࿐♡ 17
—Parece que el príncipe está nervioso —dijo uno de los ciudadanos.
—Tal vez porque la persona que gane deberá hacerlo bien o puede morir, no sé, dímelo tú —dijo con obviedad otro chico a su lado.
La batalla había comenzado y Chan al ver que uno se alistó para correr y el otro para golpes con las manos, se agachó levemente formando un círculo con uno de sus pies con fuerza, levantando tierra en el acto, pero dándole menos fricción a sus zapatos, haciendo que sea poco probable que se resbale.
Jeongin miraba todo desde su lugar, con tanto nerviosismo encarnado.
De pronto, Chan había derribado al chico que estaba corriendo hacia él, sujetándolo de la pantorrilla, haciéndolo caer de espaldas contra el suelo, golpeando no sólo una, sino tres veces en su estómago, costillas y mandíbula.
Pero tan pronto como se dio la vuelta, un puñetazo en su rostro se hizo presente.
El público cuchicheo, pero Chan solo lo miró al tipo que acababa de golpearlo, parándose erguido con una mirada tan poco amigable, sin mostrar siquiera dolor por el golpe que acababan de brindarle.
Sin siquiera colocarse en posición de pelea tomó de la camisa de otro tipo, levantándolo del suelo atajándose de las patadas que le eran brindadas, aventándolo contra una de las paredes cercanas, el timbre sonó cuando ninguno de los chicos se levantó al contar 10 segundos.
El público quedó en silencio por un momento, pero aplaudiendo y apoyando a Chan después de unos segundos, aquella pelea no había durado ni tres minutos.
—¡Sí! —dijo Jeongin lo más suave que pudo para que no muchos lo escucharan.
En ese momento estaba tomando un té de manzanilla que le dio Changbin para que se calmara un poco.
Así avanzaron alrededor de diez peleas más hasta dar con los finalistas de cada equipo, de nueva cuenta se hizo un sorteo, Chan quedando en el tercer grupo en esta ocasión.
—Voy a morirme de los nervios —Jeongin mordía sus uñas, ya se había dañado tres de sus dedos de solo una mano.
—Vamos, tu chico es una bestia, acabará con todos, viste cómo tiró al segundo mejor de la academia contra la pared, su golpe ni siquiera le dolió, parecía que le hubieran acariciado el rostro en vez de darle un golpe.
—No lo entiendes —Jeongin no podía simplemente decirle "es que él es un híbrido y si se enoja demasiado puede sacar su lado animal como modo de defensa".
—Yo entiendo que tú no deberías preocuparte tanto —rellenó el vaso de Jeongin cuando vio que estaba vacío.
Pasaron casi una hora donde recién pudo tocarle el turno a Chan pues las anteriores peleas habían tardado demasiado.
Chan entró de nuevo a combate, viendo las posiciones de sus rivales y parecía que ambos iban a correr hacia él.
Cuando sonó la señal de partida se agachó un poco, subiendo algo sus manos para tenerlas más cerca.
Agarró el brazo izquierdo del chico que llegó primero a él para empujarlo contra el otro que llegó de segundo haciéndolo caer, antes de que pueda levantarse, pateó dos veces en su estómago para quitarle el aire y cerca de su oído para desestabilizarlo.
Luego, del chico que tenía el brazo agarrado lo usó como empuje para que su golpe fuera más fuerte, golpeando directamente en la boca de su estómago, soltándolo después de eso, esperando los 10 segundos para ganar, pero al segundo 7, el primer chico quiso levantarse, por lo que caminó hacia él, pegando un rodillazo en su pecho, y está vez, ninguno se volvió a levantar.
—Wow, siete minutos, tu chico no pierde el tiempo.
—Es fuerte... y no es mi chico.
—Ajá y yo no duermo con Seungmin.
—Es diferente porque... ¿Duermes con Seungmin? ¿Es porque están haciendo mantenimiento de su habitación? Desde hace unas semanas veo unas manchas en su cuello y hay un insecto que... —y se dio cuenta—. Yo... yo no hago eso con Chan, ¿sí? Solo somos amigos.
—Uy, sí, son TAAAAN buenos amigos —molesto de nueva cuenta.
—Ya, basta, Seungmin me va a regañar si seguimos charlando.
Pasó mucho tiempo hasta dar con los otros finalistas, tal vez dos horas y Jeongin ya estaba algo cansado de estar ahí.
Solo faltaban las peleas finales, habría cinco peleas de dúo, donde habrían cinco ganadores de esos cinco, Jeongin podría elegir el que crea mejor para él.
Chan esta vez quedo en la primera pelea.
Ni bien tocó el timbre, se aproximó a dar unos pasos adelante, sabía que el otro era bueno, lo vio peleando antes, además acababan de darle un golpe en el rostro, partiendo su labio, no era su primer herida ese día, pero si era la primera al primer golpe.
—¿Vienes de otro lado? —preguntó aquel chico en medio de la pelea—. Seguro el príncipe no quiere tener a alguien desconocido como tú a su lado.
—El príncipe tendrá a quien crea mejor para él —lo estrelló contra el piso, golpeando tres veces su rostro—. Y créeme que yo seré su mejor opción —se paró, sujetando al contrario de la camisa de igual manera que al primero, estrellándolo contra la pared, pero sabiendo que el otro si iba a levantarse, aprovechando que estaba en el suelo golpeó su rostro hasta que supo que no iba a pararse otra vez.
Chan salió como finalista y ese fue el momento en el que Jeongin pudo respirar otra vez
Los otros cuatro finalistas salieron dentro de poco, ya iba a atardecer, eran las 5:12 de la tarde.
Después de eso, Seungmin debía anunciar los nombres y los logros que obtuvieron ese día en las distintas pruebas.
Pero no era necesario, la sonrisa conectada de Jeongin y Chan eran la clara prueba de eso.
—Joven príncipe, tómese su tiempo para elegir a su caballero y...
—General.
Jeongin corto las palabras de Seungmin, ya que los príncipes o princesas solían tomarse un tiempo para decidir a su caballero, pero ¿qué tiempo más necesitaba si ya sabía a quién elegir?
—Ya tomé mi decisión.
Y todo el pueblo quedó en silencio, colocaron unas gradas que daban de donde estaba Jeongin hasta el ruedo donde estaban los finalistas.
Todos se arrodillaron a la par, esperando la decisión de Jeongin.
Los príncipes solían tocar la cabeza del caballero escogido, mientras las princesas solían besar la cabellera de estos.
Jeongin si había terminado de leer ese libro, pero no recordaba todo de este... otra vez, solo vio cómo su madre escogió a su caballero cuando el otro falleció por enfermedad.
Así que, acercándose al elegido, se agachó lo suficiente para sembrar un pequeño beso en la cabellera de Chan.
—¡El caballero fue elegido! —se pronunció ante eso.
—Me elegiste —Chan miró a Jeongin, aún de rodillas.
—Sí... —vio que habían estado un poco de tiempo ya en su nube y aclarando su garganta, volvió a hablar—. Ahora..., caballero mío, déjame nombrarte como mi protector real.
La espalda más afiliada, aerodinámica, letal y tallada a mano fue entregada a Jeongin.
—Bang Chan, con esta espada, yo te nombraré como mi caballero personal, para hacer honor por lo que luchaste, para darte la oportunidad de mostrarle al mundo quién eres, estando a mi lado —le sonrió—. Y con esto, te nombro mi protector —llevó la espada de un hombro a otro.
—Estaré a su servicio por el resto de mi vida, mi príncipe.
Chan tomó la espada en sus manos, colocándole en el estuche que le fue dado, sonriéndole a Jeongin sin poder frenar su sonrisa.
—Voy a protegerte y acompañarte por el resto de mi vida.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro