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Estoy en finales, por eso me tardé tantito pero ya volvimos, Camila Aprobada 🤓☝️

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COMENTEN SI QUIEREN OTRA ACTUUUUUU 👹👹👹👹👹👹

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-¿Ah?- Ni-ki miró a Sunoo luego de que este formulará esa pregunta.

-S-si tú...- ahora estaba más nervioso, Ni-ki lo miraba atentamente -Sí... s-si quisieras casarte conmigo...

Sunoo había cerrado sus ojos y la falta de palabras de Ni-ki le hizo pensar lo peor, talvez era demasiado pronto, sí, era eso, demasiado pronto, a penas se conocían año y medio, casi dos años, talvez Ni-ki no estaba seguro, talvez... talvez no lo quería tanto.

En pánico, bajó de su regazo, dispuesto a irse, las lágrimas se juntaron en sus ojos, no sabía qué más hacer a parte de huir.

Pero cuando dio un paso lejos de Ni-ki, este lo atrajo a él, abrazando su cuerpo con fuerza y sin dañarlo.

-Y-yo no sabía...- la voz entrecortada de Ni-ki delataba que estaba llorando -no sabía que podíamos.... te lo habría propuesto el día en que nos conocimos.

Cuando Sunoo vio el rostro de Ni-ki, era un mar de lágrimas.

-Es que yo te amo tanto- lloraba el híbrido aferrado al cuerpo del Rey.

-Me asustaste- Sunoo igual liberó sus sentimientos, creyó haber sido rechazado.

-¿Te asusté?

-Como no decías nada.. y-yo creí que no querías....

-Yo siempre quise- sonrió Ni-ki -nunca dudes que yo siempre voy a querer estar contigo, siempre va a ser un "sí"

-E-es que yo creí--

-Siempre va a ser un "sí" cuando se trate de ti.

Y aunque Ni-ki lloraba, logró calmar el llanto y la angustia que Sunoo adquirió en ese momento.

-¡Te amo!- Sunoo pronunció lanzándose a los brazos de su pareja o ¿prometido?

-Yo también te amo- Ni-ki se hundió en el pecho de Sunoo, sujetando su cintura con fuerza, ya que Sunoo estaba parado y Ni-ki sentado en la orilla de la cama.

-Yo investigué... y siempre dice "un Reyno gobernado por dos personas justas"... nunca dijo que tiene que ser un hombre y una mujer...

Se mantuvieron abrazados un rato más hasta que Ni-ki empezó a jadear y a sudar en medio de los brazos de Sunoo.

-¿Estas bien?- Sunoo preguntó tomando en manos su rostro.

-Yo... no lo sé- era raro, ¿era época de celo? Aunque todos esos años, no había sentido su celo de esa manera, solamente era un muy suave calor, ¿Será porque ya tuvo intimidad con Sunoo? Eso podría haber activado esa parte instintiva, que lo llamaba a reproducirse con su pareja enlazada.

-Dios mio, estás hirviendo- Sunoo tocó la frente de Ni-ki, recordó que tenía un remedio para la fiebre ¿Dónde lo había puesto? -ah, está allá- recordó la cabaña, ahí era donde estaban casi todas las medicinas que producía él.

-Ayuda... ayúdame- Ni-ki tenía las orejas rojas, al igual que abajo de sus ojos, sus manos estaban temblando un poco y todo lo que hacía era buscar el aroma de Sunoo, era como si sus instintos dominarán a la parte decente y citadina de Ni-ki.

-Espérame, llamaré a alguien para que traiga la medicina y--

-¿No podemos ir nosotros allá?- buscaba un espacio para estar a solas con Sunoo.

-Sí, sí podemos... ahmm- estaba pensando en qué hacer, luego recordó algo y apretando una palanca, una campana se hizo escuchar, estaba llamando a Jungwon.

Pasó menos de un minuto cuando vio a su amigo entrando por la puerta.

-¿Qué está pasando?- preguntó.

-Tengo que llevar a Ni-ki a la cabaña, parece que tiene fiebre muy alta y allá están todas las medicinas y remedios que tengo.

-¿No lo pueden atender los médicos?

-Ni-ki no deja que nadie más que yo lo atienda, ya viste cómo fue en las pruebas para caballeros, no dejaba que ningún doctor siquiera lo toque.

-Entonces...

-Necesito que te encargues del reyno mientras él se recupera, volveremos ni bien esté estable.

-Pero--

-Por favor.

-Bien... llamaré a alguien para que los lleve en la carroza, así llegarán más rápido.

Y como dijo, dos minutos después, ya había alguien esperándolos afuera, Ni-ki subió con mucha dificultad y Sunoo procuraba que este no perdiera el equilibrio.

-Me siento mareado...- dijo Ni-ki, estaba sudando y con una intensa sensación de escalofríos por todo el cuerpo.

-Ya casi llegamos- Sunoo estaba preocupado ¿Qué estaba pasando? Apenas hace media hora estaba todo bien.

-Agua... quiero agua- fue lo primero que dijo el híbrido al entrar a la cabaña.

-Te llevaré agua, primero, acuéstate en la cama- Sunoo batalló un poco para que Ni-ki suba las gradas hasta el segundo piso, pero finalmente lo logró.

Ni-ki sudaba en su lugar, ansiando volver a tener el olor de Sunoo cerca de él.

Tenía hambre, pero no exactamente de comida.

Su cuerpo estaba siendo sometido a un calor intenso, tenía sed, tenía calor y frío al mismo tiempo, nunca se había sentido así.

-Volví- Sunoo regresó con unas cuantas medicinas y una bandeja con agua fría.

Le dio dos de esas patillas, una para la fiebre y otra para calmar los escalofríos y los temblores.

Pasaron unas cuantas horas, talvez cuatro, donde Ni-ki estaba mejor, parecía haberse calmado y Sunoo se quedó dormido a su lado, cuidar de alguien si que era agotador.

Entonces alguien tocó la puerta de casa,  ahí Sunoo despertó de inmediato.

-Yo voy- dijo parándose de manera tranquila dejando a Ni-ki recuperarse.

Bajó las gradas y abrió la puerta.

-¿Ya está mejor?- preguntó Jungwon con Jay al lado.

-Algo, pero ya esta anocheciendo- Sunoo suspiró.

-Vinimos preparados- Jay dijo, mostrando tres canastas con comida preparada y postres -esto es para que coman hoy, esto es para su desayuno y almuerzo de mañana, también tienen la cena y un desayuno extra, si no vuelven hasta dentro de dos días, volveré con más comida.

Sunoo sonrió y suspiró, ¿Podía haber una relación tan amistosa entre un panadero y un rey? No lo sabía, pero era como un hermano mayor, esos sobreprotectores que al mismo tiempo molestan cuando habla medio segundo con un chico.

-Gracias- Sunoo agarró las canastas llevándolas hasta adentro.

-Cuídense, si algo pasa, vendremos enseguida.

-Sí- Sunoo sonrió, cerrando la puerta de nuevo.

Tomando la canasta para ese día, la subió hasta donde Ni-ki, la abrió y vio dos platos con sopa de pollo, excelente para recuperar fuerzas, resfriados, tos, gripe y casi cualquier malestar.

-Ven, te ayudaré a comer- Sunoo se sentó al lado de Ni-ki, con su plato y una cuchara.

El híbrido no dijo nada, solo hizo caso, comiendo de a poco, el hecho de que Sunoo cuide tan bien de él, le hacía feliz.

Después de que terminó de comer, Sunoo comió su plato, no pudo terminar todo, Jay siempre le daba demás, decía "estás delgado, debes comer, por eso no puedes levantar los escudos".

-Sunoo... hace calor- otra vez, la fiebre había vuelto.

-Traeré el paño, así te vas a--

Los labios del rey fueron atacados, por los labios secos de Ni-ki, quien tenía sus dientes más "salvajes"

Los colmillos estaban más afilados de lo usual, al igual que su lengua algo más rasposa, sus músculos tensos parecían haber crecido un poco, al igual que él, se veía más alto, más intimidante, sus manos parecían más grandes, sus ojos más feroces, sus facciones aún más definidas.

-Ya no necesito medicinas- susurró en el oído de Sunoo, quien a comparación de Ni-ki, se veía tan pequeño y delgado, ya lo era antes, pero Ni-ki había crecido en tamaño y masa muscular.

-Podrías empeorar o--

-¿Recuerdas mi periodo de celo?

-Sí...

-Solo puedo sentirlo, cuando me enlazo con alguien- con una sola mano, sujetó la cintura de Sunoo.

-P-pero--

-Solo puedo contigo- susurró en su oreja, empezando a lamer toda esa zona. -sólo quiero hacerlo contigo.

-Eso significa...

-Por favor, perdóname, si me pides parar, no podré hacerlo.

Sunoo siquiera pudo decir algo, sus labios fueron atacados de nueva cuenta, sintiendo esa lengua rasposa dentro de su boca, jugando con la suya, mientras las manos de Ni-ki se guiaban hasta dentro de su pantalón.

Este no era el plan para después de pedirle matrimonio... pero bueno.

Cami~