[ Iniciado Secuencia... ]

EPISODIO CINCUENTA 

PERSONA OMNISCIENTE

Un padre, una hija y ese era el secreto, el secreto que. Morgan Stark le pesaba en su alma, a medida que cambiaba el plano en la mesa de Stark y este le daba alguna ideas que podría funcionar, trabajan a tanta sincronización que sus discusiones en ocasiones no eran por cosas incorrectas sino por mejoras y mecanismos más simples, no hablaban de su día o de un juego o de la cena o sobre su madre siendo insoportable, hablaban sobre ciencia y sobre cómo podrían mejorar cada cosa, era lo que hacían, los que los hacía sentir bien a los dos, el ambiente en el que se sentían conformes.

— sigue así, dame un momento, voy a pedirle algo a Pepper y buscaré unos refrescos ¿Qué quieres? —a medida que Stark retrocedía, Morgan asentía terminando de poner un prototipo en el plano y mirándolo.

— una gaseosa suena estupenda y más si tienes una coca —sonrió.

— ¿Coca? Por supuesto, mis favoritas —y abriéndose las puertas tras de él, Stark desapareció por ellas y Morgan siguió en sus investigaciones.

Y aunque tuviera una buena conversación con la misteriosa chica, Anthony Stark sentía curiosidad por la procedencia de ella, era obvio que no venía esa universidad que mencionó, Universidad Futurista, ni tampoco que no tenía conexión con su madre, por muy arraigada que sea, tampoco era cierto que vino por una beca, Anthony presentía que era por algo más.

Él vio a Pepper en la sala y sonrió, Pepper colgó a tiempo el celular y anotó algo en el mismo mientras esperaba a que se acercara.

— ¿Ya son mejores amigos? ¿Le contaste tu secreto? —El sarcasmo de Pepper siempre pretendía ser directo y estricto con Tony, aunque a él le valía un bledo cuando se trataba de ella.

— algo por el estilo —respondió él antes de pedir el favor— ahora, haz algo por mí ¿Quieres? —Toy Stark no era famoso por confiar en personas desconocidas y Morgan era alguien que sabía demasiado, Tony dio una rápida mirada atrás para verificar que Morgan no viniera, volvió a Pepper e incentivo a que viniera con él hacia el comedor, se acercó a ella y rascando su nuca pensó en lo que pediría antes de que Pepper muriera de la duda ahí mismo.

Mientras tanto, Morgan Stark estaba que no cabía de la emoción donde estaba, centrada en su trabajo pero sin dejar de pensar en lo de antes, Morgan no paraba de pensar en lo genial que serían estos recuerdos para ella, para su vida, volver a ver a su padre.

[ Señorita Star ]

— ¿Sí, J.A.R.V.I.S? —

[ Le ha mentido al señor Stark ]

Morgan se detuvo— ¿ah sí? —olvidaba por completo que al igual que H.A.N.N.A, J.A.R.V.I.S era muy bueno hackeando las vidas de las personas.

[ Señorita, su sistema de seguridad es muy interesante, aunque me sorprende que esté tan vacío como lo vi ]

Y Morgan frunció su ceño y pensó en lo que J.A.R.V.I.S había hecho, había intentado entrar en su información con H.A.N.N.A, ella cruzó sus brazos para discutir con un asistente virtual— J.A.R.V.I.S ¿tengo que recordarte sobre el respeto a la seguridad de otras personas? —

[ Esa regla no está en mi sistema cuando se trata de poner en riesgo la vida del señor Stark ]

Claro, era fiel a Stark, era de suponerse, Morgan se lamió sus labios y asintió seguidamente para suspirar— bien sí —debía quitarse a J.A.R.V.I.S de encima.

[ Usted mencionó una Universidad Futurista, pero su información dice que estudia en la Instituto Tecnológico de Massachusetts ]

Sí, lo descubrió, aunque para Morgan eso no era algo alarmante, sabía que su información siempre tendería a ser robada, por eso procesaba información ligera en un recuadro para mantener la demás reservada, así su hacker pensaría que tiene todo lo que deberías haber ahí dentro, pero en realidad solo se había encontrado con la primera puerta.

Morgan bajó su mirada y asintió apoyándose en el tablero— es porque entonces mandaría a investigar y sí, Jarvis, tienes razón, engañe a el señor Stark, pero a cambio obtengo la enseñanza del mejor —

[ Esta usurpando en la vida del señor Stark ]

— y tú en la mía tomando datos de Hanna, Jarvis, así que basta —

¿Quién diría que era posible pelear con un asistente virtual?

— ¿Entonces quieres decir que metes a una desconocida en tu casa, la metes a tu laboratorio donde tienes tus cosas privadas y dices que no es de fiar? —Y Stark asintió ante la suposición de Pepper.

— me alegra que me entiendas, ahora si me disculpas mi pupila me está esperando con algo para tomar, pero prefiero que salga acá, parece que se entiende muy bien con mi laboratorio —informó Stark sin mucha cizaña, más bien parecía interesado en la chica, no solo el como llegó, ni su historia, sino la compatibilidad que de alguna forma él sentía que tenía con ella.

Pepper bufo y tomó su cabeza en una mano, para aferrarse a su libreta y sonreír con hipocresía hacia Stark— claro, ¿por qué no? otro trabajo más que debo hacer —dijo arrastras volviendo en sus tacones hacia el ascensor, los pensamientos de Stark se desviaron hacia ella al instante y sus ojos se quedaron pactados en la figura de la señorita pelirroja que caminaba hacia el ascensor para irse, definitivamente no era un triunfo para él, pero de cierta forma era mejor que un triunfó tener a Potts de su lado.

Potts volteo cuando el ascensor estaba por llegar y descubrió la mirada de Stark, trató de mantener la compostura y respirando hondo se despidió con la mano para escuchar el "tin" del ascensor y entrar en él de inmediato para irse.

Apenas ambos alcanzaron a conectar sus miradas cuando las puertas del ascensor se cerraron y Potts se fue.

Stark sacó la limonada de la nevera y dibujó una media sonrisa en sus labios, la confusión de tener a una mujer tan hermosa como Potts como secretaria y no poder tenerla como realmente quería lo estaba volviendo loco y lo hacía sentir raro, eran euforias pequeñas que alcanzaban a cruzar su mente y corazón por momentos.

Rodeo la mesa y se alejó de la limonada para entrar por el pasillo secreto y bajar los escalones para entrar en su laboratorio y a primera instancia lo que sus ojos percibieron fue a Morgan, tocaba la pantalla y cambiaba las cosas, los analizaba, ladeaba su cabeza o tapaba sus labios, se había amarrado el cabello y ya no estaba sentada, parecía muy concentrada en lo que hacía, caminaba de un lado a otro o utilizaba un viejo tablero para realizar unos apuntes, Stark por instantes recordó a su joven yo, solo que Morgan era una versión femenina, pero eso no dejaba de lado el hecho de que era una extraña.

Stark abrió la puerta del laboratorio— oye niña, ven, tengo limonada rosa para ti —

Morgan hizo un amago con los labios— no tienes al menos limonada normal —

Stark frunció su ceño y no pudo articular más, pues era curioso sabiendo que a él no le agradaba la limonada rosada, sino la amarilla, la cual era normal.

Morgan y Tony compartieron el recorrido a la cocina juntos, pero en el camino Morgan no podía evitar mirar a los lados y esperar ver con la mirada a Pepper Potts, pero nunca sucedió, así que su pregunta le inquietó— ¿y la señorita Potts? ¿no está por aquí? —

— Ah, Potts, no, ella ya se fue, tiene que tomar un vuelo para ir a una reunión, así que estaré una semana sin ella —informó Stark sirviendo las limonadas mientras Morgan se sentaba a esperar la suya.

Pero con el comentario de Stark, Morgan atisbo una oportunidad— ¿eso quiere decir que estará sin secretaria por una semana? —

— que no se te note el interés niña —masculló Stark al momento de darle la bebida a ella y él servir la suya— pero sí, no tendré a Potts por una larga semana —y aunque él le quitará importancia, parecía no querer que eso sucediera.

Morgan lo entendió, en los ojos de Stark, su madre siempre le había dicho que había tenido un lazo muy fuerte con su padre desde temprano, casi desde el instante en que tomó el trabajo, ella quería ser testigo de ese amor y lo estaba descubriendo poco a poco con Stark— seguro debe ser alguien muy importante y de confianza para usted —

Y aunque Morgan esperaba que eso sonará bien a los ojos y corazón de Stark, lo cierto era que no lo hacía, Stark miró a Morgan con su ceño fruncido tratando de descubrir algo que lo hiciera desconfiar de ella, nadie preguntaba cosa así a la ligera, pero ella parecía hacerlo sin mucha importancia, por un momento ambos compartieron la misma mirada hasta el momento en que el intercom del apartamento sonó y Stark evadió a Morgan para contestar— ¿Sí? —...— oh, sí, Happy, que pase —volvió a Morgan— mira que casualidad tú victimario está aquí —

Morgan se asustó y trago fuerte la limonada cuando el ascensor comenzó a andar y Stark quiso buscar algo en el sillón, Morgan aprovechó para escabullirse mientras Happy llegaba llamando la atención de Stark— buenas tardes, señor Stark —

— llegaste justo a tiempo Happy, dentro de poco estaré listo para que me lleves —sonrió de lado hacia Happy y recordó a Morgan— por cierto, no te vas a creer a quién tengo aquí trabajando para mí —y cuando Stark quiso volver su mirada para mostrar a Morgan no la vio, volvió a la cocina, pero tampoco la halló.

— ¿señor? —

De pronto la sensación de querer darle un sorpresa se esfumó y simplemente alzo sus hombros sin importancia y dijo— no, parece que se fue, no importa, dame un momento y estaré listo —

— ¿prefiere que lo esperé aquí o en el auto? —

Tony se lo pensó, pero al final respondió— no soy una chica que va a su primer baile, así que te agradecería que me esperarás en el auto, tranquilo no me mataré bajando el ascensor —Happy asintió ante el pedido de Stark, pero antes de ver a Stark desaparecer, Happy culpable le pidió disculpas.

— Señor Stark, sobre lo sucedido anoche, yo no esperaba que esa chica estuviera en mi camino, me disculpo por haberla metido en el auto —bajó su mirada por miedo a sentirse intimidado por Stark, pero este otro simplemente le quitó importancia y fue a la cocina a pocos metros, tomo un vaso de limonada y sonrió entregándolo a Happy.

— no hace falta disculpas, no todos tienen un buen corazón como tú, muchos escapan, pero no acostumbres a meter a tus víctimas en mi auto ¿quieres? —Happy asintió con la bebida en mano y Stark le guiño un ojo para despedirse por el momento y alejarse del lugar para buscar a la chica quién intuía habría vuelto al laboratorio.

Y la encontró ahí, viendo el plano y modificandolo, abrio la puerta y se apoyo en el umbral, ladeo su cabeza y se cruzo de brazos mirandola trabajar, pero ella ya había presentido su presencia— perdone, por escapar —admitió.

— ¿por qué volviste aquí? —

Morgan levantó su mirada y relajada respondió— me gustan los laboratorios, es el SPA relajante para las personas y las bibliotecas para los inteligentes, lo mismo que los laboratorios para genios como usted y como yo —inevitablemente Morgan y Stark sonrieron al mismo tiempo y volvieron a concordar.

— entonces no será porque estás huyendo de Hogan —eso le quitó la sonrisa de Morgan y le hizo bajar su mirada y respirar con fastidio.

— eso es algo un poco más aparte —admitió y casi al instante siguió diciendo— el señor Hogan no quiere que me acerque a usted porque cree que me aprovecharé de alguna forma —

— ¿no es así? —

Morgan frunció su ceño casi indignada y respondió— no, para nada, es un privilegio para mí estar aquí, puedo aprender de usted y tener la oportunidad de demostrar mis habilidades como genio, no como estudiante promedio —y Stark no sabía si era muy buena para mentir hasta con sus expresiones o solamente estaba diciendo la verdad.

De cualquier forma, era difícil ver lo que ocultaba tras ese telón de actitud.