Jack "El destripador" era conocido por ser un asesino en serie. Claro que todos conocen su historia, terrible asesino que nunca fue encontrado. Algo interesante. Sin embargo ese estúpido apodo no le convenía a Jackson Smith. Jackson Smith lo único que tenía de asesino, era de asesino de sueños. Ahora que me había convertido en su tutora oficial y de manera involuntaria por mi parte, estaba atada a Jackson, al menos hasta final de semestre.

―Bien, te haré un examen diagnóstico. Necesito saber que tanto sabes de literatura. ―Le expliqué, pero el castaño únicamente miraba su lapicero como si fuera la cosa más interesante del mundo. Intenté calmarme. Debía ser paciente con él si quería mis créditos. ―Jackson, disculpa. ―Le quité el lapicero con más fuerza de la que tenía planeada por lo que lo tomé por sorpresa. Pero como resultado finalmente me prestó atención. ―¿Qué sabes de literatura? En general―Se encogió de hombros y sacó otra pluma para darle su atención.

Okay, esto no estaba mejorando.

―¿Qué te gusta del curso de lengua?

―No lo sé, pero definitivamente escuchar a fresitas como tú no está en mi lista.

―¿Cómo que fresa?― Mi voz sonó más aguda de lo normal. ―Escucha "Destripador" No quiero estar aquí tampoco. Pero lo hago por un bien mayor. ¿Entiendes?

―¿Por bien mayor te refieres a tus créditos estudiantiles? ―Me quedé de hielo. Okay, eso no sonaba para nada desinteresado.

―Touché. ―Sonrió. Era la primera vez que veía una sonrisa sincera en su cara. ―Escucha, sé que eso sonó egoísta, pero en verdad quiero ayudar. Hagamos un trato, soportémonos al menos hasta que aprendas algo. 

―¿Qué recibo a cambio?

―¿Conocimiento de la mejor alumna en literatura? ―Me miró con cara de hastío. No pude evitar reírme. ―Bien, ¿qué quieres? ―Lo pensó un momento y luego sonrió.

―Te lo diré cuando terminemos.

―No me pedirás nada raro, verdad. ―No me respondió. ―Jack. 

―Tranquila profesora. No soy un loco como el destripador. ―Se jactó. ―Ahora, dime, qué es lo que vas a enseñarme.

―Entonces ¿es una tregua? ―Asintió. ―¿Nos llevaremos bien durante este corto período de tiempo? ―Volvió a asentir. ―Bien, entonces resuelve la prueba diagnóstica.

―¡Muy bien, profesora! ―Hizo una saludo militar y comenzó con su tarea. Sonreí. No sabía que Jack podía ser irritante y simpático al mismo tiempo.