Habían pasado 84 años...

Bueno, no. No habían pasado años, tampoco 84. Solamente unas tres horas desde que habían terminado en esa isla. Así que como supervivientes natos, se dedicaron a buscar algo de comida (en el caso de HoSeok y TaeHyung), armar un refugio (en el caso de JungKook) y encontrar agua dulce para no morir de deshidratación.

Y bien, luego de tres horas más, cuando el sol estaba saliendo volvieron a reencontrarse.

-¿Y la comida?-preguntó NamJoon viendo a la pareja sin nada, sólo desarreglados.

-No hay, no existe.-dijo Tae.

-Comerse entre sí no contaba.-comentaba Kook rodando los ojos.

-¿Y el refugio, rata vampírica?-preguntaba HoSeok cruzándose de brazos.

-Allá-todos miraron detrás del chico, donde señalaba, viendo sólo el auto de YoonGi.

-¿Qué?-fue la pregunta general.

-¿No ibas a armar algo?-preguntaba NamJoon con el ceño fruncido.

-Lo intenté...pero sin un tutorial de internet es imposible.-dijo encogiéndose de hombros.

-Al menos dinos que conseguiste algo de agua, NamJoon.

-Descuida, HoSeok, encontré un pequeño arroyo donde podremos beber algo.

-Oh, qué bien, con Hobi vimos algunos cocos y algo de fruta mientras follabamos.-decía TaeHyung mientras señalaba el interior de la isla, el lobo a su lado poniéndose rojo.

-Qué bueno, pero no olviden que están con un vampiro ¿Qué cenaré yo?-vio como los tres se miraban con miedo-ya, no teman, la sangre de zombie es asquerosa, la de híbrido es sosa y la de lobo muy espesa, me puedo ahogar y no quiero eso.

-Vimos algunos animales ¿de ellos puedes alimentarte?-preguntaba HoSeok más tranquilo.

-Mmm...sí, de ellos sí.

-Bien, iré a buscar algo de comida ¿vienen?

Tae, el lobo y Kook se miraron entre sí antes de asentir, no tenían nada mejor que hacer.

###Monster city###

Bien, llevaban una hora caminando buscando algo para comer y no encontraban nada. Comenzaban a pensar que el sexo en una isla generaba alucinaciones. Estuvieron a punto de rendirse cuando TaeHyung detectó a lo lejos un oso bebé.

-El único que podría alimentarse de ese cachorro sería JungKook si no conseguimos prender una fogata-decía NamJoon viendo al pequeño dormir en su cueva.

-No tonto, si algo me enseñó Winnie Pooh es que donde hay un oso, hay miel, así que vamos-Tae comenzó a caminar hacia la cueva, seguido del resto esperando encontrar la deliciosa miel que los salvaría de morir de hambre. Aunque sólo llevaban unas horas sin comer.

Al acercarse al osito, lo esquivaron para ingresar a la cueva y poder encontrar lo que buscaban, pero cuando estaban por lograrlo, NamJoon pisó la patita del pobre animal haciéndolo chillar y llorar de dolor.

HoSeok, alarmado, tomó al oso para consolarlo y evitar que siguiera llorando como si fuera su madre, mientras Tae hacía el papel de padre y regañaba a Nam.

JungKook rodó los ojos ante la patética escena, pensando en que no debían encariñarse con su comida o no lo dejarían alimentarse. Pero entre pensamientos escuchó un gruñido. Se tomó el vientre, pensando que había sido su estómago, pero se dio cuenta que no era así. El gruñido venía desde atrás. A pesar de ser vampiro y tener buena vista, eso no quería decir que veía a la perfección en la oscuridad, así que llamando la atención del resto con un aplauso que casi los deja sordos, preguntó.

-¿Qué es eso que está tras nosotros?

NamJoon no veía nada, parecía miope achicando los ojos para ver algo, pero cuando Tae y HoSeok vieron, se dio cuenta de que no era nada bueno.

-¿Y?-preguntó el zombie sin lograr ver nada en la oscuridad.

-¡Corran!-gritó el híbrido alejándose con el lobo y el oso de la cueva.

Kook marchó a la velocidad que su ser vampírico le permitía, mientras que NamJoon simplemente corría, escuchando a mamá oso seguirlos enfadada.

Saltó obstáculos hasta dar con una palmera la cual escaló como si su vida dependiera de ello. Un brazo y una pierna quedaron casi al borde de desprenderse de su cuerpo, pero por suerte llevaba hilo y aguja para repararlas. Al hacerlo se dio cuenta que mamá oso no estaba ni cerca de él y se preguntó dónde podría estar.

###Monster city###

TaeHyung y HoSeok se refugiaron en otra pequeña cueva que encontraron. El bebé oso ya estaba dormido en brazos del lobo quien lo acunaba cantándole una canción de cuna, siendo observado por el híbrido quien sonreía tiernamente ante esa escena de su esposa y su bebé. Tal vez vivir en esa isla desierta no sería tan malo después de todo...bien, tenía que admitir que comenzaba a desvariar. Nunca pensó que estar en una isla fuera peor que consumir drogas.

-HoSeokie, necesitamos devolver al oso bebé.

-Lo sé, pero estoy seguro que si se lo damos a su mamá nos abrirá el estómago para comerse nuestras entrañas por quitarle a su bebé.-dijo viendo al osito dormir sobre su hombro, ya comenzaba a pesarle.

TaeHyung pensó en lo que podrían hacer, después de todo el lobo tenía razón, era probable que mamá oso los matara por haberle robado a su niño. En su mente pensando en todas las opciones que tenían para entregar al bebé, ninguna factible ni que les permitiera salir con vida. Comenzaba a creer que tendrían que crear una balsa con un Wilson para poder salir de ahí dentro de unos años. Sí, ya se imaginaba volviendo a su hogar luego de veinte años, con una barba que le llegaba hasta los tobillos, extremadamente delgado y con la piel más tostada por estar constantemente bajo el sol. Lo único bueno es que no envejecería, lo bueno de ser un monstruo y no un humano.

Seguía pensando cuando se descubrió sólo en la cueva con el oso sentado a su lado. Lo miró intrigado, preguntándose dónde estaba HoSeok. Hasta que escuchó un gruñido detrás suyo. Volteó asustado, viendo un oso enorme enojado y amenazante.

Bien, este era el momento de correr y dejar al osito con su nueva familia adoptiva.

###Monster city###

JungKook veía las nubes, acostado en el techo del auto monstruo de YoonGi. El cielo se veía más grande y extenso, se podían apreciar con claridad desde ese lugar, sin contar con que era lo único entretenido para ver en ese momento. Su celular no le servía mucho sin Wi-Fi así que no era muy útil. Ni siquiera tenía señal por lo que no podía llamar a nadie. Suspiró, estar en una isla no era muy entretenido.

-Quiero mover el bote, quiero mover el bote, le guta ¡Mueve!

Se levantó automáticamente ante esa canción. Eso quería decir que había alguien más en esa isla. Giró, esperando ver a alguien, y, a lo lejos, descubrió una luz entre la maleza. Se levantó y caminó hacia ese sector, viendo un grupo de personas bailar y festejar con cervezas y comida.

-¡Hey! ¡Otro chico nuevo!-gritó una mujer, pasando un brazo por sus hombros y ofreciéndole un vaso de cerveza que obviamente no tomaría.

La chica se alejó después de dejarlo casi en medio de la fiesta, saltando y gritando la canción. No sabía qué hacer, se sentía extraño en ese lugar, aunque la música fuera buena. Se preguntó si esas personas tendrían Wi-Fi.

-¡JungKook!-la inconfundible voz de HoSeok lo sorprendió.

-¿Qué haces aquí?

-Me salvaba de un oso malo y terminé aquí ¿no es genial?-dijo dándole un sorbo a su cerveza.

-Sí...si tuvieran sangre me gustaría más.-comentó viendo con asco la cerveza en su mano para extendérsela al lobo-tómala, yo no la quiero.

-Uh ¡Gracias, JungKook! Ya me caes mejor, compadre.-HoSeok tomó el vaso y le dio un sorbo largo, tirando el suyo que ya estaba casi vacío.- ¿vamos a bailar?

Kook se encogió de hombros y lo siguió, bailar un poco y distraerse no le vendría mal a ninguno.

Así que ahí estaban, saltando y gritando a todo pulmón una de las canciones que estaban pasando. Reían de algunas personas que caían o hacían el ridículo. Bien, no entendían por qué festejaban, pero que más daba, la fiesta era muy buena y no podían desaprovecharla.

-¡Des-pa-ci-to!-cantaban siguiendo con la música mientras saltaban de un lado a otro.

HoSeok había volcado su cerveza en una chica dos veces pero cada vez que ella volteaba se hacía el desentendido y le echaba la culpa a algún otro que tuviera un vaso de cerveza, a lo que ella volteaba y los abofeteaba. JungKook y él reían cada vez que eso pasaba.

Siguieron bailando y riendo, hasta que el tumulto de personas comenzó a moverse. Ellos los siguieron al ritmo de la música, saltando a la par, sin importar que cada vez se metían más al corazón de la isla. Aunque bueno, era difícil que HoSeok lo notara con el alcohol en su sangre y JungKook...bueno, el chiquillo parecía algo idiotizado por la fiesta como para notar que el rostro de las personas había cambiado a uno sádico con sonrisas macabras y los veían con hambre.

Cuando pudieron notarlo, gracias a que la música frenó y todos los miraron, ya estaban siendo acorralados por el resto quienes los miraron con hambre mientras, uno de ellos con un gorro de cocinero desgastado y de cuerpo enormemente musculoso, revolvía una olla gigante.

-Ah... ¿Y la fiesta?-preguntaba HoSeok.

-¿Fiesta?-preguntó uno con sonrisa tenebrosa.

-Fiesta, pachanga, asalto, como quieran llamarle. ¿Acaso no estábamos en una?-Cuestionó JungKook incomodándose ante las miradas.

-Oh, por supuesto-el que parecía ser el líder se acercó a ellos-siempre hacemos una gran fiesta antes de cenar.

-Eh... ¿y entonces? ¿Acaso ahora cenaremos?-el lobo se había apegado a Kook al sentirse intimidado y temeroso.

-Claro, sólo nosotros...los cenaremos a ustedes.-y como si fuera el efecto de una película, todos los rostros se deformaron en un gesto horrible de sadismo.

HoSeok se asustó, sintiendo que temblaba mientras que Kook se abrazaba a él pidiendo internamente que una fuerza poderosa (alias: Goku) los salvara.

-¿Y si te los comes?-preguntaba en un susurro el lobo.

-No soy como ellos.

-Pero nos salvarías.

-No soy un salvaje, hace años que no inserto mis colmillos en alguien para matarlo.-decía casi ofendido, no porque sea vampiro iba a ser un salvaje.

Comenzaron a retroceder con los caníbales siguiéndolos y mirándolos hambrientos hasta que se escuchó un fuerte rugido que llamó la atención de todos. Giraron y vieron dos osos enormes mirarlos furiosos y con hambre también. A un costado Tae sostenía al osito.

-¡Ataquen!-exclamó dándole la señal a los osos para que se comieran al grupo de caníbales.

HoSeok y JungKook se acercaron a él en cuanto tuvieron la oportunidad. El lobo saltó a abrazarlo sintiendo al osito lamerle el rostro.

-¡¿Cómo carajos pudiste liderar a dos osos?! ¿No que querían comernos?-preguntaba Kook sorprendido por ese extraño don de su amigo.

-Hablo el idioma de los osos, cuando HoSeok me dejó y salí corriendo me topé con mamá oso, le expliqué dónde dejé a su bebé y cuando lo vio se conmovió porque encontró a su pareja. Hacía meses que no estaban juntos porque se habían perdido y no se encontraban, y como reuní a la familia optaron por ayudar.-contaba orgulloso viendo cómo se comían a los caníbales.-aw, mira, Winnie, algún día tú podrás hacer algo así.

JungKook rodó los ojos.

-Todo muy bien, pero ¿cómo saldremos de la isla? No quiero vivir aquí por siempre, aun quiero seguir follando con el amigo de HoSeok.

-¡Hey! ¡No hables así de Jinnie enfrente mío, rata vampírica!

-¡TaeHyung! ¡Di algo, están insultando a tu best friend forever!

-Lo siento, Kookie, pero si te defiendo no la puedo meter.

Kook jamás se había sentido tan traicionado como en ese momento...bueno sí, pero fue cuando tenía siete años y JiMin lo delató de ser quien había ensuciado el baño con pasta dental. Eso fue la traición, la decepción, hermano.

Iba a decir algo más, cuando escucharon el sonido de un helicóptero muy cerca. El viento que generaba volaba todo, abriéndole paso y cegándolos con una fuerte luz blanca. No entendían si era la policía, los militares o Dios, lo único que tenían en mente era que por fin alguien había ido por ellos.

De repente cayó una escalera cerca y la luz bajó un poco de intensidad dejándoles ver bien el helicóptero pintado de negro, con dibujos de llamas y un nombre que debajo tenía una frase: Agust D You can't control my shit. Sí, ya les quedaba en claro quien había ido por ellos.

-¡Chicos!-NamJoon gritó feliz de verlos-¡Suban!

Sin pensarlo JungKook escaló, seguido de HoSeok y TaeHyung quien se había negado a dejar al osito pero que, tras ver a sus padres, decidió que era lo mejor. El lobo estaba seguro que tendría que consolarlo después.

Cuando estuvieron arriba recibieron los abrazos de Jin, JiMin y Alex quienes se alegraban de verlos bien al fin y al cabo. Todo era alegría, reencuentro y demás cuando sintieron un peso extra en la escalera que ninguno se había molestado en subir de nuevo. Cuando miraron hacia abajo pudieron ver a dos caníbales intentando llegar a ellos.

-¡¿Qué hacemos?!-preguntaba asustado HoSeok.

-¡Alex! ¡Como acordamos!-dijo Jin y su amigo asintió yendo por la metralleta para empujarla hasta la escalera y apuntarla hacia abajo.

-¡Traguen plomo, salvajes!-exclamó antes de empezar a disparar deshaciéndose de los dos caníbales.

Y cuando la metralleta volvió a su lugar, la escalera volvió a subir y todos se relajaron mientras YoonGi manejaba el helicóptero.

-¿Cómo fue que te encontraron antes?-preguntó Tae a Nam quien estaba perdido mirando a Alexander quien no dejaba de bromear y reír con Jin y HoSeok.

-Ah...estaba sobre una palmera, fue más fácil de encontrarlo.-explicó JiMin.

-¿Y este helicóptero?-preguntó curioso JungKook.

-Oh, es de YoonGi, pronto iremos a nuestra mansión. Bueno, una de tantas.-decía orgulloso el tritón-lamentamos si tardamos en venir por ustedes, pero es que Yoonie no quería venir hasta que la decoración del helicóptero estuviera lista.

-¿Cómo supieron que estábamos ahí?-cuestionó Tae.

-Oh, la magia de Jin ayudó, pudo rastrearlos gracias a una camisa de HoSeok.

-Todo muy lindo, pero ¿Cómo consiguieron tener tantas mansiones, un helicóptero y vaya a saberse qué más? ¿Tanto ganaron en el casino?-preguntaba NamJoon, optando que lo mejor era dejar de mirar a Alex, de seguro ya iría a saludarlo.

-En parte, y en parte fue gracias a YoonGi y su conocimiento en negocios y economía.-decía JiMin desviando la mirada con una sonrisa nerviosa.

-¿YoonGi? ¿Negocios? Imposible, desde que lo conozco que ha copiado en los exámenes de economía.-NamJoon no podía estar más sorprendido.

-Eso es porque tengo mi propia forma de negociar.-los sorprendió el vampiro peliplateado-dejé en piloto automático al helicóptero.-decidió informar antes de que todos entraran en pánico.

-¿Negociar? ¿Y cómo lo haces para tener tanto dinero?-preguntó curioso JungKook.

-Tengo una política sencilla de entender y muy práctica, eso es todo.-decía mientras tomaba al tritón y lo sentaba sobre sus piernas.

-¿Política? ¿Cuál?-preguntó esta vez TaeHyung, YoonGi se encogió de hombros, sonriendo escalofriantemente antes de contestar.

-Plata o plomo.

YoonGi Escobar le dicen :v

ya se imaginaran más o menos como serán los proximos capitulos, con unos chicos mafiosos y problemas amorosos....oh, me salio un verso sin esfuerzo, traficando rimas :v

bueno ya, espero que les haya gustado el capitulo, me costo hacerlo ._. no se me ocurría mucho XD 

intentaré, antes de Navidad, de terminar con los capitulos de Mi príncipe rebelde, ya que es un minific, y así seguir con Sonríe, KookJin chats y este fic 

Sean pacientes, plis XD 

Nos vemos en el proximo! besos💋💋💋