Durante la siguiente semana, después de las clases y antes y después de la cena, voy a la sala de requisitos con Malfoy. Él intenta hechizo tras hechizo para arreglar el armario mientras yo me siento allí y me pongo al día con las tareas escolares o paso el rato si no hay trabajo que hacer. Pasamos básicamente toda la noche en esa habitación porque, al parecer, el plan de los Señores Oscuros es sensible al tiempo. No es que me importe quedarme con él. Definitivamente no es lo peor y tiene sus ventajas... Por ejemplo, hace que Pansy y Harry se enfaden mucho y me da mimos y besos durante sus frenos. Aunque intento que no se tome demasiados descansos porque no queremos cabrear al señor oscuro.

No estoy muy segura de cómo se podría llamar la relación entre Malfoy y yo en este momento. No nos peleamos y parece que somos más que amigos, porque los amigos no suelen hacer lo que hacemos nosotros. Pero al mismo tiempo sé que él no puede enamorarse de nadie en este momento. Tiene miedo de hacerlo. Especialmente de mí. Yo soy la hermana de los chicos dorados y el señor oscuro odia a mi hermano porque no pudo matarlo. Quiero decir que estoy segura de que me odia porque mis padres me escondieron de él, pero no es lo mismo que sobrevivir a su intento.

Theo y Blaise están empezando a sospechar de Malfoy y de mí desde que le saqué de la sala común la otra noche y no volvimos. Intenté explicarles que no había pasado nada y que sólo habíamos hablado, pero no se lo creen.

Queda una semana para las vacaciones de Navidad y estoy muy emocionada por irme dos semanas. No puedo esperar a ir a la casa de Theos para las vacaciones y estar lejos de mi hermano. Lo único es que voy a echar de menos salir con Malfoy. Todavía no se lo he dicho y no sé si debería pero es la verdad.

Hoy es sábado y me dirijo a desayunar con el grupo. En su mayor parte todos estamos de bastante buen humor ya que las vacaciones están a la vuelta de la esquina pero Malfoy está de un humor bastante desagradable.

-Vamos Blaise deja de hablar de las vacaciones. - Malfoy suelta un chasquido mientras coge un gofre y lo echa en su plato.

-¿Por qué eres un Grinch? - Le pregunto pero todos me lanzan miradas vacías.

-Claro, se me olvidaba que no habéis tenido una Navidad muggle. - Digo. -El grinch es un tipo malvado de una película que intenta robarle la Navidad al pueblo porque es un miserable.

-Potter me da igual. - Malfoy me suelta un chasquido. Últimamente ha estado muy bien con no ser así conmigo... ¿por qué ahora se comporta así?

-Ohh, los enamorados en una pelea. - Blaise bromea pero yo pongo los ojos en blanco y Malfoy resopla.

-Parece que sí. - Se une Theo.

-No estamos peleando. - Les digo bruscamente a los chicos.

-Genial, ahora eres un Grinch. - Bromea Blaise.

-¡No lo soy! Soy el mayor amante de las vacaciones que conocerás. - Digo y Theo asiente con la cabeza.

-Me hizo poner un árbol de Navidad en mi habitación hace dos años y poner todos los regalos debajo. Luego me hizo comprar unas sábanas y mantas extrañas de color rojo y verde y un pijama de cuadros a juego. Luego me obligó a ver algunas de esas películas navideñas de mufla mientras bebía chocolate caliente. - explica Theo.

-Y le encantó cada minuto. - Digo con una sonrisa.

-Sinceramente, fue bastante divertido. - añade Theo.

-Qué adorable. - Dice Malfoy sarcásticamente mientras se levanta. -Ya me voy.

-¿Quieres que vaya hoy? - Pregunto, preparándome para levantarme y acompañarlo.

-No, estoy bien. - Dice y se va sin decir nada más. Me vuelvo a sentar y trato de ocultar que eso me ha dolido... Theo me da un codazo en el brazo para consolarme.

-¿Qué has hecho para que se enfade? - pregunta Blaise.

-No lo sé... - Digo mientras me como una fresa e intento averiguar qué he hecho mal.

-¿Por qué no te vas con él de todos modos? - Theo sugiere.

-Porque probablemente empeore las cosas. - Añade Blaise.

-Probablemente, pero voy a hacerlo de todos modos. No puede tratarme así y marcharse sin más. - Digo. Me pongo de pie y salgo del gran salón. Sé exactamente a dónde va, así que voy directamente allí. Cuando llego a la habitación, está sentado en el sofá con la cabeza entre las manos. Parece tan... triste. Me acerco con cuidado a él, pero me oye y se levanta rápidamente.

-Te dije que no vinieras hoy aquí. - Dice mientras se aleja de mí.

-¿Qué pasa...? - Pregunto. Dejo de moverme cuando me pongo delante de él.

-No es de tu maldita incumbencia. - Me suelta.

-¡Por el amor de Dios, Malfoy, no hagas esto! - Grito.

-Te dije que no vinieras aquí. - Repite.

-¿Qué está pasando? - Pregunto, mi voz se quiebra un poco.

-No quiero oír hablar de lo emocionado que estás por las vacaciones, ¿vale? No quiero oír hablar de lo que hicisteis Theo y tú ni de tus películas muggles. - Hace una pausa porque doy un paso atrás.

-Lo que pasó... Pensé... - Empiezo a decir antes de que me corte.

-¿Qué? ¿Creías que éramos amigos? ¡Te dije que no puedo dejar que te acerques a mí! Te dije que soy peligroso. Te dije que no soy bueno para ti. - Él se desprende.

-¡Sólo yo puedo decidir lo que es bueno para mí! - Grito.

-Esto no es bueno para ti. Y no importará después de que vayas a casa de Theo y pases la Navidad con él.

-¿Tienes algún problema con que Theo y yo salgamos juntos? - Pregunto.

-No.

-Esta bien, entonces, cuál es el problema.

-Ninguno. Solo vete.

-Malfoy, no me voy a ir hasta que me hables.

-Me estás cabreando, Potter.

-¡Bueno, tú también me estás cabreando!

-Te voy a echar de menos, ¿vale? Eso es todo. Tú te vas a casa de Theo, Blaise se va a casa y todo el mundo tiene que ir a algún sitio y yo estoy aquí atrapado.

Me acerco a él y tomo su mano entre las mías. Al principio se echó para atrás pero después me dejó coger su mano.

-¿Por qué no te vas a casa para las vacaciones? - Le pregunto.

-Tiene muchos mortifagos allí y no quiero pasar la Navidad así.

-¿Por qué no le pides a Theo que venga con nosotros?

-Los padres de Theo nunca lo permitirían.

-No lo sabes hasta que lo pides, Malfoy. Pero si no quieres preguntar, puedo hacerlo yo.

-Esta bien.

-Quería decirte que yo también te iba a echar de menos, pero no estaba segura de que quisieras oírlo. - Lo admito.

-Vale... le pediré que me deje ir con ustedes. - Dice mientras se inclina y me besa la frente.

-Bien porque quiero enseñarle a hacer bien la Navidad. - Bromeo.

-Genial. - Dice sarcásticamente y me besa.

-¿Todavía quieres que me vaya? - Pregunto, apartándome ligeramente.

-No... - Dice mientras me vuelve a acercar a él.

-¿Qué pasaría si el señor oscuro se enterara de lo nuestro? - Pregunto.

Se aparta y pone los ojos en blanco.

-Qué manera de arruinar el momento, Potter. - Dice mientras nos dirigimos al sofá.

-Lo siento... Yo... sólo necesito saberlo.

-Probablemente te daría la opción de unirte a él.. o morir...

Respiro profundamente para intentar controlar mi voz temblorosa.

-¿Esa es la opción que te dio? - Le pregunto.

-Mhm.

-Lo siento...

-No me enfadaría si decidieras irte ahora.

-Nunca te había considerado tan inseguro, Malfoy. - Bromeo. -No me voy a ir.

-No dejaría que te matara. - Dice.

-No estoy seguro de que seas capaz de detenerlo, pero te lo agradezco. - Bromeo.

-Sería capaz de detenerlo cuando se trata de ti.

-Pero, ¿por qué yo? - Pregunto.

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Nt; NO SE CUANDO PARAR AAAAAH SOY ADICTA A TRADUCIR SIN PARAR AYUDAAA WJKASLKAKLASKLAKSL

Bien, bien. En el capítulo 16 me detengo. 

Ese será su especial navideño, las amo demasiado por eso lo hago, Muak.

Att: -F.💖