Cap5: Jaula
Me despierto tras cuatro horas de sueño, lo suficiente y lo que normalmente duermo. El sol aún no ha salido.
Voy a la carpa donde están los animales para ver como están. Los que dispersé por el campamento están tranquilos, así que nadie se atrevió a poner un pie en esta zona.
En la tienda está mi pequeño Loony, un león que adopté desde que él era cachorro. Le alimento con las reservas, pero pronto con los muertos estará más lleno, suelo darle los cadáveres.
Acaricio la cabeza del felino, una vez está lleno este se para con sus patas sobre los barrotes y trata de sacar la cabeza.
—Buen chico —susurro para él y luego me dispongo a dejar el sitio.
Solo me tomó treinta minutos.
Voy donde la carpa de las mercancías humanas para revisarlas. Si no usarán estas en la función no deben tener problemas en venderlas. Pero es algo que dejaré que Daga lleve a cabo.
Cuando entro están todos tirados en las jaulas, quedan ocho, serían nueve si aquella mujer no fuese un peligro para Jeremy. Esta semana me toca ocuparme de su comida.
Me acerco a las cajas y dejo los papeles periódicos en el suelo, cosa que solo deben estirar sus manos para tomar el arroz. Dejar materiales filosos hace que se suiciden, ya ha pasado...
—Látigo. —Escucho tras de mí y me giro a ver quién es.
Una mujer de cabello rojo atado en una coleta y ojos blancos por la ceguera está ahí. Porta las ropas del diario.
Solo la observo para que siga hablando.
—Parece que nos toca hacer las guardias juntos de nuevo —comenta ella cruzando las manos y viniendo hasta mí con su contoneo.
—Sí —respondo sin quitarle la mirada.
—Siempre es divertido hacer las rondas nocturnas contigo —expone ella deslizando una mano por mi pecho mientras sonríe—: no me dormiré de esta manera.
Ella deja desde esa posición su escote al descubierto para que lo vea, sus intenciones son claras.
—El nuevo cordero no desea que juegue sin él —respondo regresando la vista a sus ojos tras abandonar su abertura.
—Tú nunca has tenido que pedir permiso. No jodas que te has vuelto un perro con correa —responde Sonido para agregar ahora en voz baja—: aunque siempre has sido un buen sabueso.
—No busques provocarme, si te interesa darle celos a Daga hazlo de otra forma —digo sin hacer más reparo en ello.
—¿Te dijo algo? —Manifiesta ella.
—Hace semanas no habla de ti. Solamente ha estado atento a Pluma —le comento.
—Que ese jodido enano del diablo me cambie por ese nuevo. Pero verás, le voy a regar el estiércol de los caballos en la cama —responde ella chasqueando la lengua—: ¿No te molesta, que él esté también interesado en tu juguete?
—No —Le contesto.
—Yo sí, tengo ganas de desplumar a ese chiquillo —dice ella mientras me sonríe deslizando una mano por mi mejilla y la otra a mi entrepierna.
—Mira a ver sobre quién pones tus manos —le digo tomando la de mi rostro por la muñeca haciendo presión, y no me refiero a mi cuerpo, más bien a Jeremy.
—Aburrido, si averiguas algo más de Daga dime, vamos a tener unas noches largas tú y yo —comenta para apartarse a un lado y sentarse a cuidar el lugar.
Sus ojos no ven nada, pero su audición es perfecta.
Me dispongo a salir del sitio sin desear hacer más reparo en esto. ¿Sonido? Es problema de Daga, no debió robar a esa joven prostituta y casarse con ella. Ahora ni caso se hacen.
Ya a las seis de la mañana me dirijo a la carpa de Jeremy. En esta noto actividad afuera en cuanto logro visualizarla.
Lucía está sentada en el suelo, cabizbaja, y él se encuentra tendiendo las sábanas de su cama. Por otra parte, Soga, su compañera de habitación, se encuentra muerta de la risa en el suelo.
Llego al lugar y cargo a la pequeña, noto su ropa mojada.
—¡Se hizo pis encima! —Dice Soga cada vez que puede hablar—: tan Jeremy, la hija le tenía que salir como él.
—¡Cállate, apestosa! —Le grita Jeremy lanzándole un gancho de tender—: la vas a avergonzar más.
—Perdón, tío Látigo, no me cargue. Me hice pis arriba y estoy sucia —dice ella con los ojos aguados.
—Es algo normal —digo sin bajarla, realmente no me importa—: ¿Quieres bañarte?
—¿Se puede? —Comenta ella sin levantar la cabeza.
—Sí, es normal que eso le ocurra a los niños de tu edad. A mí me pasaba —le contesto sin darle muchas vueltas.
—Parece que tuvo una pesadilla —dice Jeremy para venir hasta nosotros.
—Es que fue con mamá, un ser oscuro se la llevaba y luego quería tomar a papi —dice Lucía tragando seco y luego levanta el rostro como si fuese malo dejarse decaer—: ¡Pero si viene le voy a golpear fuerte!
¿Habrá visto que moría Jeremy o yo?
—No digas esas cosas, eso no pasará. Todos acá somos muy fuertes, Lucy —comenta Jeremy.
—Lo sé, papá, no dejaré que te pase nada. Soy ahora más fuerte —dice Lucía a él.
Al menos no sospecha de que soy su padre, solo el tío Látigo.
—Jeremy de padre, menudo desastre. Yo esa niña salía corriendo —dice Soga antes de marcharse hacia el área de prácticas.
—Bocona —balbucea él—: Lucy, te prepararemos un cubo grande de agua y podrás bañarte ahí.
—Te toca bañarla —respondo.
—¡No, es una niña, que se bañe sola! —dice Jeremy.
—Calma, papi, mamá me enseñó —indica ella, parece que se olvidó de que su ropa está mojada abajo.
Dejamos la bañera a medio llenar y a Lucía dentro del espacio para el baño. A esta hora y día nadie lo suele usar, así que solo debe estar ella. Jeremy y yo por nuestra parte le cuidamos la entrada.
Para su ropa le dejamos una camisa mía y una cinta para que lo amarre a la cintura a forma de vestido.
—Es una buena niña. Tienes suerte —me dice Jeremy.
Quiero saber de qué tengo suerte. ¿De tener una hija?
—Lo harás bien —me dice él y se recuesta a mí, últimamente tiene más confianza.
Yo, en cambio, lo abrazo y recuesto a mi cuerpo ahora que podemos tener un minuto de soledad. Si Lucía demora quizás pueda...
—¡Látigo! —Escuchamos la voz de Daga rompiendo mis planes—: ¿Qué hacen? Hoy no es día de baño.
—¡Papi, se me cayó Jackson a la bañadera! —Grita la niña desde el baño.
—¿Papi? —Pregunta Daga al escucharla.
En algún momento la vería, hubiese deseado que no fuese tan rápido.
;3 Espero que hayan disfrutado el capítulo de hoy.
Daga casado... Bueno, no lo veo de buen marido XD ni a la esposa tampoco, pero es así.
XD Me dicen que les pareció, les leo.
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