— Lisa, ¿Podemos hablar? — Jennie detuvo a Lisa quien ya se marchaba para ir con Jisoo.

— Lo siento, tengo cosas que hacer — Respondió cortante.

— Por favor, tengo cosas importantes que de... — Fue interrumpida por Jisoo, quien apareció en la escena.

— ¿Nos vamos? — Preguntó Jisoo a Lisa, quien asintió.

Rosé notó toda la situación, mirando la cara de su mejor amiga Jennie, afligida como siempre pero... Esta vez parecía más afligida que otras veces.

— ¿Y sí vamos todas a cenar?, todas nos conocemos y a demás, no hemos celebrado que regresé de Londres — Miró a su mejor amiga sonriendo.

— Cierto — Se apresuró a decir Jennie, esperando que las otras dos chicas aceptaran.

— ¿Qué te parece corazón? — Le cuestionó Jisoo a su novia.

— Me parece bien — Sonrió falsamente, pues ciertamente no quería interactuar más con Jennie pero no podía negarse.

— ¡Perfecto!, iremos a un restaurante que nos encanta a mi y a Jennie — Comentó la rubia — ¿Nos vamos? — Animó.

Todas las demás asintieron.

Las chicas salieron de la mansión de Jennie hacia el restaurante, las cuatro iban en una de las camionetas de la coreana, ninguna dijo nada todo el camino, hasta llegar al lujoso restaurante.

Salieron de la camioneta y se dirigieron a la recepción para entrar.

— Hola Philip — Saludó Rosé.

— Hola señorita Park, es un gusto tenerla de nuevo aquí — Saludó cordial — ¿tiene reservación? — Preguntó alegre.

— Me temo que no, pero ¿Podrías hacerme el favor de conseguir una mesa para cuatro, por favor? — Le sonrió.

— Mmm, claro, hay una mesa con reservación pero vienen hasta las 9:00, procuren terminar pronto de cenar ¿Sí? — Comentó el hombre.

— Claro Philip, gracias amor — Le propinó 100 dólares al hombre, quien sonrió ante tal acción de la rubia.

— Lucas, guía a estas señoritas a la mesa A-9 por favor — Le pidió el recepcionista a un camarero quien aceptó amable.

— Por aquí por favor — Dijo el camarero encaminando a las cuatro chicas a su respectiva mesa.

Las mujeres caminaron en silencio y se sentaron todas, Lisa le extendió la silla a Jisoo, lo cual no pasó desapercibido por Rosé y por Jennie, quiénes se quedaron con un sabor amargo en sus bocas.

El mesero de les acercó y comenzó a pedir sus órdenes.

— Hola, soy Lucas y hoy seré su mesero, ¿Qué desean ordenar?, ¿O quieren algo de tiempo para tomar una decisión? —  Preguntó amable.

— Yo tengo en mente lo que quiero ordenado, ¿Ustedes? —  Cuestionó Rosé a las otras tres chicas que la acompañaban.

— Mmm, ¿Ya sabes que ordenar cariño? —  Le preguntó Jisoo a Lisa, quien veía el menú, esta la miró y solo asintió.

Se sintió algo incomoda, pues le había dicho a Jisoo que no le gustaban esos apodos, pero aún así se los seguía diciendo.

— Ya sabemos que ordenar — Le sonrió Jisoo a Rosé, esta le devolvió la sonrisa.

—¿Tú Jennie? —  La miró.

— Sí, también —  Confirmó.

— Muy bien, estamos listas — Le dijo al mesero la rubia — Yo voy a querer una tarta de picantón y un bacalao a la gallega por favor — Pidió y el hombre lo anotó en su libreta.

— Yo voy a pedir un magret de pato y granada por favor — Siguió Jennie.

— Muy bien señoritas — Respondió el mesero anotando en su libreta nuevamente — ¿Ustedes? — Les sonrió a Jisoo y Lisa.

— Yo quisiera ordenar una Corvina con salsa de chile dulce por favor — Ordenó Lisa cerrando el menú y el chico asintió.

—Yo un bacalao con costra de mahonesa de pera — Ahora pidió Jisoo, el hombre anotó en su libreta esto último para después recoger los menús de las chicas.

— ¿Quisieran algo de beber? — Cuestionó el chico.

— Un vino finca pedernal está bien —  Contestó Lisa.

— Muy bien, en seguida les traeremos su comida — Sonrió el mesero y se retiró.

Las chicas estaban en silencio, sin saber que decir, hasta que Jennie se animó a decir algo.

— Y... ¿cómo se conocieron? — Preguntó Jennie curiosa a la pareja.

— En mi trabajo, yo era nueva y llegó Jisoo a pedir a mi jefe que entrevistaran a su jefa, o sea tú, pero yo no lo sabía en ese momento — Contestó con naturalidad la tailandesa.

— Me enamoré de Lisa en cuanto la ví — Se unió a la plática Jisoo sonriendo y tomando del brazo a Lisa, quién incomoda se removió en su lugar.

— No digas esas cosas Jisoo — Rió nerviosa la reportera.

— Es la verdad, no digo mentiras — Rió ligeramente.

— Que linda historia de amor — Se unió Rosé.

— En realidad solo hemos salido unos meses, no somos nada aún — Dijo Lisa un poco harta por el romanticismo, Jisoo la miró y sus ojos se cristalizaron, pero no lloraría en ese momento.

Entonces apareció el mesero con la orden de todas, acompañado de otro chico, quien destapaba el vino y lo servía en las copas.
Lisa le dió gracias al cielo porque la comida llegó en el momento más oportuno, pues no quería tener esa conversación tan incomoda.
De inmediato le arrebató la copa de vino al mesero y se la tomó de un jalón, ganándose una mirada sorprendida por las tres chicas.

—Tenía sed - Rió nerviosa —Más por favor — Le pidió al mesero, quien le sirvió más vino.

— Quedo a su disposición, disfruten sus alimentos —  Hizo una pequeña reverencia el hombre y se retiró.

— Comamos —  Dijo Jennie, las demás asintieron.

Una, dos, tres, cinco copas de vino por parte de Lisa, a penas y comió, simplemente se dedicó a tomar vino, el cual ya la estaba mareando.
Las demás chicas hablaban con naturalidad y Lisa no podía evitar pensar que todas las chicas que estaban sentadas en esa mesa habían pasado por su cama aunque sea una vez. No podía haber una situación más bizarra que esa.

— ¿Cuando regresa Kai de Canadá? —  Preguntó Jisoo, ganándose la atención de todas,incluida Lisa, quien se encontraba perdida en sus pensamientos.

— Creo que el viernes — sonrió incomoda Jennie al recordar a su marido.

— Justo el día del cumpleaños de... Auch —  Sintió una patada en su pierna.

— ¡Lo siento! — Se disculpó Rosé — A veces tengo tic's nerviosos — Se rió, pues en realidad lo había hecho a propósito para que Jisoo se callara.

— No te preocupes — Le dijo Jisoo masajeandose la pierna, pues le había dolido.

— Lisa ¿Estás bien? — Preguntó Jennie preocupada viendo cómo Lisa cerraba los ojos despacio.

— Lo siento, creo que se emborrachó —  Respondió Jisoo en lugar de Lisa, quien sostenía la copa de vino en sus manos — Cariño, ¿Te encuentras bien? — Llamó Jisoo a su tailandesa.

— ~No me digas cariño ~ —  Dijo casi en un susurro.

— ¿Qué?, no logro escucharte — Acercó su oído a la tailandesa.

—  No me digas cariño, no me gusta —  Dijo ests vez en voz alta.

— ¡JAJA!, ¿Entonces como quieres que te diga? ¿mmhm? —  Rió Jisoo ante la situación.

— De ninguna manera, ni siquiera estamos en una relación porque yo amo a otra persona — Dijo torpemente, la sonrisa de Jisoo desapareció y las otras dos chicas solo se quedaron en shock.

— ¿Qué? —  Jisoo se alejó de ella y con los ojos cristalinos volvió a preguntar — ¿qué dijiste? —  Dijo nuevamente.

— Yo a-amo a esa chica de ahí - Señaló con el dedo a Jennie, quien se quedó sin palabras — Tú no... Tú no —  Le dijo a Jisoo.

La pelinegra miró a Jennie, quien casi derramaba lágrimas de sus ojos.

— L- La quieres a ¿Ella? — Preguntó aramandose de valor Jisoo.

- Mhmm... — Se quedó pensando

— ¡Entonces dime!, ¡¿qué mierda quieres?!, ¡me tienes dando vueltas como idiota en todo esto! — Gritó eufórica

— Cálmate Jisoo — Respondió Rosé tranquila, tratando de calmar la situación.

— Siempre que me necesitas llamas — Habló en un hilo de voz — Pero cuando no, ni siquiera te apareces para decirlo — Dijo afligida.

— Sé que soy un desastre pero te quiero — Contestó la más alta viendo a Jisoo con sus ojos perdidos por el alcohol.

— ¡NO ME MIENTAS!, ¡TU NO ME QUIERES!, LO DICES PORQUE ESTÁS BORRACHA — Gritó — Así que todo el tiempo fue ella, todo el tiempo por quién no podías amarme era por Jennie — Sollozó — No te quiero volver a ver — Dijo para después tomar su bolsa e irse.

Todos en el restaurante vieron la escena estupefactos, para después ver cómo Lisa se desmayaba y dejando caer su cabeza en la mesa, inconsciente.

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Gracias por todos, bye😸