Capítulo XIX: Cuenta Regresiva (Parte II)
- ¿Así que decidieron salir del agujero en el que se escondían, ratas inmundas?.- Preguntó el "Gran Sabio" hacia los presentes.
- Uhhh, cuidado, Franky, es el primo malvado de Griffin, el Hombre Invisible de "Hotel Transilvania".- Se burló Steve del oponente.
- No le llegas ni a los talones al buen Griffin. Ese sí es un buen amigo.- Le reprochó Franky, cosa que ambos se rieron del enemigo, quien lanzó unos rayos que fueron repelidos por "Planet Waves" y "Kraft Work".
Los ojos de aquel enemigo brillaron como si fueran Oro puro, un aura de pura maldad recorría su ser, mientras que las "Hermanas de la Persecución" yacían tiradas contra el piso, siendo Karmesite la que se levantó con dificultad, apretando los dientes por el dolor que sentía y luego miró a sus hermanas caídas.
- ¿Por qué...Gran Sabio? ¿Por qué nos hacen esto?.- Preguntó la muchacha de cabello negro-azulado esponjoso.- ¿Por qué nos atacaron?.-
- ¿Y todavía lo preguntas?.- Le espetó el encapuchado con frialdad.- Mírense, no pudieron ni hacer frente a un asalto de este tipo. Me dan vergüenza, por algo el Comandante Rubeus siempre las vio como sustituibles.
- ¡Eres un desgraciado, nunca hay que hacerle a tu propia gente!.- Gritó Makoto con rabia al oír esas palabras tan desagradables, cosa que no le interesó al rival, quien se encogió de hombros.
- Las guerras son así, Sailor Jupiter. No puedes evitar tener bajas, pero tampoco puedes contar con gente que cumpla con su papel, para eso existe el término "Carne de Cañón".- Sostuvo el villano, mientras que con sus manos esqueléticas tomaba a Karmesite de la cabeza.- A estas mocosas les dimos poder para que cumplieran con su misión y lo hicieron muy bien; pero, siempre hay un pero en todo "Contrato", cuando llega el final del mismo, hay que darles de baja.- En aquel momento, soltó a la muchacha y volvió a caer al piso.
- ¡Ya basta, déjalas, ya están derrotadas!.- Le ordenó Minako Aino, cosa que eso no podía permitirse.
- Jejeje, ya tanto insisten con seguir "jugando", voy a darles algo más que una oportunidad.- Señaló el "Gran Sabio" y extendió sus manos al aire. El lugar se volvió oscuro, todo parecía haber sido engullido y quedaba en una especie de pasillo extenso y sin ningún tipo de iluminación. Acto seguido, como si se tratara de una tormenta que está por desatar todo su potencial sobre un área urbana, una serie de descargas de "Energía Maligna" cayeron sobre las "Hermanas de la Persecución", llevando a que Karmesite y las suyas se fueran poniendo de pie, gritando por el dolor hasta que todo cesó.- Ahora, cumplan con su cometido, terminen con ellas y sus Aliados.
- ¡Cobarde!.- Gritó Rei Hino, quien fue a la carga contra el "Gran Sabio" pero Karmesite la agarró con fuerza del cuello y la tiró contra sus amigas.
- A la flauta, hoy nos despertamos de mal humor, che.- Bromeó Santiago.- Sammy, quedate cerca mío, que esto se va a poner muy feo.- Pidió el argentino a la albina, quien vio como Berjerite iba contra él.
- ¡SANTI!.- Gritó Samantha y le tiró una patada a la oponente, quien lo resistió y redobló sus esfuerzos para lastimar a la novia de Santiago.- ¡Agh, suéltame, hija de puta!.-
- Nunca, Uzaki chan albina.- Respondió Berjerite, pero cuando estaba por dar el golpe mortal, su brazo quedó inmovilizado por una extraña fuerza, una que parecía ser sobrenatural.- ¿Qué...?.
No tuvo tiempo para nada, los ojos de Santiago estaban de un color rojo como la sangre y en cualquier momento pasarían al negro, por lo que Samantha se alegró de verlo en acción.
- Soltá a mi novia o te juro que lo único que van a recoger de vos serán tus cenizas con una esponja.- Le advirtió con una voz que parecía ser de ultratumba.
- ¿Tanto la quieres?.- Se burló Berjerite pero le resultó imposible moverse.
- Un movimiento más y terminas como el ex de ella, así que anda bajando los humos.- Dejó su aviso el argentino, pero la peli celeste-blanquecina no se iba a quedar de brazos cruzados y como una cobarde, sino de que empleó todo su poder para atacarlos a ambos.
Berjerite ejerció una gran presión para quitarse de encima ese agarre, pero cuanto más poder efectuaba, más le consumía y eso estaba por provocar un feroz inconveniente.
- Dale, te estoy esperando, ¡ataca!.- Le ordenó Santiago pero no hubo resultado alguno.
La peli celeste-blanquecina no se iba a dejar intimidar y reunió una gran cantidad de poder para lanzarlo contra Santiago y Samantha. Mientras tanto, los "Usuarios Stand del Pasado y del Presente" se hallaban con los "StarForce" para contener los ataques que lanzaba el "Gran Sabio" hacia ellos, siendo esto un verdadero problema.
- Ah, ¿así que los "StarForce" han venido hasta aquí para salvar al "Príncipe Lunar" y a Lumix?.- Preguntó con burla el oponente.
- Así es y no descansaremos hasta que hallemos la cura para salvarla.- Juró Kazuya y atacó al rival.
- ¡Ja!. Si tanto la quieren, ésta se halla en alguna parte del Cuartel General en el "Planeta Némesis".- Les espetó, mientras que Kazumi y Rin se le lanzaban encima.
- ¡No nos pongas a prueba, infeliz!.- Exclamó la hermana menor de Kazuya.- ¡Danos la cura, ahora o tendremos que tomar medidas más drásticas!.-
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En ese momento, Dimitri y Luna cargaron contra Petzite, la cual estaba renovada y con un poder mucho más letal, disparando sus rayos a más no poder, por lo que llevó a que la castaña se tomara de las manos de su novio y como si se tratara de un baile, ambos evadieron cada impacto que ella mandaba. A pocos metros, los dos dieron contra la misma, derribándola justo a tiempo, mientras que, desde la "Sala de Control" del Cuartel General "Némesis", el Comandante Rubeus no parecía, en lo absoluto, perdido o furioso por las derrotas que estaba teniendo, ya que podía ver cómo los "Medidores de Energía Maligna" iban aumentando a cada segundo que pasaba, revelando lo que tendría reservado para sus enemigos.
Por su parte, Endymion y Diamante habían logrado llegar hasta la "Sala Privada", en donde Serena se hallaba prisionera, justo antes de que las Fuerzas del "Clan" se metieran para llevarse de allí a la "Neo-Reina".
- Serena, Serena, soy yo, Darien, despierta, Amor Mío, despierta.- Le llamaba Endymion a la muchacha pero ésta no parecía responder ante su voz, ya que seguía inconsciente.- ¡Serena, Mi Reina, abre los ojos, por favor!.- Rogó el peli negro cuando sintió sus manos frías.
- No...- Oyó la debilitada voz del Príncipe Diamante, quien observaba, con horror en sus ojos, lo que estaba ocurriendo.
El "Gran Sabio" lanzó una helada risa que se hizo sentir por todo el lugar, llamando la atención de todos los presentes y de ahí, abriéndose camino hacia el Cuartel General del "Clan", éste dejó solas a las "Hermanas de la Persecución".
- ¡Oye, vuelve aquí!.- Bramó Sailor Mars, quien dejó fuera de combate a Kalaberite y de ahí fue tras el oponente.
De golpe, como si tratara de algún impacto provocado por un misil, un sacudón llevó a que se cayeran al piso, las "Hermanas de la Persecución" también quedaron inconscientes, mientras que Karmesite, la última en permanecer de pie se dirigió hacia ellas, con su mano izquierda extendida, como si intentaran tomarla para salvarla de un destino sumamente terrible.
- Por favor...derroten al "Clan Black Moon"...nos utilizaron...al igual que las "Sailor Animates"...no los dejen ni respirar.- Rogó la peli negra-azulada esponjosa, quien caía inconsciente contra el piso.
De golpe, una vez derrotadas las villanas, algo pasó, todas las luces de la "Nave Central" quedaron apagadas, iluminando un camino que conducía hacia el "Planeta Némesis", el lugar en el que se hallaban los cautivos.
- ¿Vamos a cruzar hacia allá?. Deberemos ir con cuidado.- Sugirió Dudley y estaba en lo cierto
- Sí, no sabemos qué clase de trucos nos estará esperando ese maldito del "Gran Sabio".- Aportó Edwin, mientras que comenzaron con dar los primeros pasos hacia el objetivo.
Como un Ejército que marcha hacia el frente, aquel inmenso grupo pudo distinguir una especie de "Portal" que se abría ante los ojos de los presentes. Destilaba unas Energías violeta que se entrelazaban y bailaban hasta que desaparecían. Luego de ello, la imagen de aquel siniestro Planeta daban rienda suelta a lo que podría haber allí mismo. Las primeras en cruzarlo fueron las "Sailor Scouts", sus Reyes estaban en peligro y lo mismo el Futuro de toda "Tokyo de Cristal". Acto seguido fueron las Loud y sus amigos, dando pasos, metiéndose dentro de aquel "Portal" y de ahí terminaban en una especie de "Ciudad" totalmente devastada, el aire frío, gélido como si fuera el Polo Norte o el Sur de Argentina se hacían sentir a flor de piel, moviendo y haciendo desaparecer columnas finas de polvo. Zork Hush se arrodilló, tomó un puñado de tierra y lo puso sobre su computador portátil que llevaba en su muñeca derecha para analizar la composición y el estado de su materia.
- ¿Esto es Némesis?.- Preguntó Alexander con asombro.
- Así es.- Oyó la voz de Rei Hino.- Estuvimos aquí, hace mucho tiempo, capturadas por el "Clan Black Moon".- Contó la muchacha de largos cabellos negros.
- Pero ustedes saben cómo vencerlos, ¿no?.- Quiso saber Lily.- ¿Lo hay?.
Era una buen pregunta, ya que ante ellos estaba el Cuartel General del enemigo, aquel sitio que les estaba esperando y que sería su última prueba. Si querían salvar a Lincoln, los integrantes del "Clan" estarían al acecho, listos para el ataque, pero no se los podía ver. ¿Acaso estaban ocultos?. La rubia dio unos pasos al frente pero se detuvo cuando sintió una horrible punzada, algo que parecía como un grito de ayuda, uno que se estaba haciendo oír por todo el lugar, agarrándose el pecho y cayendo de rodillas al piso.
- Dios...era Lincoln, pude sentirlo.- Dijo la muchacha.
- Lincoln, ¿en dónde está?.- Preguntó Lori, ayudándola a ponerse de pie.
Tenía el pulso que le temblaba como una hoja en medio de un viento invernal, señaló hacia el interior pero, desde éste mismo, un resplandor sumamente aterrador se hacía presente en ese sitio. Era como si se tratara de una "Luz" que no paraba de brillar, desde el extenso pasillo en el que se veía, una misteriosa figura caminaba hacia ellos, con elegancia y seriedad, sin problemas, ni tampoco inconvenientes para presentarse ante sus oponentes.
- ¿Quién será?.- Quiso saber Rama cuando, de repente, los ojos del malayo se abrieron como platos ante el horror que tenían frente a ellos.
Desde el "Salón Privada", Diamante sintió, de repente, como sus fuerzas menguaban y Darien iba en su auxilio, encontrándose con el joven albino de rodillas en el piso y temblando del frío.
- No dejes...que ella...cumpla su objetivo, Darien...por favor...protege a la "Neo-Reina" Serenity...- Pidió el muchacho y de ahí se vio una figura que aparecía flotando ante ellos.
- Vaya, yo creía que eras el más leal de todos en el "Clan Black Moon", Príncipe Diamante, pero me equivoqué: Terminaste por ser un miserable traidor.- Oyó la voz de aquel encapuchado, quien se estaba burlando de él.
- ¡"Gran Sabio"!.- Lo reconoció Darien con rabia.
- ¡En efecto, Mi Estimado Amigo!.- Respondió jocosamente ante el peli negro.- Pero bueno, así son las cosas en nuestro Mundo y ya han llegado demasiado tarde.- Señaló el oponente.
- ¡Eres un maldito!.- Diamante hizo acopio de todas sus fuerzas para lanzarle esa maldición.- ¡Esto no era parte del plan, hacerle esto a ese niño, ¿qué clase de honor hay en nosotros?!.- Preguntó con rabia, intentando ponerse de pie pero el "Gran Sabio" extendió una mano y la cerró con fuerza, llevando a que las Energías que él tenía fueran directamente hacia la persona que se hallaba en el exterior.
- Le estás robando la vida a Diamante, así como también a mi esposa y a Lincoln.- Reconoció Darien con rabia.
- Jejejeje.- En ese momento, la sonrisa esquelética del villano se asomó por debajo de su capucha.
- Y ya han llegado muy tarde para salvarlos: Ella ya ha despertado.- Anunció el encapuchado, mientras que se podía ver, a través de la "Bola de Cristal" que poseía, cómo esa persona iba saliendo del interior de aquel Cuartel General.
Nadie podía dar crédito a lo que estaba viendo, allí, de pie ante sus propios ojos, se hallaba una mujer adulta de largos cabellos y un peinado que hacía recordar a cierto personaje, salvo por la ligera diferencia que eran los rodetes de forma triangular en lugar de redondos. En su frente podía apreciarse el emblema del "Black Moon", una Media Luna invertida de color negro como la Noche.
Su vestimenta consistía en un vestido de gala negro y largo con aperturas en las piernas de color interior azul oscuro, cuyas mangas y cuello estaban decorados con diamantes pequeños y un camisón transparente marrón rojizo que, en conjunto con su apariencia le otorgaban un aspecto similar al de una "Mujer Fatal". Para complementar el vestuario, ella usaba un chal de color rojo transparente en sus brazos y como adición llevaba un paraguas de color rosa junto a unos aretes oscuros.
Aquellos que nunca la habían visto sintieron miedo, incluso las Loud, era como si estuvieran en presencia de la propia Muerte. Los labios de la mujer se curvaron en una sonrisa burlona, mirando con desprecio a sus enemigos, mientras que, con elegancia, se dirigía hacia ellos y desde el "Balcón Central" del Cuartel General, los miembros del "Clan Black Moon" aparecían como si se tratara de un evento.
- Vaya, no me esperaba que ustedes, mocosas, pudieran vencer a las "Hermanas de la Persecución".- Oyeron la voz del Comandante pelirrojo, quien las miraba con frialdad en sus ojos.
- Y tuvieron buena determinación para vencerlas, no como ustedes, que se ocultan como ratas.- Les espetó Santiago con burla.
- Ten cuidado con lo que dices, no querrás terminar como ellas. Una lástima, yo pensaba que servían para más pero terminaron fracasando, igual que en el Pasado.- Sostuvo Rubeus, encogiéndose de hombros, cosa que llevó a Samantha, harta de todo el miedo, decidiera hacer frente al enemigo.
- ¡¿En dónde tienen a Lincoln?! ¡Devuelvan a nuestro amigo, ahora!.- Ordenó ella con desafío.
No hubo respuesta, solamente el viento gélido que soplaba, los resultados comenzaron a sonar en el portátil de Zork, quien examinó los mismos y frunció el ceño.
- Este Planeta está muerto desde hace Eones, ustedes mismos lo destruyeron con su Magia.- Dijo con seriedad.- ¿Acaso quieren que la Tierra sufra igual que el suyo?.- Preguntó hacia los oponentes.
- Todo en esta vida tiene un precio, Señor Hush. No se puede escapar de su destino, ni de su propia Historia, ya que esto conforma parte del "Redil" mismo de la Naturaleza, así como sus miedos más profundos, sus pesadillas, de las cuales vivirán en este momento.- Apuntó Esmeralda.
- ¡Eso jamás! ¡Vamos, amigos!.- Les animó Lynn, sin embargo, la peli rosa le impidió avanzar, dándole un golpe que la arrojó para atrás.
- ¡Lynn!.- Corrieron sus hermanas para ayudarla.
- Hm, patético.- Señaló Zafiro.- Si tanto quieren a su hermano, entonces vengan aquí, que las estamos esperando.- Dijo con brusquedad, mientras que pegaban un salto para ir al frente.
- Nunca...nos vamos a rendir...se lo prometimos a Lincoln.- Dijo la deportista, con un profundo dolor en su abdomen por el impacto que recibió.
- Pero si ustedes, aún, no han aprendido de sus errores, ¿creen que yendo con él, protegiéndolo, harán desaparecer lo que le hicieron en el Pasado?. La gente de su Ciudad les teme, lo mismo a sus amigos y novios, por eso Bobby pidió ese tiempo con Lori, porque le tiene miedo.- Dijo Esmeralda con tono serio.
- Lo mismo ocurre con los amigos de Leni, Lynn, Luan e incluso de Lucy: No quieren acercarse porque les temen, piensan que ellos van a ser lastimados, igual que su hermano. El miedo es así, se moldea a la persona que sea y de ahí obtienes los resultados.- Señaló Zafiro, caminando hacia los presentes.-
- ¡Deja de mentir, ellos nunca nos harían a un lado por eso!.- Intentó Lisa con ir por el lado científico.
- Ni la Ciencia puede ayudarlos, Lisa: El miedo, la angustia, la desesperación, la incertidumbre son parte de toda forma de vida. No puedes huir de ellos, son parte de ti, nacen contigo y están hasta el final para, acto seguido, pasar hacia otra persona, es así como funciona, no hay escapatoria de ello.- Le señaló Rubeus, mientras que sus pasos se hacían más cercanos y los miraba a todos con aire de superioridad.
- ¿Y ustedes?. Han causado un verdadero genocidio en su Tiempo y ahora quieren dar "Clases de Moralidad", no me hagan reír.- Masculló "Sailor Jupiter".- Será mejor que se preparen.
- ¿Enserio?. "Black Lady".- Llamó Esmeralda a aquella hermosa mujer.- ¿Reconoces algo de tu Pasado? ¿Una señal de que hayas sido parte de la "Realeza de Tokyo de Cristal"?.-
La muchacha se quedó allí, mirándolas, giró la cabeza unos pocos grados y de ahí se quedó contemplándolas, mientras que las comisuras de sus labios formaban una sonrisa de maldad pura.
- No, no reconozco nada de ellas, ni tampoco de mis padres. Yo soy del "Black Moon".- Respondió ella.
- ¡No les hagas caso, tú no eres así, eres la hija de Serena y Darien!.- Intentó Leni en hacerla entrar en razón.
- ¿Ellos, mis padres?. Jejejeje, no hagas reír, Leni. Ellos son débiles como ustedes.- Sentenció.- Será un honor mandarlos al "Otro Mundo".- Sentenció con frialdad en su ser.
- No tiene corazón.- Quedó Dudley helado por lo que podía sentir de esa persona.- Es puro Hielo, un aura de maldad recorre su ser, alimentada por las Energías que Lincoln y la "Neo-Reina" Serenity tienen...¡tenemos que hacer algo!.- Bramó el muchacho moreno.
- Si tanto quieren salvar a ese muchachito y a mi madre, adelante, pero no me contendré en lo absoluto, sufrirán con cada uno de mis ataques.- Avisó ella de antemano.
- ¡Eso ya lo veremos! ¡Atención, vamos, contra ellos!.- Ordenó "Sailor Mars" y se lanzaron al ataque.
No había tiempo que perder en esos momentos, la vida de Lincoln estaba pendiendo de un hilo muy delgado y tenía que dar todo lo necesario por él y la Reina.
Mientras tanto, Diamante yacía en los brazos de Endymion, quien lo había recostado contra una de las columnas, todo ante la vista del "Gran Sabio", quien estaba moviendo los "Hilos del Destino" y contemplando aquella belleza que era "Black Lady" en toda su extensión y ser.
- Y así es cómo la guerra se gana, con la sangre derramada, la muerte y la destrucción misma, Su Majestad. Si piensas que todo será sencillo, te equivocas: Ellos nunca tuvieron su oportunidad, los exiliaron por rebelarse y ahora mírate: Prisionero, sin tu amada Reina y encima de todo serás testigo del hundimiento de tu Mundo.- Sentenció el Ser Esquelético, mientras que la "Bola de Cristal" flotaba en el aire.
- ¿En serio?.- Preguntó el peli negro, quitándose su capa y listo para pelear.- ¿Dejar morir a incontables vidas inocentes por solo obtener poder?. Eso es lo más patético y lamentable que he oído durante toda mi vida, "Gran Sabio".- Le respondió el joven, haciéndole frente.-
- Devolver a la vida a "Black Lady" es uno de los actos más hermosos que podría existir en todo el Universo, aún con el precio de condenar a todos los que amas.- Respondió, encogiéndose de hombros, sin mostrar ningún atisbo de piedad.
- Igual que cuando destruyeron su Mundo, pero no importa, hoy habrá Justicia por todos los que han sufrido.- Juró el peli negro, dando un paso al frente y preparándose para pelear.
- Eres testarudo y valiente, pero veamos si eres digno de tales honores.- Finalizó el enemigo y lanzó una poderosa descarga de "Energía Maligna" que azotó el ambiente y de ahí Darien lo esquivaba.
La destrucción que dejó fue tremenda, ya que parte del "Salón Privado" quedó arrasado por la Magia que éste portaba. Diamante logró salvarse de ser reducido a cenizas, sin embargo, ahora, el peligro corría en ese sitio, ya que todo lo que se podía hacer era resistir y pelear.
No había nada que pudiera detener esa lucha, no mientras Lincoln y Serena estuvieran bajo el control del "Clan".
[Y ahora, Damas y Caballeros, hemos llegado al "Punto Sin Retorno", en donde se deberá pelear o morir para detener los planes del "Clan Black Moon". ¿Lograrán poner fin a esta guerra? ¿Salvarán a los cautivos?. Todo esto y más lo veremos en el próximo capítulo de "Misión en Tokyo de Cristal".
Mando saludos y agradecimientos para RCurrent, LucasAbad0, FreedomGundam96, FrankHurk50, LeoneEpsilon/Ratnik 3, AnonimousReader98, gabiColombo746 y los demás seguidores.
Cuídense, buen Jueves y también les deseo un excelente comienzo de día Viernes para todos ustedes, Camaradas.].
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