XIV: Avances y Cambios
1
Todavía no le he dicho nada a Aizawa, no por miedo a su reacción, es solo que la situación está complicada. Tensa.
Ha pasado un mes, sí, un mes. Y aunque la organización de los Ocho preceptos de la muerte fue desmantelada, hubieron bajas.
Eri, la niña que ocupaban para crear las balas, fue rescatada por Midoriya y Mirio, ¿el costo? La individualidad de Mirio... habían perfeccionado la bala y eso fue lo que sucedió. Tener a la niña permitió detener la producción y todo lo relacionado a ello, de ahí solo tuvieron que ir desarmando poco a poco dicha organización.
Subtraktion me dio su opinión de todo esto, diciendo que, desde lo objetivo, fueron mínimas bajas en comparación a lo que hubiera sucedido si esa producción se vendía de forma internacional; pero que desde lo más sentimental, es terrible que un chico que ni era un héroe haya tenido que ver su sueño opacado de esa forma. Y es cierto. Él se esforzó tanto por hacer de su individualidad una ventaja...para que suceda esto.
Me la paso en casa, haciendo el vago literalmente. No sé que podría hacer estando ahí, aprendí a tejer y le he hecho infinidad de gorros a Ezra, bufandas y zapatitos de bebé... pero la realidad es que tejer ya me aburrió. Estuve practicando cocina, aprendí a hacer tantas recetas internacionales como pude y me cansé de eso hace como una semana.
Ahora no sé cómo ocupar mi tiempo para que la angustia disminuya, porque quierase o no, la liga de los villanos sigue suelta.
2
Pues para matar el tiempo me puse a buscar música, me he encontrado todo tipo y pues encontré algunas de esas que a veces le daba a mi madre por escuchar; las recuerdo vagamente. Son algo viejas, de cuando no existían las individualidades. Y como a mí no me gusta escuchar a ciegas, he buscado la letra en japonés porque están en español.
Son bonitas letras.
Ezra se ha quitado de mis piernas, y al buscarlo está a los pies de Aizawa. Se ve más cansado de lo normal. Pero estoy feliz de verlo sano y salvo, luego de un mes de casi no saber de él.
—Bienvenido.
—Esa camisa es mía —Se acerca a mí, estoy recostada en el sofá con mi teléfono en reproductor aleatorio.
Es mucho más agradable el abrazo, luego de un mes de solo recibir llamadas telefónicas. Y creo que ya se dio cuenta...
—¿Has subido de peso?
No es la mejor pregunta, pero obviamente no tiene idea de nada. Cuando le dije a Rin que ya se le notaba me tiró una papa frita y dejó de comer, a punto de llorar porque, según ella, la llamé gorda... Creo que para cada una es diferente.
—No, estoy...embarazada —Me muerdo el labio inferior, Ezra ha vuelto a subirse a mis piernas y ve fijamente a Aizawa, como esperando, al igual que yo, una reacción.
...
—¿Cuánto tiempo? —Ante esa respuesta, Ezra se ha enroscado para continuar su siesta.
Yo sonrío, más tranquila. Uno siempre tiene miedo de lo que pueda ocasionar una noticia así.
—Casi dos meses...
—¿Por qué no me dijiste antes?
—La situación estaba difícil, no quería causar problemas...
—Entiendo —Recuesta su cabeza en mi hombro y cierra los ojos —. ¿Tienes alguna cita?
Asiento, la verdad fue una de las primeras cosas que hizo el doctor, me refirió a otro doctor para que me hiciera seguimiento del embarazo.
—Lunes es la primera cita.
—Hablaré con Mic —Se levanta del sofá y saca su teléfono, lo más probable es que estará aquí ese día.
3
Esa llamada a Present Mic fue la puerta que trajo a una bestia, él pasó todo el fin de semana aquí, revoloteando de un lado a otro, colmando la paciencia de Aizawa y de Ezra, que en dos ocasiones le dejó ir unos fuertes rasguños, y al hacerlo se ganó solo regaños míos porque él hasta le compró pescado.
El punto es que él está emocionado, diciendo que tendrá un sobrino. Y creo que por él es que medio mundo ya se ha enterado.
Aizawa ni se molestó en mostrarle el primer ultrasonido, algo que yo sí hice con Iwaizumi y Kenzo... respecto a Rin, no le he enseñado nada ni tampoco sabe. Más que nada porque las cosas no se han resuelto por completo, cuando nos vimos no se me notaba nada y ahora si ocupo mi ropa se puede apreciar un leve cambio.
Y eso nos tiene en el centro comercial, sufriendo entre la gente. Aizawa parece a punto de desistir a esto, aunque haya dicho que me acompañaría, a pesar de decir que podía decirle a Nagano al respecto.
—¿Qué falta?
—Zapatos —Mira mis pies. Llevo unas botas estilo militar, que en definitiva no son las indicadas. Es más, no tengo ni zapatillas para decir que usare eso.
Nos vamos hacia una tienda de zapatos, una joven nos atiende y pues yo solo quiero un par de zapatos. Con uno me basta, mientras sean negros. Y pues, pido eso, aunque no sé por qué hay personas que no aceptan de una lo que se les pide.
No quiero diversos diseños, solo unas sencillas zapatillas negras. Y cuando las consigo, al fin podemos volver a casa.
Estoy cansada, muy cansada. Solo quiero llegar a acostarme.
4
Aizawa me mandó una fotografía, parece que Present Mic les fue con la noticia a sus estudiantes y ellos hicieron algo para nosotros, algo que se quedará con él hasta el fin de semana.
Parece que, como la individualidad de una de sus estudiantes es creación, entre ellos armaron una especie de canasta de regalos. Me gustó, en especial un muñeco que es él usando su traje de héroe. Según dijo ese fue hecho a mano, también hay un muñequito de All Might, de Present Mic y del director —ese último no sé por qué— junto a mucha ropa que fácilmente puede utilizar tanto niños como niñas.
Yo quiero ver todas esas cositas, especialmente los muñecos.
Son buenos chicos, también me gustaría conocerlos.
En esa foto aparecen todos, creo que fue idea de un tercero, él no tiene una gran expresión de felicidad al estar rodeado de tus sus estudiantes.
Y pues aquí el capítulo 14, es un poco corto, pero espero sea de su agrado.
¿Qué les pareció? ¿Alguna opinión?
Gracias por leer♥
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