Un ruso se encontraba en la comodidad de su sofá mientras revisaba con desgano su celular, su pareja estaba arriba en la segunda planta bañándose, o eso creia.

El alemán se acerco a paso lento y silencioso hasta que optó por llamar su atención.

— ¡Roooaar! Soy un monstruo y te comeré –intento hacer la voz algo gruesa mientras reía como villano.

Rusia sonrió divertido por su comportamiento, observando como su pareja se acercaba haciendo gestos raros.

— Германия, ya no somos unos niños ni creas que eso servirá contra mí –dejo su celular en la mesita de centro y se cruzó de brazos.

— Eso piensas tú ¡Muajajajajaja! –se acercó como a su "presa" empezando hacerle cosquillas.

— Нет хахаха, достаточно хахаха! –pidió entre risas.

— ¡Nunca subestimes al rey de las cosquillas! –dijo mientras seguía haciendo lo anterior ignorando al ruso.

Cuando Alemania se canso paró, dejando que Rusia recuperará el aliento de tanto reír.

— Eres alguien malvado –dijo con una sonrisa después de haber recuperado el aliento.

— Aber so liebst du mich –respondió dándole un beso en el cachete.

Rusia se negó, poniendo su mano en la boca del mayor evitando que lo besara.

— Nu, toi' moleto –hizo un pequeño puchero fingiendo molestia.

— Este mounstro quiere un besito y obtendrá un besito –dijo acorralando al de ushanka en el sofá.

— ¡Nuuuuuuuuuuuuu! –intento escapar del contrario.

Al final, Alemania le dio besitos por toda la cara a Rusia, rato después, quedaron dormidos en el sofá abrazaditos.