Abrí los ojos y sonreí, me sentía estupenda y bien descansada

Miré a mi alrededor e hice una mueca para luego reír a carcajadas sin tener razón alguna

Destruí todo y me da igual

-Barbie-miré a mi lado y Nicolás se había despertado

-Hola-le sonreí-No quise despertarte-de hecho no me había percatado de su presencia hasta ahora

-¿Por qué tan felíz?-señalé la habitación y volví a reír-¿Estás bien?-asentí

-Mejor que nunca-frunció el ceño

-¿Segura?-asentí

-Sip ¿Por qué no lo estaría-sonrió divertido y me señaló

-Estás desnuda-

-¡Ay carajo!-me cubrí con las sabanas y él rió

Se pegó a mí y me abrazó

-¿Qué es eso?-pregunté intentadome alejar pero sin mucho éxito

-Aún es muy temprano Barbie-lo miré con los ojos muy abiertos

-¿E...estás desnudo?-asintió

-Creí que era el tema de la noche-le dí un golpe en el hombro y rió

-¿Hablas de que esa es tu lapicera?-se pegó más a mi cuerpo haciéndome sentir su miembro en mis muslo y dejó un beso en mi cien

-Yo lo llamaría fibrón-me alejé tanto que terminé callendome de la cama y golpeándome la cabeza con la mesita de luz

-¿Estás bien?-negué

Cerré los ojos y masajeé mi cabeza

-Yo te ayudo-abrí los ojos y los volví a cerrar

-Vistete-presionó sus labios en los míos y me cargó en sus brazos

-No, lo haré cuando tú lo hagas-negué

-Vistete-volvió a presionar sus labios en los míos

-Basta-susurré perdiendo la poca fuerza de voluntad que me quedaba y dejándome llevar por la electricidad que recorría mi cuerpo

-¿De qué?-preguntó haciéndose el tonto

Me dejó en la cama y se acomodó sobre mi cuerpo

-Ya-negó y volvió a besarme, gemí en su boca y segundos más tarde él cortó el beso

-¿Qué sentiste cuando Axel te besó?-preguntó

-No quiero hablar de eso-lo evité

-Pero yo sí-me dijo

-¿Qué te pasó ayer en el parque?-le pregunté

-No me cambies de tema-

-Pues responde-le pedí

-Recordé mi pasado, sé como llegué a ser lo que soy ¿Contenta? Ahora respóndeme tú-negué

Sentía mucha curiosidad por saber como es que un muñeco sexual cobró vida

-Dime tengo mucha curiosidad-negó

-Yo ya te respondí, es tu turno-miré sus ojos y no me quedó otra que responder

De sus labios no iba a salír otra palabra y estoy segura que hasta que de los míos no salga lo que quiere escuchar no se me quitará de encima

-Nada, no sentí absolutamente nada-le respondí sinceramente

-¿Por qué tuvieron sexo si no sentías nada?-bajé la mirada avergonzada

-Mírame-lo hice y acarició mi labio

Jadeé por el corte y él fue más cuidadoso

-Lo siento-no dije nada, solo observé su forma de mirar mis labios

-Los besos siempre me han confundido-susurré llamando su atención

-¿Qué?-preguntó sin comprender que quería decír con eso y dejó de acariciar mis labios

-Me confunden los besos, no sentí nada al besar a Axel pero me dejé llevar por lo que él quería-le confesé

-No quiero que vuelvas a estar sola con él, pudiste salír lastimada-asentí

-¿Ya puedes quitarte?-negó

-Aún no me pides disculpas, yo soy tu amante, no él-negué

-No te pediré disculpas, ahora salté. Vístete y cuéntame de tu pasado-negó

-Voy a besarte hasta que dejes de confundirte, no quiero que él te vuelva a manipular cuando yo ya no esté-me quedé con la boca abierta

Ya lo había olvidado, él se irá ¿Por qué creí que se quedaría? Pasó tanto en tan solo tres días que no parece real, es como si Nicolás fuera parte de mi vida pero a la vez no

Aprovechó mi descuido y me besó, no le seguí el beso y cuando lo hice él lo cortó

-No me tienes que seguír el beso, esa es la idea-sonrió y volvió a besarme

. . .

-Te necesito-susurré contra sus labios hinchados de tanto besarnos

-¿Qué dijiste?-separó un poco nuestros rostros y me miró fijamente

-Quiero sentirte-negó

-Solo estás confundida-negué

-No lo estoy-le dije y repetí el anterior beso

Él no me correspondió y se cortó el labio cuando quitó su boca de la mía

-Estás confundida y no me aprovecharé de eso-besó mi mejilla y dándome la espalda comenzó a vestirce

-¿Te espero abajo?-asentí y salió de la habitación acomodandoce la ropa y con el cepillo de dientes en su mano

. . .

-No es buena idea-me recordó

Asentí y me subí el cierre de los zapatos

-Debo ir, es mi trabajo-le contesté

-Es peligroso, no quiero que te haga daño Vaneditt-me giré en su dirección

-¿Por qué no me dices Barbie?-traté de cambiar de tema

-Porque estoy enojado-lo miré de arriba a bajo y su postura lo delataba. La punta de su pie golpeaba una y otra vez el piso, su brazos cruzados estaban muy tensos y sus labios estaban fruncidos y formaban una fina linea

-Yo debería estarlo, aún no me respondes nada sobre tu pasado-bufó

-No sé en que año nací pero recordé algunas cosas, nunca antes me había pasado esto-asentí y le hice un gesto con la mano para que siga

Se sentó en la cama y me hizo señas para que me siente a su lado. Así lo hice

-Mi mamá y mi papá...los recuerdo con armaduras, el murió en una guerra y a ella la quemaron en una oguera-susurró

-Lo siento-asintió

-Ya pasó hace mucho-murmuró

-¿Cómo llegaste a ser lo que eres?-me miró

-¿Un esclavo sexual?-no quería ofenderlo solo tuve curiosidad

-No eres un esclavo sexual Nicolás, no para mí-besó mi frente y lo abracé

-Mi madre, antes de que la apresaran nos dijo unas palabras y lo último que recuerdo es estar en la cama de una mujer complaciendola-me contó

-¿A quiénes? Dijiste "Nos dijo unas palabras" ¿Tú y quién más?-le pregunté

-¿Recuerdas que te conté que tenías a uno de los dos muñecos sexuales que hay en el mundo?-asentí-El otro era mi mejor amigo, sus padres habían muerto y mi familia lo adoptó...