CAPÍTULO VEINTICINCO
SARANG

—¡SARANG!

—¿Quieres dejar de gritar, Jason?

Salgo de la habitación por milésima vez, Jason está como un loco enfurecido por todo el asunto de la musa, llego hasta la puerta que es dónde está él y mi boca casi toca el suelo.

¿Qué hacen Suho y Michael aquí?

—Pasen, adelante— Jason los invita a pasar, detrás de ellos viene otro hombre que desconozco totalmente— pueden sentarse allí, dónde gusten.

Una de las manos de Jason se pone en mi espalda baja y me empuja con suavidad para ir a sentarme junto a los recién llegados. De verdad no comprendo que hacen mis hermanos aquí y menos sé quién es este hombre.

—¿Les puedo ayudar en algo?

—A sus hermanos los conoce, nosotros dos no tanto— el desconocido toma la palabra— Tanaka Kendo, mánager personal del vocalista Kim Taehyung, integrante de Hotissue. Aunque a ellos también los conoce muy bien.

—¿Y qué hace aquí?— observo a mis hermanos— ¿Ustedes lo han traído?

—Escucha primero y luego hablas.

Le doy una mirada a Jason, él no me mira, mantiene la vista en el suelo y su pierna se sacude debido a la molestia. No entiendo.

—¿Y qué podría necesitar su mánager de mí? Si es por el asunto del noticiero-

—Es precisamente por eso— deja sobre la mesa de centro unas cuantas hojas— vengo a comentarle que tendrá que viajar de regreso a Corea del Sur en el plazo estipulado en las órdenes para presentarse a un juicio.

—¿Juicio?

—He impuesto una demanda por difamación, otra por incumplimiento de contrato y la última— señala uno de los documentos— por acoso e invasión al artista. Tiene tiempo para contratar un abogado.

Cierro los ojos, necesito mantenerme serena para conversar adecuadamente sobre está sarta de mentiras.

—¿Qué está diciendo?

—Le explicaré cada punto de la manera menos profesional posible y también resumida, para que me entienda— me cruzo de brazos y piernas, mirándole— hablé con la presentadora que reveló su rostro e información al mundo, información no verídica, todo lo dicho por ella no son más que mentiras que usted le proporcionó.

—¿Cómo que mentiras?

—Decir que Taehyung la presionó e insinuó durante todos los años que trabajó con él cuando claramente no sucedió tal cosa, son claramente mentiras— parpadeo— ¿O dirá que tiene como probarlo? Le recomiendo que no intente mentir, porque en la agencia todo, absolutamente todo contacto del staff con los artistas en las habitaciones asignadas para su preparación estética, son grabadas en voz y quién posee las grabaciones de todos estos momentos, somos los representantes y es completamente legal, en caso de que tenga quejas— señala el documento de en medio— y está en el contrato que usted firmó hace mucho tiempo, en el cuál expresó estar de acuerdo con esto.

—¿Ustedes poseen estas grabaciones?— cuestiona Jason.

Kendo asiente.

—Solo nosotros, Hotissue tiene cinco mánagers y nosotros decidimos implementar esto con la banda debido a inconvenientes con anteriores miembros del staff — explica— de esta manera, si se presentan injusticias con nuestros artistas, tenemos pruebas para defender a los miembros de cualquier tipo de percance que pueda afectar su imagen, integridad... todo muy meticuloso. Tanto ellos como dicho staff están muy conscientes de este método, que, repito, es completamente legal, tenemos los permisos para ello. Ahora, con eso aclarado pasamos al incumplimiento de contrato.

Me entrega una copia, dicta número de página y párrafo, encerrado en un círculo rojo.

—Esto no...

—Allí prohíbe claramente hablar sobre el artista a terceros, contar lo que sucede en la empresa, ya sean conversaciones con el staff, con los artistas a cargo e incluso la sola mención de 'trabajé con... y él es cómo...' están prohibidas— arqueo una ceja—incluso después de terminado el contrato, sigue estando prohibido hablar del artista, menos a medios públicos, cosa que usted ha incumplido descaradamente—pasa hasta la última página— este es el contrato original, ahí está su firma, usted estuvo de acuerdo con todo lo estipulado aquí, recuerdelo.

Jason toma la copia que tengo en manos y mis hermanos piden leer la que el mánager tiene, él lo permite. Puedo sentir la tensión tan pesada casi sobre mis hombros.

—¿Y la demanda por acoso en qué se basa?—eso lo pregunta Suho.

—La señorita Sarang hizo presencia en dos ocasiones al hogar de Hotissue, por supuesto tengo las grabaciones de la cámara de seguridad, además de testimonio del equipo de seguridad de la banda que confirman que lo que digo es cierto— mis mejillas se sienten calientes, estoy hirviendo en furia— y en ambas ocasiones se le pidió más de una vez que abandonara el sitio, obviamente, no era bienvenida, posterior a eso— saca más documentos, demonios— siguió acosando a llamadas a Taehyung, aquí están los registros de todas las llamadas que han salido desde su estadía aquí en Los Ángeles, pueden ver el código del país, la hora, día y número para confirmar si le pertenece o no y no solo eso, antes de mudarse aquí, también lo llamaba constantemente aún cuando Taehyung había dejado en claro sus deseos de alejarse.

Doy un salto en mi lugar cuando Jason suelta de manera brusca todas las hojas sobre el escritorio y se levanta, está enojado. Mis hermanos siguen sin despegar la vista de lo que están leyendo y a mí se me escapa una risa.

—Esto es simplemente ridículo— le digo— ¿Solo por una noticia de farándula que no tiene tanto peso como asegura? En todo caso, la afectada soy yo, mi imagen fue expuesta ante todos.

—Joder, Sarang— Michael me habla, levantándome la voz— basta, presta atención, lo has arruinado y en grande.

—No he arruinado nada, no entiendo eso en qué afecta a Taehyung, él escribió canciones sobre mi sin mi permiso ¿eso no es demandable también?— bufo, negando—es una tontería, la noticia trató sobre mí, es mi imagen la comprometida.

—¡Deja de victimizarte, Sarang!— vuelvo a asustarme, Jason grita— Simplemente acepta tus errores, que él no ha viajado hasta aquí para decir mentiras y todo está en esas malditas hojas, no te hagas la que no entiende, te dije que haber hecho eso te traería problemas e hiciste oídos sordos, no entiendo cómo no puedes sentir vergüenza en este momento.

No puedo estar más asombrada por como me está hablando. Kendo se pone de pie, no presto atención a lo que dice, solo lo veo irse y explicarle otras cosillas a Jason.

Es increíble que Taehyung me haya demandado.

La puerta se cierra, Jason vuelve y se sienta en el lugar que ocupaba el otro. Todo es silencio hasta que Suho habla.

—Ojalá hubieras visto la entrevista que le hicieron a la banda. Taehyung se veía tan herido y sereno al mismo tiempo, la más rara de las combinaciones, claramente le dolía hablar sobre esa canción que cualquiera diría que es tonto, pero, no estamos en el lugar de un músico, así que no lo vamos a entender nunca.

—Entonces tú enamoraste a una persona, la ilusionaste y mantuviste solo por si acaso, luego hiciste toda esta mierda y cuando decidió irse por la paz, avivaste la llama otra vez, expusiste los sentimientos de Taehyung, ahora todos saben que fue desechado y otros piensan que en efecto es un amante, nada más— Michael me mira— y no sientes culpa alguna.

Suspiro.

—No soy una insensible, simplemente no tenía idea de que esa pequeñez iba a terminar en esto. Dios, no lo sabía.

—Sigues insistiendo en el tema de la noticia cuando ese es el menos importante aquí. No me explico qué hacías intentando contactar al chico después de nuestra boda, luego de mudarnos aquí, se supone que salimos del país para empezar de nuevo, sin inseguridades y honestidad.

—Taehyung es mi amigo y quería disculparme por algo que hice y estuvo mal.

—De nuevo, tienes que ver la entrevista. Él dejó muy en claro que nunca fueron amigos.— ambos se levantan, Michael me señala— Estaremos en el hotel, papá y mamá quieren hablar contigo apenas lleguemos a Corea, no sé si Jason...—lo mira— querrás venir con nosotros, supongo.

Él asiente.

—Claro, nos compraré los boletos y partimos mañana. Tengo que mover un montón de cosas pendientes en el trabajo.

—No he dicho que iré.

—No tienes opción, si no te presentas pueden arrestarte— me quedo callada, si ese es el caso...— y no es necesario que se queden en un hotel, hay habitaciones vacías. Voy a irme a preparar todo.

Se levanta, hago lo mismo, no me gusta que esté molesto conmigo.

—Jason...

—No quiero hablar, Sarang.

Solo espero que todo esto se resuma a una multa monetaria o algo así, hablaré con Taehyung o al menos encontraré la manera de hacerlo. Esto es exagerado.

—Ten, observa la entrevista.

No me queda otra más que hacerlo. Lo primero que noto es su cabello, es azul, se me escapa una sonrisa al notarlo, le luce muy bien, luego escucho todo lo que dice y me causa incomodidad el como se expresa de mi, no dice mi nombre en ningún momento, pero obviamente sé que soy yo de quién habla.

Perdió importancia hace un buen tiempo.

Perdió el puesto de musa y sin retorno.

Nunca la besé.

Vaya, me superó muy rápido, bastante extraño y cuestionable viviendo de la persona que repetía sin descanso que me amaba e insistía por oportunidades.

Woah, no sé que sentir o qué decir. Le regreso el teléfono a Michael.

—Lo único que hice fue decirle que no a estar juntos.

—Si, claro. No te servirá mucho más hacerte la tonta.

—Ya, Suho, basta ¿Si? Deja eso.

—Qué decepción, Sarang. Que triste que seas de esta manera.

No respondo más, no tiene caso.