24.- "Discusiones y Agua Cristalina"
Sam Walker
La familia Walker ama el alcohol, o la gran mayoría.
Muchos de los invitados ya se estaban retirando de la fiesta, varios famosos que tenían un poco menos de confianza en quedarse porque vivían lejos.
Había al menos una o dos cámaras grabando, sabía que en algunos días iba a haber videos en internet de la boda, y se notaría como Anthony y Tristán pueden ser muy torpes incluso en un día tan importante.
El manager de ambos solo negaba cuando los veía hacer algo que claramente no debían, cómo cuando los vasos resbalaban de sus manos, o se caían, o simplemente eran ellos siendo ellos.
Afortunadamente, ya las cámaras no grababan mucho, o mejor dicho, ya no grababan para el vídeo musical, pues se trataba del concepto de la boda de Anthony y Eliot, y de Tristán y Dimitry como invitados que igualmente querían casarse, la verdad era que se notaba que sería un gran video.
Estaba seguro que sus fanáticos iban a llorar cuando lo vieran, y no me sorprendería.
Por nuestro lado, Tony sabía que su familia entera iba a aprovecharse del vicio, y eligió este lugar para la boda con la confianza de que habría una habitación suficiente para que todos pudiéramos quedarnos a dormir.
Eddy estaba un poco decaído, ya que Thomas no apareció en mucho tiempo, y no fue hasta que estaba siendo cerca de las once de la noche que él chico se apareció. Claramente Eddy estaba enojado, y se fueron a hablar en privado antes de venir con los demás, normalmente, él no solía enojarse tanto, y aún así, se le veía bastante molesto.
Ahora mismo, Daniel y Bruno ya habían hecho su travesura, secuestraron todos los centros de mesa y comenzaron a venderlos, en cualquier caso eso sería normal considerando que son Daniel y Bruno.
Pero como si no podía faltar otra cosa, Dimitry les compró todos los centros de mesa.
Jean, Kayla y Ayden, no se aburrían de recordar cuando salían de fiesta hace años, mis padres y ellos de verdad parecía que volvieron a sus días de universidad.
Tanto así, que parecía que mis padres habían olvidado que estaban casados ya, y los amigos de Ayden incluso le hacían esa burla de que fuese a hablarle a Frank.
De verdad estaban ebrios.
Bueno, mientras no se maten entre ellos, que se diviertan.
¿Hasta dónde ha llegado la masacre?
Daniel y Bruno ya están dormidos.
Dimitry y Tristán también.
Izan y Landon comiéndose a besos por algún lugar.
Anthony buscando a su caballo con Frank en una competencia de; él que lo encuentre se lo queda.
Eliot no deja de llorar porque Pelusa está muy bonito.
Ayden sigue creyéndose joven de preparatoria con Jean y Kayla.
Los abuelos ya se fueron a dormir.
Acacia estaba cuidando que nadie saliera herido.
Y Keith y yo... Siendo espectadores de todo.
Porque a él no le gustaba tomar, y yo estaba muy cansado de las prácticas como para no querer descansar mañana.
—¿Y Pelusa? —preguntó Donson.
—Creo que está visitando a las mesas —indiqué, viendo al hámster en la mesa de una banda de pop.
—Es una celebridad. Estoy tan orgulloso.
—¿No te da miedo que pueda pasarle algo?
Asintió. —Sí, pero Pelusa es más inteligente que yo, sabrá cómo volver antes de que le hagan algo.
—Menos mal —me alegré—, entonces, ¿qué deberíamos hacer?, ¿encerrar a mi familia para que se duerman?, ¿buscar sobras de comida?
—Mmh... ¿Buscamos al caballo? —sugirió.
Lo miré, chasqueando mis dedos. —Buen plan.
—Chicos —una voz femenina nos llamó, obligándonos a voltear—, ¿han visto a mis padres?
Negamos.
Acacia se veía más preocupada de lo normal, considerando que ella era una persona que podía mantener su cordura en muchas circunstancias... Menos en la parte en la que abofeteó a Tony antes de ir al altar.
—¿Todo bien? —pregunté.
—Sí, sí, sí... Bueno no —soltó—, ya han tomado mucho, y me preocupa Brent, Myles es más tranquilo, pero Brent es... Se enoja muy fácil, ¿bien?, no es bueno que esté lleno de gente con el alcohol cruzando su sangre.
—Mmh, pueden estar dormidos también quizá —comenté.
Suspiró. —Ojalá que sí, ya me cansé de pagar los platos rotos... O huesos. Pero, está bien, los veré luego, esto ya está apunto de acabarse.
—Todavía podemos huir —susurró Keith a mi lado, cuando Acacia se fue en busca de sus padres.
—Pelusa es nuestro guardaespaldas —le contesté.
—Pelusa se va a poner hasta el copete —señaló una mesa, dónde él hámster corría entre copas de vino que estaban sobre ella.
Reí. —Al menos no hicimos el ridículo.
A lo lejos, Eddy nos llamó, e hizo que parte de la familia, los cuáles estaban en una misma mesa ahora, le pusieran atención a él, pues él había regresado ya con Thomas, sujetos de sus brazos.
Ayden, Kayla, Jean, Keith y yo fuimos los únicos que lo escuchamos, los demás estaban buscando un caballo o dormidos.
Kayla quién bebía de una copa y Ayden, ya sabían por dónde iba esto, mientras que Jean los miraba con los ojos entrecerrados.
Galen asintió a Thomas, él chico de cabello gris, parecía malo, no porque lo presintiera, simplemente su apariencia parecía de alguien que podría hacernos mucho daño, y aún así, Eddy estaba tan pegado a él cómo si fuera un oso.
—¡Familia, él es mi novio! —Eddy sonrió—, saluden a Thomas Brennan.
Escuchamos a alguien escupir a la derecha, la garganta de Kayla comenzó a toser después de sacar el líquido de su boca.
—¡Kay! —Ayden la llamó en pánico, ayudándola a no ahogarse.
Me tomé de la mano de Donson, porque inesperadamente, Jean se levantó de su asiento.
—¡Papá! ¡¿Qué estás haciendo?! —gritó Eddy, cuando su padre empezó a jalarle del brazo fuertemente.
—¡Espera, Jean! —Ayden gritó, al mismo tiempo que calmaba a la morena.
No estaba entendiendo nada, solo ví como las cosas se estaban descontrolando a un lado de Donson.
Jean se llevó a Eddy a la fuerza, alejándolo por completo de todos, Kayla parecía no procesar nada, y Ayden luchaba por traerla a la realidad.
Algunos invitados se dieron cuenta de lo que sucedía, y estaba de más decir que algunos camarógrafos posiblemente iban a tomar captura de esto.
Miramos a Kayla, la mujer morena había pasado un susto, Ayden la estaba reconfortando, y ella solo parecía ir con una mirada perdida hacia abajo, como si le hubieran dicho lo peor del mundo.
—Kay, escúchame, no es ese Thomas —Ayden tomó su rostro—, Kayla, por favor.
Al novio de Eddy parecía irle igual que a nosotros, estábamos confundidos, sin saber qué acababa de pasar.
—Tú quédate aquí con Kayla y Thomas, yo voy a ver a Jean —le pedí al peliblanco.
Dió un saludo militar. —Seré el mejor mediador del mundo.
Sonreí aplastando mis labios, antes de ir detrás de los dos rubios que acababan de desaparecer al estacionamiento.
Entre la noche y la caminata, observé como Frank y Tony seguían buscando un caballo que estaba enfrente de sus narices.
Rodé los ojos, ni cómo ayudarlos.
Me acerqué hasta la parte del gran jardín donde había autos estacionados, todos eran tan lujosos, y entre tanto buscar, encontré a Eddy forcejeando para safarse del agarre de Jean, antes de que lo hiciera entrar al auto del hombre mayor.
—¡Papá, suéltame! —ordenó Galen en crisis.
—¡No vas a ver a ese idiota, Eddy!
Apenas pudo soltarse un momento. —¡¿Qué pasa contigo?! ¡Thomas es mi novio!
La voz de Jean salió en un grito autoritario y desgarrador, con una crisis de ser escuchado y obedecido.
—¡Él te asesinó, maldita sea, no voy a perderte otra vez!
Galen se quedó estático, yo me quedé estático.
Él rubio más alto, solamente negó, y balbuceó sus palabras.
—Entra al jodido coche, no voy a repetirlo.
Eddy negó. —No voy a entrar ¡Se supone que deberías estar feliz porque tengo a alguien! ¡Es la boda de Anthony, y hacer esto es ridículo!
Él mayor no hizo caso a nada de lo que su hijo le gritó, a la fuerza logró hacerlo entrar, dejando a Eddy encerrado en él, Jean se quedó fuera, pero aún con Eddy gritando y pateando en el coche, Jean simplemente había cerrado las puertas con seguro.
—¡¿Qué fue eso?! —me metí a la escena—, Jean, ¿enloqueciste?
Él me miró, aunque la noche inundara, podía ver incluso a este nivel de iluminación, esa desesperación en sus ojos, un miedo irracional, y una forma de respirar que no era nada controlada, estaba agitado, sus manos temblaban, y luchaba por no perder más el control.
No me contestó nada, corrí a abrir la puerta del auto, pero era inútil, Eddy estaba peor, apunto de romper siquiera una ventana.
—Abre la puerta —pedí—, ¿qué te está pasando?, es tu hijo.
Él hombre asintió varias veces, dando una expresión de frialdad.
—No pienso arriesgar a mi hijo, no a él —fue lo único que dijo, sin intenciones de negociar—, y ese imbécil no va a acercarse a Eddy.
Intenté abrir varias veces la puerta, Galen ya ni siquiera lo intentaba, simplemente dejó su cabeza en el respaldo del asiento.
Pensé, Jean tenía que calmarse, y yo tenía que encontrar a alguien que sepa cómo abrir puertas de auto.
Lamentablemente, Daniel, Bruno y Dimitry estaban dormidos sino es que desmayados.
En la familia, solo podía recordar a otros dos que pudieran ayudar en esto, pero estaban buscando al caballo.
Suspiré, no tenía seguridad de si quién estaba pensando lo lograría, por otro lado, me sentía mal de pensar que Keith sería del tipo de persona que conocería cómo abrir puertas con seguro, era mi última opción. Jean estaba actuando extraño, y no me gustaba cómo estaba apunto de ir contra Thomas.
Caminé regreso a la fiesta, creyendo que también Kayla y Ayden estarían gritando o insultando a Thomas por motivos desconocidos.
Pero no, cuando llegué, Keith estaba de pie viéndolos de lejos, Ayden tomaba la mano de Kayla en sus respectivas sillas, y Kayla, parecía haber llorado, pero estaba hablando con Thomas en voz baja.
—¿De qué están hablando? —pregunté al peliblanco cuando llegué a su lado.
—Me gustaría saberlo —contestó—, Kayla casi le tira un vaso de agua encima, pero ahora está hablando con él.
Negué. —Keith, ¿puedes ayudarme en algo?
—Yo siempre.
—Eh... ¿Alguna vez has abierto una puerta de un auto asegurado?
[...]
—Sammy y Keith, agentes en cubierto en una misión por salvar al rubio secuestrado por su padre que odia a su prometido, una misión peligrosa y arriesgada —susurraba Donson, mientras íbamos detrás de los autos con un cuchillo traído de una mesa—, ¿lo lograrán?, ¿sobrevivirán?, siga viendo la transmisión.
—Keith —lo llamé en risas.
—Mande.
—Cállate —ordené—, seriedad.
—Oh, sí, sí —asintió, dejándome seguir el camino enfrente de él.
Llegamos a la parte del piloto en sigilo, Jean estaba del otro lado un poco lejos, mirando nada más a la dirección donde Thomas se hallaba en la fiesta.
Toqué el cristal de la ventana, llamando la atención de Eddy, el cuál hizo caso rápidamente.
Señalé al asiento trasero, Galen alcanzó a entender, y justo después de voltear a ver qué Jean no viera, se pasó del asiento del copiloto al asiento de atrás, justo dónde estábamos, si íbamos a abrir la puerta, era claro que la alarma del coche iba a sonar, así que necesitábamos que Galen estuviera listo para salir antes de que Jean viniera por el ruido.
—Haz tu magia —pedí a Donson.
—Observa el arte del contrabando —sonó dramáticamente.
Incrustó el filo del cuchillo en dónde la llave debería ir para abrir la puerta, no sé bien qué técnica pudo usar, era un cuchillo pequeño pero afilado, escuché por un momento como la cerradura era maltratada por aquel cuchillo, era sorprendente que de verdad supiera cómo hacer esto.
Nos alejamos de la puerta, y después de unos intentos, la alarma del auto sonó cuando Keith abrió la puerta rápidamente.
Eddy salió disparado del coche, tuvimos qué cerrar la puerta nuevamente y escapar por detrás de los autos que estuvieran al lado.
—¡Misión cumplida! —susurró Keith emocionadamenre.
—¡Tom! —gritó Galen, yendo directamente con su chico.
Keith y yo no vimos nada después de eso, tuvimos qué escondernos para que Jean no quisiera reprendernos, como dos niños que acababan de hacer una travesura.
La verdad no sabíamos nada de qué sucedía, no sabíamos por qué Kayla y Jean se pusieron así, no sabíamos por qué estuvieron tan impresionados con la pareja de Eddy, ahora mismo, no queríamos meternos más, pues solo vimos que Eddy salía de la boda con Thomas tomando su mano.
La boda se había realizado en un lindo campo, pero este lugar lo conocía bien, pues estaba a pocos kilómetros de lo que era un ícono de cariño para nosotros la familia Walker.
Un lago cristalino, uno en el que recuerdo que me han contado qué, Frank llevó a Ayden, Daniel llevó a Bruno, Dimitry llevó a Tristán, Tony a Eliot.
No estaba muy lejos de aquí, podríamos llegar en auto fácilmente.
Las cosas aquí se habían puesto difíciles con lo ocurrido, pero estaba seguro que en unos minutos todos se calmarían.
Entonces, a mi mente llegó una idea.
¿Sería este el momento en el que quisiera llevar a alguien a ese lugar tan especial?
Miré a Donson, ambos estábamos sentados en el césped, con nuestras espaldas apoyadas en el auto de Frank.
Sus ojos brillaban intensamente, con ese azul cristal que siempre tenía un resplandor cuando estaba con él, su cabello blanco se movía por las pequeñas ráfagas de aire, y su piel era pálida, muy pálida. Y claro, no iba a olvidarme del pendiente que colgaba en su oreja, y del piercing que adornaba su ceja izquierda.
—Esto de tener una familia es difícil, hay tantas personalidades —comentó irónico—, ya no quiero imaginar cómo nos va a ir en navidad.
Pensé un pequeño tiempo, ya no se escuchaba ningún grito o parecido en la fiesta, y desde aquí todo era silencio, tranquilidad.
Y así iba a ser, hasta que escuchamos a dos personas gritar y correr por un lado de nosotros, siguiendo de largo.
—¡Yo lo ví primero! —fue el grito de Frank.
—¡Pero es mi caballo! —se defendió Anthony.
Y los dos Walker se fueron corriendo en una carrera por quién llegaba al caballo que estaba bastante lejos.
¿Cómo es que corren tan rápido?
Miré a Keith, él me miró a mi.
—¿Seguro que son de nuestra familia? —preguntó serio.
Debía admitir, que ver a Keith tan emocionado por tener una familia, era lo más lindo que podía pasarme hoy.
—Son adoptados —comenté en risas.
Nos levantamos al mismo tiempo, pensando en que, no estaría mal escaparnos al lago.
Después de todo, ¿qué podía perder?
Antes de que él siguiera caminando a la fiesta, lo detuve tomando su mano, necesitaba preguntárselo antes de hacer planes, incluso pensando que se negaría.
—Ah, cerca de aquí hay un lago —mencioné al mayor—, muchas personas no lo conocen, pero, es muy tranquilo allá, si tú quisieras podríamos...
—¡Oh, sí, yo voy a dónde sea, voy por Pelusa y nos vamos! —soltó rápidamente, y corrió a la fiesta en busca del hámster que se había robado la boda.
Eso fue más fácil de lo que creí.
Me quedé quieto viendo el panorama, todos los invitados la estaban pasando bien, considerando que ya era muy tarde y eran pocos además de la familia.
Miré a un costado, había alguien sentado muy a lo lejos de toda la fiesta, en el césped, y reconocí rápidamente su traje y su cabello rubio.
Jean.
Keith al parecer fue raptado por Ayden antes de encontrar a Pelusa, comenzaron a intercambiar algunas palabras, y como siempre, a mí me ganaba la curiosidad.
Y es que, de verdad estaba inquieto sobre lo que pasó con Jean hace minutos, ¿por qué había dicho eso de que Thomas había asesinado a Eddy?
Sin mucho problema, caminé a pasos ligeros hasta aquel hombre, me acerqué por detrás, y entre más cerca estaba, más lento caminaba.
Jean estaba sentado en dirección a dónde la luna se había aparecido hace horas, tenía sus rodillas flexionadas hacia arriba, sus piernas abiertas, y con sus codos y brazos apoyados en sus propias rodillas, aparte, su cabeza estaba baja, jamás lo había visto así.
Cuando estuve a tan solo tres o dos metros, escuché bien, Jean estaba llorando.
Esa era la señal para que me fuera.
Todos en la familia Walker sabíamos mejor que nadie, que cuando uno de nosotros necesitaba espacio, había qué dárselo.
Y estuve apunto de irme, hasta que escuché cómo le hablaba al viento, con su voz rota, con un sentimiento que sentí en lo más profundo sin siquiera tratarse de mi.
—No puedo decirte adiós, pequeño.
Mi lado más humano me quiso ordenar ir con él y apoyarlo en algo, aunque no supiera qué era, o al menos así iba a ser, hasta que Keith me llamó de nuevo, Pelusa ya estaba en su hombro, esperándome por igual.
Aplasté mis labios, y di la vuelta para escaparme con Donson.
Al llegar a su lado, extendió su brazo flexionado, para que yo pasara mi brazo por en medio, y entrelazarnos.
—Lo llevaré a su carruaje —comentó.
—Carruaje que yo voy a conducir —reí.
—Conformate con que voy a llevarte a él.
[...]
—Este parece un buen escenario para un asesinato del cuál nadie sabrá y se tendrá que empezar una investigación que nos lleve a una horrible verdad, muchos lamentos, y un romance entre una investigadora y un hombre herido por haber perdido a alguien especial —comentó Donson, quitando el cinturón de su cuerpo—, perfecto para el inicio de película.
Negué. —Tienes qué dejar de ver tantas películas con Pelusa.
—Él es quién me incita —lo miró seriamente, portando al animal en sus manos.
Salimos del auto al mismo tiempo, no podíamos conducir hasta el lago directamente, ya que teníamos que ir por un camino de piedras.
Al ser entre tantos árboles, claro que daba miedo, todo estaba oscuro y tenebroso, pero a lo lejos se veía el agua del lago brillar por la luz de la luna y su tono cristal.
Tomé la muñeca del ojiazul, no sin antes asegurarme que el coche estaría bien, y aunque fuera arriesgado, dejamos todo ahí a excepción de su teléfono, pero fuera de eso, nuestras billeteras y mi celular se quedaron ahí.
Así, comenzamos a pasar sobre ese camino de rocas torpemente, tuvimos qué usar la linterna de su teléfono para poder ver, y ahora que lo pensaba, él tenía razón al decir que parecía un buen escenario para un asesinato.
Hubo muchos tropezones, y finalmente llegamos a este hermoso lugar.
El agua de verdad lograba brillar de tan limpia que estaba, y ahí estaba ese muelle que ya comenzaba a hacerse más viejo, pero era muy resistente en verdad, quizá porque eran escasas las personas que conocían este lugar.
Seguí tomando su muñeca, hasta que terminamos en la orilla de este muelle, en el cuál estaban las marcas de los que pasaron por aquí.
Al tomar asiento, nos dimos cuenta de que aún seguían esas iniciales que pusieron Ayden, Frank, Daniel, Bruno, Dimitry y Tristán, claro que en diferentes zonas y de diferentes maneras.
Por ejemplo, Ayden y Frank pusieron una florecita arriba de sus nombres que fueron tallados con algo filoso, Daniel y Bruno habían tallado el Yin y el Yang, Tony y Eliot no, ellos habían dejado un dibujo de un pincel y una guitarra en miniatura, y finalmente, Tristán y Dimitry habían dejado sus iniciales con notas musicales alrededor.
Me quedé pensando en si nosotros deberíamos hacer lo mismo.
No era seguro que él estuviera de acuerdo, pero dudo que se oponga.
De igual manera, ya estaba preparado para esto, había traído cuidadosamente el mismo cuchillo que usó para abrir la puerta del auto de Jean, cuando Keith decía que era un buen escenario para un asesinato, no mentía.
Aunque, si alguien se atreve a tocarle un pelo a él y a Pelusa, voy a actuar.
—¿Cómo conoces este lugar? —preguntó Keith curioso, Pelusa estaba en mi regazo, siendo acariciado por mi con la mayor delicadeza que tenía.
—Casi toda mi familia ha venido aquí con alguien especial —comenté—, Tony dice que Frank y Ayden nos traían un par de veces pero, no lo recuerdo en realidad. Lo que sí sé, es que los Walker siempre vienen con alguna persona a pasar el rato, normalmente solo hablan.
Asintió aplastando sus labios. —Entonces, eso quiere decir que soy privilegiado en ser quién venga contigo, ¿cuándo vas a decirme que me quieres y soy el amor de tu vida?, nadie va a saberlo, lo prometo.
Reí. —Quisieras, Donson.
—No pienso moverme de aquí hasta escuchar un "te quiero" de tu boca, hemos hecho suficiente para que lo digas —su cuerpo se echó hacia atrás, recostandose en el muelle.
Pese a la oscuridad, podía ver a Pelusa y a Keith claramente, mientras también veía el agua brillante abajo de nosotros.
Había escuchado levemente lo que algunos de mis familiares hicieron al venir aquí, y todo se resumía en que venían a charlar por horas, a confesarse que realmente se querían.
Yo tenía ganas de hacer algo diferente.
—Cuídalo un momento por mi —susurré al hámster blanco, dejándolo a mi costado.
Me levanté de la orilla, y la ropa comenzó a salir de mi cuerpo por mis manos, el traje formal iba desapareciendo de mí.
—Ah, ¿vas a darme un show de tus bailes, Sammy? —preguntó el peliblanco.
—Eres muy insistente cuando te lo propones. ¿No vienes?
Pareció entender rápidamente a qué me refería, yo quería que entraramos al lago juntos.
Claramente no quería mojar nada de mi ropa, mi solución fue rodear el muelle hasta poder entrar al lago por tierra, cuando el agua helada llegó a mis muslos, quité mi ropa interior en un intento porque Donson no viera.
Solté respiraciones rápidas y cortas, el agua en verdad estaba fría, y mi parte baja estaba sufriendo las consecuencias mientras más me adentraba.
—¡Está helada! —chillé cuando él nivel de agua terminó en mi cintura.
Lancé mi ropa interior hacia arriba al lado del muelle, logrando que terminara arriba de este.
—Oye, ¿qué me asegura que no hay un horrible animal allá abajo que pueda comerte? —cuestionó, mientras él se desvestía, dejó caer su camisa arriba de Pelusa, pobrecito.
—Bueno, no recuerdo que alguno de ellos haya visto algo, no me digas que tienes miedo.
—¡Miedo tuve cuando tus padres aparecieron, pero nunca temería de una bestia de lago! —exclamó orgulloso—, ¿te molestaría voltearte para demostrarle mi desnudez al bosque?, atrevido, ¡Descarado!
Reí nuevamente, muchas veces me preguntaba cómo es que Keith podía decir tantas tonterías.
Me di la vuelta hasta darle la espalda, esperando a que él me diera la señal de que podría volver a verlo.
De pronto, escuché algo caer al agua, ese había sido Donson.
Qué valentía la de él de saltar con esta temperatura.
Después, ya no escuché nada.
—¿Ya puedo voltear?
No hubo ninguna respuesta.
Pensé que debía voltear ya, más que nada por los nervios de no escuchar nada.
Y así fue, hasta que sentí como algo me tomaba desde la cintura y me jalaba hacia el lago rápidamente.
—¡Secuestro! —gritó esa voz que había esperado.
—¡Keith, espera! —solté en risas—, ¡Está muy fría!
De nada sirvieron mis ruegos, Donson terminó llevándome más dentro de toda la zona repleta de agua hasta que llegó hasta mi cuello y aún podía tocar el suelo.
Por inercia me aferré a Keith, él era más alto, y prefería que él me cargara.
—¿Y nuestro hijo? —preguntó mirando al muelle, dónde en efecto estaba Pelusa corriendo por todo este.
—Él está bien —contesté.
Aferré mis brazos alrededor de su cuello, y él me sostuvo desde la cintura nuevamente, volví mi mirada a él, el reflejo del agua llegaba a su cara, sus ojitos brillaban de nuevo, y su cabello totalmente blanco estaba creciendo cada vez más, tanto que la mayor parte de sus mechones de enfrente estaban por su cara.
Retiré aquellos mechones gentilmente, descubriendo bien su lindo rostro, y con ello, el piercing que atravesaba su ceja.
—¿Por qué eres tan bonito? —pregunté curiosamente.
Hizo una mueca de pensamiento. —Mmh, no lo sé, mi rostro es una bendición, soy la belleza materializada en una persona.
—Meh, no más que yo —concluí
Comenzamos una amena conversación mientras él nos llevaba de un lado a otro, conversación que claramente siempre me sacaba una sonrisa por cada cosa que decía.
Con Keith jamás me aburría, jamás sabía qué sería lo siguiente que diría, pero si sabía que iba a hacer algo que me haría reír.
En este instante, me ponía a recordar cómo hubiera sido esta parte de mi vida sin la llegada de Donson.
Antes prefería negarme a tener cualquier relación amorosa, había aprendido a la mala que existen personas que a la menor oportunidad pueden traicionar, y también había aprendido a qué no era capaz de confiar en cualquier persona por miedo a que otra vez saliera herido.
Y de pronto, llegó un italiano de cabello blanco, que me había hecho adicto a él.
No lo veía venir realmente, nadie espera enamorarse de quién se enamora. Y sin pensarlo, me había hecho adicto a verlo, a hablar con él, a incluso su forma insistente de querer aparecer a todos los lugares que iba.
Fue muy rápida y extraña la forma en la que entró a mi vida, y ahora tenía la confianza de que no iba a irse.
Que claro, pese a saber que no éramos nada, no evitaba sentirme como si de verdad Keith fuese mi novio.
¿Cómo sería Donson de pareja?
Quizá más lindo de lo que es ahora..
En nuestra conversación, terminé dejando mi cabeza en su hombro, estaba muy relajado, sintiendo el roce de nuestros cuerpos, no me importaba que estuviéramos desnudos, ya lo habíamos estado antes, nos adaptamos a la temperatura del agua y bajo la noche estaba siendo un momento muy tranquilizante para mí después de lo sucedido con Eddy y Jean.
—Sammy —mencionó llamando mi atención—, en nuestra boda, ¿qué tonos de blanco te gustan para los manteles?
Lo miré risueño, su expresión y seguridad eran de un niño pequeño haciendo alguna firme decisión.
—¿Boda? —pregunté sonriendo.
Asintió. —La de nosotros. Me gusta el blanco pastel, ¿Tú qué dices?
—Mmh, no sé, ¿Blanco clarito? —respondí dudoso, yo ni siquiera conocía las tonalidades de blanco.
Pestañeó indignado. —Con esa iniciativa nuestra boda va a estar retrasada, ¡Ten algo de ánimos por esto!
—¡Yo no sé cuántos blancos hay!
—Qué decepción.
Negué varias veces, quizá tenía razón, nuestra boda iba a estar retrasada por mi poca iniciativa.
Keith dejó un casto beso en mi frente de la nada, luego en mi sien, luego en mi mejilla, y así recorrió un corto camino hasta mi boca.
—¿Qué pensaría nuestra criatura sobre esto? —lancé.
—Que no mire porque vamos a hacer cosas de adultos —culminó, y dejó un último beso en mis labios.
Me sacó una última risita, antes de profundizar el beso.
Y ni cómo oponerme a eso, tengo una adicción a sus besos y a lo que hacía conmigo.
Al menos podía decir que esta boda terminó bien.
[...]
Keith ha demostrado ser mi fanático número uno en mis clases de danza, al igual que yo iba a ser su fanático en sus juegos de soccer, no nos perdíamos ninguna práctica, y cuando ocurría, era solo porque teníamos que ir a la misma hora.
Después de cualquiera de los dos que sea la última práctica, corríamos directo a comer algo, y de ahí, la mayor parte del resto de la tarde terminábamos en su dormitorio o en el mío.
Había pasado una semana después de la boda, los fans de Impertinent estaban explotando en internet después de que el vídeo de la boda junto con la canción fueran subidos.
Me gustaba ver todo tipo de contenido sobre mi hermano, y a Keith también le gustaba, así que pasábamos la tarde observando a Tristán y a Tony en cientos de vídeos de toda clase, de sus ensayos, conciertos y muchas cosas más.
Le había pedido personalmente que en el vídeo no enfocaran a Keith o a mi, más que nada, porque no quería que comenzaran a hostigarnos con preguntas sobre si fuimos invitados y por qué.
Lo que me tomó por sorpresa, es que Pelusa Donson fue grabado y fue una estrella en el vídeo, todos los fans hablaban de él, de cómo un hámster con traje tenía más suerte que ellos, entre otras cosas.
En este día, Keith y yo hemos estado viniendo infinidad de vídeos que los fans de Impertinent realizaban, refiriéndome a qué juntaban toda clase de clips sobre ellos, y he de decir que tienen mucho talento para la edición de vídeos.
Había tanto contenido para reírse de Tristán y Tony.
Por ejemplo, cuando estaban en conciertos y se caían en el escenario o de él, cuando hacían cosas raras como bailes, cuando eran invitados a eventos y siempre hacían una travesura, ellos siendo ellos.
Además de eso, había videos un poco más serios y que daban orgullo, cómo las tres veces que han sido nominados a premios artísticos y los han ganado, o cuando han ido a otros países a hacer colaboraciones, mi hermano y Tristán de verdad eran estrellas.
Pero en todo lo bueno está lo malo, porque también nos encontramos con esos vídeos que mostraban que a veces estaban cansados, ambos trabajaban mucho, muchas horas de ensayos, de estrés, y todo para dar buenos espectáculos.
El vídeo que más nos impresionó, fue el de una ocasión de hace meses, que Anthony literalmente se desmayó en el escenario al término de una presentación, porque él simplemente no había descansado nada.
Fue horrible verlo perder el conocimiento.
Y ni hablar de cuando en los vídeos de sus ensayos, Tristán estaba tan estresado que podía estar apunto de llorar, y para eso, llegaban Dimitry y Eliot, para apoyarlos. O incluso, grabaciones en las que les sangraba la nariz por el mismo estrés.
Había mucho que ellos estaban logrando, tenían mucho éxito y aún faltaba que lograran tantas cosas, pero daba tristeza ver todo lo que han tenido qué hacer para estar dónde están, porque no fue fácil.
Sin embargo, ahora mismo, era divertido ver la primera entrevista que le hicieron a los chicos cuando estuvieron en la primera alfombra de su primer evento de premios en que los nominaron.
"La alfombra estaba llena de celebridades, era de noche, y mientras entrevistaban a varios, apareció el dúo talentoso, confundidos y sorprendidos por donde estaban, una reportera los llamó, y ellos, aún nerviosos, se acercaron.
—¡Anthony y Tristán, es su primera nominación! ¿qué sienten ahora mismo? —preguntó la entrevistadora con ánimos.
Los nombrados aplastaron sus labios, sin saber qué decir exactamente, Eliot, Dimitry y Acacia estaban detrás de ellos como acompañantes, claro que no podían faltar.
Pero, cómo era de esperarse, Anthony es hijo de Frank, y Tristán su mejor amigo.
—Sí —contestó Ant.
—Yo también —siguió Tristán".
—Estoy de acuerdo en eso —escuché la voz de Keith a mi lado.
Reí. —Yo también estoy de acuerdo.
Seguimos viendo contenido y más contenido, Keith y yo estábamos sentados en mi cama, con Pelusa dormido en su hábitat, mientras que teníamos bastante comida en medio de nosotros.
Donson no tenía su camisa, ya que había llegado con la del equipo, que estaba muy sucia como para que yo quisiera que subiera con ella a mi cama, aunque claramente fue con doble intención mi orden de que se la quitara.
Hoy me había molestado un poco internamente, ya que los dos días anteriores a este, no lo había visto, Keith no había aparecido por la universidad, y yo sabía por qué.
No me gustaba saber que otra vez había tomado algo hasta quedarse dormido y no despertar por días, yo no tenía el poder de quitarle a Keith su adicción, y no me veía en posición de reclamarle, ya muchos lo habían hecho como para que yo llegara a seguir ese patrón.
Afortunadamente, poco a poco ha dejado de hacerlo, por lástima no ha podido dejar sus cigarros.
—Apri la bocca —pidió, acercando un bocado de pasta italiana con algunas especias, muy deliciosa por cierto.
Hice caso a su petición, y sin dejar de ver el vídeo en la laptop sobre la cama, abrí mi boca para que él me alimentara.
Me había hecho adicto a dos cosas más, a la comida italiana, y a Keith hablándome en su primer idioma.
Degusté el sabor de la comida, dejando mi cabeza en su hombro, hacer esto era algo tan sencillo pero tan entretenido, porque siempre que terminabamos de ver cosas sobre Impertinent, veíamos la película que Donson elegía, que en su mayoría eran infantiles.
Después de algunos vídeos, llegamos a uno que no había visto bien, y el título me era extraño.
"Impertinent reacciona a fanfics de fanáticos".
—¿Quieres verlo? —pregunté al de tez pálida.
Asintió. —Se ve que van a salir traumados.
Sonreí. —Entonces, hay que verlo.
Reproduje el vídeo, Tony y Tristán aparecieron en una habitación blanca e iluminada, había solo dos sillas enfocadas enfrente de una cámara, y una voz femenina que suponía era la encargada de la actividad para ellos, les hizo sentarse.
"—¿Saben por qué están aquí? —preguntó la voz detrás de todo.
Ambos negaron.
—Sospecho que para recibir buenas noticias no —pronunció Tristán en broma.
—Están aquí para descubrir el lado más sucio de sus fanáticos, lo que van a ver es contenido de fans para fans —comentó la mujer con una risa—, ¿saben lo que es un fanfic?
Tony y Tristán se miraron al mismo tiempo, con gestos de duda.
Quién tenía su cabello platinado en esos meses, habló. —Eliot me dijo una vez algo de eso, pero me quedé dormido.
—Tú siempre te quedas dormido —soltó Bennett.
En unos minutos, comenzaron una dinámica, se les entregaron dos teléfonos a los dos chicos respectivamente, explicándoles que se hallaban en una aplicación para leer y escribir cualquier tipo de historia.
Con eso, ambos comenzaron a leer títulos, se mostraban recuadros de lo que parecían ser portadas con imágenes o dibujos hechos.
Les pidieron a ambos que leyeran lo primero que encontraran en silencio, y seguidamente les preguntaban acerca de lo que vieron.
—Tony, ¿puedes decirnos de qué trata la historia?
Ant asintió obediente, pero habló con muchos nervios cómicos.
—Dice que soy un líder de la mafia y que Eliot es un chico que compré —comentó con vergüenza, para después reír—, yo jamás compraría a Eli, no soy malo.
—En todo caso, Eliot lo compraría a él, ese chico tiene familia poderosa —recalcó Tristán—, ¿cuánto cuestas, Ant?
—Soy muy caro.
—¿Y tú, Tristán, qué tienes que decirnos? —preguntó la mujer.
Él moreno asintió por igual, revisando lo que estaba en ese teléfono.
—Literalmente dice; Dimitry Walker está harto de que el homofóbico del clóset llamado Tristán, lo moleste todos los días, hasta que en una fiesta, Bennett le demuestra la verdad —cuando Tristán habló, Anthony dió una carcajada—, ¿de qué te ríes?, van a voltearme la moneda.
Anthony rió al escuchar las cosas que Tristán leía sobre lo que escribieron de él, puesto que la mujer les pedía qué llegaran a cierto capitulo y leyeran ciertos párrafos.
A mi hermano le hicieron llegar un capítulo y un párrafo, y él antes platinado relató.
—Anthony tomó a Eliot de sus caderas y empezó a meter su... —un grito ahogado salió de su boca—, ¡¿Qué cochinada es esta?!
Las carcajadas de Tristán se hicieron presentes.
Y claro, él peliblanco al lado de mi también comenzó a reír.
Lo bueno de todo esto, era que terminaron traumados por las cosas que leyeron.
Al final, ni Tony ni Tristán se tomaron a mal aquellos relatos, les causó gracia leer esas cosas, decían que los fanáticos eran muy creativos, y que apreciaban que se esforzaran en nombre de ellos.
Y claro, que los fanáticos que hablaban español y francés no se habían salvado, pues ellos, al entender bien varios idiomas incluidos esos dos, se quedaron igualmente impresionados de lo que leían".
Al finalizar el vídeo, Keith dijo que quería dormir, cosa a la que no me opuse.
Puse su música favorita, Stick Figure, por supuesto, era música que nos relajaba bastante.
Había notado que prefería dormir cuando estaba ansioso o inquieto por algo, que pude deducir que eran sus nervios por querer consumir alguna pastilla, beber o fumar algo, así que era probable que su solución fuese mejor desconectarse del mundo real con una siesta, y lo comprendía.
Mientras él dormía y me mantenía abrazado, yo le pregunté a Eddy cómo estaba, no lo había visto en toda la semana desde la boda, pero en todos los días que le pregunté, él confirmaba que todo iba bien. Cosa que no creí.
Y por último, antes de querer seguir el paso de Keith y dormir, me llegó un mensaje de Ayden, más bien una invitación, en dónde decía que su restaurante iba a abrir un nuevo local en la ciudad, ya que su restaurante era una cadena de comida oficialmente.
Decir que estaba orgulloso era poco, toda mi familia era sumamente exitosa, y yo, bien gracias.
Aún así, nos invitó casi a los mismo que acudimos a la boda para ir a celebrar a su primer restaurante, con este nuevo, había al menos tres o cuatro ya en la ciudad.
Y podré ser juzgado, pero en ese mensaje se ve claramente que Ayden tiene preferencia.
"¡Entonces, espero que Keith pueda asistir a la celebración!"
Entonces, esto sintió Ayden cuando Alyssa y Edward prefirieron a Frank, o esto sintió Anthony cuando Frank y Ayden prefirieron a Eliot, ahora ellos preferían a Keith.
Hemos sido abandonados. Huérfanos de por vida.
[...]
—Y así fue como tu padre casi llora por ver al integrante de Ac/Dc interpretar su canción favorita —contó Donson mientras conducía.
Las cosas que pasaron mientras yo me distraía en la boda, eran anécdotas que me hubiera muerto por ver, pero estuve muy ocupado en ciertos puntos de la celebración.
No sé cómo es que esperó tanto para contarme, pero saber que Frank casi llora por él guitarrista favorito de él y Anthony, es oro.
Así, hubo más anécdotas que me perdí de la boda, y me dió tanta felicidad darme cuenta de que en cada anécdota habían incluído a Donson.
Ahora, tenía qué pensar mejor lo que iba a hacer, porque hoy al despertar, miré que nuevamente, Zachary quería que habláramos.
Ya empezaba a ser hora de que afronte las cosas, porque ya he cometido muchos errores.
_____________________
Me tardé un poquito viste.
Sí ama, soy Pelusabeleiver y qué. Y QUÉ.
¿Qué se siente que ya falta menos para que se nos acabe la trilogía?:(
Feito vdd.
Bai.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro