/Narra el autor/

  Luego de la paliza que recibieron los gemelos, todos volvieron al entrenamiento, incluyendo los hijos del trueno. Tal como lo dijeron, el entrenamiento fue duro, pero lo fue aún mas para los gemelos. Ellos constantemente estaban cargando pequeñas bolsas de arena para cada ejercicio que hacían, mientras que los demás no. Los ejercicios fueron trote, pesas, ejercicios de resistencia, escalar un muro y combate contra bolsas de boxeo. Las cosas fueron muy exigentes y duras hasta que por fin los chicos pudieron tomar un descanso. Todos fueron a almorzar y los maestros les dieron dos horas de descanso, luego se fueron y no los vieron por el momento.

  Los chicos mientras comían y descansaban, comenzaron a hablar y poco a poco se iban conociendo más.

  Zephyr y la Hiccan joven se sentían incomodas al ver un ambiente tan tenso y no saber que hacer. Ellas y Verónica hablaron por un rato pero seguían sin sentirse cómodas hasta que ya no lo pudieron soportar. Se sentían tan incomodas de que nadie quisiera hablar por el enojo que decidieron sacar un tema cualquiera para hablar.

Zephyr: ¿Y? ¿Ya todos somos amigos?

Neitan: *Molesto* ¿Por qué tuvieron que hacer eso? Ellos perdieron a un amigo y ustedes haciendo el ridículo.

Hiccan: Al menos nos tenemos los unos a los otros ¿No?

Lobo: *Enojado* Yo también quiero irme, pero si siguen estorbando nos perjudicarán a todos.

Espadachin: ¿Eso significa que también vas a desafiarlos?

Lobo: Yo no dije eso, solo que quiero irme.

Caballero Oscuro: Dejen de quejarse, nosotros recibimos la paliza.

Verónica: Tengo que admitir que ese trabajo en equipo fue fenomenal.

Dama Negra: Si no me hubieras estorbado de seguro los habríamos derrotados.

Caballero Oscuro: Tu fuiste quién cayó sobre mí y comenzó a estorbar.

Dama Negra: Se supone que ya debías haberte encargado de él y no estar ahí.

Caballero Oscuro: ¿Y eso qué tiene que ver?

Dama Negra: Si lo hubieras derrotado no estarías ahí, no me hubieras estorbado y de seguro habríamos ganado.

Caballero Oscuro: El tipo tenía seis brazos, tu oponente era solamente una mujer sin poderes. Tienen la misma edad, pero ella es solo una mortal ¿Cómo pudiste perder contra ella?

Dama Negra: No es mi culpa, sino tuya.

Caballero Oscuro: ¿Por qué?

Dama Negra: Porque si.

Caballero Oscuro: Si tan solo fueras menos cabeza dura, la hubieras ganado.

Dama Negra: *Enojada* ¡¿Me estás diciendo tonta?!

Caballero Oscuro: *Enojado* No, solo torpe.

Dama Negra: Y tu eres incapaz de pelear a menos de que una mujer te ayude ¡¡¡Eres un debilucho y una vergüenza para los vikingos!!!

Caballero Oscuro: Si tanta vergüenza doy entonces porque simplemente no dejas de ser mi hermana. Quizás hubiera ganado si no tuviera una.

  Ambos hermanos se arrepentirán de sus palabras, pero la ira y rabia que sentían, hacian muy difícil dejar de lado su orgullo. Iban a seguir discutiendo hasta que Hiccan golpeó con fuerza su plato contra la mesa, llamando así la atención de todos. Ella simplemente se levantó de su asiento y se fue.

  Todos se calmaron y la buscaron por la base hasta que la encontraron en un rincón en suelo mientras abrazaba sus rodillas. Se acercaron a ella lentamente mientras intentaban hablarle.

Lobo: ¿Estás bien?

Espadachin: Tranquila, ya nadie esta peleando.

Zephyr: Si. Levántate y volvamos a entrenar.

  Ella seguía sin moverse y sin decir nada hasta que de repente...

Hiccan: *Triste* De donde vengo... nadie me ve... nadie quiere verme... no le importó a nadie. No importa cuanto me esfuerce, solo me ven como la decepción de mi padre. Cuando de repente me secuestraron y me dijeron que necesitaban de mi ayuda de manera desesperada, creí por un momento que podía ser util para alguien. Creí que podría demostrar lo mucho que todos se equivocaron, pero al verlos a ustedes y a nuestros maestro, entendí que solamente soy una chica débil que no tiene lo necesario.

  Todos quedaron callados porque todos de una forma u otra conocían ese sentimiento. Sabían de lo que hablaba y nadie supo que decir hasta que Veronica decidio decir algo.

Verónica: Oye. Tu los viste ¿No? Nuestros maestros en plena noche se lastimaron a si mismo para hacerse fuertes. Ellos peleaban, se lastimaban y se esforzaban. Ellos no se dieron por vencido ¿O si?

Hiccan: Ellos tienen poderes.

Verónica: No todos. Hablé con Valkiria en privado y ella no posee poderes. Ni siquiera es una valkiria de verdad. Ella entrenó con ella y se ganó su título de valkiria por esfuerzo propio. Ella escaló hasta la cima por si misma. Ella es igual a ti.

  Todos se animaron a hablar con ella para consolarla.

Caballero Oscuro: Nosotros también eramos las parias de nuestros respectivos pueblos.

Hiccan: Pero son semidioses.

Dama Negra: Y aun asi fuimos discriminados por todo el mundo. Fue la única persona que nunca nos abandonó, la que nos inspiró a ser fuertes y convertirnos en quienes somos. Nos entrenó y nos apoyo y fue por ella que nos convertimos en leyendas.

Caballero Oscuro: No contabamos con nadie, salvo con nosotros mismos. Dos hermanos y un aguila. *Mirando tristemente a su hermana* Y por más distintos que seamos, seguimos siendo hermanos.

Dama Negra: *Mira tristemente a su hermano y le agarra su mano* Siempre.

  Hiccan comenzó a levantar su vista y vio a quienes trataban de animarla. Todos se sentaron cerca de ella formando un círculo. Al principio solo la acompañaban en silencio al rato todo el silencio se volvió incómodo.

Zephyr: Dama, dijiste que responderias cualquier pregunta que tuviera durante una hora ¿Verdad?

Dama Negra: Si ¿Por?

Zephyr: Pido ahora que me respondas todas las preguntas que quiero hacerte. Aún nos queda una hora. 

Dama Negra: Esta bien ¿Qué quieres preguntar?

Zephyr: Su historia.

  Los hermanos se vieron mutuamente, sonrieron y comenzaron a contar su historia.

Caballero Oscuro: Todo comenzó cuando eramos unos bebes. Eramos los hijos de Thor y de Sif, nacidos bajo luz de un eclipse. Fuimos separados al nacer ya que a tan corta edad nuestras vidas fueron amenazadas.

Dama Negra: Ambos eramos marginados en nuestras respectivas islas hasta que un día ambos huimos de nuestras aldeas, huimos de todo y nos convertimos en quienes somos. Luchamos contra la Muerte Roja y así fue como mi hermano perdió la pierna. Luchamos contra incontables cazadores, contra nuestras tribus, incluso peleamos en el mismo Ragnarok y contra la diosa Hela. Incluso Fenrir y Jormungandr fueron nuestros enemigos y les ganamos pero a un alto costo. Tuvimos que sacrificar nuestro lugar de nacimiento para salvar a todos. Fue en esa peligrosa batalla que casi pierdo este ojo *Mostrando su cicatriz* y me llevé de premio esta cicatriz. Obvimante, luego de muchas cosas, Astrid y mi hermano se enamoraron y formaron una familia, al igual que yo con Aster. 

Hiccan: *Gritando de la sorpresa* ¡¡¡¿TU Y ASTER SON NOVIOS?!!!

Dama Negra: *Acariciando sus oidos* Es mi esposo, y tengo dos hijos con él. ¿Acaso hay un Aster en tu mundo y no te hace caso?

Hiccan: *Asiente cabizbaja* Así es.

  Ella solo sonrió y se acercó más a la chica. La reconfortó dandole un consejo y unas palabras de aliento.

Dama Negra: No dejes que eso te afecte. Él todavia no se da cuenta de quién eres, y si no se da cuenta cuando seas realmente tu, entonces no vale la pena. Se que estoy diciendo cosas malas de mi esposo de otro mundo, lo cual es incomodo, pero es porque confio en que mi esposo jamás me va a traicionar. Él es el amor de mi vida en mi mundo, no se si será lo mismo en el tuyo, pero si se una cosa. Se que eres fuerte con o sin él.

Zephyr: Asi es.

Caballero Oscuro: Ya que estamos ¿Por qué no contamos historias? Nosotros ya dijimos la nuestra, faltan ustedes.

Neitan: Ok, empiezo yo. Hace mucho tiempo yo también fui hijo de los dioses. Al parecer, cuando nací, un elfo oscuro intentó asesinarme, pero fui entregado a Estoico y a Valka, mis padres, y me crié con ellos. Al final pasó lo que creo que le pasó a la mayoría. Con el pasar del tiempo, mis hermanos me encontraron. Al parecer soy hijo de Odín, hermano de Thor, Loki y Torunn. Fui enviado a Midgar y luego de muchas aventuras por fin conocí a mis hermanos, descubrí mis poderes y eso basicamente. Pasaron muchas cosas y pasé por grandes aventuras, pero la más importante de ellas fue conocer a mi verdadera familia y al amor de mi vida.

Lobo: Creo que sigo yo ¿No es asi? - Todos asintieron y dejaron que hablara - La verdad, es que pase por muchas cosas también, pero al final pude estar con Astrid. Nos habíamos convertido en novios pero luego pasó algo. Astrid desapareció, yo encontré a un amigo y luego de muchos malentendidos, aventuras y sorpresas, por fin pude estar con Astrid. Tuve ayuda de un amigo que me enseño a controlar mis poderes, me ayudó a encontrar a Astrid y me protegió de muchos peligros. Tengo que admitir que todo fue bastante repentino, me costó un poco acostumbrarme pero... no hay nada que no pueda hacer por my lady. 

Las chicas/mujer: Awww.

Zephyr: Ahora sigo yo. Verán, todo comenzo muchos años luego de la pelea contra un tal Grimmel. Mi padre liberó a los dragones y estos fueron a vivir al Mundo Oculto. Este mundo esta literalmente oculto de los humanos. Un día, un sujeto liberó a un ser que destruyó el mundo oculto, asesinó a muchas personas inocentes y trató de destruir el mundo. No se si fue obra de los dioses o del destino, pero mis amigos y yo terminamos yendo a la isla de los Berserkers. Allí conocimos a los hijos del tio Dagur y Mala y a la hija de Heather. A medida que avanzabamos en nuestra aventura, poco a poco fuimos construyendo nuevas amistades, formamos nuevas alianzas y derrotamos a varios oponentes. Al final, logramos salvar al mundo, derrotar a Asvaldr y al Salvajibestia legendario. Pasaron muchas cosas, algunas fueron un tanto vergonzosas pero otras fueron más interesantes. De hecho, Verónica servía a Asvaldr y luego se volvió nuestra amiga, pero creen que ella esta muerta.

Lobo: ¿Por qué?

Veronica: Es complicado.

Espadachín: ¿Entonces continuo yo? - Todos asintieron y quedaron expectantes mientras este Haddock aclaraba su garganta - Mi pueblo estaba muy alejado de otros. En mi "mundo" no tenemos a estos... dragones... para ayudarnos. Somos guerreros hasta la médula y afrontamos cualquier desafío. Un día, simplemente todo cambió. Fuimos atacados de la nada y mi gente trató de resistir pero al final fueron capturados. Yo logré escapar y desde entonces he entrenado arduamente para salvar a mi gente, recuperar nuestras tierras y salvar a mis amigos. Es un viaje difícil y he estado solo durante mucho tiempo, pero ahora con ustedes... ya no me siento tan así.

  Antes de que alguien se diera cuenta, todos comenzaron a llevarse mejor. Se estaban conociendo, se estaban volviendo aliados. Iban a seguir hablando pero notaron nuevamente el semblante triste de la joven Hiccan.

Zephyr: ¿Qué sucede?

Hiccan: *Triste* Es que... Todos tuvieron aventuras increíbles. Todos tiene poderes o son geniales en cierto punto y yo solamente soy la chica que ayuda a Bocón. Soy el pescado parlanchín de mi mundo y eso sigue sin cambiar. No tengo poderes, mi dragón todavía me odia y no tengo nada especial.

Espadachín: Aún. Escuché de los maestros que te encontramos justo en el punto de partida. En otras palabras, ellos te trajeron justo el día en donde todo comenzó para muchos de nosotros. Todos hemos tenido aventuras diferentes pero por lo que pude escuchar, todos, o al menos la mayoria, inician en el mismo punto de partida. Tu todavía no iniciaste, pero puedes hacerlo ahora. Eres una Haddock, no eres cualquier persona, eres especial.

  Esa charla motivacional ayudó a levantarles a todos los ánimos.

  Mientras tanto, los maestros estaban ocultos escuchando cada palabra. Ellos los habían seguido desde el momento en que Hiccan se fue de la cafetería.

H. Dragon Man: Deberiamos avisarles que ya pasaron sus dos horas.

H. Valkiria: Déjalos. De todos modos esto es necesario también. De nada servirá que entrenen día y noche si a la hora de la verdad no confían los unos a los otros. Esa vez, casi se arruina todo solo por no confiar en uno de nosotros. La amenza era grande, pero esta es mucho mayor.

H. Dracomano: Necesitamos que esten en sus mejores condiciones. Esta pelea es muy seria, y probablemente haya más de una baja.