▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪

Quiero ser aquello que anhelas con todo tu corazon.

Las cosas no solo se dicen, se manifiestan de distintas maneras.

Todas ellas hermosas y dignas.

Aun si no me gritas cariño a los cuatro vientos.

El susurrar de la brisa me brinda tus sentimientos...

Pero por favor te lo ruego.

Lucha un poco mas, no te rindas ahora.

Hemos llegado a la ultima prueba.

No te rindas.

No todo esta perdido.

En mi corazón ahora bañado por la calidez de tu llama aun vive la esperanza.

▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪▪

¿Un sueño o una ilusión? Podría jurar escuchar las risas de su hermano.

Esa melódica voz dulce al oído de cualquiera que se percatara de ella.

Casi podía divisar a aquella grácil figura en tunicas de seda blanca agitada por el viento mientras los cabellos castaños danzaban en la brisa rodeados de frescas y coloridas flores del patio de aquel enorme templo celestial donde vivían juntos como hermanos hace tantos años.

Giotto llevaba una semana encerrado en su cuarto,  G venia en ocasiones para verificar su estado.

Todo parece un sueño irreal.

Eso lo hace mas doloroso...mas horrible.

Mas que perder las plumas que adornan sus alas.
¿Que mas le queda ahora?¿Que le puede importar?

Esa miseria lo envuelve en su manto negro, carcomiendo sus entrañas.

Su alma...su ser...sus deseos de existir.

Quiere salir de esa prisión...de esa jaula dorada.

¿¡POR QUE NADA LE SALE BIEN?! ¿¡SIGUE SIENDO ESTE SU CASTIGO?!

No...no es ni la mitad de lo que se merece...una basura como el.

Merece mas dolor...mas castigos...

-Ayuda...-

Suplica entre tristes murmullos una vez mas el rubio ángel.
Esta tan agobiado que no se da cuenta cuando cae al suelo en un pesado sueño.

En su dulce tormento.

Probando de aquel dulce delirio vuelve a verlo.

Ahí esta...tan fresco, tan encantador.

Su Tsunayoshi corriendo vivaz  entre las flores arcoiris bajo la Calidez de los rayos del rol.

El cielo tan claro y despejado con todo su encanto y esplendor.

Las nubes flotando con libertad...tan hermoso paisaje de lienzo blanco...que empieza a teñirse de tristes tintes.

Tantas promesas caídas.

-¿Aun te lamentas?¿Te arrepientes?-

Aquella voz murmurando que provenía de la inmensa claridad lo puso mas que nervioso.

¿Que estaba pasando?¿Quien le hablaba?.

-Giotto...No puedo perdonarte...Pero debo hacerlo...esta es tu...nuestra ultima oportunidad...sal de aquí y buscame-.

¿Esa voz era la de su Tsunayoshi?¿Quien?¿Por que?.

Intento hablar para darle una respuesta...no tenia voz.

Algo bueno por que frente a sus ojos apareció una figura oscura...de tener forma hubiera gritado con todas sus fuerzas

Un joven de piel blanca y fría, casi fantasmal, de ropa blanca manchada de rojo carmesi hecha jirones.

Unas grandes y poderosas alas blancas destruidas, demacradas, con tantas heridas sin sanar.

Un ángel sucio que Jamas volveria a volar.

El cabello de ese chico era castaño con suciedad y sangre...

Incluso su cuerpo estaba destrozado.

Con marcas de latigos y variedad se castigos tatuados en aquella piel.

-¿Te da miedo?¿Te da asco?-

Escucho al joven hablar...quiso decirle que no...y también quiso tocarlo, ofrecerle ayuda.

Tsunayoshi
¿Esto eres tu?Dejame ayudarte...

¿Tsu...na...yoshi?

Los azules ojos del rubio ángel se llenaron de lagrimas al fin habia distinguido quien era este pobre ser.

Esas heridas...ese cuerpo...era el de su hermano en su ultimo dia de vida.

¿Como había olvidado eso?

El rostro de Tsuna estaba mas que carente de vida, estoico cual estatua de mármol lleno de dolores y aun así era hermoso.

-¿Que es lo que harías por amor?¿Vivirias o moririas por el?-

El rubio trato de poner atención a lo dicho por la sombra de su amado hermano.

-Giotto...esta vida es una oportunidad...no podre vivirla...no como yo quiero.-

El mencionado temblor ante el toque frío de aquella pequeña mano manchada de carmesí que acaricio su mejilla, el rostro de el menor no cambiaba, era como una fina muñeca.

-Por favor... Hazme este único favor...dejame ser feliz...y también lo seras...Xanxus nacerá en un hogar humano...yo no...ya no buscalo...cuida de el hasta que...yo pueda arreglar todo...-

La voz sonaba tan dulce, insegura y temblorosa un duro contraste contra aquella nula presencia de emociones.

Incluso aquella sutil lágrima que se derramo por la manchada mejilla dejando un rastro hasta perderse en el menton del menor.

-Por favor...Giotto...Vive...y espera...Tus alas no deben volverse negras...no sigas mi camino...aun no...ahora vuela...despierta...-

El entorno se coloreo de negro, como un frío abismo.

Luces rojas Dañaron alrededor del joven castaño, el cual se alejo del sorprendido y alarmado rubio.

Aquella dulce y lamentable apariencia cambio.

Las alas dejaron de ser blancas...se tornaron de un color ónix brillante, las plumas parecieron endurecerse.

Algo semejante a cuernos dorados surgieron entre la mata de cabello castaño.

-Tsuna...tu...-

Giotto al fin pudo hablar...no se percato de cuando habia empezado a llorar, pero no podria evitarlo.

Su amado hermano...el alma de su hermano.

-Gio...promete cuidar de Xanxus...Yo volveré a el...solo...por favor... Te lo ruego-.

-Tsuna...Tsuna te lo prometo...-

Despues de tanto pudo ver de nuevo una sonrisa dibujarse en aquel rostro vacío, e incluso pudo distinguir un brillo singular en aquella opaca mirada.

Y así Tsunayoshi como habia aparecido se desvaneció.

No podía sentirse miserable.

No permitiria otro daño a su hermano, Alaude...Tal vez no todos estaba perdido.

Aun si su corazón sufría por el pasado, y atormentaba su presente.

Nada cambiaría sino actuaba por el mañana.

Tenia que proteger lo que una vez no pudo.

Luchar.

➿➿➿➿➿➿➿➿➿➿➿➿➿

Perdonen la ausencia ಥ⌣ಥ
Es que mister inspiración se fue de parranda y hasta hoy regreso.

Con cariño S.Y