Supongamos que un día te despiertas y tu ya no eres tu.

Ahora formas parte de un ser disperso en miles de partículas que se distienden por el espacio sin mayor conexión que una sensación...

Algo late en tu interior, algo que es y no parte de ti, no al menos de aquello que solías ser

Porque no terminas de reconocer esta nueva apariencia y pensamientos como propios...

Porque lo que fue tu voz se vuelven solo vibraciones de una membrana que difícilmente logras ubicar

Porque lo que fueron tus manos y brazos tan tangibles, visuales y perceptibles ahora son solo una extensión de aquella forma corpórea que no llegas a comprender en que momento empieza...

Si, y digo momento porque no eres una existencia física calculable, no, mejor dicho ya no eres, son

Porque SON es la concepción más cercana a la entidad de la formas parte, aun si desconoces exactamente como...

Supongamos que un día te despiertas.