3° UNA NAVIDAD COLORIDA
“La imaginación tiene sobre nosotros mucho más imperio que la realidad”
Los preparativos para esta noche de Navidad comienzan con una Aylin apurada en la cocina preparando lo indispensable para una cena especial con todos. Por un instante, dudó en invitarlos, sin embargo por ser una fecha importante consideró convivir con cada uno aunque todos sean muy diferentes.
Agotada observa cada platill preparado por ella. Apoya sus manos sobre la mesa de la cocina y suspira repasando una lista imaginaria en su cabeza.
—Comida, postre, regalos —señala diferentes platillos como aquella bolsa enorme de regalo— creo que es todo —tan pronto chasquea sus dedos al recordar un último detalle — las bebidas— se voltea yendo en dirección a la alacena sacando primero varias botellas de vino tinto, después se dirige al refrigerador sacando dos botellas de líquido carmín para invitados especiales.
Con las botellas de vidrio entre sus brazos, las deja sobre la mesa separando el vino y la sangre.
—No tiene porque salir mal —se encoge de hombros al notar la gran diferencia.
Una convivencia de mortales con inmortales. Algunos buenos, malos y otros peores. Sin embargo todos comparten algo tan común.
—Vamos Aylin, todo tiene que salir bien. —se dice a si misma, revisa la hora en su reloj de su celular y ante el tiempo en su contra, contando cada minuto necesario, sale de la cocina para arreglarse en su habitación.
[ Noche buena 🎆 ]
A las 9:00 pm, Aylin lista espera a cada uno sentada en el sillón de la sala, con la vista fija en la puerta.
Tras una tarjeta de invitación enviada a cada uno, les indicó la hora y lugar.
Ante la baja temperatura, frota sus manos y se levanta dando un último vistazo a su alrededor. Siendo un departamento pequeño, le fue fácil decorar con luces por las paredes, en una esquina se encuentra un mediano árbol de Navidad, decorado con esferas de colores y una estrella hasta arriba brillando, debajo su bolsa de regalo solitaria esperando el resto.
Aylin se ajusta su boina negra, esta por revisar la hora cuando con un minuto tarde, un golpe en la puerta causa su atención y la amplia sonrisa en su rostro al dirigirse a abrir.
—¡Hola! —exclama con emoción la chica castaña frente a ella acompañada de un chico rubio.
—Hola Alicia, Axel, pasen por favor —Aylin les permite entrar, con un agradecimiento ellos se adentran viendo alrededor.
—¿Somos los primeros?
—Son puntuales —le responde Aylin mientras cierra la puerta y se acerca varios pasos— pueden sentarse.
Alicia asiente y es la primera en tomar asiento.
—Dejaré esto bajo el árbol —menciona Axel mostrando un pequeña caja de regalo y regresa a sentarse a un lado de su chica.
Aylin les sonríe, le parece tierno y gracioso que ambos lleven cuernos de reno en sus cabezas.
—Nos vemos horribles ¿cierto? —le pregunta una Alicia sonrojada al notar su mirada.
—No, es único de hecho
—Vez Ali, somos únicos, la pareja ideal —Axel hace una señal con sus manos mostrando un letrero imaginario— fue una apuesta lo cual gané.
Aylin se cruza de brazos con interés.
—¿Quieren contarme?
Alicia suspira
—Aposté con Axel a que no leería en una semana un libro con más de 200 páginas y lo logró en cuatro días. Cuando a mi me costó terminarlo en seis. Y si no lo lograba, usaría cuernos de reno esta noche.
—Más es evidente quien perdió —Axel la observa burlón— valieron la pena cada desvelada y no soltar ese libro por nada, mi chica se ve tan adorable —le pellizca las mejillas ganando un manotazo— pero no podía dejarla sola así que igual use estos cuernos de reno.
—Hace eso y no puedo estar molesta con él.
—Definitivamente hacen una linda pareja —les dice Aylin— jamas había... —un golpe en la puerta la interrumpe— lo siento, iré a abrir— se voltea en dirección a la puerta, al abrir se encuentra con otra pareja más romántica —¡Layla, Aidan! ¡Bienvenidos!
—Gracias —responden al unisono y entran. Ambos con dos gorros navideños en sus cabezas y un suéter decorado. El de Layla es rojo con un árbol Navideño, el de Aidan verde con regalos.
Al notar su presencia, saludan a la primer pareja.
—Woo, ya veo que no somos los únicos que nos pusimos de acuerdo. —les dice Alicia al ver a cada uno.
—Fue idea de Lay y no puedo negarle nada —le contesta Aidan ganando la sonrisa amplia de su novia y un encogimiento de hombros.
—Aylin ¿Dónde dejamos esto? Son nuestros regalos —Layla le señala una caja de cartón que sostiene cada uno— única pista, para postre especial.
—En la cocina, es por aquí —la dueña del departamento los guía a la cocina.
Cuando los tres regresan, cada uno trae copas y una botella de vino. Se sirven y dan el primer brindis.
Transcurridos varios minutos, el resto aparece. Esta vez Aylin se mantiene cerca de la puerta, abriendo cada vez que dan un golpe al mismo tiempo que observa su celular y cada pareja llegar.
Hace 10 minutos llegaron Daniela y Ángel al mismo tiempo que Juliett y Evans, cada uno sentado en cada sillón hablando y bebiendo entre ellos.
Aylin deja de verlos y suspira al teclear un mensaje en su celular: ¿Vendrás? Eres bienvenido.
Presiona el enviar esperando eternos segundos su respuesta que no llega y frustrada vuelve a guardar su celular.
No obstante, otro golpe en la puerta escucha y con una pizca de esperanza mezclada con la emoción, la abre enseguida borrando su sonrisa al ver a los tres frente a ella.
—¿Trajimos la verdadera diversión? —Kelly le muestra una botella de whisky y sin permiso entra.
—No era nece... —Aylin guarda silencio al ser empujada por ella. Mantiene la calma y suspira— entren.
—No será por mucho tiempo, mi hermano y yo preferimos celebrarlo esta noche solos.
—Decidan el tiempo que quieran quedarse —le responde Aylin, causando una leve sonrisa en solo uno de ellos. Se aleja y ambos Rizon se adentran al departamento.
Antes de cerrar la puerta, se asoma viendo el departamento de a lado. La puerta del #234 se mantiene cerrada. A los dos segundos, prefiere dejar la suya abierta con la esperanza que su vecino vampiro aparezca.
—¿Puedo poner música? Esto parece funeral —recibe de Kelly en cuanto se voltea y regresa a la sala.
—Claro —le contesta Aylin dudosa.
La mira buscar en su celular y de la pequeña bocina que trajo, comienza a sonar una alta melodia.
—Ignorala, son gustos de la forastera —su voz causa un leve sobresalto en ella. Sin responderle, mira al chico de tatuajes pasar por su lado, servirse una copa y sentarse cerca de su hermano, ambos alejado sin el otro aceptar ninguna bebida.
Aylin se anima a integrarse apesar de conocer muy poco a cada uno. Mientras una parte de ella espera a los invitados faltantes.
...
—¿... Vino?
—¿Qué? —alza la vista al escuchar una baja voz.
—¿Que si tienes más vino? No quiero ser imprudente pero se acabó la primer botella.
Aylin deja de revisar su celular y se levanta.
—Si, no te preocupes. Ahora mismo voy por otra Alicia— recibe su sonrisa y pasa por su lado en dirección a la cocina.
Al llegar agarra la botella viendo las otras con ese líquido carmín intenso. Antes de regresar, revisa su celular por última vez.
—10:00 en punto, no vendrán —emite en voz baja y lo vuelve a guardar en su bolsillo.
—¿Qué te hace creer eso? Si la noche es eterna.
Con un rápido movimiento se da la vuelta al reconocer su voz sin evitar la sonrisa en su rostro.
—Creí que no vendrías
—El tiempo es irrevelante pequeña. Antes tenía cosas muy importantes por hacer —el rubio vampiro recargado en el marco de la puerta ladea la cabeza —¿eso es sangre? Porque es de mala educación no invitarme una copa.
—Exclusivamente para invitados especiales —enseguida Aylin se la entrega.
—Que honor —él le sonríe mostrando sus colmillos.
—Creo que serás el único entre mortales.
Tan pronto, el vampiro se aleja de la puerta.
—Yo no diría eso, yo vine acompañado.
—¿Ella es la anfitriona querido? —una retadora vampiresa aparece a su lado apoyando su pálida mano en su hombro— que gusto conocernos mejor.
—Apuesto que se llevarán bien —él deja de verlas con indiferencia siendo su vista fija en la botella al abrirla siendo fuerte el olor a sangre.
—Eso lo intentaré —Aylin carraspea y apesar de su mirada, se acerca dos pasos— Disfruten esta noche Esteban —lo señala— Nohemi.
—Todas las noches son especiales y las disfruto intensamente si estoy con mi amado ¿verdad?
El rubio vampiro asiente
—Nos da curiosidad estas fechas especiales de mortales. Celebran cada cosa —su risa es eco cuando usa su velocidad vampirica y sostiene dos copas de cristal, la botella y sosteniendo de la mano a su alma, la guía en dirección al resto.
Aylin al perderlos de vista, inhala y exhala aire varias veces y se dispone a regresar con todos ellos.
Observa como cada pareja se reúne en diferentes lugares. Los hermanos Rizon con Kelly, Aidan, Layla, Alicia y Axel por otro lado. Y a poca distancia Daniela, Ángel hablan con Juliett y Evans. Y en un sillón individual, yace sentado ese rubio vampiro, con la vampiresa sentada en sus piernas sin importarle besarlo frente a todos, ambos ajenos a cada mortal.
Decidida, se acerca a ellos y con un carraspeo causa su atención.
—Esteban —frota sus manos nerviosa— ¿Sabés si Darren vendrá?
—No creo que se pierda la diversión pequeña, en todo caso tú estas aquí —la señala con su copa de sangre— o eso espero, no queremos ser los únicos inmortales aquí —le da un casto trago a su copa lamiendo la sangre de sus labios.
—Yo si lo entiendo, la tentación es demasiada. Solo por mi amado, acepté venir.
—Amore, te acostumbras a convivir con humanos, aprendes mucho de ellos —le da un casto beso— pero si te pido pequeña, como la responsable de esto, que bajes ese ruido, es molesto para nuestro oído sencible.
Aylin asiente y se dirige a Kelly con la intención de convencerla. Por suerte, lo logra sin problema siendo consciente de la mala convivencia entre todos.
...
—Las 11, perfecto —se dice Aylin a si misma mientras bebe de su copa de vino. A bebido varias pero no demasiadas para sentirse afectada por el alcohol en su sistema.
En la cena, muy poco tuvo apetito en comparación al resto. Siendo dos inmortales que se conformaron con sus copas de sangre.
—¿Todo bien? —una voz la hace darse la vuelta— ¿pareces molesta? ¿Tensa?
—¿Creés que todo esto fue mala idea?
Layla se acerca a ella con su copa de whisky.
—Para mi no, todos nos estamos divirtiendo a su manera. Tranquila, es una noche agradable.
Aylin suspira
—Quisiera pensar como tú Layla.
La susodicha le sonríe
—Te daré un consejo, deja de pensar tanto y disfruta esta noche. En unas horas será Navidad —hace una corta pausa— ¿sabés cuál es su significado?
—Eso creo
Layla bebe de su copa y afina su garganta.
—Es Navidad se olvida de los problemas, los malos entendidos. Es sana y grata la convivencia. Aunque todos seamos tan diferentes, hoy nos reunimos para celebrar este día, eso lo hace más especial ¿no creés?
Aylin hace una mueca
—Tienes razón. Es hora de pasarla bien con todos aunque no esté aquí a quien quiero y dudo que aparezca.
Layla choca su copa con la suya, beben y juntas regresan a la sala.
Sin embargo, apenas Aylin da tres pasos cuando la obligan a darse la vuelta y chocar con él.
—Debemos hablar Ayline
Ella pestañea varias veces incrédula.
—Yo los dejo a solas —les dice Layla y regresa con su chico. Al llegar hasta Aidan, lo llena de besos.
—Darren —con un empujón Aylin marca distancia y se cruza de brazos— llegas tarde.
—Ya estoy aquí, agradece eso —deja de verla posando la vista en cada mortal— demasiada sangre ¿no?
—No les vayas a hacer nada
—Tú me invitaste
Aylin resopla y baja sus brazos.
—Darren, te pido que no vayas...
—No me interesa su asquerosa sangre Ayline— la interrumpe— tengo preferencias— la observa de pies a cabeza logrando que su corazón se acelere— A media noche me largare de aquí.
Al pasar por su lado, esta vez ella lo detiene.
—Valoro tu gran esfuerzo, gracias por venir Darren.
—Juraba que estarías molesta
Aylin niega varias veces
—Hoy entendí muchas cosas y no, no arruinare esta noche especial. —se inclina dándole un casto beso en sus fríos labios. Al alejarse lo suelta pasando por su lado en dirección al único lugar desocupado.
El resto de la noche transcurre, mejora para todos cuando se han integrados.
—¿Seguro que no te quieres sentar? —le pregunta en voz baja Aylin al vampiro de pie a un lado del sillon cruzado de brazos.
—No insistas
Ella rueda los ojos y regresa a ver al resto.
—¿Y cuándo será la parte favorita de recibir obsequios?
—En un rato más Esteban. No estamos todos.
Él bebe de su quinta copa y enarca una ceja.
—Darren parece una sombra pero cuenta como tal con su presencia. Creí que era el único que faltaba.
—No es así —las palabras de Aylin causan la atención de todos.
—¿Quién falta? —pregunta Daniela sin soltar la mano de Ángel, al mismo tiempo jugando con el piercing de su boca.
—De hecho son quiénes —Aylin ríe nerviosa— Escuchen, no se asusten pero logré contactar con otra dimensión y los invite.
—Los, dimensión, eso no me gusta como suena —le dice Esteban sin soltar de la cintura a Nohemi— ¿no eres una humana ordinaria?
—De una humana que está con vampiros ¿qué se puede esperar querido? —la vampiresa bebe de su copa— no tienes límites, si yo estoy aquí y ciertos que ya no existimos —se encoge de hombros señalando a varios— es posible.
—¿Lo hiciste? —le pregunta Darren fijando sus ojos carmesí en Aylin.
—Forman parte de esto también —le responde y regresa la vista en cada uno — Annett es humana y vendrá con ellos, con tres sobrenaturales.
—No es en quienes estoy pensando —le dice Esteban con seriedad— Cuatro seres del Mundo Vampirico ya es mucho riesgo —se señala a si mismo, a su alma y a Darren para proseguir a señalar en un punto del departamento donde todos notan una abertura de energía que muestra otro mundo.
Aylin rápido se levanta
—No tienen de que preocuparse. Su tiempo aquí es limitado.
Del portal cruza una chica de cabello negro, portando un vestido color negro ocultando tanto sus cuernos como sus alas oscuras.
—Sigo conservando mi esencia humana —les sonríe a cada uno— Y al mismo tiempo soy un ser sobrenatural.
—Annett es recibida aquí como todos —la señala Aylin— ella es el mejor ejemplo de una convivencia distinta —baja lentamente su mano y pasa saliva al verlos detrás de ella y el portal cerrarse —gracias por aceptar venir.
—A ti por considerarnos, la verdad fue difícil entre el diferente tiempo de cada dimensión.
—Nuestra estadía aquí no será duradera, pueden estar tranquilos —les dice el vampiro viendo con interés alrededor.
—En ese caso, disfrutemos nuestra estadía aquí —Jared avanza a sentarse en el sillón otorgado por una pareja mortal, en cuanto aparecieron, ante la cercanía prefirieron marcar distancia— ¿Qué hay de nuevo en su mundo? ¿Hoy será luna llena?
—No te vas a transformar aquí. De por si ya es insoportable tu maldita presencia.
—Lo mismo digo purasangre
—¿Cómo es que soportas estas cerca de él? —le pregunta Esteban al otro vampiro.
—Bajo reglas, pero aún existe la rivalidad.
—Valkian, Jared —les dice Annett— comportense que no vinimos a pelear. No hay enfrentamiento aquí. —con elegancia se sienta en el antebrazo del sillón— tenemos otro motivo.
—Hay algo que nos entrelaza a aquí, por eso solamente vinimos. —emite el demonio sin ocultar sus cuernos, más sus alas las mantiene ocultas.
—Por mi no hay problema —carraspea Axel — es como ver una de esas películas de fantasía en la vida real.
—O mejor, imaginar todo esto en una historia super entrenida —termina por él su chica.
Aylin es la primera en avanzar varios pasos bajo la vista de todos.
—Todos tenemos nuestra propia historia ¿podemos cumplir una petición especial este día?
Recibe el asentimiento de varios.
—Haremos una excepción pero hay seres y vampiros que no se mezclan.
—Apuesto a que si hablarán se llevarían todos bien —les dice Layla señalando a cada uno.
—Nunca —responden al unisono todos los inmortales.
Aylin niega varias veces y revisa la hora en su reloj.
—Falta media hora para media noche ¿pueden quedarse por ese tiempo?
Annett comparte una mirada con el demonio.
—Lo intentaremos pero exactamente a las 12 de la noche, nosotros nos vamos.
La anfitriona asiente y ante su baja mirada les entrega una copa de sangre a cada uno.
—¿Les perece adelantar los regalos?
—En eso si estoy de acuerdo pequeña.
Cada uno toma cada obsequio, varios permaneciendo en su lugar.
—Ahora me doy cuenta que esta Navidad es la más rara de mi corta vida —emite Juliett riendo— véanos.
—Para nosotros es diferente a las de siempre —espeta Rydel— cada año es solo con mi hermano.
—Nuestra familia es reducida a dos —inquiere Ryan— pero nunca es bueno pasar este día solo.
—Yo tuve Navidades diferentes cada año —menciona Kelly apagando la música— y sin duda eran mejores con mi propia y verdadera familia.
—Le dan tanta importancia a una maldita fecha repetitiva en cada año— su voz causa la atención de todos— jamás entenderé a los mortales.
—Es cuestión de adaptarse y acostumbrarse si estas en su mundo mi querido Darren ¿cierto? —le contesta el rubio vampiro brindando con él y bebe.
—De acuerdo —Aylin carraspea— ¿Quién será el primero?
—Si todos estamos de acuerdo, tú deberías serlo —le responde Ángel esperando la respuesta de todos.
—Que así sea
Aylin no evita medio sonreír y asentir.
—Bien, inicio yo —hacer una pausa al al sostener la bolsa de regalo en su mano— La verdad no sabía que regalarle a cada uno cuando somos tan diferentes. Estuve pensando y no se me ocurrió nada más que aparte de lograr reunirnos a todos aquí este día, es darles esto a cada uno —saca una bufanda negra y sin permiso se la coloca al vampiro pelinegro— es tuya Darren —se inclina a su oído susurrandole— no te la quites.
Cuando se aleja, ignora su mala mirada y milagrosamente, él la conserva.
—¡Estas son para ustedes! —le entrega una bufanda roja tanto a Esteban como a Nohemi, el primero sin evitar la sonrisa.
—Se agradece pequeña pero no creo necesitarla.
—Puede ser útil querido al cubrirnos los ojos cuando nos divertimos tan pasionalmente—Nohemi se la enrreda en su cuello ganando su mirada.
—Cambie de opinión —le sonríe con complicidad.
Aylin carraspea, deja de verlos y prosigue a entregar cada bufanda de diferentes colores, rosas, verdes, azules, blancas, moradas hasta terminar en su lugar. A la mayoría les gusta y otros la observan con desagrado.
—Combina con tus ojos Lay —le dice Aidan a su novia logrando un casto beso.
—Le daré un uso especial para amarrar a ciertos Rizon y que no se me escapen —ríe Kelly al sostener la suya entre sus manos.
—Tú y tus pensamientos asesinos y enfermizos Campbell.
—¿Quién sigue? —Aylin interviene desviando la vista de ellos.
—Lo ideal sería por parejas ¿no?
Ante el comentario de Axel, Aylin posa la vista en el vampiro a su lado.
—Darren te toca obsequiar algo
Él gruñe y observa a cada uno.
—Ya lo hice. Les di a cada uno la maldita oportunidad de aún vivir esta noche y si tienen suerte, superen otro año.
Tan pronto el silencio los invade, cada mortal con miedo.
—Que considerado —Esteban acaba con el silencio— que maravilla, ya es mi turno— usa su velocidad vampirica y ante la vista de todos aparece en el centro con una pequeña caja— Que les quede claro, que no todos los vampiros somos iguales —comienza a avanzar— primero que nada, para cada mortal les estoy eternamente agradecido, si su existencia, sin su sangre, bellas criaturas como yo no existirían —se detiene enfrente de Aylin— y admiro su imaginación infinita —le entrega dos libros y se voltea— el de vampirismo es tuyo y el otro se lo darás a Darren, no me lo aceptará. Tal vez si se anima a leerlo entienda el comportamiento humano, es ciencia básica— se dirige al resto— una disculpa ante la falta de decoración, soy pésimo en eso y otra por los que faltaron, no los consideré importantes.
—He leído libros de grimorios mucho más interesante —le responde Annett con una falsa sonrisa.
Él la ignora y al finalizar regresa a su lugar.
—Una novela romántica —emite Aidan al ver su libro, igual al de Layla— supongo que gracias.
Esteban hace una rápida reverencia y termina por sentarse en el sillón.
—Siempre existe la opción de devolver intacto.
—¿Tienes más libros de estos? —le pregunta Alicia con emoción— quiero leer más libros —abraza el suyo fascinada.
—Toda una inmensa biblioteca preciosa. —ignora la mala mirada de Axel.
Nohemi observa el libro en su mano con interés ante el titulo y el diseño de portada.
—Un libro... erotico Teban —le susurra al oído ganando su mirada.
—Podemos leerlo juntos amore
—Y poner en práctica cada posición, me encantaría querido —lo besa.
—Fuiste dedicado a elegir el libro perfecto para cada uno. Me encantará leer sobre todos los delitos del país y sus castigos —le dice Kelly sarcástica.
—Gracias Esteban —le dice Aylin y abraza los suyos causado su atención — es tú turno Nohemi.
Ella frunce el ceño
—Vale su reciente regalo por Esteban ¿cierto?
—No, es muy aparte. Nunca nos pusimos de acuerdo y no me diste ideas cuando te pregunté mi amada.
Nohemi le da un leve golpe en el hombro, gruñe y cruza las piernas.
—Bien, no pensaba usar esta información esta noche. Les daré un obsequio de vida —lame sus labios— no me pregunten como lo sé pero les diré el momento de su muerte. La mayoría de ustedes, especialmente mortales van a vivir hasta los 70 a 75 años, será triste que se despidan del mortal a quien aman —señala a varias pareja— Tú primero y después ella, en ustedes será al revés. Otros ya murieron —guía su mano a Aylin— si estas con un vampiro, seras eterna y termino contigo Teban, lamento decirte que tu eternidad será dolorosa y solitaria.
—Ya acabaste con las ilusiones de todos mi amore —ella se encoge de hombros.
Aylin tensa como todos, la mayoría con una mirada triste aferrada a su pareja, interviene:
—Vamos a enfocarnos en el presente, todos aquí existimos aún ¿Quién sigue para un regalo más... grato?
—Nosotros —Axel carraspea. Con ayuda de Alicia les entrega a cada uno varios cupones —Pueden ir al cine, al parque de diversiones, a cada lugar correspondiente.
—Lo sentimos si no pensamos tanto en gustos inmortales— les dice Alicia apenada y regresan ambos a su lugar.
—Siempre hay regalos malos, buenos hasta peores —espeta Kelly viendo su cupón a un antro conocido.
Enseguida, Aidan y Layla se levantan.
—Creo que llegó nuestro turno —los dos se marchan a la cocina, se demoran poco tiempo cuando regresan —pensamos en darles un famoso pastelillo que Layla prepara.
—Con ayuda de Aidan, esperamos les guste. Algunos son especiales —los entregan a cada uno— contienen sangre —hace una mueca de asco.
—Al fin alguien que piensa en nosotros —Esteban es el único inmortal que le da un mordisco, ganando el de Nohemi cuando se lo regala— no sabe mal.
Es el turno de los hermanos Rizon y Kelly, quienes les entregan una rosa roja a cada uno, la mayoría de ellos, se la regalan a su pareja. Rosas rojas con y sin espinas, otras pintadas de negro y otras con gotas de sangre en los pétalos.
Cuando es el turno de Daniela y Ángel, ellos regalan cartas con palabras emotivas y Juliett y Evans, dibujos detallados de cada chica.
—Nos encanta —emiten varios.
—No es la gran cosa, no está detallado pero voy a aceptarlo. Pero que sea la última vez que dibujas no sé como a mi amada.
—Controlate Teban, admite que en esa hoja me veo preciosa. —él le da la razón.
—No fue fácil, Juliett me ayudó.
—Tuvimos que pedir información de cada uno. En la mayoría, Aylin nos ayudó. Días atrás la visitamos.
—Si, con miles de preguntas de varios —observa su propio dibujo de ella en su mano— no pensé que sería para esto —gira a verlos— gracias— se las ingenia para sostener cada obsequio suyo y de Darren que no deja de rechazar.
—Parece que somos los últimos —emite Annett— les daremos algo especial —increíblemente en sus manos aparece una piedra brillante— cuando quieran usenla para visitarnos, sola una vez podrán cruzar a nuestro mundo.
—Procuren en luna de sangre y acompañados.
—Pero les advertimos que hay más seres peores que nosotros —les dice Jared y se levanta.
—Y antes deberán pasar por el Inframundo —Azbel chasquea sus dedos creando un portal— es hora de irnos.
—Nos veremos otra vez —les dice Annett y es la primera en cruzar seguido de cada uno hasta el portal esfumarse.
Para evitar la tristeza, Alicia carraspea.
—Ya faltan 5 minutos para las 12 —anuncia y uno a uno se pone de pie formando un círculo.
—Dejaré esto y enseguida vuelvo —anuncia Aylin y se dirige a la cocina. Al llegar deja cada regalo sobre la mesa y mueve sus brazos —¿Qué es esto? —agarra un trozo de papel con letras en cursiva escritas y lo lee con detenimiento:
Es una advertencia, nadie, nunca vengan a Neevil. Tienen la oportunidad de mantenerse lejos de la oscuridad. Lejos de las sombras. No estar atrapados. Lejos de ellos. Nunca lo busquen, nunca nos inviten.
Nea Baker
Aylin confundida observa detrás del trozo de hoja notando una frase: Siglo XVll.
Y ante sus ojos, la hoja se consume en fuego hasta terminar en cenizas. A tiempo, la suelta notando el polvo esparciendose en el aire.
—¡YA ES NAVIDAD! —los escucha gritar.
Confundida se voltea pensativa tratando de discifrar el mensaje. Con la curiosidad de quien proviene.
—Pequeña —enseguida deja sus pensamientos a un lado al escucharlo y verlo frente a ella— Ya es demasiado para nosotros, nos retiramos. Es mucha la tentación cuando se abrazan y todo.
—No estuvo tan mal esta noche, lo reconozco.
—Lo entiendo, ya soportaron y estuvieron presentes en lo más importante.
El rubio vampiro se acerca a ella, le da un rápido abrazo deseandole "feliz navidad " y se aleja agarrando de la mano a su alma.
—Como dije, la noche es eterna en compañía de Nohemi.
Ambos desaparecen de su vista dejando por segundos a Aylin sola hasta que otro vampiro aparece.
—Te prefiero a ti cerca que rodeados de malditos mortales —se acerca a ella— ¿Qué sucede?
—Nada, creí que... —Aylin niega varias veces— no me acostumbro a lo sobrenatural —suspira— iré a desearles feliz navidad a todos.
Pasa por su lado cuando con rapidez él la obliga a girarse.
—Ignoras al primero con el que deberías hacerlo.
—Darren, no creí que tú...
La interrumpe con un beso en sus labios situando su mano en su nuca. Cuando se aleja, le sonríe dejando a la vista sus colmillos. Aylin sonriendo ampliamente con miles de emociónes por dentro.
Enseguida se aclara la garganta y pronuncia:
—Feliz Navidad
☃️
🎆
🎁
🎅
🥂
🎄
N/A:
¡FELIZ NAVIDAD! a todas mis lectoras/lectores que leen esto. Un nuevo extra especial de Mundo Imaginations. Les aclaro que nada de aquí afecta la trama de cada historia al usar a todos mis personajes principales para que convivan. Por el momento, no incluí tanto a la nueva historia NEEVIL pues apenas comienza y necesito conocer más a los personajes pero si habrán extras más adelante donde ya los incluya.
Como han leído, una pareja es la principal y anfitriona de esta locura de historias con todos mis personajes: Aylin & Darren. Como sabrán, ellos fueron los primeros que imaginé, la primera historia, los primeros personajes, los amo tanto. Puedo crear mil historias, mil personajes pero ellos dos son especiales, los #1, pero amo a todos y los considero importantes pues cada uno tiene su forma diferente de ser.
Me gustó mucho escribir este extra. Una Navidad colorida referente a mis personajes de todas mis historias. Humanos, vampiros, asesinos, sobrenaturales, cursis, sad ect... Cada uno tiene un color que los define:
Aylin y Darren: Blanco y negro
Esteban y Nohemi: Rojo
Alicia y Axel: Azul
Layla y Aidan: Rosa y verde
Hermanos Rizon y Kelly: Rojo
Daniela y Ángel: Morado y gris
Juliett y Evans: Rosa y naranja
Annett, Valkian, Jared y Azbel: Ellos son una mezcla de colores rojo, negro, blanco y azul.
Los invito a leer cada una de mis historias si aún no lo han hecho y nos vemos en otro extra.
¡Felices fiestas decembrinas! 🎁🥂
Mari ✨❤️🖤💜💙💚🧡
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