Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

cincuenta y uno

-Por favor, tened cuidado este año. - Andrómeda dice mientras los cinco bajamos las escaleras a la mañana siguiente. Ninguno de nosotros está emocionado o feliz, pero estamos allí.

-Haremos lo posible. - Draco se burla ligeramente para aligerar el ambiente.

-Escríbeme, Draco. - exige Andrómeda.

-De acuerdo. - Dice mientras toma mi mano.

-Buena suerte. - Dice Andrómeda una última vez antes de dejarnos a los cinco solos.

Se ofreció a acompañarnos a la estación de tren pero no podíamos hacerle eso. Tiene fama de buena persona y que la vean con nosotros probablemente lo arruinaría. Su marido lucha por la orden, y nosotros somos comedores de la muerte. No sería justo...

-¿Están listos? - Theo pregunta. No lo estamos y probablemente nunca lo estaremos, pero qué otra opción tenemos...

-Vamos a terminar con esto. - Digo en tono sarcástico. De nuevo, intentando levantar el ánimo.

-

La estación de tren estaba abarrotada, como siempre, de gente de primer año que corría de un lado a otro para conocer gente nueva, despedirse de sus familias y encontrar un sitio para sentarse.

Los chicos mayores estaban de pie con sus familias, despidiéndose y dirigiéndose a buscar un lugar para sentarse con sus amigos. Nos reconocen nada más pisar el andén y muchos nos miran con desprecio. Para ser justos, nos lo esperábamos, pero sigue siendo extraño.

Draco no me ha soltado la mano desde que salimos de casa de Andrómeda y no creo que me la suelte hasta que estemos lejos de todos. No es que me queje. Me hace sentir segura.

Los ojos observan cada uno de nuestros movimientos mientras caminamos hacia el tren y siguen mirando hasta que llegamos a un compartimento privado.

-La gente tiene un maldito problema de mirada. - Grita Pansy una vez cerrada la puerta.

-Nos odian. - Le recuerda Blaise. -Sólo están mirando. Podría ser peor.

-Sólo trata de ignorarlos. - Dice Theo en voz baja.

-¡Joder! - Pansy grita y patea el asiento. -Este año escolar va a ser duro.

-Cuando lleguemos al colegio y vean lo que ha pasado, dejarán de prestarnos atención. - Dice Draco.

-Eso espero, carajo. - Pansy continúa. Está enfadada... Lo entiendo pero tiene que calmarse.

-Pansy, cálmate. - Le digo. -Estamos bien.

-Sólo estoy enfadada. No tienen derecho a juzgarnos. - Pansy vuelve a gritar.

-Cielos, Pansy. Relájate antes de que atraigas más atención hacia nosotros. - Theo llora y Blaise la rodea con un brazo para calmarla.

-Que todo el mundo se calme. - Yo digo. -Pansy, vamos a estar bien. Nadie aquí lo entiende, recuerda. Sigue diciéndote eso.

Ella asiente y se sienta.

-Theo tiene razón. No necesitamos atraer más atención hacia nosotros. - Continúo. -Cálmate.

Todos los demás asienten y se sientan también.

-Theo tiene razón. No necesitamos atraer más atención hacia nosotros. - Continúo. -Cálmate.

Todos los demás asienten y se sientan también.

-Blaise, cuéntanos alguna historia disparatada para distraernos. - Digo y Blaise sonríe.

-Muy bien. - Dice y comienza a contarnos una historia de cuarto año en la que él y algunos de sus amigos se metieron en algunos problemas. Los demás nos sentamos y escuchamos con atención, riéndonos cuando era el momento adecuado y relajándonos en la conversación y dejándonos distraer.

-

-Levanta el culo, Maya. - Draco me grita al oído y yo me levanto de un salto.

Miro a mi alrededor y veo a todos saliendo del tren y a Draco sonriendo hacia mí.

-Que te den por culo. - Le suelto un chasquido pero eso solo hace que sonría más.

-Podemos saltarnos la cena y hacer eso si quieres. - Sonríe mientras me ayuda a levantarme y me coge de la mano.

-No, no podemos. - Digo con firmeza.

-¿Y por qué no? - Pregunta.

-Porque me hiciste enojar. - Sonrío.

-Oh, ¿podrían ustedes dos conseguir una habitación? - Theo se queja. -Voy a perder el apetito.

-

Entrar en Hogwarts se sentía tan diferente de la última vez. Definitivamente se siente como si no perteneciéramos a este lugar. No ayuda que todo el mundo se quede mirando y se gire para hablar con sus amigos. Ni siquiera intentan ocultarlo.

Sentado en el gran salón con el resto de los Slytherins me sentí tenso. La gente de las otras casas no deja de mirarnos y de hablar con sus amigos. Me doy cuenta de que Cho me miraba directamente a mí y, cuando establecemos contacto visual, se dirige a Luna y le susurra algo. Luna me mira después de eso, pero no me mira fijamente, sino que me sonríe. Le devuelvo la sonrisa, pero sé que Luna es demasiado buena para odiar a alguien y esa es la única razón.

No es de extrañar que los otros Slytherin no se preocupen por lo ocurrido. No están mirando ni hablando con sus amigos. Crabbe y Goyel dejaron claro que mientras estemos del lado de los señores oscuros, estamos bien.

Que se jodan.

Te juro que en realidad son personas terribles.

El gran salón tiene un aspecto diferente este año. Snape quitó todo el color y la alegría. Las mesas no están decoradas de forma elegante y nos han dicho que las mesas no estarán aquí después de hoy. Cuando nos llamen al gran salón, aparte de las comidas, nos pondremos de pie.

-Este año será muy diferente para todos ustedes. Concéntrense en la escuela y no se metan en problemas, de lo contrario los zanahorios los castigarán. - Snape explica

-Este año será diferente para todos nosotros. - Repito y Theo resopla y Blaise se ríe.

-Sí, qué subestimación. - Dice Blaise.

-Yo ya he superado esto. - Añade Draco.

-Yo también.

-¿Volvemos a la sala común entonces? - Sugiere Pansy.

-Sí. - Theo dice. -Al menos la gente nos dejará en paz allí.

-Um. McGonagall viene hacia aquí. - Añade Blaise.

-Mierda. - Mascullo.

-Creo que está repartiendo los horarios de las clases. - Dice Draco y pone los ojos en blanco hacia nosotros. -Os preocupáis demasiado.

-Oh. - Murmuro. -Ya.

McGonagall se acercó a la mesa de Slytherin y apenas nos miró mientras repartía las tablas de multiplicar. Dejó la mía en la mesa frente a mí, junto con las demás, y se marchó.

-Vaya. - Dice Blaise cuando se ha ido. -Eso fue tenso.

-Ella debió estar allí cuando El Elegido contó su versión de la historia, y debió creerla. - explica Theo.

-Jodidamente increíble. - Digo y pongo los ojos en blanco.

-Está bien, vamos a la sala común. Mañana tenemos clases y ya he terminado con el día de hoy. - Dice Pansy.

Y entonces me di cuenta.

¿Qué pasa si tengo una clase sin al menos uno de ellos en ella?

Nunca pensé en eso...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro