52
Por la noche, con Enid durmiendo a su lado, Merlina no podía hacer nada más que permanecer mirando el techo, sintiéndose terriblemente mal.
Por más que se decía que no debía ponerse así, que no era su culpa que le guste Enid, y que no podía evitar sentirse atraída a las mujeres, una parte de ella quería cambiar, volver a su casa y que sea todo como antes.
Así que se había armado una discusión consigo misma, una parte que no podía aceptarse y otra que quería ser como es.
¿Tan difícil podría ser aceptarse a sí misma?
Sintió a Enid removerse a su lado, murmurando sonidos que no le encontró sentido, pero que la hicieron sonreír.
¿No podría aceptarse a sí misma, al menos por Enid?
Al pensar en ella, incluso la parte que decía estar mal, esa parte que quería ser "alguien normal", callaba, perdiendo todos sus argumentos.
Ni siquiera ella podía contra todo lo que amaba a Enid.
Dejó un beso sobre la nariz de la dormida chica, y rio un poco cuando la vio fruncirla.
Se concentró en mirarla dormir, eso la llenaba de paz, la alejaba de sus pensamientos, y fue lo único que la pudo llevar al sueño.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro