Escuchaba como caían gotas haciendo eco en lo que parecía ser una gran sala cavernosa, sentía un ruido cercano deslizándose por el suelo casi silencioso, pero aun así era siseante y amenazante, me causaba un escalofrió de incomodidad constante. Me moví lentamente arrodillándome en el suelo arenoso y húmedo, abría mis ojos intentando ver algo pero solo podía ver mi arco tirado frente a mí con un vago brillo. Estire mi mano para tomarlo pero con sorpresa una mano negra se intentó adelantar a la mía escuchando un chillido estridente que logro sobresaltarme. Me apresure a tomarlo aferrándome a él y a su luminiscencia moviéndolo de un lado a otro enterándome que la espesa negrura no se atribuía solo a una simple oscuridad, si no que incontables pesadillas eran las que me rodeaban sin dejarme salidas.

-Elizabeth. Contra todo pronóstico veo que aquí estas -De la nada una de las sombras tomaba la forma de Pitch justo frente a mí, primero aparecieron sus ojos hasta tomar su apariencia normal hablándome familiarmente.- Sobrevives otra vez, ¿No te cansas de eso?

-¡Pitch! -Murmure iracunda notando el brillo de mi arma aumentar y el mío aparecer con la mirada fija en el percibí el vago retroceso de las pesadillas que lo acompañaban- Devuélveme a Jack en este mismo instante o...

-¿O qué? ¿Me mataras? -Soltó una risa profunda que hizo eco llevando sus manos a la espalda para hablar con una estridente seriedad- Si te atrevieras serias la única con el valor suficiente.

-¿Qué hiciste con él? -fruncí el ceño aferrando más el agarre de mi mano en el arco y con la otra estire la cuerda sin dejar de verlo.

-¿Yo? Por favor no le hice nada a tu adorado Jack Frost. -Mostro una sonrisa amplia mientras comenzaba a rodearme iluminándose por el brillo que yo misma irradiaba- Si le hizo algo la única culpable es Tenebris.

-¿Tenebris? -Me reí un poco mientras el desaparecía apareciéndose más cerca a mi lado y con una ladina sonrisa obligándome a girar.

-Tenebris Dominae -Respondió con regocijo mirando el arco en toda su extensión acercando sus manos para apreciarlo mejor pero se detuvo mostrando una cara molesta- Pero veo que ella no es la única re nombrada. ¿Debería llamarte por tu nuevo nombre Fulgenti? -Volvió a retirarse algunos pasos hacia atrás- Deberías haberte quedado junto a tu familia, no perteneces aquí.

-Sin embargo querías que me uniera a ti. -Arquee una ceja mostrándome más seria.

-Corrección, te utilice a ti y a tu poder para crear una versión mejorada. -Me sonrió fingiendo calidez en su voz- De hecho te debo a ti mi éxito, hagamos esto para no debernos nada, te permitiré buscarlo sin resistencia alguna de mis pesadillas.

-¿Me crees tan estúpida para que caiga en tus trampas? -Dispare hacia el viéndolo desaparecer, la flecha se ensarto en una de las paredes brillando con tal potencia que las pesadillas huían del sitio gimiendo escalofriantemente, pero Pitch apareció a mi lado golpeándome con fuerza.

-¡Les das la mano y te toman del codo! -Se agacho a mi lado manteniendo su distancia- Esta en ti creer o no, yo solo sé que al lado de Tenebris le queda muy poco tiempo y eso no sería divertido. El tiempo corre -Dijo por ultimo decidiendo desaparecer entre las sombras de la cámara en que me encontraba, ahora sola.

Una entrada que parecía mas una grieta lo suficientemente estrecha fue lo que me dio libertad para encontrarme en un laberinto de cuevas, usaba el brillo de mi arco para guiarme por los lugares corriendo y escuchando que a veces a mi alrededor se escuchaban los mismos sonidos que creaban las pesadillas, se intentaban acercar pero luego retrocedían con mi pasar para mi extraña tranquilidad. Algo no estaba bien para nada. Corrí por largos minutos, a través de los largos y eternos pasillos creyendo con temor que lo hacía en círculos ya que no tenía manera de saber dónde me encontraba y no quería dispersar las luces de luna que me acompañaban por miedo a que las pesadillas decidieran atacarlas. Era el brillo que emitían lo que las mantenía alejadas y a mi segura de que no pudieran tocarme. Recuperaba el aliento cuando un grito lejano llego hasta mis oídos y ellas hablaron: "¡Es... el... ¿pero... donde?!". Volví a correr ignorando mi cansancio hasta que llegue a la más profunda de las cámaras. Lo vi caer con un último quejido en medio de la sala pareciendo inconsciente frente a él una furiosa y espeluznante figura. La misma que se la llevo con él. La misma que me hablo antes de que la cúpula cristalina explotara. Tenebris Dominae. No repare en tomar mi arco preparada para dispararle y batallar por la seguridad de él mientras estaba distraída gritándole miles de cosas al cuerpo inerte del piso, tan furiosa que su voz rebotaba en las paredes distorsionándose hasta que algo me hizo frenar.

-¿¡Porque!? - Ella cayó de rodillas frente a él llevando sus manos a su propio rostro clavándose sus propias uñas para dejar que de sus ojos lágrimas de desesperación corrieran por las hendiduras que se rellenaban nuevamente devolviéndole el aspecto normal a su cara. -Me rechazas ¿Por qué? yo te amo, Siempre lo hice.

-Elizabeth -Se escuchó en un susurro llamándome, era hermoso volver a oírlo pero con tan solo eso vi como ella se enfurecía mas levantándose de inmediato lista para clavarle sus garras en venganza a ello. Pero dispare a su cuerpo antes de que pudiera tocarlo, corrí hacia el viéndola furiosa y dispuesta a atacar pero las luces de luna crearon una protección de luz más potente que al tocarlo solo le causo un inmenso dolor.

-¡Jack! -Lo tome por los hombros viéndolo en un estado deplorable, tenía arena por todos lados signo de que lo había revolcado por la cámara ve a saber las veces, magulladuras, laceraciones entre otras heridas. Acaricie su cabello blanco viéndolo apretar sus ojos ya cerrados con dolor, la mire ahora a ella quien chillaba aun sosteniendo su mano. - ¿¡Que le hiciste!? ¿¡Cómo puedes decir que lo amas causándole tanto daño!?

-¡Me escucho como tú, me veo como tú, lo amo como tú, pero no es suficiente para que él me acepte! -Estiro sus manos a los lados de su cuerpo atacando con la masa que la componía creando afiladas lanzas que nos lanzó, pero no lograron atravesar la barrera de las luces que valientemente aguantaban golpe tras golpe- Tienes que morir y él aprender a amarme por las malas. ¿Quieres saber que le hice? Esta encerrado en mi reino. El mundo de las pesadillas, viéndote morir en sus brazos una y otra vez, a veces eres tú, otras tu imagen se distorsiona y me muestra a mí. Dentro de poco él me aceptara.

Lejanos pasos se comenzaron a escuchar apresurados mientras buscaba alguna manera de escapar, pero teniendo a Jack inconsciente me era imposible. Con la cercanía me preparaba para lo peor también viendo decaer algunas de las luces agotadas y debilitándose el escudo. Tenebris mostro una cruel sonrisa lista para atacar nuevamente, cerré mis ojos con fuerza abrazándome a Jack y el ataque nunca llego, solo golpes metálicos interceptándolo.

-Justo a tiempo -Sonrió Conejo justo frente a mí usando sus boomerangs en equis y recomponiendo su posición preparada para más. Ombric soltó una risa leve y agitada viéndolo algo agotado por las corridas, quien con Katherine nos auxiliaba.

-¿Qué le sucedió? -Me miro por sobre el hombro arrodillándose a nuestro lado, pero Ombric le indico que esto no terminaba preparándose para combatir a la par que se recuperaba.

-¡¿Cómo se atreven a... -Hablaba con su voz comenzando a distorsionarse y levanto su mano para otro ataque, pero desde las sombras Pitch hablo apareciendo justamente a su lado .

-Tenebris -Le detuvo la mano tomándola con la suya amenazante aunque con falso cariño tanto en su tono de voz como en su rostro- Déjala, ya hiciste suficiente. Dije que podía recuperarlo sin intervenciones. ¿No quieres parecer malcriada no es así? -El rostro de ella se desfiguro mirándolo ferozmente lista para protestar o atacar a quien se le interponía, pero el continuo para ella con autoritarismo y amenazante, apretando su mano hizo que toda la ferocidad se transformara en una mueca de dolor- Tenemos cosas más importantes que hacer tú y yo, ¡vámonos! -La arena comenzó a envolverlos violentamente y se la llevo por alguna oscura rendija de la cueva dejándonos solos en aquel lugar, pero no por eso reino la tranquilidad. Jack aun no despertaba y atrajo la atención de los guardianes inmediatamente tras asegurarse que el peligro había acabado.

-¿Qué es lo que sucedió? -Pregunto Norte acercándose a nosotros envainando sus espadas. Llevo una rodilla al suelo de arena reposando su codo en la otra mirándome con curiosidad. Los guardianes también esperaban respuestas.

-Ella... él -Los mire con preocupación a cada uno, no sabía cómo explicárselos mientras el descansaba en mis brazos inquieto. Sandy me alcanzo llevando su mano a mi espalda para reconfortarme- No despierta Norte, no despertara hasta que logre sacarlo.

-Lo hiciste muy bien Elizabeth, lo encontraste, ahora estará bien. -Respondió levantándolo en sus brazos. Katherine me ayudaba a mi ahora junto a Tooth, después de ver que al intentarlo sola trastabille- Primero, saquémoslo de aquí.

Al salir del sitio, estaba completamente vacío de las pesadillas que antes juraba haber sentido. Parecían haberse ido con Pitch y Tenebris a ocuparse del asunto que los apresuró a irse. Algo de todo esto no estaba bien y todos lo sabíamos pero necesitábamos que Jack estuviera recompuesto para lo que se avecinaba, aun así, no sabía si sería algo fácil. Con una bola de nieve de Norte llegamos inmediatamente hasta el Taller y llevamos a Jack a una de las habitaciones para reposarlo en la cama. Elfos y Yetis nos rodearon todo el camino con preocupación al ver uno de los guardianes inconsciente, Katherine decidió cuidar de su sueño y curar sus heridas mientras nosotros teníamos una reunión urgente para explicar todos los sucesos. Los ayudantes de Norte no se movieron de las puertas que Conejo cerró para tener privacidad.

-¿Entonces qué es lo que le hizo esa cosa a Jack para dejarlo en ese estado? -Pregunto Norte prácticamente conteniendo su mal genio poniendo incomodo a Sandy logrando que se alejara llegando a mi lado.

-Tengo la teoría de que ella lo torturó porque se negaba a cooperar -Respondí recargada en el escritorio de Norte con la mirada clavada en el suelo, escuche algunos sonidos de sorpresa provenientes de ellos y una respiración profunda de Conejo. Levante mi mirada. -Antes de que yo llegara, eso explicaría las heridas. Pero no le bastó con eso, si no que en la desesperación me confesó que lo tiene encerrado en el mundo de las pesadillas, donde tiene acceso quiero creer al igual que yo como al de los sueños. -Mire a Sandy quien asintió con una mueca y creando la figura de una puerta.

-Leí del de sueños. Es el lugar de donde proviene el poder para el conjuro de "Tengo fe" ¿No es así? -Comento Ombric sentado en un sofá con un aire de cansancio mientras Sandy lo señalaba y asentía- Si existe, tiene que tener su contraparte y allí es donde lo tiene.

-Cuando estuve inconsciente tras la pelea y que ella apareciera, estuve en el mundo de los sueños. Es fácil perderse ante la maravilla que puedes encontrarte y es tan extenso que jamás podrías recorrerlo por completo. -Agregue soltando un gran suspiro- Allí existen todos y cada uno de los sueños que fueron, son y serán, nacidos de cada estrella fugaz que se le pidió deseos.

-¿Y cómo se supone que lo rescataremos? -Pregunto preocupada Tooth a Norte mientras el intentaba hacer algún plan.

-Ustedes no pueden llegar, como dije yo ya estuve allí. -Apreté mis puños mientras miraba a Sandy creando en el centro la puerta nuevamente, una de las que me había encontrado en aquel mundo y el chico brillante me advirtió no cruzar. Era temible, estaba en lo que parecía uno de los límites o uno de los accesos, tallada con escalofriantes figuras detenía las cosas que podrían entrar a aquel sitio y contaminar todo a su paso. Las pesadillas transformarían los sueños. -Debo ir yo misma y sacarlo de allí.

-¿Sola? -Cuestiono Conejo mientras se acercaba cruzando sus brazos.

-Sola.