Momento 14

Sigo preguntándome

¿Cuál fue el motivo que me llevo a la situación actual?

¿Dónde ha quedado el rechazo que tanto me caracterizaba por las presencias de bajo linaje?

¿Porque este Sesshōmaru ha permitido tal intromisión a su perfecto mundo equilibrado?

¿Es esto un maquiavélico plan para llamar tu atención de alguna u otra forma?

De no ser así, no tiene sentido.

Tus amigos han venido a verte el día de hoy, porque así lo he dispuesto, te he dado esta loca idea de que permanezcan un día en mis tierras, asegurándome de que se irán cuando las primeras luces del sol se asomen rompiendo el horizonte.

Debo admitir que me gusta esta nueva sonrisa en tu rostro, a excepción de cuando miras a Inuyasha, no puedo evitar sentir una gran e incómoda molestia. Sin embargo trato de ignorar estas nuevas emociones para que puedas disfrutar de la compañía de tu viejo grupo, además Rin también parece estar feliz, jamás la había visto tan risueña y charlatana con aquella cría de zorro cuyo nombre desconozco o no recuerdo.

Permanezco lo más alejado posible, no quisiera incomodarlos porque sé que no soy su agrado, así que me dispongo únicamente a observar cada gesto de tu rostro, desde mi posición sentado sobre mis rodillas en un tapete de tatami, ahí una pequeña mesita de madera frente a mí y otros tapetes a su alrededor.

Una de las siervas se acerca a con una bandeja de madera clara cargando sobre ella una tetera rellena de té verde y varios tazones, las coloca frente a mí para seguidamente servir un trago, simplemente le agradezco con un leve y casi imperceptible movimiento de cabeza, ella se aleja para darme privacidad.

Es en ese momento en que siento la mirada de alguien sobre mí, frunzo el ceño y mis instintos me llevan hacia la figura de aquel monje este parece percatarse de haber sido descubierto, ya que me dirige una sonrisa y baja la cabeza en señal de respeto, seguidamente lo veo ponerse de pie y caminar en mi dirección.

No parece para nada cohibido, lo cual logra molestarme un poco ya que es ese mismo valor el que lo lleva a sentarse a mi lado.

Permanezco en silencio tan solo observándolo de una manera fría y calculadora, mientras su rostro relajado pero también pensativo permanece inmóvil sobre la figura de la miko.

–"Ella es como una flor de loto"–murmura captando mi atención por completo, parece notarlo ya que instintivamente voltea el rostro y sonríe–"El loto es hermoso, pero su belleza es de alguna manera la sublimación de las turbias aguas de las que se alimenta la planta"–sus labios se mueven sin recelo, sin dudar ni un solo momento su mirada permanece sobre la mía–"El loto se alimenta del lodo, pero crece hacia la luz"–Finaliza para seguidamente regresar los ojos hacia el frente.

Se lo que trata de decir, lo sé perfectamente, eh escuchado tiempo atrás esa metáfora en la que el lodo simboliza el sufrimiento no se contrapone a la liberación de este, sino que es la fuerza primitiva detrás de lo que posteriormente será el florecimiento.

–"Solo dele tiempo"–vuelve hablar minutos después, no puedo evitar sentirme interesado mientras varias cuestiones azotan mi mente.

–"¿Por qué me dices todo esto?"

–"¿Porque este monje se pondría de este lado, siendo amigo del híbrido?"

Él sonríe y me pregunto porque estoy perdiendo el tiempo de esta forma, escuchando la habladuría de un humano.

–"Deseo lo mejor para ella y tengo la sensación de que usted también lo quiere"

Su respuesta acertada logra incomodarme, pero soy capaz de disimularlo mi rostro no ha mostrado ni una pizca de sorpresa.

–"Eres amigo de Inuyasha"

De repente su rostro se ha vuelto serio, me responde con un movimiento de cabeza, esta actitud despierta en mi gran desconfianza, mis pupilas se dilatan sobre su pequeña figura.

Él se remueve incomodo, parece dudoso de darme una respuesta.

Finalmente me teme.

–"Inuyasha perdió su oportunidad, no fue capaz de luchar por ella. Confió en que usted no será igual"

Mis labios se vuelven tan solo una línea surcando la frialdad de mi rostro, me siento expuesto, cohibido ante la verdad.

–"¿Qué te hace pensar eso?"

El no responde simplemente sonríe, no se, si se lo hace para molestarme o simplemente no tiene palabras, algo capta su atención sigo sus movimientos que me llevan hasta ti miko, caminas apresurada.

No soy plenamente consciente de mis acciones, cuando quise retractarme ya me encontraba dentro de la casa al igual que tú, en aquella cocina que tanto te gusta estar, ni si quiera notas mi presencia, estás demasiado ensimismada de puntillas sobre un taburete de madera tratando de alcanzar un recipiente sobre la alacena, sueltas un bífido de molestia tu pequeño brazo esta estirado a toda capacidad, pero ni si quiera así logras tu objetivo.

–"¿Qué es lo que tratas de alcanzar con tanto esmero?"–mi voz te sobresalta, eh logrado asustarte lo sé porque de inmediato te tambaleas perdiendo el equilibrio, cayendo hacia atrás.

Te atrapo en el aire.

Suspiras aliviada al ver que no has recibido ningún daño, pero luego tu mirada se vuelve acusadora.

–"Me has dado un susto de muerte"–susurras arrugando la frente y tus labios se rompen formando un puchero–"No vuelvas hacer eso"

–"Hn"

Me he percatado de que aun te tengo entre mis brazos, tus suaves manos aferradas a mi cuello, con mi pecho sobre el tuyo puedo sentir el palpitar de tu corazón.

Te pones nerviosa, tu corazón se acelera y carraspeas, bajando la mirada avergonzada.

–"Sé que quieres que te libere pero déjame decirte una sola cosa.

No pienso hacerlo"

Continuara...

¡Saludos hijos de Húrin!

#Como siempre si votas o comentas se agradece.

#También agradecería que me indicaran faltas ortográficas no temáis, que no me molestan las correcciones, si no todo lo contrario me ayudan a crecer.

#Próxima en actualizarse ?? lo dejo a su elección

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Namárië??