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situado en the queen — post capítulo xxii. el primer cumpleaños de andrea

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Era 6 de Junio.

Elijah Mikaelson no era un prodigio del arte del lienzo, más, se tomó la tarea de guardar en su memoria el amanecer de ese 6 de Junio; los diferentes tonos de azul llenaron cada rincón que él podía ver y contrastaban con el amarillo que emergía desde el Este y que prometía iluminar el día con vehemencia.

Se repitió la fecha una vez más: 6 de Junio.

Fue una sorpresa para él encontrarse, a principios de Mayo, contando los días para ese día como si la única motivación para seguir se contrajera en lo que él supondría un día mundano. Días después, supo la razón de la insistencia de su mente tras un día que, aparentemente, no significaba nada para él.

Es el cumpleaños de Andrea.

En un milenio lleno de vivencias y afinidades, la celebración de su cumpleaños nunca fue una prioridad o un evento del cual sentirse particularmente emocionado. Eran mucho más comunes que, los pocos cumpleaños que celebró, terminaban opacados por la amargura de un padre iracundo con el mundo y sus hijos.

La poca tradición que, en algún punto, su hermana presidió se perdió mientras el rio de la desolación y el caos seguía su curso. Él estaba bien con ello; lo que anhelaba, en noches de insomnio era la esperanzadora inocencia que traía consigo. Lo único humano a lo que él se aferró, desapareció.

Pues, ¿qué diferencia habría?

La celebración de la vida cuando ésta se es infinita resultaba un irónico sin sentido.

Sin embargo, Andrea no era inmortal.

En la mesa frente a él, Elijah observó estático el vaso de bourbon a medio terminar. Rememoraba haberlo servido después de llegar del complejo. Elijah no volvió a tener un buen dormir después de su encuentro con Esther, su madre se había encargado de que él jamás tuviese un descanso y el vampiro se veía a sí mismo contrariado por la fiereza de ese castigo.

«Yo no elegí esto».

Quejarse no servía de nada.

A veces, soñaba con el cadáver quemado de Gia.

Otras veces, Hayley y las promesas que él no cumplió.

Y siempre, con Andrea.

Todas, de alguna manera, terminaban detrás de la puerta roja.

Sus propios pensamientos le resultaban amargos más pidió un deseo al inicio del día. Él, el siempre creyente de redención, anheló por los atisbos de una nueva vida y claridad, si él jamás moriría estaba bien.

Pero él iba a encontrar una manera de romper la maldición de los Crecientes.

Y Andrea conocería el mundo.

•••

El pantano nunca estaba en silencio en su totalidad.

La premisa de ello no le importaba en demasía, los sonidos provenientes de la naturaleza, por alguna razón, le obligaban a dejar cualquier pensamiento pesimista o triste detrás de él. El vampiro se aseguró de tener cuidado en su camino, había llovido hace un par de horas y el suelo estaba mojado y resbaloso en algunas zonas.

Alzó la vista para ver el cielo a través de las copas frondosas de los arboles a su alrededor. Una noche clara; las estrellas resplandecían con un brillo blanquecino y la luna creciente menguante se veía lejana en el cielo.

Es al llegar a su destino, al lado de la choza frente al pantano, que Elijah se alertó bajo el sonido de las hojas siendo aplastadas por los pasos de alguien más. Elijah se giró de inmediato y de la oscura profundidad del pantano, el pelaje grisáceo brilló por un segundo.

Un aire de confianza lo abrazó.

La luz tenue y natural lo hicieron resaltar como si Elijah fuese dueño de la noche misma.

Elijah tomó un paso hacia adelante. Unos ojos azules le veían detrás del tronco de un árbol, Elijah estiró su brazo hacia la loba y ella salió de su escondite. Agachó la cabeza sin perderlo de vista. Tampoco se movió más en su dirección y Elijah entrevió la amenaza detrás de su posición.

El sonido que salió de la loba sonó a un llanto ahogado, Elijah creyó que debía dormir, pues podía jurar, pese a la distancia y gracias a su visión perfecta, que los ojos azules que le veían sin parpadear lucían cristalinos. Un tono más claro del azul que, en confesión, le fascinaba ser testigo de.

El sonido agudo de los grillos hace eco en su intimidad, el sonido de las hojas de los árboles danzando y las gotas cayendo del cielo en intervalos de segundos no le molesta en absoluto. Lo único que le molesta es la desesperación que lo golpea al no poder abrazar a Andrea.

Elijah quiere acercarse. No se mueve ni un ápice, sin embargo; Andrea le ilustró lo que sucedía en su mente semanas atrás. Rememora sus palabras: «No tenemos la misma consciencia a cuando somos humanos. Es una versión primitiva, soy capaz de distinguir quiénes son los míos y todo lo demás que existe es una amenaza».

La fresca brisa iba y venía.

Entre gota y gota, los intervalos se hacen más cortos. Volverá a llover en cualquier momento.

Elijah avanzó otro paso.

Andrea arrugó el entrecejo acompañado de un gruñido bajo que sonaba a amenaza.

«Te puedo escuchar». Andrea una vez le confesó. «Soy incapaz de distinguir los sonidos de las palabras, pero sé que eres tú. Sé que eres tú quien me habla y sé, también, que estoy segura contigo».

Así pues, Elijah lo dice:

—Feliz cumpleaños, Andrea.

•••

Luna llena fue diecisiete días después, el 23 de Junio.

Elijah suele hacer los preparativos cada mes para darle la bienvenida a los Crecientes. Después de que todos están compartiendo, Elijah sabe que su presencia se vuelve indeseada y se convierte en una sombra.

El menosprecio de otros no le molesta en demasía, su apellido tiene mucho más peso y no culpa a la manada. Elijah toma su victoria cuando ve a Hope en brazos de Hayley.

—Gracias —Andrea se posicionó al lado de él. Perdido en sus pensamientos, no percibió su esencia y el encuentro lo tomó con la guardia baja. Sus cejas se juntaron y ladeó la cabeza ligeramente a la izquierda haciendo que los labios de Andrea subieran en una sonrisa tímida—. Estuviste aquí por mi cumpleaños. No debiste, pero viniste.

Andrea no le brindó tiempo a Elijah para pensar en una respuesta, ella tomó la mano de él y se pegó a su cuerpo. Su diferencia de altura no es demasiado grande, pero sí fuerza a Andrea en ponerse de puntas para depositar un beso en su mejilla. El olor de Elijah se le hace placentero, más sabe que no puede quedarse ahí con él.

Elijah leyó las intenciones de apartarse y apretó, con suavidad, la muñeca de Andrea; impendiéndole alejarse, suplicando en su mirada que se quedase. Elijah escuchó el corazón de Andrea latir con vehemencia, estaba seguro que ella oía el de él intentado seguirle el ritmo. Sus ojos se encontraron y todo lo demás desapareció, es ahí cuando las palabras brotan de él antes de que fuese capaz de procesarlas.

—Eres importante para mí, Andrea.

Andrea entreabrió los labios y direccionó su mirar en los labios de él, su pecho se llenó de aire y comenzó a respirar por la boca sin notarlo. No obstante, Elijah lo hizo.

Elijah sí notó el cómo su cabello crecía, en cómo antes lo solía mantener suelto y ahora prefería usar coletas, el cómo tenía cicatrices en el cuello o brazos que curaban y eran reemplazadas por nuevas. No le era extraño distinguir lo inusual que se había vuelto en ella sonreír y en cómo el centelleo en sus hermosos ojos marrones se desvanecía cada noche después de una luna llena.

Ella debía pensar que sus promesas eran vacías.

Fue el peso de su incompetencia lo que obligó a Elijah a tomar un paso hacia atrás.

Andrea tomó una bocanada de aire, observó por unos segundos sus alrededores y después a Elijah. El vampiro no le reciprocó la mirada.

Elijah, por su parte, cerró los ojos por un segundo, el corazón latiendo en su pecho con presteza. Es demasiado sencillo perderse en Andrea y desconoce si es bueno o malo. ¿Es normal sentirse morir ante la distancia?

Al recuperar la compostura, Elijah viró hacia ella. Encontró a Andrea con la vista en el horizonte y una sonrisa triste en sus labios.

—Mis cumpleaños siempre me han regalado un sentido de humanidad, de comodidad, si se quiere —Andrea alzó el mentón y un par de lágrimas corrieron por su mejilla—. Siempre fuimos Ayana y yo. La extraño todos los días.

Elijah fue incapaz de decir algo, pero sí escucho, pues sabía que, en ocasiones, solo estar presente es suficiente.

Andrea le miró; Elijah se sintió pequeño ante la intensidad que profesaban sus ojos, tenían una luz sinigual en la tristeza y duelo.

—Todo lo especial que mi primer cumpleaños aquí tuvo, fue por ti.

Elijah desarrolló el don de la palabra, aun así, cualquier oración coherente moría en sus labios mientras Andrea estuviese presente. Le era tan increíble como confuso, pues él siempre habría necesitado de palabras; para encantar a otros, para proteger a su familia, para cazar a sus enemigos. Su palabra es sagrada.

Y es completamente innecesaria con Andrea.

El silencio los conecta más que cualquier cosa que él pueda decir podría*. Es suficiente. Por ello, Elijah sonrió; un gesto diseñado para derretir corazones. Andrea entendió porque Hayley se enamoró, lo rápido que Gia cayó.

La sonrisa de Elijah Mikaelson debía la cosa favorita de Andrea.

Era contagiosa —sería un crimen no retribuirla. Andrea lo imitó, Elijah ya sabía diferenciar de los tipos de sonrisa que Andrea regalaba. La que realmente a él le gustaba, era esa donde ella sonreía con los ojos y hoyuelos se formaban en sus mejillas haciendo que subieran otorgándole un aspecto adorable y genuino.

La luz de la noche despejada relumbró sobre Andrea y Elijah fue bendecido con una imagen digna de canciones, pinturas y libros.

—¿Cuándo es tu cumpleaños? —Andrea quiso saber, curiosa.

Elijah no recordaba la última persona que le preguntó tal normal pregunta. Supone que no respondió. A Elijah no le importaba su cumpleaños y no deseaba que otros cargaran con tal información.

Pero no le pesa saber que Andrea lo conozca, se permite ser un poco más humano y responde para apaciguar las ganas de besarla:

—16 de Enero.

•••

n/a: las dos neuronas que me quedan intentando descifrar la fecha de nacimiento elijah en base al único flashback que nos mostraron de esther embarazada 😭

buuut les traigo este one shot del primer cumpleaños de andrea en NOLA después de the queen. mencioné en el canal que estaría medio triste pero bonito en general and i hope i deliver porque la verdad tenía full sin escribir y me costó un poco pero se logróo ❤️ esto es por celebración de que andrea cumplió el jueves pasado y no pude actualizar the rival, entonces bueno alguito para la espera les traigo 🫂

espero leernos pronto en the rival 💙