𑁋¿Todavía no le dijiste lo que sientes?

Merlina negó, manteniendo su seriedad, Xavier, por su parte, parecía decepcionado.

𑁋¿Pero la has visto?

Merlina asintió.

𑁋El otro día la vi... Bien, estaba en su casa, era lógico, pero con su madre pensábamos que llegaría más tarde 𑁋contó𑁋. Pero me vio, practicando las señas, y cuando quise decir algo se fue... Y yo sólo me congelé, no pude ir 𑁋mintió.

Xavier se frotó el rostro, suspirando pasadamente.

𑁋Que idiota...

𑁋¿Por qué? 𑁋Merlina alzó una ceja𑁋 ¿Por no decir mis sentimientos?

𑁋Exactamente 𑁋concordó el castaño.

𑁋Oh, vaya, a quién me suena 𑁋dijo la pelinegra con ironía.

Xavier la miró unos segundos hasta comprender a qué se refería.

𑁋Bien, bien... Nunca dije que yo no fuera un idiota, digo, somos amigos, tenemos cosas en común.

Merlina lo miró con el ceño fruncido.

𑁋Idiota empedernido 𑁋dijo, y tomó su mochila para levantarse del pasto y caminar hacia la escuela.

𑁋No me dejes hablando solo, Merlina 𑁋Xavier apareció luego de correr hasta llegar a su lado.

La pelinegra lo miró alzando una ceja con indignación.

𑁋Mira, no eres mejor que yo en esto de confesarse, así que no actúes como si yo estuviera haciendo mal las cosas 𑁋dijo el castaño.

𑁋La gracia de la vida es que tienes que ser mejor que el resto 𑁋Merlina sonrió, largó el aire en un corto suspiro𑁋. Yo... voy a confesarme a Enid hoy, aquí en la escuela.

Xavier sonrió y aplaudió.

𑁋Al fin demuestras algo de ovarios en la vida.

Merlina hizo una mueca de asco ante la expresión.

𑁋Me disgustas 𑁋dijo por lo bajo.