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Guardia baja

Muchas felicidades Sumi ^^

Esta actu va dedicada a ti en este día especial, aclarando claro, que no es tu regalo oficial, esa vendrá con uno de los temas del KiriAsuweek así que considera esto como una previa xD

***

Anteriormente...

-Acaso quieres apostar? - el brillo en sus ojos era totalmente visible por la emoción de demostrarle a su amado que tarde o temprano necesitaría de ella - esta bien, solo el saludo normal, nada de acercamientos innecesarios y con esto me refiero a no mas besos o abrazos demasiado cercanos hasta que pierdas kirito kun.

-esta bien, pero si tú pierdes harás lo que yo quiera....y como que hasta que pierdas? Acaso crees que ya ganaste antes de empezar?

-y si tú pierdes dejarás que te ayude sin oponerte y claro, conociéndote bien ya sé que gané.

Y tras esas palabras dieron por seguro su apuesta.

***

Motivaciones.

Guardia baja.

- Ya Asuna, no pongas esa cara!!.

Era la hora del almuerzo y tanto Asuna como Rika se encontraban sentadas ocupando una de las mesas de la cafetería.

La primera se encontraba recostada sobre sus brazos con una expresión cansada en su rostro, mientras que la segunda trataba de levantarle los ánimos a su amiga.

Asuna suspiró sonoramente mientras miraba a la castaña a su lado - es que extraño mucho a kirito kun - respondió haciendo un adorable puchero.

- Si vas a estar así todo el día mejor no hubieras hecho esa estúpida apuesta, Asuna.

- Moohh!! Ya lo sé Li.. Rika chan - se acomodó en su asiento para poder conversar mejor - pero realmente en ese momento no pensé las cosas. Además estaba segura de que Kirito kun perdería como máximo en unos dos o tres días... - comentó algo decepcionada.

- Sii!! Pero ya van casi dos semanas y ninguno de los dos se rinde.

Si, desde hace aproximadamente diez días kazuto y Asuna habían empezado con esa absurda apuesta. Y aunque aun pasaban mucho tiempo juntos, no era lo mismo, ya que ninguno podía acercarse mas de lo debido al otro hasta que alguna de las partes perdiera o se rindiera. Y en un principio Asuna creyó que sería fácil, que Kazuto no resistiría un solo día sin verse afectado por tales términos, conociendo muy bien los instintos del espadachín negro estaba muy segura que cedería rápidamente y que al final ella saldría victoriosa. Pero pasaban los días y él no se veía para nada afectado, mas que solo en aquellas veces (y vale decir que fueron bastantes) en las que ella trataba de ponerle algunas "trampas" para hacerlo caer.

Y así como también ella conocía esa parte apasionada de él y la forma extrovertida en la que se desenvolvía solo con ella, también estaba esa parte orgullosa y que no se rendía ante nada hasta lograr su cometido (al igual que ella). Pequeño detalle que ella había olvidado en ese momento en el que había sugerido tal cosa.

Por lo que esta, realmente empezaba a verse como una batalla de voluntades. Quien cede  primero.

- Y no lo voy a hacer yo Rika, haré que Kirito kun se trague sus palabras - dijo completamente decidida y con una nueva expresión de seguridad y motivación en su rostro.

- Hummm... en serio crees eso? - Asuna miró incrédula a la castaña a lo que está adivinando sus pensamientos continuó - digo; yo veo a kirito muy calmado, al contrario de ti...

- Que estás tratando de decir? - la mirada amenazante que la ex sub comandante lanzó ocasionó que Rika se ponga un tanto nerviosa pero sin embargo no fue impedimento para que continuara con lo que había empezado a decir.

- Que realmente creo que a como vamos kirito será el que gane esta apuesta.

Asuna se levantó bruscamente de su asiento en un impulso de sorpresa al ver que, incluso su mejor amiga también dudaba de su convicción - que estas diciendo? Acaso también quieres apostar?

- Hey cálmate Asuna! - colocó sus manos frente a sí a la altura de su pecho en una acción que indicará a la joven frente a sí que se calmara - No me metas en sus jueguitos de pareja. Yo solo digo lo que veo, y lo que veo es que vas a perder...

- No voy a perder - aseguró y volvió a sentarse.

- Esta bien, pero entonces debes intentar otras cosas para que él caiga.

La muchacha asintió con seguridad para luego llevarse un bocado de pan a la boca.

***

- ¿Que piensas hacer kazuto? - el joven de cabellos rojos preguntaba mientras bebía el líquido que aquel cantinero moreno conocido como Agil en SAO; le había ofrecido minutos atrás - Asuna san es muy testaruda, sabes que no se dará por vencida hasta ganar.

Kazuto soltó un profundo suspiro - lo sé Klein.

- No debes bajar la guardia con ella - comentó el moreno al otro lado de la barra.

- Eso también lo sé. Apenas puedo resistir sus ataques y eso que han sido muy seguidos - en ese momento el pelinegro recordó cada uno de los momentos en esos diez días en que su novia lo había estado "provocando" por así decirlo y que a duras penas había encontrado la forma de evitar caer en sus encantos.

Últimamente Asuna se le había estado insinuando al pelinegro, había propiciado momentos en los que se encontraban ellos dos a solas terminando con un pequeño acercamiento tentador, claro, sin romper con las condiciones impuestas en la apuesta. Además estaba el hecho de que la extrañaba mucho, su cercanía, poder abrazarla y besarla, retribuirle todo el cariño que ella le daba con acciones ya que, él no era muy bueno con las palabras y sin embargo ahora parecían ser dos amigos que se quieren como algo mas, pero que no se atreven a dar el siguiente paso y eso era algo que a ambos les frustraba pero ninguno pensaba en ceder, también estaba el hecho de que Kazuto siempre consultaba sus decisiones con ella pero no podía decirle nada ahora porque sería como darle por ganada la guerra y en esos momentos en los que mas deseaba dejar de lado esta absurda competencia es que las palabras que aquella orgullosa y hermosa muchacha había dicho el día en que todo este asunto había iniciado resonaban una y otra vez en su cabeza como una especie de mantra, mantra que le hacía recordar porque había decidido dejarse llevar por los. Jueguitos de su novia. "Te enseñaré a que entiendas que no puedes hacer nada sin mi", "Verás que seras tú mismo el que luego venga hasta mi pidiendo un poco de mi ayuda y de mi atención" . Y aunque esto era innegablemente cierto, aún así Kazuto quería demostrar lo contrario y era en ese momento cuando su determinación y orgullo volvía con fuerzas renovadas.

-Lo sé - volvió a repetir Kazuto para luego mirar fijamente a ambos hombres y con una sonrisa llena de seguridad dijo - pero al igual que ella, yo tampoco pienso perder.

***

Al día siguiente, a la clase de Kazuto le tocaba educación física, por lo que, como era costumbre las chicas se cambiaban en el vestidor mientras los chicos lo hacían en el aula. Kazuto al entretenerse un poco con algunos detalles que estaba corrigiendo de la sonda que preparaba para Yui y que, anteriormente había sido utilizada un tiempo por Konno Yuki, terminó por ser el último estando dentro del salón, el último en cambiarse y por ende también sería el último en llegar a clases.

Tratando de evitar que su profesor le pusiera una falta o le diera un llamado de atención, apresuró el paso todo lo que pudo para llegar a las canchas con la mayor rapidez posible y sobretodo, a tiempo (si es que realmente podía llegar a tiempo aún).

Pero cuando llegó a las escaleras que conectaban el segundo piso con el primero, justo al girar para seguir bajando por la siguiente hilera de escalones se encontró con Asuna que iba subiendo con unas cuantas copias en mano, por lo que al quedar frente a frente se detuvieron unos instantes, quedándose estáticos unos momentos solo mirándose fijamente.

Cada uno luchando con sus pensamientos e impulsos de querer tirar todo por la borda y lanzarse a los brazos del otro. Hasta que el silencio y la quietud se vieron quebrantados por la delicada voz femenina - Kirito kun, no vas a llegar tarde acaso?.

-S-si... - respondió con cierto tono de nerviosismo y ya con un leve sonrojo empezando a hacerse notorio en sus mejillas. Como era un día bastante caluroso, Asuna se había desecho del nudo de la pequeña corbata que traía el uniforme y había desabrochado también dos botones de su camisa. Claro, a simple vista eso no llamaba para nada la atención. Pero como kazuto estaba como tres escalones mas arriba que Asuna, y esta estaba bien dotada con respecto a sus atributos como mujer y eso era algo que para Kazuto no pasaba para nada desapercibido cuando se trataba de ella ya desde la época de SAO, entonces ese pequeño detalle se hacía mucho mas notorio desde la posición que ambos tenían.

-Kirito kun? - a juzgar por el tono que había usado, el pelinegro pudo darse cuenta que Asuna no se había percatado aun de ese detalle que para él en esos momentos era como un arma filosa. Si ella se daba cuenta de que el estaba nervioso por la vista que ella le estaba ofreciendo, entonces podría usarlo en su contra para obligarlo a caer una vez mas en sus encantos. Y vaya, que si se daba cuenta, esta vez no habría nada que Kazuto pudiera hacer para resistirse puesto que justo ahora e inconscientemente Asuna se acercaba a él de la forma mas natural posible, con la ingenuidad latiendo en sus orbes avellanas y Kazuto no podía evitar alternar su mirada entre el rostro femenino y el "uniforme", cada vez mas nervioso.

Entonces decidió apartar la vista con mucho trabajo para empezar a bajar y ponerse por lo menos a la altura de la muchacha, quedando ahora el pelinegro un escalón mas abajo que su novia, logrando soltar un suspiro de alivio al hacerlo y dejando algo confusa a Asuna. En ese momento un grupo alumnos mas o menos entre cuatro y cinco (todos chicos) venían por el mismo camino por el que Kazuto había llegado con la diferencia de que estos se notaban mas eufóricos, al parecer venían gritando y empujándose, en otras palabras... estaban peleando.

Kazuto y Asuna miraron en dirección a ellos que a estas alturas se encontraban también en las escaleras cerca de ambos.

-Suéltame, si Amano san no te hizo caso no es mi culpa - gritaba uno de los muchachos, de corto pelo castaño, empujando a un chico de cabellos rubios saltándose de esta forma el agarre que le había hecho.

-Si es tu culpa, tu me la robaste! - respondía con igual tono el chico mientras estaba siendo sujetado por dos de los chicos que los acompañaban.

-Yo no te la robé - el joven esbozó una sonrisa victoriosa - ella me prefirió a mi - declaró con seguridad y orgullo mal disimulado siendo este el detonante para que el joven, que estaba siendo sujetado se abalanzara sobre el otro.

Kazuto y Asuna miraban sorprendidos la escena pero justo en el momento en que iban a decir algo para detener la pelea el chico de pelo castaño empujó con gran fuerza el rubio y este fue a chocar directo contra Asuna, pero logró sujetarse de la baranda de las escaleras para no caer por ellas. Sin embargo Asuna que había recibido todo el peso del chico mas el suyo propio no logró contar con esa misma suerte por lo que terminó cayendo de una forma brusca hasta la planta del primer piso.

Los chicos se habían quedado como estatuas ante lo ocurrido pero al cabo de unos segundos tres de ellos fueron a llamar a un profesor mientras los otros dos que habían iniciado la pelea buscaban la forma de ayudar.

Afortunadamente al caer, Asuna no se había lesionado, de hecho casi ni sintió el golpe así que cuando intentó levantarse, abrió los ojos con desmesura y terror al descubrir que la razón por la que no sintió el golpe fue porque había caído completamente sobre Kazuto, siendo éste el que se llevó toda la carga del golpe.

-Kirito kun? - su voz sonaba quebrada y asustada, y no era para menos, pues Kazuto tenía los ojos cerrados con fuerza y una expresión de evidente dolor en el rostro acompañadas  de unas pequeñas lágrimas que persistían en salir por mas que él hiciera todo lo posible para evitarlo. Aun así, ella pudo notar la leve presión que el pelinegro ejercía en sus brazos que se hallaban envueltos al rededor de su cintura, como si con ese acto quisiera asegurarse de que ella estaba bien.

Los dos chicos que quedaban ayudaron a Asuna a levantarse en lo que llegaban sus compañeros con el profesor pero ella persistió en quedarse arrodillada a lado del pelinegro con el rostro distorsionado por la angustia, sujetando la mano masculina y repitiendo una y otra vez su nombre, su verdadero nombre no importándole nada mas que él en ese momento, ni siquiera el hecho de que las hojas que tenía quedaron esparcidas por todos lados, (no se había tomado la molestia de juntarlas de nuevo). Kazuto por su parte seguía en el suelo, no se había movido ni un centímetro, el golpe había sido tan fuerte que a él se le dificultó la respiración por unos segundos dándole una horrible sensación de falta de aire.

Cuando los alumnos volvieron, habían llegado con dos docentes y entre ellos llevaron a ambos estudiantes a la enfermería.

***

Habían pasado veinte minutos desde que dejaron a Kazuto con la enfermera, como Asuna no presentaba ningún tipo de lesión mas que solo un pequeño raspón en la rodilla derecha, fue atendida y llevada a la dirección junto a los otros chicos para dar su versión de lo acontecido para así el director pueda tomar las medidas disciplinarias correspondientes no sin antes asegurarle al joven Kirigaya que una vez termine con todo eso volvería para estar junto a él.

Una vez hecho y sin perder un segundo mas, la muchacha fue corriendo hasta la enfermería nuevamente para ver como seguía el pelinegro.

Encontrándose con la puerta cerrada al llegar. Dudo unos segundos sobre si era conveniente abrir o no la puerta, con la mano puesta en el picaporte de la misma. Pero antes de tomar una decisión con la cabeza fría escuchó un grito desde adentro.

-Ah! AAHH!!

Si, era la voz de Kazuto. El oír como su amado espadachín gritaba la alarmó (¿Tan mal estaba que incluso gritaba de dolor?) por lo que terminó por irrumpir en la sala casi gritando también - Kirito kun que tie...

Sin embargo Asuna no fue capaz de terminar puesto que quedó sorprendida y con  rostro con una expresión desencajada ante la escena que veía. Kazuto, recostado boca abajo y con el torso desnudo mientras la encargada de la enfermería tenía ambas manos puestas sobre la piel expuesta con total confianza.

-Asuna! - logró articular kazuto con evidente expresión nerviosa.

-Ah! Asuna san, que bueno que llegas - la mujer que estaba aplicando una especie de líquido o una especie de gel o crema sobre la espalda del pelinegro, la miró y con gran animo la instó a que entrara completamente - necesito ir a la dirección para explicar la situación de Kirigaya kun y quería pedirte que te quedes un momento con él, para evitar que haga un esfuerzo de más este muchacho anda que quiere levantarse a cada rato.

Asuna solo miraba la escena en silencio sin acotar ni reclamar nada para luego de unos segundos esbozar una sonrisa un tanto forzada que terminó por causar un leve escalofrío en el pelinegro que seguía acostado.

-Claro, yo me encargo - dicho esto la mujer salió dejando a ambos jóvenes solos sumidos en un profundo silencio, silencio que fue interrumpido por el carraspeo producido por el pelinegro.

-Em... Asuna...

-Sabes, kirito kun... - la muchacha se acercaba lentamente con una expresión seria hasta la cama donde él estaba - tenía mucho miedo que te haya pasado algo malo, pero llego aquí y.... - posó suavemente su mano izquierda sobre el colchón a un lado del rostro de Kazuto ocasionando que el joven se tensara aun mas - me alegra ver que estes bien.

-¿N-no estas enojada? - preguntó debido a la escena anterior y a pesar de la posible respuesta afirmativa y lo que ello conllevaba. Pero para su sorpresa Asuna negó con la cabeza y, ofreciéndole su mejor sonrisa contestó.

-No puedo enojarme contigo por algo que no fue tu culpa.

Ante esto el pelinegro intentó voltear hacia ella - no te muevas kirito kun te harás mas daño - intentó pararlo con sus palabras pero el pelinegro era muy testarudo por lo que haciendo caso omiso continuó con au intento de incorporarse - moh! Quédate quieto!! - sus pequeñas manos hicieron contacto con la espalda masculina pero al darse cuenta, en vez de apartarlas rápidamente como hubiera hecho en otras circunstancias, está vez la mirada ambarina se quedó fija en ese lugar donde sus manos entraban en contacto con la piel del pelinegro.

-Asuna? - pasaron varios minutos y Asuna seguía en la misma posición, impidiendo que Kazuto se moviera.

¿Cuánto tiempo había pasado desde que había tomado su mano por última vez antes de todo eso?. ¿Cuándo fue la ultima vez que había sentido la suave y delicada piel masculina bajo su tacto?. Sin duda extrañaba la sensación que sentía al entrelazar sus manos, al tocar su mejilla o que él toque la suya con cariño, el ser rodeada por aquellos brazos masculinos que conocía a la perfección en un abrazo lleno de sentimiento en el cual siempre podía encontrar seguridad y la paz que necesitaba y mucho mas extrañaba el sabor de sus labios cándidos por un beso apasionado o la sensación de ligero hormigueo y ansiedad por el simple roce de sus labios en los suyos. Eran tantas las sensaciones que parecían tan lejanas en estas instancias y que ahora recordaba perfectamente solo con ese sutil toque.

-Asuna... - reiteró el pelinegro y a modo de respuesta obtuvo una ligera presión por parte de las manos femeninas primeramente en el área de sus hombros, ahí donde habían una grandes marcas producto de la caída, bajando por toda su espalda y subiendo de nueva cuenta cada vez con mayor confianza - que haces? - reprimiendo un  pequeño gemido de dolor, pues aunque ella estuviera masajeandolo para darle un poco de alivio aún así dolía debido a los moretones que se habían formado en varias partes de la espalda masculina.

En un momento dado, kazuto logró voltear se con dificultad hacia Asuna, quien, cesando en su actividad se acercó lentamente al oído masculino y con un leve susurro le dijo - no fue tu culpa, pero aún no te he agradecido por evitar que me lastime - y con eso dicho, se inclinó sobre él y terminó por unir sus labios, primero solo un pequeño roce que fue afianzando la caricia con los segundos. Tanto tiempo sin retribuirse su amor de esa manera (exactamente diez días) que se sentía tan bien como si fuese la primera vez. Una ligera sonrisa se asomó en los labios de ambos quienes solo se dejaban llevar por aquella exquisita sensación que tanto habían extrañado. Las manos masculinas inmediatamente rodeando la cintura femenina, y las de ella posadas sobre el torso de Kazuto. A estas alturas el dolor era lo de menos para el pelinegro si podía estar de nuevo así con su amada.

Separándose solo para poder mirarse unos instantes. Todo el sentimiento reprimido en esos días se notaba en el mirar de ambos. Ambos estaban mas que felices.

-Te extrañaba tanto - la voz pasiva de Kazuto resonó con seguridad y tranquilidad.

-También te extrañé - con la mirada se atraían, con sus labios se llamaban y con sus besos se saciaban del otro. Al cabo de unos minutos mas, oyeron pasos provenientes del pasillo por lo que se vieron obligados a separar sus rostros.

La enfermera del colegio había vuelto, después de quien sabe cuanto tiempo y cuando lo hizo Kazuto aún seguía sosteniendo a Asuna por la cintura en tanto ella intentaba librarse del agarre - vaya, veo que ya no necesitas mi ayuda kirigaya kun - soltó con voz burlona la enfermera a lo que Asuna no pudo mas que sonrojarse en sobre manera ante aquel comentario. Por su parte Kazuto solo reía divertido.

-bueno, ya está todo para que vayas a casa - el joven asintió alegre se vistió nuevamente con su playera del uniforme pero antes de salir de la enfermería la mujer nuevamente los detuvo con un ultimo comentario - Kirigaya kun... - lo miró sería para luego sonreír cómplice - ahora es tu turno de cumplir.

Ese comentario dejó confundida a Asuna quien solo logró preguntar - cumplir?.

-Eso no tiene importancia, ya vamonos. Muchas gracias Kaname san - se despidió y dicho esto ambos salieron del lugar.

Como apenas eran las dos de la tarde, ellos eran los únicos saliendo del instituto, Kazuto tenia permiso para retirarse temprano tras lo ocurrido y Asuna por su parte decidió acompañarlo sin importarle si se saltaba el resto de las clases, no iba a permitir que su novio fuera solo a casa después de lo ocurrido. Ya en la entrada, mientras caminaban abrazados Asuna volvió a preguntar a que se refería con lo de "ahora es tu turno de cumplir".

-Bueno... - Kazuto reía nervioso - es que a cambio de que me ayudara a ganar la apuesta yo... prometí ayudarle con su computadora.

-Que??? - el rostro de la muchacha se iluminó tomando una tonalidad parecida al de si cabello - Eso es injusto kirito kun!! Yo estaba preocupada por ti y tu hiciste trampa!!.

-Yo no hice trampa, solo le pedí que nos deje solos unos minutos - se defendió y poniendo una expresión de picardía continuó - tú sola caíste, admítelo no puedes estar sin mi - y para terminar de provocarla le dio un beso fugaz en los labios antes de reír sonoramente - perdiste, ahora tienes que hacer lo que yo quiera.

-Eso es injusto!. Entonces si vamos a ser justos, tú perdiste la apuesta primero... - contra atacó - ¿o acaso olvidas como me sujetaste cuando caímos?. Además tu tampoco puedes vivir sin mi...

-Tienes razón... - Asuna lo miró sorprendida - no puedo vivir sin ti...- eran contadas las veces que él era tan abierto en lo que sentía y la mirada que le dedicó en ese momento le demostraba que estaba siendo totalmente sincero.

Ella sonrío levemente y con cierto tono seductor y alegre le respondió - aun sigo diciendo que tu perdiste... - el pelinegro la observaba risueño - pero mientras resolvemos eso, deja que yo te cuide... - diciendo esto volvió a apoderarse de sus labios y con una mirada sugerente se dirigieron a la estación mas próxima, cuidando claro que el pelinegro no se sobre esfuerce, aunque con aquella declaración poco le importaba hacerlo. Después de todo, al fin tenía de vuelta a su novia solo para él y aunque fueran solo minutos o segundos, el quería aprovechar todo el tiempo que tuviera con ella porque sin duda no podía estar sin esa hermosa mujer y eso ya lo sabía desde un principio solo que ahora no le importaba admitirlo.

***

Felicidades Sumi ^^

Tarde pero aquí esta mi pequeño aporte de fluff XD

Como ya mencioné, este no es tu regalo oficial. El de verdad vendrá en la Kiriasuweek y espero puedas esperar hasta entonces mientras tanto espero te haya gustado este cap o al menos entretenido aunque creo que salió algo raro XD. Espero hayas pasado un día genial ^^

Por otro lado... al fin actualicé motivaciones :v//. ¿Cómo no me dijeron antes que llevaba casi un año sin actualizar esta? jaja ok no, si me dijeron y muchas veces :"D (casi me matan y todo XD)

La nueva portada fue hecha por Sumi chan, muchas gracias por  tan lindo trabajo y por el tiempo que te tomaste en hacerla :)

Bueno lo importante es que al fin lo hice y espero les haya gustado, nos vemos en la week ^^

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