Aquel vampiro había logrado escapar, pese a que se encontraba rodeado por tres vampiros y varios hombres y mujer lobo.

Sin embargo, cuando estaba siendo acorralado aparecieron dos vampiras, que al parecer eran gemelas. Ambas con el cabello como la nieve, piel pálida y ojos de color grises.

Ellas aparecieron y comenzaron a pelear con el resto. Mientras ellas peleaban, él aprovechó de huir.

Aunque Aiden logró dejarlo herido.

De eso hace tres días.

Ahora me encontraba en la residencia de los Relish.

Cuando mi turno terminó en la tienda, esta vez no me estaba esperando Aiden, sino que sorpresivamente la madre de Aiden, Clementine.

Me había llevado a su casa, algo que se me hizo extraño ya que la primera vez que nos vimos fue algo bochornosa ya que en medio de una discusión declare mis sentimientos hacia su hijo.

Al igual que la casa de los Collins, el hogar de Aiden gritaba por todos lados ostentosidad.

La única diferencia es que el hogar de la segunda familia vampírica se encontraba en la parte más rica del pueblo.

Al igual que la mayoría de los edificios en este pueblo, la casa estaba construida con una arquitectura antigua.

Clemencia me guía hasta la segunda planta, para ser exactos a una de las habitaciones.

No comprendía qué hacía en este sitio, acaso planeaba prohibirme salir con su hijo o algo por el estilo.

Pero grande fue sorpresa encontrarme a varias maquillistas profesionales en el lugar. En una de las sillas se encontraba una joven hermosa de cabellos rojos como la sangre y ojos color esmeralda. Inmediatamente supe que era la hermana de Aiden.

Todo el mundo me había hablado de la hija de los Relish y todos coincidían en lo mismo, que tenía una belleza sin igual.

Su belleza era una ventaja de ser inmortal ya que con sus aspectos hermosos y etéreos la cual atraía con mayor facilidad a sus presas.

Aunque estoy segura que como mortal también poseía una belleza sin igual.

—¿Qué hago aquí'

—vamos a tener una tarde de chicas aprovechando que será el baile—responde entusiasmada

Había olvidado el baile de la fundación. Estaba tan enfocada en averiguar qué era lo que había sucedido con mi hermana que se me había olvidado por completo aquella fecha importante para el pueblo.

—pensé que no se realizaría.

—planeábamos cancelarla, sin embargo, al final decidimos continuar con el evento para animar a los habitantes del pueblo. Mucha jovencitas esperan este día para bailar junto a sus parejas o las personas que les gusta—me guiña el ojo

Clementine me lleva hasta una de las sillas y les pide a las maquillistas que me comience a arreglar para la fiesta.

—Esperen, no tengo que ponerme para la fiesta.

Ni siquiera tuve tiempo para ir a comprar uno en alguna tienda de segunda mano o ir a casa de Ferya para que me prestara uno.

—tranquila ya tengo todo solucionado—responde

No tenía un buen presentimiento sobre esto, aun así no dije nada.

Scarlett se me quedó observando unos breves segundos. Su mirada puesta en mi persona me hizo sentir cohibida, seguro me estaba juzgando. Para ella era una simple humana.

—mi hermano me hablo de ti—habla

Hasta su voz se escuchaba armoniosa, malditos vampiros y su falsa perfección.

—tu hermano también me hablo de ti un par de veces—respondo

Ella no responde nada por unos segundos los cuales se me hacen eternos.

—Vamos Scarlett no seas tímida, dile que estabas entusiasmada por conocerla.

—¡mamá!

—te conozco se que tiene curiosidad de saber sobre ella.

—es que no puedo creer que mi hermano está enamorado.

Casi escupo mi jugo que segundos atrás me dio una de las empleadas de la residencia.

—¿enamorado? No creo, seguro solo le gusto.

—por supuesto que no, Aiden nunca menciona a las chicas con las que sale o lo hemos visto salir con una chica. Y de repente me llama para contarme que está cortejando una chica.

Esta vez no escupo por poco mi bebida sino que me ahogo con ella al escuchar que está intentando conquistar.

—cuidado querida—dice Clementine mientras me da palmaditas en la espalda

—¿estás bien?—pregunta Scarlett

—si estoy bien, solo que me tomó por sorpresa eso—respondo

—a nosotros igual, como dijo mi hija, él es muy reservado en sus relaciones y más si se trata de decir sus cosas, ya sabes a lo que me refiero—dice en voz baja

—bueno no creo que vaya por el mundo diciendo que es un vampiro—susurró

Ambas logran escuchar lo que dije a pesar de que lo dije lo más bajo posible.

—cierto, pero a nadie de los nuestros le había dicho y a ti te lo dijo.

—bueno es que no tenía opción.

Aunque pudo mentirme y decirme que era un ser inmortal en lugar de decirme que era un puro como llaman a los vampiros nacidos de vampiros.

Luego de estar como dos horas arreglando mi cabello y maquillándome, llegó la parte más difícil ya que dudaba que el vestido que me prestaran me quedará, no obstante, estaba hecho a mi medida. El vestido era de color negro con encaje que comenzaba en la parte de arriba del vestido hasta la parte superior de la falda del vestido.

—te ves preciosa—mencionan ambas

—gracias—respondo de manera tímida

Me llevan a una de las habitaciones en donde planean reunir con Aiden.

Por el pasillo escuchó como discutía con su madre.

—¿Qué es lo que planeas? Cuando fui por Nora a su trabajo me dijeron que fuiste por ella y ahora me dices que tienen una sorpresa para mi.

—solo ve a la sala para que veas tu sorpresa.

—se es alguna de tus bromas...

Se queda callado al verme.

—Buenas noches jeune monsieur tomó el costado de la falda de mi vestido para hacer una reverencia.

—traje a Nora para tener una tarde de chicas—responde

Aiden se acerca para susurrarme algo.

—¿estás bien?

—te escuche jovencito.

—si estoy bien—respondo entre risas—por cierto te ves bien en ese traje.

Aiden vestía con un traje con un estilo vtange de color negro, al igual que me vestido, en su manos tenía unos guantes de piel del color de traje y un saco largo del mismo color.

Enserio a este hombre le quedaba tan bien el color negro.

Escuchamos el clic de un celular. Ambos miramos en dirección en donde se produjo el sonido.

Nos habíamos olvidado de la presencia de Clemnetine e incluso ahora se encontraba acompañada de su esposo.

—¿no se ven adorables? Mi pequeño cómo ha crecido, primero andaba corriendo por los pasillos con su traje de marinerito y ahora está acudiendo al baile con la chica que le gusta.

—¡madre!

Comienzo a reírme por la actitud de Aiden con su madre.

—Yo pagaría por ver una foto de Aiden con ese trajecito—bromeo

—¡Nora!

—Te daré una después querida.

Estuvimos conversando un rato con sus padres hasta que se adelantaron al baile, nosotros esperaríamos a Scarlett y a su hermano que acaba de llegar cuando nos estaban arreglando.

Luego de media hora de espera nos fuimos a la alcaldía en donde se llevaría a cabo el baile.

Durante todo el trayecto estuve conversando con Derek, el medio hermano de Aiden. Al igual que el resto de la familia mencionó que era la primera vez que les presentaba a una chica.

Al parecer les había agradado a toda su familia.

Al llegar me encuentro con varios autos en el estacionamiento.

Aiden coloca su brazo frente a mí para que enganché mi brazo con el suyo. Comenzamos a caminar hasta la entrada.

Tal como sucedía ante la presencia del ahora ser inmortal, los presentes pusieron sus miradas en nosotros.

Comenzamos a caminar entre la multitud.

Noto entre los presentes a algunos vampiros, lo se por que he visto por un par de segundos su ojos color rojo.

Llegamos hasta donde se encuentra un hombre de mediana edad el cual es el alcalde del pueblo, su nombre es Noah.

Pensaba que sería un vampiro como la mayoría de los presentes.

También había algunos humanos mezclados en el lugar. Me tope a las amigas de mi hermana entre la multitud, las cuales iban acompañadas con sus respectivas parejas, también me encontré con Saori y sus padres.

Me acerco a mi amiga para saludarla.

—vi que llegaste con Aiden y sus hermanos, si Ferya te viera haría un escándalo. Por cierto me encanto tu vestido.

—gracias me lo presto su hermana—miento

Esperaba que fuera un préstamo porque estoy segura de que este vestido costaba una fortuna.

Platiqué con ella por un rato hasta que Aiden vino por mí.

—el alcalde quiere hablar contigo.

—pero ya converse con él—respondo

—Ese humano solo es un señuelo, el verdadero alcalde se encuentra en la segunda planta.

Aquello me tomó por sorpresa.

—¿no quieres que lo conozca?

—honestamente no, no se cuales son sus intenciones contigo, además sabe lo de tu sangre especial.

—¿Crees que quiera alimentarse con mi sangre?

—No lo sé, a pesar de que está prohibido alimentar directamente de un humano, él tiene la excepción.

—¿Qué es lo que le hace especial?

—él es el primer vampiro convertido, el que fue maldecido—responde

Estoy sorprendida por su respuesta, no esperaba que el primer vampiro en la faz de la tierra se encontrara en el pueblo y mucho menos que quisiera hablar conmigo.

Nos subimos al elevador, Aiden aprieta un botón que dirige al piso cuatro. El elevador comienza a subir hasta llegar a la última planta.

El pasillo se encuentra desolador e incluso me atrevo a decir que parece una bodega en donde guardan los adornos de navidad.

—te equivocaste de piso.

—no es el correcto, para los humanos es un lugar para almacenar decoraciones, pero en el fondo se encuentra el verdadero alcalde o como nosotros lo llamamos nuestro rey.

Comenzamos a caminar por el lugar que estaba en penumbras y en el que teníamos que esquivar algunos objetos que fueron guardando en el lugar con el paso de los años, hasta llegar a una puerta que tenía una cartel que decía: alto voltaje.

Aiden da unos golpecitos a la desgastada puerta.

—pasen.

Él abre la puerta para dejarme pasar. Una vez que entro el me sigue.

Noto que de los dos lados se encuentran varios vampiros que no llegó a reconocer y del otro lado los Collins y la familia de Aiden. En la parte de en medio se encuentra un escritorio de caoba y una silla de cuero de color negro en la cual esta un joven de entre doce y catorce años sentado.

¿acaso él es el primer vampiro?

Ojos color rojos como la sangre, cabello negro, piel blanca y nariz puntiaguda. Vestía un traje negro, una camisa de rallas blanca, una corbata del mismo color de su traje y una gargantilla con un dije de cruz, algo irónico ya que no solo en se creía que los vampiros les aterraba los crucifijos sino por que el que lo maldijo fue un ente divino.

—buenas noches, soy Nora Galindo, es un placer conocerlo—me presentó mientras hago una reverencia

—Buenas noches señorita, de igual forma me presento soy George Murray, adelante siéntese.

Señala una silla de caoba con detalles dorados que se encuentra frente a él.

Hago lo que me pide a pesar de que no estaba segura.

Al sentarme me quedé en medio de todos los vampiros.

Observó de reojo como Aiden se coloca a lado de sus padres.

—tú igual siéntate en la silla a su lado—ordena

Corre a donde me encuentro para luego sentarse a mi lado.

El vampiro se levanta de su asiento y se acerca a nosotros.

—por donde empiezo—murmura

Mira ambos para luego enfocar su mirada en mi.

Se acerca a mi para luego hincar frente a mi, dicha acción sorprende a los presentes.

—jamás en mi miles de años de vida imagine conocer a un descendiente de un vampiro puro y una bruja.

Toma mi mano y besa mi dorso.

—Es un honor conocerla.

No se que responder, estaba demasiado nerviosa.

—además no sólo presencié una vez a un descendiente de un vampiro puro si no dos veces.

Esta vez mira a Aiden el cual se tensa al saber que ha sido descubierto.

—acaso creían que no me daría cuenta, siempre lo supe, solo que fingí no estar al tanto de tu existencia. Pero he vivido por años para no notar que eres un puro. Tranquilos, no tomaré represalias.

—su majestad si me permite, no quiero a mi hijo sea parte de una guerra contra humanos—menciona Herbert

—no te preocupes, no pretendo derramar una sola gota de sangre humana. Aunque sí debo admitir que deseo deshacerme de esos cazadores.

Se levanta para regresar a su asiento.

—Escuche tu propuesta de alianza con los lobos.

—si señor, acudí a ellos para proteger al pueblo de aquellos vampiros forasteros.

—se sincera conmigo, se que quieres darle caza a ese vampiro para vengar la muerte de tu hermana. También estoy a tanto de eso y quiero acabar personalmente con ese vampiro me ha dado varios problemas los últimos doscientos años.

Al parecer en otros territorios de vampiros les ha dado problemas.

—Necesito deshacerme de él ya que planea hacer un ejército de vampiros para acabar con los humanos, principalmente los cazadores.

—pensé que usted estaría de acuerdo con su plan—comentó

—podría pero estar tantos años en la tierra me he acostumbrado a ellos e incluso me atrevo a decir que envidio su vida tan corta.

Noto un deje de tristeza en su ojos.

No entiendo muy bien la razón por la cual fue maldecido, pero se nota que está arrepentido por lo que hizo en el pasado.

—Pero no vengo a hablar de mi vida privada. Sino para acabar con aquel vampiro forastero, así que hice mandar a traer a más invitados a nuestra velada.

La puerta se abre dejando ver al líder de la manada de los licántropos junto a otros miembros de su consejo y por último Acher y un malhumorado Logan.

—bien ahora que estamos reunidos, empecemos la reunión.