Capítulo 50
El viejo permanecía quieto, sereno, por delante de Tetsu, Naoki y Aki quien se había movido para estar al lado de ellos, estos tres últimos mantenían una mirada de miedo y preocupación, mientras el anciano solo observaba como los hombres de ropa negra, se aproximaban directamente a él con miradas molesta e intenciones de atacarlo
Aki, coloco su mano izquierda con suavidad en su vientre y también agarro la yukata de Naoki por sobre su hombro asustado y Tetsu hizo lo mismo pero colocando su mano en el brazo de su esposo como una forma de buscar protección en él. Naoki entendió el gesto de ambos donceles y con torpeza por su cuerpo adolorido dio un paso hacia adelante para hacerles saber a los dos que estaba ahí con ellos a pesar de que no pudiera defenderlos ni siquiera a el mismo. Tetsu observo a su esposo suavemente como agradecimiento de que no lo apartara de su lado y Aki sintió como Naoki coloco uno de sus manos encima de la suya donde estaba su vientre y al doncel le gusto que hiciera eso
Por un momento el hombre anciano cerró los ojos lentamente e hizo una profunda respiración, que los chicos que estaban detrás de él pudieron escuchar y poner un poco de atención a pesar del ruido que hacían los otros hombres al correr hacia su dirección y uno que otro jadeo por parte de los mismos
El anciano volvió a tomar otra profunda respiración, el aire entraba por su nariz y lo soltaba lentamente por la boca
Naoki no entendía como aquel hombre de avanzada edad podía estar tan tranquilo con aquella situación que se les iba a presentar frente a ellos. Los hombres con ropa negra iban a matarlos a todos y el anciano solo respiraba como si nada estaba pasando
El jefe del grupo estaba más cerca de llegar a donde el viejo para atacarlo
El viejo inhalo aire por la nariz en una tercera respiración, pero cuando lo iba a soltar por la boca, abrió los ojos abruptamente, separo las piernas, colocando una hacia adelante y la otras atrás y con un rápido movimiento de brazos a los lados, pego un grito ensordecedor que asusto a todos los presentes, incluyendo a los que tenía delante, en ese mismo instante un viento fuerte que parecía provenir alrededor de su cuerpo, empujo a todos los que iban a atacarlo, haciéndolos volar por los aires y aterrizar varios metros del sitio, ocasionándoles dolor en todo el cuerpo al punto de no querer moverse después
Todos los que se encontraban en el lugar, estaban impresionados ante lo visto, incluso el jefe de aquellos sujetos, levanto la mirada para mirar alrededor y notar que no solo él fue el afectado, todos sus hombres, estaban en el suelo quejándose del golpe al caer, se sentían como si un tren les hubiese pasado encima y ninguno de ellos entendían
El hombre anciano, mantuvo la posición, mantenía sus brazos extendidos hacia arriba y las piernas separadas, mirando fijamente al jefe de los otros hombres, el cual también busco con la mirada sin comprender como aquella persona de avanzada edad pudo con todos ellos en una sola técnica que nunca en su vida había visto ni creído que podría ser posible de hacer
- ¿Cómo es posible...? – pregunto el jefe del grupo poniéndose de pie con algo de dificultad - ¿Cómo hizo esto?! – exclamo con molestia
- No necesito explicarlo, solo le diré que es mejor que tú y tus hombres se vayan
- No acepto ordenes de nadie que no sea mi señor Shiro
- Shiro, no le ordenó matar a nadie, eso tengo entendido hasta ahora
El jefe del grupo y sus hombres al escuchar aquellas palabras del anciano, se extrañaron y se miraron entre ellos, excepto el primero que no dejaba de mirar al viejo pero sorprendido
- No sé quién es usted, tampoco sé si conoce al señor Shiro o como supo lo que acaba de decir, pero es cierto, mi señor solo nos ordenó dejar un mensaje y advertirles – explico el jefe del grupo
- Ya dejo en claro su mensaje, lo han entendido – hablo el anciano
- Talves físicamente
- Entonces váyanse
- Jm en algo tiene razón, ya no tenemos nada que hacer aquí, pero, verbalmente les diré el mensaje de nuestro señor
- ... - el anciano se mantuvo en silencio
- Nuestro señor Shiro les advierte, que no intenten acercarse ni un metro a él, o les pasara algo peor de lo que vieron hoy – dijo el jefe mostrando una sonrisa malévola
Hubo un corto silencio en el lugar, los hombres que estaban arrojados en el suelo, se colocaban de pie lentamente
- Vámonos - ordeno el jefe de aquellos hombres y en un corto tiempo, ya estaban ellos alejándose del lugar, entonces el anciano cambio su posición a uno más tranquilo, bajando las manos y uniendo los talones de sus pies
Naoki al comprobar con la mirada que ya esos hombres se habían ido por completo de su presencia, soltó un suspiro y cayó al suelo de rodillas cansado y adolorido
- ¡Naoki! – gritaron al unisonó Tetsu y Aki y se agacharon para estar a la misma altura que su esposo y revisar su estado
- No se preocupen, estoy bien – hablo en voz baja el varón real
- Déjame ayudarte jovencito – hablo el anciano que se acercó a ellos y sujeto el brazo de Naoki para ayudarlo a levantarse
Naoki no supo cómo, pero sintió la fuerza del hombre viejo que lo estaba ayudando a ponerse de pie y hacer que este colocara su brazo en el hombro de el para apoyarse. En ese momento llegaron corriendo a ellos Issei, Kaori y Hirochi también para ayudar, pero Naoki fulmino con la mirada al último para que no se acercara, entonces fue Issei quien coloco el otro brazo de su esposo para que también se apoyara en el
- Te ayudaremos de esta forma pero apoya tus pies en el suelo para que puedas caminar – hablo el anciano
- No... no puedo, me duele la pierna – reclamo Naoki con los ojos cerrados
- Claro que puedes, hace un momento estabas sobre tus pies
- Hace un momento nos vimos en peligro, tenía que hacer algo
- Entonces imagina que sigues en peligro, tienes que caminar, ten fuerza de voluntad – explicaba calmadamente el hombre anciano
- Tu puedes gran Naoki – hablo Aki animándolo
- Lo... lo intentare – el varón real abrió los ojos y apoyo sus pies en el suelo para intentar dar unos pasos, su pierna dolía, pero lentamente pudo caminar hacia adelante
- Así... - dijo el hombre mayor
- ¿A dónde iremos? – pregunto Hirochi
- Cierto, destruyeron mi auto, ¿Qué haremos ahora? – Kaori se veía triste por cómo habían dejado su auto aquel hombre con el martillo
- No se preocupen, el templo está cerca – respondió el anciano
- ¿Iremos al templo? – pregunto Tetsu, pero el hombre de avanzada edad no respondió
Kaori miro hacia atrás hacia donde estaba su auto y Hirochi coloco una mano en su espalda
- Tenemos que dejarlo aquí hermana – hablo Hirochi
- Sabes que fue un regalo de papa – dijo ella triste con lágrimas en los ojos
- Lo sé, lo siento, pero no creo que tenga arreglo
- ¿Qué pasará?, ¿Se lo llevaran?
- Lo más seguro es que alguien se lo lleve para apartarlo del camino, debemos seguir, lo importante es que estamos a salvo de esos hombres ahora
- Tienes razón
Kaori y Hirochi caminaron detrás de los donceles, Tetsu y Aki, por delante iban Naoki todavía siendo ayudado por Issei y el anciano
Cada pocos minutos se detenían para que Naoki descansara su pierna y luego seguían, hasta que todos pudieron ver no muy lejos, la estructura de un templo grande y de color anaranjado con techos de color marrón, muy cerca de un enorme lago y mucha vegetación alrededor
Se fueron acercando al lugar hasta llegar a la entrada del templo lo cual tenía una gran puerta de madera y esta se hallaba cerrada con una cerradura de metal
- Está cerrada – dijo Issei
- No se preocupen, tengo la llave – dijo el anciano apartándose lentamente de Naoki y de Issei y haciéndole seña a Tetsu con la mano para que se acercara y tomara su lugar en ayudar al varón real
El doncel así lo hizo y entonces Naoki de mala forma y sin mirarlo coloco su brazo alrededor del hombro de Tetsu
- ¿Tiene la llave? – Pregunto Naoki observando al igual que los otros como el anciano subió por unos cuatro escalones hasta la puerta y abrirla con la llave - ¿Quién es usted? – volvió a preguntar el varón real con cierta curiosidad
Los demás se preguntaban lo mismo, entonces también lo observaron. El anciano dio media vuelta ya con la puerta completamente abierta y serenamente los miro a todos
- Mi nombre es Shen y este es mi templo – respondió el hombre de avanzada edad
- Así que es el dueño del templo... - hablo Aki
- Entonces estaba fuera del templo cuando esos hombres nos atacaron, decidió pasar por el camino y vio lo que paso – decía Kaori
- En realidad estaba dentro del templo cuando esos sujetos los atacaron, no tenía planes de salir de acá – decía Shen
- ¿Entonces por qué salió del templo si no tenía intenciones de hacerlo?
- Porque sabía que me necesitaban
- Espera, ¿Qué? – Kaori no entendía y los demás tampoco y miraban al hombre de forma extraña – ¿Acaso los gritos se escucharon desde su templo?
- No – respondió Shen
- ¿Entonces...como supo que estábamos en problemas? – pregunto Tetsu
- Tengo buenos sentidos – dijo con una sonrisa Shen – Se escuchar, oler, saborear, percibir...
- Entonces si se escuchó el alboroto hasta este lugar – hablo Hirochi
- No – dijo Shen sin dejar de sonreír y los demás estaban más confundidos
- Es que... nos tardamos varios minutos para llegar desde donde estábamos hasta este templo, por supuesto que no pudo escuchar, ¿Verdad? – se preguntó Issei
El hombre llamado Shen solo lo miro con una sonrisa sin despegar sus labios y hubo un corto silencio que luego fue apagado por Naoki
- ¿Por qué nos ayudó? – pregunto el varón real
- ¿Sí? – hablo Shen mirando ahora a Naoki
- Pregunte que por que fue a ayudarnos, responda – Naoki parecía serio
- Era parte de mi tarea – respondió Shen
- ¿Su tarea?
- Si no lo hubiera hecho ustedes estarían gravemente heridos por el orgullo del jefe de los hombres sombra – Shen decía ahora dándose la vuelta y comenzar a caminar hacia el interior del templo tranquilamente
- ¿Qué?, Espera, ¿hombres sombra?, ¿a dónde va?
- A buscarles unas habitaciones y curar tu sangrado por supuesto, sé que te duelen las heridas, debemos tratarlas lo antes posible – dijo Shen sin dejar de caminar lentamente y escucharse su eco por estar adentro
Los otros se miraron sin explicaciones a lo que el anciano decía pero decidieron entrar detrás de el ya que sabían que el hombre tenía razón en lo último que dijo sobre el estado de Naoki
Mientras iban caminando se percataron de que la puerta era solo el inicio, pues al dar unos pequeños pasos notaron que ahora estaban en un patio enorme y que al frente se encontraba el verdadero templo. El dueño del lugar se desvió hacia la derecha por donde había más camino y el piso era de piedra
- Síganme – dijo él y los otros lo siguieron – Las habitaciones están de este lado
Tetsu e Issei se miraron sin entender y luego miraron al anciano
- En realidad solo necesitamos una habitación para Naoki – dijo Tetsu
- Sí, no queremos incomodarle demasiado – dijo Issei
- No es ninguna incomodidad – explico Shen
- Pero... - Issei iba a decir
El hombre se quitó unas sandalias que traía y entro por un pasillo donde el piso estaba hecho de madera y el techo era bajo, los demás hicieron lo mismo y ayudaron a quitarle las sandalias a Naoki para luego seguir al anciano adentro
Un minuto después Shen se detuvo en una pequeña puerta de madera que deslizo hacia un lado y entro
- Adelante – hablo cuando vio que los otros se habían detenido afuera – Aquí es seguro
Tetsu e Issei asintieron uno al otro y caminaron hacia adentro donde notaron que se trataba de una habitación amplia y hermosa con una gran cama en el medio y varias mesas cuyos encima de ellas habían macetas pequeñas con flores de varios colores, las paredes estaban pintadas de un color rosado claro y a los lados de la cama habían dos ventanas en cada extremo del cuarto
Shen se acercó a las ventanas y las abrió, en ese momento el sol entro a la habitación
- Esta habitación sí que es hermosa – dijo Aki entrando también al cuarto con los demás
- Pueden dejar al jovencito Naoki en esta cama – dijo Shen señalando la gran cama
Tetsu con la ayuda de Issei y Aki, acercaron a su esposo a la cama y lo acomodaron un poco para que se recostara en ella lentamente. El varón se quejó un poco al hacerlo por sus heridas pero luego se quedó quieto para no sentir más dolor y miro a Shen pensando en hacerle algunas preguntas
- ¿Sabes de medicina? – pregunto Naoki al hombre
- Uhm más o menos – respondió Shen
- ¿Sabes curar enfermos?
- Si lo que quieres saber es si puedo curarte, la respuesta es sí, después de todo, no estás herido de gravedad – dijo Shen sonriéndole a Naoki el cual dejo callado al varón real unos segundos
- Bien, necesito algo para el dolor y una vez que me recupere... - iba a seguir hablando Naoki pero fue interrumpido por Shen
- Curare tus heridas, descansaras y luego empezaremos a trabajar, claro esta
- ¿Qué ha dicho?, ¿Trabajar? – Naoki lo miro confundido al igual que los demás
- Eso mismo dije jovencito, ahora aguarden aquí un momento mientras busco la medicina – Shen busco la mirada de todos y luego camino hacia la salida de la habitación, dejando a los otros solos en ella
- ¿Ese hombre estará bien? – dijo Tetsu
- ¿A qué se refiere con que vamos a trabajar? – dijo Aki
- Talves se deba a que como nos ayudó con aquellos sujetos, entonces ahora nosotros debemos hacer algo por el - dijo Hirochi
- ¿Qué?, ¿Es enserio? – dijo un poco alterado Naoki
- Digo que es probable – dijo Hirochi
- Eso pasa mucho en esta época chicos – explico Kaori
- Pero nosotros no pedimos su ayuda – dijo orgulloso Naoki – Lo que estaba a punto de decir que es después de curarme usaríamos su templo para volver a nuestra época
- No puedes decirle a ese anciano las intenciones que tienen con su templo – dijo Hirochi
- ¿Por qué? – pregunto Naoki
- No nos creería
- Cierto, pensara que estamos locos – dijo Kaori
- Yo no lo pensaría así – se oyó una voz en la habitación y cuando todos miraron en la entrada, ahí estaba de regreso Shen y eso sorprendió a los presentes, ya que no se habían percatado de que había regresado sin hacer ningún ruido y lo que dijo también les sorprendió
- ¿Cómo llego tan rápido? – pregunto Naoki - ¿Acaso estaba cerca de aquí?
- Eso no es importante – dijo Shen acercándose a la cama
- ¿Qué no es importante?, ¿Saber cómo llego tan rápido?
- Correcto
- Usted escucho de lo que estábamos hablando, sobre su templo y...
- Usar mi templo para volver a su época, eso tampoco es importante – dijo tranquilamente Shen
- ¿Entonces usted nos cree? – pregunto Kaori extrañada
- Claro que les creo – respondió Shen
- Ehm bueno... si nos cree, ¿entonces porque dice que no es importante usar su templo? – pregunto Tetsu esta vez
- Porque no importa cuántas veces lo vayan a intentar, mi templo no los hará regresar de donde vienen
- Hee! ¿Cómo sabe usted eso? – pregunto extrañado Naoki
- Se de eso y mucho mas – Shen mostro una sonrisa
- ¿Y cómo estaríamos seguro de lo que sabe?
- Adelante, después de que te recuperes, puedes intentar....y luego podemos hablar
- ¿Hablar?, ¿De qué?
- Un paso a la vez jovencito – Shen mostraba seguridad en su mirada
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¡Hola a todos como están?! :D
¿Qué les ha parecido este capítulo?
¿Qué opinan de aquel hombre anciano llamado Shen?
Gracias por seguir con la lectura, aprecio comentarios y votaciones si les ha gustado
¡Hasta la próxima! n.n
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