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CAPITULO 15

Maratón (1/3)

JACOB'S POV

La usual y amable sonrisa de Cris asomó por la puerta que tan solo unos cuantos segundos atrás yo había tocado, su sonrisa se hizo aún más grande al verme en el umbral de esta.

– ¡Hey! Jake, hermano. – me dijo, tan animado y amable como siempre. – tiempo sin verte. – dijo uniendo nuestras manos en un puño para acercar nuestros pechos en una especie de abrazo.

– eso te digo. – le dije cuando el saludo afectuoso llegaba a su fin. – ¿Has tenido mucho trabajo o Leah no te deja salir? – pregunte con un tono de burla, los labios de Cristian dibujaron una linea recta tras mis palabras.

– muy gracioso. – dijo al final. – lo cierto es que si.

– lo sabia, Leah no te deja salir. – dije molestándolo, Cris tan solo rodó los ojos al escucharme.

– hemos tenido mucho papeleo últimamente. – continuo, ignorando mi comentario. – la policía de Boston aún hace preguntas sobre Nicollette y sabes que hay cosas que no podemos explicar.

– entiendo oficial Moore. – dije asintiendo a sus palabras. – es solo cuestión de tiempo, luego dejarán el tema a un lado.

– lo sé. – dijo acomodándose en el umbral de la puerta para volver a erguirse en cuestión de segundos. – ¡Oh, lo siento! – dijo de forma sorpresiva. – ¿Quieres seguir?

– No, no. Tranquilo. – me apresure a decir. – vine por Nessie. – la expresión de Cris mostró confusión al escucharme. – ya sé que no está aquí. – explique. – pero tampoco está en la reserva, en casa de sus abuelos o de sus padres, algo me dice que April puede saber algo.

Cris asintió comprendiendo el asunto tras escucharme, reemplazando así su expresión confusa por una mueca de burla dirigida a mí. – por ahí escuché que lo de ustedes ya es algo más que una amistad. – dijo con una sonrisa.

– para estar ocupado trabajando te enteras muy bien de todo. – conteste, mirando al cielo al notar como la noche empezaba a caer sobre Forks.

–bueno, la manada y las improntas se dan sus mañas para mantenerme informado.

– más las improntas ¿No es así? – pregunte intercambiando una mirada con él que pronto se convirtió en una carcajada. – ¿Puedes llamar a April por favor? – pregunte al dejar de reír.

– ¡Oh, claro! – exclamó Cris para luego desaparecer hacia el interior de su casa mientras lo escuchaba gritar con fuerza el nombre de April.

Escuché a la pelirrosa bajar hasta la cocina, en donde Cris le indico que alguien necesitaba verla en la puerta de la casa, sabía que algo había hecho mal cuando April me fulminó con sus azules ojos al notar que era yo.

– ¿Qué quieres? – preguntó con frialdad, bien. Debía dejar de burlarme de Brady cada que ella le trataba de tal modo.

– Nessie...

–¿Ella está bien? – preguntó repentinamente al escuchar su nombre.

– ¿Porque no habría de estarlo? – pregunte sintiendo como una creciente preocupación invadía mi cuerpo.

– ¿No ha regresado del bosque?

– ¿Cómo que del bosque? ¿Porque estaría en el bosque? – pregunte con una mezcla de miedo y confusión, April me miró confusa un par de segundos para luego fruncir el ceño y dedicarme una mirada de odio, de nuevo.

– más bien. – dijo acomodando su mano derecha sobre su cintura. – ¿Que hacias tu saliendo de un supermercado con la tal Sally esa? – pregunto enarcando una de sus cejas.

No estaba seguro de que había hecho mal, pero de cierto modo sentía que se me acusaba de algo, pero lo más preocupante era que Renesmee se había internado en el bosque un par de horas atrás, por lo cual, sin ganas de dar explicaciones algunas me aleje del porche en dirección al bosque dejando mi auto aparcado frente a la casa de los Moore, al correr entre los árboles tropecé tratando de deshacerme de mi ropa para entrar en fase, tras hacerlo tomé mi pantalón con el hocico y me interne en el espeso bosque nocturno, rogando por dar con el rastro de Nessie para ser llevado hasta ella.

Se veía taciturna iluminada únicamente por la luz de la luna, sentada sobre una enorme roca a la orilla del acantilado al que los Cullen solían venir a jugar baseball, parecía no haberse dado cuenta de mi llegada o simplemente había elegido fingir que no lo hacía, sin embargo corrí a meterme detrás de un árbol para regresar a su lado vestido con mi pantalón, lo único que había traído conmigo.

Al sentarme junto a ella Nessie dejo de mirar la cristalina agua que bajaba por el acantilado para mirarme, dedicándome una acogedora sonrisa, SU usual y preciosa calida sonrisa. – Hola – saludo, como si una bella joven en medio del bosque oscuro fuera lo más natural del mundo.

– ¿Planeas matarme de un susto? – pregunte al final, rodeando sus hombros con mi brazo y acercándola a mí para brindarle calor.

– exageras. – dijo en un susurro. – ¿Recuerdas nuestras vacaciones en Alaska? – preguntó, luego de unos cuantos segundos.

– claro, si fue tan solo hace unos meses. – dije, acercándola más a mi pecho, mis pensamientos viajaron hasta aquella época y no pude evitar preguntarme si en aquello entonces Nessie ya sentia mas que amistad por mi.

– ¿Recuerdas la vez que entre tío Jasper y tío Emmett te enterraron en una montaña de nieve? – comento empezando a reír, yo solo susurré un –si– uniendome a su risa. – te molestaste tanto que ibas a entrar en fase y el calor que emanaba de tu cuerpo derritió la nieve a tu al rededor.

– si. – dije de nuevo, riendo escandalosamente junto a ella. – a Rosalie no le importó que estuviera molestó y me lanzo una bola de nieve al hocico, luego Alice la imitó.

– luego saliste corriendo detrás de nosotros, empujaste a tío Emmett con tu lomo y el voló por el aire y golpeó un árbol.

– el árbol se cayó. – dije, mi estómago empezaba a doler a causa de la risa.

– luego mis padres y mis abuelos salieron de la casa para regañarnos. – dijo irguiendose, escapando de mi abrazo. – fueron bueno tiempos. – dijo en un susurro, cuando nuestras risas se habían apaciguado, su semblante había cambiado, su rostro ya no lucía sonriente, se veía triste y lo único que pude hacer fue abalzarme para rodearla con mis brazos de nuevo.

– lo siento, Nessie. Lo siento. – dije sintiendo su respiración en mi cuello la cual estaba generando un leve cosquilleo. – siento todo lo que te dije y siento haberte hecho pasar un mal día. – Nessie se apartó de mí y su delicada mano se elevó para acariciar mi mejilla, me sentía bendecido cada que recibía sus caricias.

– no tienes nada de que disculparte, yo te entiendo. – la mire un par de segundos tratando de analizar tales palabras, disculparme no podía ser tan fácil, seguro no era así.

– en cuanto al supermercado. – insistí, pero el dedo pulgar de Nessie esta vez acarició mi labio inferior.

– apuesto que hay una buena explicación para eso.

– si. – dije un poco embobado al detallar la magestuosa imagen de mi impronta siendo iluminada por la tenue luz de luna, Nessie me miró a espera de mi explicación. – creí que si debía disculparme lo mejor era no aparecer con las manos vacías, pase al súper por chocolates y flores. – dije esta vez acariciando yo su mejilla. – ella solo estaba allá, me pidió ayuda con sus compras.

–entiendo. – dijo tomando mi mano que se veía enorme en contraste con su pequeña y blanca mano. – fui un poco ridícula ¿No es así? – interrogo agachando su rostro apenado.

– no es así. – dije pasando mi dedo bajo su mentón para que volviera a mirarme. – bueno, tal vez si. – dije con una mueca graciosa.

–¡Jake! – se quejó ella golpeando mi brazo, golpe que de hecho si dolió, para luego mirarme de mala manera y regresar sus castaños ojos al acantilado.

Tras quejarme un par de segundos del dolor no logré que Nessie regresará su atención a mi. – lo que en realidad trataba de decir. – intenté de nuevo, alcanzando su mano para acunarla entre las mías. – es ridículo verte celosa por alguna otra mujer. – dije soltando su mano para rodear su cintura y acomodarla sobre mi regazo, Nessie Centro su atención en mi mientras las sensaciones que ella lograba en mi estaban a flor de piel. – yo simplemente... Simplemente existo, respiró y soy feliz porque estoy contigo. – su rostro se ladeó levemente al escucharme. – te aseguro que no hay mujer sobre la faz de la tierra más bella e importante en mi vi...

– es por la imprima...

– No, Nessie. – me apresure a interrumpirla. – no necesito de la imprimación para darme cuenta de lo maravillosa que eres, todos lo notan... Por algo odio a tu amigo aspirante a Romeo. – dije, logrando ver su bella sonrisa ante el comentario, Nessie se acercó, eliminando el espacio que nos separaba, colocando sus sedosos y rojos labios sobre los míos logrando así cortarme el aliento.

– ¿Sabes? – interrogue unos minutos más tarde, cuando nos dedicabamos tan solo a abrazarnos mientras veíamos la cristalina agua caer, ella guardo silencio esperando que yo continuará. – rente un pequeño lugar en la reserva.

– ¿Que? ¿Porque? – preguntó ella con sorpresa.

– me he sentido un poco nómada últimamente. – explique. – cuando no duermo en tu casa, duermo en casa de tus abuelos o en casa de mi padre o en la de Emily... Mi casa sería... Nuestro lugar. – Nessie mostró una expresión que no logré descifrar. – vamos te llevaré a casa. – continúe.

– ¿A qué casa? – preguntó ella abriendo sus ojos como platos, la mire lleno de confusión.

– pues a casa de tus padres ¿Dónde más? – respondí de inmediato, Nessie balbuceo un par de segundos para luego ponerse en pie de un salto.

– ¡Si! A mi casa. – dijo empezando a caminar en dirección hacia el bosque. – dónde si no. – la escuché decir con un tono ¿Nervioso? – Vamos, Jake. Una carrera a casa. – fue lo último que dijo echándose a correr por el bosque.

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Jujujujuju
¿Cómo esta todo el mundo?
Bienvenidisimos a este maratón para recibir el maravilloso diciembre.

Par FAVAR!!!!
Cuénteme sus opiniones, mis amores.

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