Después de escuchar su explicación solo pude reírme, aquello era simplemente absurdo, como si hubieran puesto a los x-men aquella genial serie de cómics en la vida real.

El hombre solo suspiro y metió una mano en el bolsillo del pantalón que usaba debajo de la bata blanca y saco lo que parecía un pequeño espejo y me lo acerco. Lo tome dudosa por su acción.

—Lo que hablaba con mi compañero afuera es justamente lo raro que aparezca la particularidad en una persona de tu edad —explico —Los quirks pueden evolucionar o hacer parecer algo de lo que en realidad son, pero los físicos no pasa así. Tú al parecer tienes una particularidad física que cuando llegaste aquí no tenías.

Lo mire extrañada pues según lo que decía yo debía verme distinta a una persona normal, y se que eso no era así.

Me insistió con la mano a qué me viera en el espejo que me había entregado, cosa que hice sin entender.

Mi cara lucía normal mis ojos seguían siendo marrones y mi cabello seguía de ese color anaranjado rojizo que había pintado poco tiempo atrás para evitar que mi madrastra me encontrará con facilidad. El espejo mostraba una parte de mi cabello de una extraña forma despeinado, con la mano que tenía libre quise acomodarlo pero al tratarlo la retire de inmediato sintiendo como si estuviera tocando una parte algo fría pero teniendo nervios de igual manera, es decir, cabello no era, pues puedo sentir que lo toco con mi mano pero no por el cabello.

—Pero que es... —solte alejando el espejo para poder apreciar todo el panorama. Era como si unas orejas largas de zorro, quise jalarlas, solté un quejido al hacerlo. Ahora sí estaba en shock.

Lo mire aterrada, esto no podía ser cierto, todo era demasiado sub-real.

—Pedimos hablar con tus padres porque eres una menor y porque queremos saber que está pasando.

Poco después sono algo desde su cintura, miró un aparato que pude reconocer como un identificador, se disculpo conmigo y luego se fue dejándome sola pensando en que rayos me estaba pasando.

Paso un rato para escuchar a alguien otra vez del otro lado de la puerta, aunque está vez nadie entro.

—Pues si tanto quieres hacer las dichosas pruebas y aparece como desconocida llama a servicios sociales. Que aunque no quisieras hacer las pruebas es lo que deberías hacer —dijo alguien como si estuviera regañando a otra persona.

Me tense, tenía que salir de ahí, quien sabe cómo terminaría si me hacen las dichosas pruebas, no pensaba terminar peor.

Me pare detrás de la puerta y pegue la cabeza a la puerta para poder escuchar mejor, no se escuchaba nada, abrí la puerta y corrí hacia unas escaleras que estaban a un lado. Cada escalón escuchaba claramente ruido de personas.

No sabía que hacer, si seguía estaba claro que me verían.

—Hey niña —logro escuchar detrás de mí. Volteo con miedo —¿Que haces aquí? Deberías estar en tu cuarto —dice un enfermero mientras se acerca a mi, estuvo a punto de agarrarme cuando de mi brazo salió fuego.

Estaba esto era demasiado, al parecer el enfermero tampoco se lo esperaba así que por el shock de momento aproveche de correr escaleras abajo hasta la salida, mucha gente se me quedo viendo extrañados. Logré eludir a los de seguridad y salir del hospital a quien sabe dónde, no me fijé a dónde iba solo iba corriendo por un rato hasta que termine cansada.

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Estaba en un lugar que parecía residencial, caminé lentamente pensando que hacer, no sabía dónde estaba ni que hacer. Mientras iba sin rumbo de forma tranquila escucho como la casa por la que acabo de pasar algo explota y poco después se ve fuego, busco una forma de como comunicarlo pero no veo teléfonos cerca.

Pude escuchar como alguien dentro de la casa pedía ayuda, sin pensarlo 2 veces entre al jardín buscando la forma de entrar o que la persona pudiera salir, una segunda explosión sonó justo a mi lado rompiendo la pared y justo como paso en el hospital mi brazo estaba en llamas solo que está vez me protegieron de la explosión.

Entre en el lugar evitando el fuego de la casa con el que salía de mi cuerpo.

—¿Dónde estás? —grite esperando oír a la persona de antes.

No hubo respuesta pero escuchaba como tosia, corrí en dirección al ruido y me conseguí con un niño y sus padres, estos últimos parecían dormir.
Agarre al niño y lo carge.

—Sostente como puedas —le dije luego de cargarlo para después poco a poco ir arrastrando a su madre primero con el niño medio cargado, volviendo por el mismo lugar que entre, baje al niño y lo deje en el patio junto a su madre y corrí dentro.

No sé porque lo hacía, no sé si era una forma de compensar el no haber hecho nada cuando mi madre murió, pero ahí estaba, arrastrando al hombre, cuando otra explosión sonó justo a mi lado que por instinto me cubrí con mis manos pensando en el dolor que sentiría después pero no fue así, de mis brazos volvían a salir llamas, esto era perturbador pero útil. Logré sacarlo y poco después llegaron los bomberos.

Yo me quedé solo porque el niño después de salir de la casa me abrazaba llorando sin soltarme. Un policía nos vio y me preguntó que había ocurrido, no sabía que decir cuando el niño soltó que yo solo llegué y los salve. El oficial me miró como si esperara una explicación.

—Yo solo iba pasando por aquí cuando sonó una explosión, no sé que pasó —dije sin que me preguntarán, estaba nerviosa, no quería problemas, suficiente con escapar del hospital.

—No hay nadie dentro de la casa —dijo dirigiéndose al oficial para luego voltear la vista en mi dirección y en la del niño que abrazaba mi pierna con fuerza —¿Lograron escapar a tiempo del fuego? Me alegro bastante.

—No —dijo el niño —ella nos salvó.

Solo lo mire sorprendida, según lo que dijo antes el doctor no era bueno usar el quirk en público y yo tuve que usarlo para sacarlos, eso era malo ¿Cierto? Aunque tampoco sabía exactamente como lo había echo.

—¿Es eso cierto? —pregunto el oficial, a lo que solo pude asentir en respuesta a su pregunta.

El hombre solo regreso por dónde vino, no paso mucho tiempo en el que nos dejó solos, se agachó para quedar a nuestra altura.

—¿Debo suponer que ellos no son tus padres, no? —pregunto y yo asentí —Y tus padres no sabes dónde estás en estos momentos ¿Es correcto? —baje la cabeza sin mirarlo, terminaría en servicios sociales, ya lo ví todo.

Se enderezó y pidió que fuera con él, el chiquillo que estaba abrazando mi pierna no quería despegarse pero el oficial solo le dijo que sería un momento nada más.

Me llevo al frente de la casa donde habían varias personas curiosas, bomberos y otros policías. El oficial me pidió que me quedará ahí un momento mientras el hablaba con unas personas. Estaba nerviosa mi vida se estaba complicando desde que pasó lo del callejón y no habían pasado ni 24horas de eso.

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Tal y como lo pensé, termine en servicios sociales, después de que los padres del niño despertarán pues no quería separarse de mi, me trajeron aquí, pude cambiarme con la ropa deportiva que tenía antes mientras el oficial de antes y otras personas hablaban.

Unas de las cosas que iba aprendiendo de este lugar y sobre mi quirk es que al parecer puedo escuchar mucho mejor las cosas que los demás y que no está bien usarlo en público a menos que tengas un permiso pues puede pasar lo que pasó en el callejón.

Al final tuve que contar todo, pues al parecer había alguien que podía detectar las mentiras, así que no tuve de otra, así que ahora solo esperaba que terminaron de decidir, mientras estaba sentada en una habitación donde el ruido no entraba ni salia.

Estaba por dormir recostando mi cabeza en la mesa que tenía en frente hasta que la puerta se abrió lo que hizo que me despertara de golpe.

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Saquen ustedes por contexto que fue lo que dijeron, o véanlo a medias en el próximo capítulo
まった