Resumen: En donde Sonic se pregunta a sí mismo por qué el objeto de su afección está tan enfocado en una simple cajita azul.

Tipo de Fic: One-Shot [Más de 1,200 Palabras]

Advertencias: Sonadow no correspondido, crackship, Yaoi, Universo Alternativo, Lenguaje Vulgar, Posiblemente personalidad no correspondiente al personaje, menciones sexuales ligeras, etc.

Notas: Acepto pedidos de parejas, ¡mientras más raras mejor!

...

Sonic no era la persona más brillante de todas, pero había varias cosas que podía ver y deducir de inmediato con tan sólo ver. Estaba en su naturaleza veloz entender con tan sólo unas palabras, el reaccionar con rapidez alguna situación para nada prevista, y de por supuesto, saber cuando algo no estaba normal casi al instante.

El erizo negro enfrente de su campo de visión suyo era el ejemplo perfecto de lo último mencionado.

Shadow the hedgehog había salido de una pequeña tienda que parecía tener poco tiempo de haber abierto después de la derrota sobre Eggman, en sus manos enguantadas una pequeña caja, envuelta en papel de regalo azul claro. El erizo azabache miraba hacia todos lados casi de manera frenética, como si buscase a alguien, o, como si revisara si alguna persona conocida estuviese en su campo de visión.

Sonic no pudo evitar el observar el como los hombros del erizo de ojos carmesí se tensaron al notarlo. Decidió ignorarlo olímpicamente, y darle a Shadow de su compañía, aún si no la quisiese.

-¡Hey, Shadow! ¡Cuánto tiempo sin vernos!-Saludó Sonic, sonriendo amplio, de esa manera amable y energética que sólo él sabía dar. Shadow rodó sus ojos rojos como la sangre, dejando que el erizo cerúleo llegase a su lado. Sabía que no iba a quitárselo de encima sin importar lo que hiciese, después de todo.

-Faker.-Dijo el erizo mayor por respuesta, su mirada seria, y su voz tan intimidante y profunda como siempre. A Sonic siempre le recorría un escalofrío por todo su cuerpo al oírlo hablar, no importase lo que saliese de sus labios. -Pensé que el Guardián y tú tenían cosas que hacer.

Sonic se encogió de hombros, aún con su aura despreocupada y su suave sonrisa.-El cabeza de nudillos sólo necesitaba ayuda en unas pocas cosas. -Shadow observó al erizo estirar sus piernas, soltando un gruñido contento al sentir varios huesos tronar.-Así que estoy de nuevo libre.

El erizo azabache no tenía el más mínimo interés de continuar hablando con su rival de púas azules, continuando caminando de manera tranquila hacia su destino. Sus ojos carmesí observaron la caja entre sus manos, pulgares acariciando el delgado papel de regalo azul.

Sonic parpadeó, notando a Shadow alejarse, y el cómo cuidaba de aquella caja como si fuese su mayor tesoro. Si su curiosidad ya estaba picada por ver a su rival celosamente cuidarla, ésta curiosidad se alzó por los cielos al ver la maldita sonrisa que se asomó por los labios del erizo negro.

No era una de sus sonrisas maliciosas que implicaban burla hacia un patético objetivo, o esas sonrisas semi forzadas que muy pocas veces solía hacer cuando la situación lo obligaba -Un ejemplo eran las veces que Cream y Shadow coexistían en una misma habitación -. Era una sonrisa pequeña, apenas las comisuras de su boca se habían movido, pero era la pureza, la alegría palpable lo que movió algo dentro de Sonic.

Una sonrisa que no había visto dedicársela a nadie.

Mentiría si negara que saber que el contenido una caja podía hacerlo sonreír así pero no él le hizo sentir como si una aguja pinchara su corazón.

Sonic tenía muchas preguntas formulándose en su cabeza en ese preciso momento, y las respuestas eran mucho más que deseadas.

-¡Hey, Shads!-Sonic lo alcanzó a pasos veloces, colocándose a su lado, manos detrás de su cabeza en una cómoda posición. Notó como la muy pequeña sonrisa en el erizo negro se borró, como si no quisiese que nadie supiese de aquél lado sensible que guardaba con recelo. -¿Qué te traes con ésa caja?

El ser más rápido del mundo había preguntado aquello como si la caja no fuese tan interesante para él, pero aún así había hecho que la expresión en el erizo azabache cambiase, como si alarmas en su cabeza estuviesen sonando a manera de advertencia.

No le gustó aquello.

-Nada de tu importancia, Faker.- Fue la cortante respuesta de Shadow. Estaba en guardia, y Sonic lo sabía. Eso aumentaba más la amargura. Habían pasado por un infierno hacía tiempo atrás, y todavía el erizo negro era tan frío como antes.

Sonic suspiró, para dejar a Shadow continuar su camino. Sabía que no conseguiría nada de él... Pero aún así no dejaba de doler.

Bufo, pateando una pequeña roca cercas de él. Supuso que podría ir a ayudar a Tails con varias cosas.

...

El sonido de una puerta abriéndose fue ignorado por la figura habitando la sala de aquella normalmente solitaria casa.

Infinite parpadeó varias veces, sintiendo una caja azul caer encima del libro que estaba leyendo. Ojos heterocromáticos observaron sorprendidos al erizo negro enfrente suyo y su expresión enfadada, que lucía como si estuviese a punto de explotar de la ira.

-¿Ha pasado algo, Shadow?-Infinite preguntó con cautela. Sabía que el erizo negro no era capaz de golpearlo sin que lo provocase primero, pero uno nunca sabe cuando una situación aparentemente controlada se sale de sus manos, eso el mercenario lo aprendió de mala manera.

-El Faker. Eso ha pasado. -Shadow se acomodó en el sofá junto al chacal, apoyando su espalda contra el suave cojín. Un suspiro exasperado salió de sus labios, Shadow no podía a veces recordar al erizo sin frustrarse. Sonic era un buen rival, y Shadow le daba su merecido respeto, pero a veces la actitud de éste lo enfadaba a niveles increíbles.

El chacal de pelaje negro con blanco miró hacia la nada por unos cuantos momentos, recordando cuando la vida de éste estuvo en sus manos, y el cómo lo dejó vivir al creerlo débil. Había momentos en los que se arrepentía de dejarlo vivir. Por su culpa estaba en aquél miserable estado*.-El erizo azul, ¿hmn?

Una mano enguantada del chacal se posó en la cabeza del erizo negro, acariciando sus puás de la manera que sabía que a Shadow le gustaba, haciendo a la Forma de Vida Definitiva se relajase bajo su toque, expresión tensa y enfadada escapando de su rostro para volverse solo una seria y monótona.

El silencio reinó por varios minutos, con Infinite simplemente regalándole a Shadow varias caricias, su propia expresión relajada y ausente de su ceño fruncido. El libro que había estado leyendo yacía olvidado entre su regazo, su mano libre ocupando la cajita envuelta con papel azúl .

-¿Se ha enterado...?-Infinite se atrevió a decir al fin, su voz inexplicablemente baja.

Shadow no dejó siquiera que acabase la pregunta, sujetando la mano del chacal que estaba en su cabeza con una de las suyas.-El Faker no es tan listo.- Dijo, su voz mostrando sinceridad, aún a pesar de no haber abandonado aquel monótono tono de voz que lo caracterizaba.

Notando el como el erizo entrelazaba los dedos de las manos unidas de ambos, Infinite recordó el como él y Shadow habían llegado a aquella situación.

Recordó el dolor de la derrota inicial con aquél erizo negro. La debilidad. El como dejó su "yo" del pasado para volverse Infinite. La obsesión con el poder. La segunda derrota. La huida. Su búsqueda en busca de arrestarlo y llevarlo contra la justicia. El como Shadow lo encontró en un callejón luchando en contra de la muerte y, el como contra todo pronóstico lo llevó a su solitario hogar para cuidar de él. Los sentimientos que poco a poco nacieron en contra suya. La negación. La aceptación...

-Estás pensando demasiado de nuevo, chacal**.- Shadow habló, interrumpiendo los pensamientos del mercenario definitivo. No pudo evitar escapar una burlona sonrisa pequeña al ver las mejillas del mercenario pintarse de un suave rosa, imposible de esconder por su blanca melena en ellas.

La anteriormente mano derecha del Doctor Eggman dejó salir un bufido en respuesta, para sentir la otra mano del erizo negro tocar su pierna, para deslizarse y acomodarse en su cintura. Se repetía a si mismo que la situación no le afectaba cual mantra, como si haciendo eso pudiese bajar el rubor en su cara. -¿Y qué planeas hacer al respecto, erizo?

Shadow dejó salir una ladeada sonrisa sensual. Infinite tenía que admitir para sí. Eso había hecho que su estómago diese vueltas. Su corazón no dejaba de latir con fuerza. -Quizás ocupar tu mente con otra cosa.

Tras decir eso, el erizo azabache acercó sus rostros, y sus labios se posaron contra los del contrario en un beso. Infinite no pudo resistirse y ni siquiera se molestó en hacerlo,correspondiendo aquél beso de manera tranquila y calmada.

Mientras ambos continuaban con sus besos, y decidían llevar sus actividades a la habitación, la cajita azul yacía olvidada en una mesita.

El papel de regalo estaba lo suficientemente abierta para revelar el nombre de una joyería.

. . .

*La situación que Infinite tiene en éste universo es diferente a lo que muchos fanfics quieren dar a ver. Muchos ponen acerca de la redención de Infinite, y el como es perdonado. Yo me decidí en detallar un poco de uno en donde es buscado para ser llevado a la prisión por homicidio masivo, y Shadow lo mantiene escondido en su hogar. Infinite sigue siendo un mercenario, y no tiene un mínimo interés en ser un héroe. Pero con el tiempo ha sabido respetar al erizo que lo a llamado débil, hasta crear una relación con él a espaldas del Sonic Team.

**Jackal =es Chacal en español. Eso si no me falla la wikipedia