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Dieciséis

—No te entiendo,sé más claro.

—Debemos unirnos para hacer un bien común que resuelva un problema  mayor,sé que tú y tus amigos están investigando sobre los asesinatos que han ocurrido,aunque aún no sé cuanto sepan sobre ello,pero sólo su disposición y su habilidades bastan para que sean aptos a la causa y yo los puedo ayudar.

—¿De qué manera?

—Sé cosas que les pueda servir de ayuda,de alguna manera yo sé lo que va a pasar en un futuro.

—Eso es lo que me preocupa,que sabes demasiado ¿Quién me garantiza que no eres uno de ellos?

Le exijo respuestas,a pesar de que voy a ceder haga lo que haga,pero tal vez si me mantengo firme descubra lo que esconde.

—Nada te lo garantiza.

Definitivamente no me esperaba eso.

—¿Entonces?

—Puedo mostrarte algo,que supe hace poco,pero me tienes que ayudar y sobre todo confiar.

—¿Confiar en ti? Lo hice,y luego ¿como me trataste? Como si no valiera nada ¿y que pasó con lo que me hiciste jurar en el bosque? ¿qué pasó con eso?—le reclamo.

Él se acerca y yo doy un paso atrás,el miedo a que vuelva a gritar cosas hirientes puede más.

Él da un paso más hacia delante.

—No me puedo aferrar a ti Aghata,las personas como yo,no pueden aferrarse a ninguna persona.

—¿Por qué?—la pregunta sale como una súplica.

Él levanta una mano hacia mí,como si quisiera acariciarme la mejilla,yo doy un paso hacia delante invitando a que lo haga.

—Porque su perdición es tratar de salvarlas—mumura con pesar.

—Aún no entiendo lo que quieres decir.

—Ya lo entenderás algún día,ahora...¿me dejarás mostrarte lo que sé?

Achino los ojos y lo observo,sus facciones están relajadas,una de sus cualidades nos es ser un mentiroso,al menos que yo sepa hasta ahora,pero es que últimamente Marcos es un ser que desconozco completamente,no sé sus próximos pasos,es como caminar a ciegas con él a pesar de ello respondo:

—Ok

—Siguéme—dice antes de salir del espacio en el que nos encontrábamos,cierra la puerta del gimnasio con llave para luego guardarla en el bolsillo de su pantalón.

Camina por el pasillo sin esperar a que yo me adpate a su paso,es como si supiera que aunque vaya delante yo siempre lo estoy siguiendo sin importar qué.

Salimos del colegio y nos dirigimos al centro de la ciudad,pasamos el parque,y eso me recuerda el día que estuvo en esa casa,en el momento que justo pasamos por allí me atrevo a preguntarle.

Doy pasos apresurados hasta quedar justo al lado de él.

—¿Qué es eso?

Marcos observa el letrero con tonos azul eléctrico.

—Es una vidente.

—¿Vidente?

—Si,esas personas que pueden descubrir cosas que no se basan en la razón o procedimientos científicos.En este caso ella es una vidente táctil, de modo que necesita estar en contacto con alguna objeto para obtener información.

Las cartas y la bola de cristal se materializan en mi mente.

—¿También puedes comprar cosas allí?

—¿Por qué la pregunta?

—Curiosidad

—La curiosidad mató al gato,recuérdalo.

—Odio ese dicho.

—Pero sí—continúa—allí puedes adquirir libros respecto al tema y basta de preguntas.

Me advierte y camino a su lado en silencio,entonces él lo que compró fue ¿libros?

¿Para qué o qué?

Llegamos al pie de la escaleras de la biblioteca local.Esto cada vez me resulta más descabellado.

Entramos y le entrega su  identificación a una chica.

—¿Traes tu identificación?—me pregunta.

Se la entrega y después de colgarnos algo en el cuello,podemos pasar.

Pasamos entre los laberintos de estanterías,hasta llegar a un lugar bastante alejado que tiene un gran libro dentro de un cristal,me fijo en las esquinas y hay cámaras que apuntan directamente a ese punto por si existe algún intento de robo.

—Eso es lo que te quería mostrar—me dice Marcos.

—¿Un libro?

Creo que está un poco loco.

—Dentro del libro está el cuchillo,si logramos sacarlo,podríamos entregarlo a la policía y ver si hay huellas.

—¿Y por qué no le decimos a la policía directamente?—cuestiono.

—No sabemos si hay infiltrados allí,pero si conseguimos el objeto podemos llevarlo a alguien de confianza que tengo dentro de la rama.

—¿Y las cámaras?

—Eso es fácil,puedo hackearlas,ves el conducto de ventilación arriba.

Miro hacia arriba con disimulo.

—Si.

—Podemos entrar por allí fácilmente,justo el callejón que queda la costado hay uno que nos dirige justo a ese.

—Lo tienes todo planeado ¿cierto? Entonces ¿para qué nos necesitas?

—No puedo hacerlo solo,y ustedes son muchos,necesito que reunas a tus amigos para hacerlo esta noche.

—¿Esta noche? ¿Tan pronto?

—Mientras más rápido mejor.

Toma un libro de la estantería a su lado y nos dirigimos a la salida.

Se acerca a la chica de la recepción y le entrega el libro.

—Me llevaré este,le entrega nuevamente su identificación y la mujer hace los trámites pertinentes.

Luego bajamos las escaleras.

—Dos y media de la mañana,en el callejón de al lado,no falten—dice antes de marcharse en dirección contraria a mi casa.

***

Tiran piedrecitas a mi ventana.

Me levanto la capota de mi abrigo lila y me asomo a la ventana.

Liam está en el jardín,con un gorro negro que le cubre el cabello.

—Ya baja—me apura.

Me alejo y salgo de mi habitación,bajando las escaleras y escabullendome por la puerta de la cocina,dando la vuelta hasta llegar al jardín.

Coloco mis manos en los bolsillos de atrás de mis pantalones,es una mala costumbre que he adquirido cada vez que me los pongo,me acerco a Liam.

—¿Y los demás?

—Están afuera...

Me sobresalto al escuchar un ruido y me acerco más a Liam.

—¿Qué fue eso?

Liam saca su celular y alumbra con la linterna el césped,luego un poco más allá,donde está el gato de mi hermano en un rincón.

—Juro que ese gato va a matarme de un disgusto—digo murmurando.

—¿Trajiste el cuaderno?—pregunta el castaño.

—Sí,aquí está—abro el abrigo dejando a la vista el cuaderno y se lo entrego.

Liam piensa que es buena idea que lo rotemos entre él y yo,por si alguien piensa en robarlo,hasta que podamos leerlo completamente.

Él lo guarda en la mochila que se cuelga en la espalda y luego salimos.

Nos encontramos con Sandra y Logan.

—Hola—los saludo—¿cómo estás?

—Pues...confuso—duda—aún no entiendo que hacemos a estas horas en la calle.

—Vamos a por pistas.

—¿De qué?

—Del asesino

—Bien...¿se creen la pandilla de Scobby Doo o algo por el estilo?

—Muy gracioso—Liam emite unas carcajadas fingidas mientras le palmea la espalda con fuerza—Te salvamos el culo de paso.

—Ok gente,estamos en Pades—hace un gran círculo con sus manos para darle más énfasis—fuera del círculo de peligro,el asesino no está.

Sandra revienta un globo que hizo con la goma de mascar ganándose nuestra atención.

—Ha estado así desde que abrió los ojos por la mañana,tuve que quedarme a vigilarlo y por eso no pude ir al colegio,insistía en salir a conocer los alrededores,está en fase de negación.

—Tal vez Marcos lo haga recapacitar—le digo.

—Muy de acuerdo,ese tío de miedo—confiesa Sandra.

—No hables como si no estuviera—le recrimina a Sandra.

—Logan,cierra el pico y camina—lo reprende ella.

Llegamos al callejón que queda al costado de la biblioteca,tiene muy mal aspecto,grandes bolsas de basura adornan el lugar y una gran peste y podredumbre no rodean.

—Joder que feo huele—se queja Liam tapándose la nariz.

Y todos los seguimos en su acción.

—¿Dónde está Marcos? Se supone que el siempre cumple con todo,ya debería se estar aquí.

—Y estoy aquí—su figura sale detrás de un contenedor.

Alumbra el rostro de Liam con la linterna y todos lanzamos un grito despavorido.

—Shhh....pueden dejar de ser tan obvios—nos acribilla con los ojos.

—¿Son amigos de ese?—pregunta Logan con confusión.

Marcos le da una sonrisa de lado.

—Algo así ¿y qué haces en Pades?

—Por tu culpa tuve que salir del pueblo,no te cansas de inventar mentiras.

—¿Qué?—dice Marcos sorprendido—Te he advertido de algo que va a pasar,y deberías estar agradecido por ese jodido favor que te hago.

—Oohh perdón por no agradecerte que digas frente a una multitud de personas que voy a morir.

—Chicos ya paren—intervengo.

Pero ellos me ignoran y Logan se acerca aún más a Marcos,sus ojos estan turbios,en serio está molesto.

—Si tanto sabes,di de una jodida vez como llegó esa información a ti y en ese entonces sí me harías un jodido favor.

—Pensarás que estoy loco.

—Eso me suena a excusa.

—Piensa lo que quieras.

—Eso hago.

Sandra interviene.

—Chicos pongámonos a la tarea que vinimos a realizar y dejemos de discusiones.Logan todos intentamos ayudar y eso hace Marcos...o eso creo.

Marcos saca una laptop y una tablet ignorando todos y empieza a teclear algo con ellas,esperamos una media hora,contando las grietas de las paredes en silencio mientras Marcos hace su magia.

—Listo—su mirada pasea a cada uno de nosotros—Una chica y un chico tienen que venir conmigo,otros dos tienen quedarse aquí vigilando las cámaras,si el vigilante se mueve de sus sitio llaman a cualquiera de nosotros.

—Yo voy—hablo.

—Igual yo—habla Liam.

Sandra y Logan se quedan,por tanto Marcos  le entrega de mala gana la laptop a Logan y la tablet a Sandra.

La tensión aún se puede palpar en el aire por lo que decido actuar de una vez.

—¿Y bien? ¿Dónde está la rendija?

—Allí—Liam apunta hacia la pared a unos metros por encima de mi cabeza.

Empuja el bote de basura de modo que quede debajo para poder trepar,Marcos se coloca una soga a su hombro.

—Agatha,debes subir primero—habla.

Trago grueso y con la ayuda de Liam trepo,la abertura queda más o menos a la la altura de mis pechos y no es bastante grande como para movernos con facilidad,bueno pero supongo que podamos movernos aunque pareceremos sardinas enlatadas.

Dejo la tapa a un lado y un profundo hoyo queda a la vista,la oscuridad reina en él y no puedo imaginar los animales que habiten allí.

"Debo ser valiente"

Respiro hondo y me impulso con los codos comenzando a internarme y arrastrarme con las manos,el túnel me traga por completo y el espacio cerrado empieza a ser asfixiante.

Las partículas de polvo hacen que me cosquillee la nariz,sigo impulsandome,a mi espalda me sigue Marcos y más atrás Liam.

El rubio me alcanza una pequeña linterna que facilita la tarea de adentrarse a la "boca del lobo"

—Derecha—Me guía Marcos.

—¿No era mejor buscar una manera de ingresar por la entrada?—pregunto.

—El vigilante no se mueve de la puerta,sólo hace rondas cada tres horas y es tedioso esperar cuando tenemos otra vía.

—En resumen tu rubio quiso experimentar lo que se sentía estar aquí dentro igual que en las pelis—se aqueja Liam.

—Me caes como una patada en el ano—confiesa Marcos.

¿Ano?

¿Quién diablos dice esa frase?

—No era de extrañar,nadie es lo suficientemente bueno para andar con su majestad,no se junta con la plebe.

—Tengo una lista muy reducida de amistades íntimas.

—¿Y dentro de esa lista quien está?

—Puedo jurar que tu nombre no figura en ella—se burla—eso es lo único que tienes que saber.

—Pelele de mierd...—se calla de golpe—algo con patas me rozó la pierna.

—¡¿Qué?!—chillo dejando de arrastrarme.

—Creo que es una rata—dice Marcos.

Miro hacia atrás y unos ojos rojos vienen caminando hacia mí.

Cierro fuerte los ojos.

—¡Es una rata!

—No vayas a gritar que debemos estar encima de el vigilante.

Pasa por encima de pie y me roza la mano.

No puedo evitar soltar un grito cuando siento sus patas recorriendo mi piel.

Pero es acallado con la mano de Marcos.

El corazón me late a mil y las mariposas aparecen revoloteando en mi estómago,su tacto suave encima de mi boca  y olor embriagante me hipnotizan,lo que dura segundos me parecen horas.

Los pequeños momentos pasados aparecen ante mis ojos,queriendo recuperarlos con más ansias,quiero que me mire como yo lo miro a él.

Quiero tenerlo sólo para mí y ser la primera persona de esa jodida lista.





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