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¿Quien vela por mis sueños de amores pasados?
Me siento mas abandonado cada día.
¿Cuando volveré a ver tu rostro?
Mi alma se consume en nostalgia...

No quiero dormir mas ...quiero verte...

Xanxus...

Xanxus...

Mi amado Xanxus

-Una vez había escuchado una historia, una vez contaron entre versos la historia de un tierno amor...-

Una dama danzaba en una de las esquinas de la calle mas oscuras.
Una joven de cabellera rosa pastel o un poco mas fuerte, la gente la ignoraba, se decia que era una bruja que envenenaba a todos con su comida y seducía hombres para luego robarles todas sus cosas.
Claro estas cosas Tsunayoshi no lo sabia, por lo que se acerco.

La señorita al darse cuenta presurosa se acerco con aires coquetos.

-Hola Joven señor...¿En que puedo servirle?-

El chico frente a ella era bien parecido, de dulces facciones inocentes y bastante adinerado.

Una víctima fácil de seducir con sus encantos.

-¿Como iba tu historia?-

El castaño le pregunto ignorando cada sutil movimiento y roce contra su persona.
No le llamaba la atención la doncella, solo queria escuchar la historia.

-Oh buen mozo ¿Desea que le cuente?...-

La pelirosa no planeaba darse por vencida.
Alguien con su atractivo y poder era imposible que no hiciera caer a ese hombre tan bonito a sus pies.

-¿La contaras?-

Pregunto el chico de forma educada mientras atraía la atención de mas personas que decidieron escuchar la famosa historia.

La joven suspiro y decidió seguir con su acto, después de todo esta historia su madre la contaba de labios por su padre ,un demonio.

-Una vez había escuchado una historia, una vez contaron entre versos la historia de un tierno amor....un viejo cuento de hace muchas lunas...un triste romance nacido de un horrible pecado...luna oscura y siniestra...cálido cielo brillante...-

Dando pasos delicados comenzó a danzar cantando la historia.

-Los cielos y la tierra , temblaron de horror...al descubrir una horrible tragedia entre dos seres...un ángel y un demonio...nombre ya olvidados...condenados por un acto inmoral...aun así, por amor su castigo fue peor ...-

La joven narraba la historia con simple armonía, mucha gente estaba maravillada, impresionada y un poco incomoda.

Pero Tsunayoshi, el estaba conmovido.

Le dolía tanto aquel destino de dos corazones sinceros.

Tan triste...tan injusto...tan cruel.

-Se dice que el demonio pronuncio un hechizo prohibido...condenado estaba su morir...y su amado lo siguió incluso en eso...su amor...tan prohibido...se dice que volverán a nacer...una y otra vez...hasta que puedan volverse a ver.-

Termino de narrar la señorita y la gente murmuraba entre ellos, algunos decian que los cielos no se equivocaron en castigar tal asquerosidad.
Otros sentían lastima por los dos amantes.
Algunos se reían de lo vago de sus sentimientos...habría sido mas fácil negar todo y vivir.

Tantas opiniones que hicieron al dulce corazon del castaño llenarse de un raro sentimiento.

Como si odiara a todas esas personas.

Se sentía mal, muy mal, debería volver a casa.

{vamos a buscarlo...Buscalo...por favor...permite a mi alma despertar un momento...dejame ver el mundo ,dejame ver  a mi amado}.

Una voz suave y muy similar a la suya resonaba en sus oídos de una forma curiosa y algo molesta, daba miedo.

Se escuchaba tan cansado y lejano, como si con el viento fuera capaz de desvanecerse.

Decidió alejarse del tumulto de gente y de la dama de cabellera rosa, y prefirió montar a Natsu y esconderse entre las calles.

Dejaría que pasara lo que tuviera que pasar.

Mientras tanto en un rincón un rubio buscaba desesperado sobre el cielo y algunos tejados de varias casas el rostro de su hermano.

Desplegó sus alas y se elevo al cielo una vez mas.

Ni siquiera el sol respondía a sus preguntas.

Reborn buscaba por tierra, debían hallar a Tsunayoshi.

No podían permitir que despertara.

-Dame Tsuna, estas por cumplir 20 años...aun es muy pronto...-

La gente les miraba extrañados.
¿Por que los señores corrían por la calle?
¿A quien buscaban?

Que mas daba, sino pedían ayuda probablemente no era importante...

Giotto estaba cansado de volar, demasiado tiempo sin desplegar sus alas le estaba cobrando factura.

Y eso lo estresaba tanto.

Necesitaba volar mas alto.

Debía hallarlo...no quería perder a su hermano de nuevo, no quería arrebatar la vida de Tsunayoshi, no quería fingir su muerte...no queria abandonar a Alaude.

Perdió toda la fuerza y cayo en un tejado, para llorar un poco.
¿Cuando se había vuelto un ángel guardián de la esperanza sin fe?

Todo el había caído cuando presencio la amargura de su hermano...quería rogar su perdón...Quería quedarse un poco mas de tiempo con su Alaude, ver crecer aun mas a Kyoya.

Quería ver a Tsunayoshi vivir como humano.

Si tan solo hubiera...

-Vooooooi, ¿Que hace una gallina de mierda como tu aquí?-

El rubio dejo de llorar para esquivar diversos intentos de asesinato de parte de un albino de piel ligeramente morena, bastante guapo y de rasgos feroces, con ropa ajustada de cuero negro que le permitían moverse con libertad para asesinar a sus enemigos.

-¿U...un demonio?-

El ángel se elevo lo mas rápido que pudo pero el demonio de cabellera blanca le siguió en el aire.

-¡No vas a sellar a mi maldito Jefe, basura!-

Squalo, el tiburón...un demonio poderoso que amaba pelear sin compasión alguna.

Y es que ese ser de negro tenia un buen punto.

Si sellaban a uno de los dos, el otro podría vivir...

Si eso era así..Tsuna podria vivir.
Eso alegraba tanto su corazón hasta que volvió a percatarse de algo importante.

Si un guardián como Squalo estaba cerca.

Eso solo podía significar una cosa.

¡XANSUS ESTABA CERCA!

No permitiría que dañaran a su hermano.

Pelearía esta ocasión... Se enfrentaría a el espadachín tiburón.

El cielo comenzó a nublarse y la gente preocupada decidio volver a casa lo mas antes posible.

Las calles empezaron a quedar vacias.

En el cielo un ángel peleaba contra un demonio, aun así los ojos mortales no lo percibian.

Reborn si...y le preocupaba, esa era la firma de la llama del cielo.

-Maldicion-

Mascullo entre las sombras, no habría de volver a su forma natural.

Era mas complicado traer a Tsunayoshi así.

La ciudad empezó a callar , solo se escuchaba el arruyo del agua al cantar.

Tan dulce y relajante melodía.

Un castaño había llegado muy a las afueras de ese pueblo.
A las orillas de un bello río, desmonto su caballo y le dejo beber libre.

Había una rama cercana a los arboles frondosos y verdes.
Amarrar a Natsu no había sido problema.

Ahora estaría seguro, se sentó sobre una roca y suspiro.

-Xanxus...-

Llamo en un tenue susurro, era un nombre hermoso, fuerte y atractivo.

A su mente llego una imagen poco vivida de un hombre alto ,moreno con dibujos en su piel, de cabello azabache y unas poderosas alas capaces de cubrirlo.

-Xanxus...-

Le llamo con un poco mas de fuerza en su voz.

Escucho el moverse de las ramas, no presto atención alguna. La brisa solo soplo con frescura.

-XANXUS...-

Llamo fuerte y claro, un golpe seco se escucho a su espalda.
Pars cuando giro para ver...

Pudo sorprenderse en gran forma.
Aquel hombre de sus pensamientos estaba ahí ,de carne y hueso, con ropajes sencillos de color gris, un pendiente en su oreja, y con una cara que daba miedo.

Sin cuernos ni alas.

Pero era el, algo dentro suyo le decía que era su Xanxus, su anhelo.

-¿Por que me llamaste, Basura?-

Y era muy maleducado. No era un caballero, además, no había ni observado demasiado cuando desenvainó su espada para luego apuntar al cuello del castaño.

Ambas almas dormidas estaban por despertar.

¿por que no quieres esperar mas? Entiende que cuando despiertes , tendrás que luchar...prepara tu espíritu... prepara tus armas.

Que peleare para seguir a tu lado hasta el final sin fallar.

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