Al otro día me levanté para ir al instituto y llegando encontré a Taehyung en la puerta; Jungkook no venía conmigo pues había salido más temprano por unas tareas, menos mal, porque no quería escuchar sus peleas.

-¡Hola!-me saludo mi amigo con su gran sonrisa cuadrada.

-¡Hola!-sonreí, achicando los ojos.

-¿Ya sabes la nueva, nueva?-intriga con entusiasmo mi amigo, mientras caminamos dentro del edificio.

-¿Qué ahora? ¿Un nuevo alumno?-inquiero cansino.

Al girar la cabeza en un pasillo pude ver al pálido flacucho hablando con Suran, o más bien ella coqueteandole porque él solo la miraba con aburrimiento.

Sus ojos chocaron con los míos por un breve segundo y después la pared corto nuestro contacto.

-No en realidad es...

-¡Chicos!-gritaron por detrás de nosotros y no solo volteamos Tae y yo, sino los demás estudiantes a nuestro alrededor.

Jungkook venía corriendo por el pasillo.

-¿Qué pasa rata?-le pregunto cuando llega con nosotros. Seguimos caminando con él siguiéndonos.

-En-en... ¡Uff!-suelta e inhala aire para recobrar compostura-En las noticias están diciendo de un peligro...

-¿Qué peligro?-interrumpe Tae curioso.

-En el bosque, están acechando animales muy peligrosos...

-¡Claro, Jungkook, dah!-reitero-Hay osos, lo más posibles que también halla serpientes-susurro lo último en modo suspenso, luego me río y Tae me sigue.

-Es en serio Jimin, los periodistas dicen que son algo grandes, con garras y pelaje pero no de algún oso. Han entrevistado a pocas personas que los han visto y dicen que son como perros grandes. Han echo hasta masacres muy grandes-replica miedoso.

Perros grandes...

Perro grande...

Aquellas palabras me hicieron recordar lo de ayer. Aquel perro negro y grande, y también aquel sueño raro de hace días.

-Wouh, la gente si inventa cosas-habla Tae y empieza una pelea con Kook.

La campana suena y me voy a clases dejando a los tortolitos en su pelea.

∆∆∆∆∆

A la hora del almuerzo me desvío a la biblioteca para buscar un libro de historia. Entro, encontrando el gran silencio, miro de reojo a la bibliotecaria y sigo mi rumbo al área de historia, encontrando una gran desgracia.

-Hola, Jimin-saluda serio.

-Hola.

Arrugo mi cara en disgusto observando al pálido recostado en los estantes.

Camino entre los estantes sintiendo sus ojos en mi, miro los estantes buscando el libro y lo encuentro pero había un problema.

Chasqueo la lengua malhumorado.

El libro estaba por encima de mi estatura actual, ni estirando el brazo lo alcanzaba.

-Mierda.

-¿Algún problema?-pregunta.

Metiche... Pienso.

-Nada que te incumba-respondo grosero y sin mirarle, arrugando más el rostro en molestia.

Estiro el brazo y me levanto de puntas pero no logro alcanzar el libro. Sigo intentando pero sigo en las mismas.

Escucho su risa, una muy linda y maldigo.

-¿Te ayudo...?

-¡No!-le interrumpo frustrado, mirándolo de reojo con molestia.

Sigo en lo mío.

-Te ayudo...

Antes de poder negar otra vez, sentí unas manos grandes y fuertes tomar mi cintura, levantándome un poco y sorprendido aún, tomé el libro. Deje de sentir sus manos apenas me dejó en el suelo y sentí de inmediato la falta de sus manos en mi cintura. Volteo.

-Gracias-murmuré sujetando mejor el libro, su oscura mirada me dejó estático, pude ver tanto y poco en ella.

Me aleje de él sintiendo su mirada, registre el libro para llevármelo y salí, aún puedo recordar sus ojos, el como algo salvaje estaba dentro de él, algo bastante terrorífico para descubrir.

∆∆∆∆∆

Las clases ya habían culminado y yo me tenía que ir solito a casa, porque Jungkook tenía clases de natación y Taehyung de arte. Tome mis cosas y salí del salón de química para dirigirme a los casilleros y poder vaciar un poco mi bolso; pero al llegar a una esquina me tuve que esconder.

Yoongi y su amigo ese de cabello gris, estaban saliendo de la oficina del director y yo aseguro que ese hombre no estaba allí, porque a estas horas él se paseaba por las clases extra curriculares.

Arrugue mi entrecejo teniendo una mala espina de ellos.

Empezaron a caminar por el lado contrario de dónde yo estaba pero al estar por cruzar en una esquina, el pálido se detuvo mirando a dónde yo estaba y con el corazón desbocado me oculte rápidamente sin que me viera.

Que equivocado estaba...

∆∆∆∆∆

Llegue a casa, todo estaba en silencio, mis padres estaban en el trabajo y a Jungkook le faltaba para que llegara. Dejé mis cosas cerca de la puerta y fui a la cocina, no había nada, a mamá seguro no le dió tiempo de hacer comida así que me prepare para hacer yo la cena. Saque todo lo que necesitaría y empecé la acción.

Y cuando menos lo espere, escuché la puerta de entrada ser abierta.

-¡Ya llegue!

-¡Deja el escándalo y ven ayudarme!

-¿Estás haciendo Tteokbokki?-pregunta acercándose a la estufa

-¡Aléjate!-le reclamo, amenazándole con un cucharón grande.

-Bueno, está bien ¿En qué te ayudo?-pregunta cansino y toma un pedazo de zanahoria para comérselo.

No pude evitar reír.

-¿Que?-gruñe.

-No, nada-respondo sonriendo divertido-Ayúdame a poner la mesa. Mamá y papá no tardan en llegar-le pido.

-Ok.

Jungkook se pone manos a la obra con lo pedido y yo terminé de hacer la cena, cuando el sonido de las noticias me hizo desconcentrarme de mi que hacer. El televisor que estaba en la cocina captó nuestra atención con las noticias de última hora.

"Buenas noches televidentes, está noche les traemos otra noticia de los mismos acontecimientos anteriores. Se les pide calma, paciencia y comprensión ante la situación. Hoy a las 17:22, en la Estación Ttukseom, cerca del parque de Seúl, hubo un ataque animal dónde la vida de tres inocentes fue perdida, todos masculinos, los transeúntes ante tal ataque no hicieron más que correr despavoridos y al momento de llegar la policía y también control animal ya no había nada más que soledad. Los atacados fueron llevados a emergencias pero ya no tenían signos vitales, las pocas personas que habían que pudieron esconderse, declararon que lo que vieron jamás los habían visto, la descripción fue lo que se venía diciendo con anterioridad, perros grandes, con colmillos y garras enormes, y con un color de ojos particular. Los policías no saben que hacer y los de control animal están asustados de tales animales tan feroces. No sabemos que son, tampoco que quieren. Les pedimos total precaución a la hora de salir de casa y no estar a altas horas de la noche por las calles, menos cerca de los bosques o parques. Con esta información dada, a continuación un anuncio..."

-Chicos...

Con Jungkook nos dimos la vuelta asustados.

-Mamá, papá...

-Las calles están peligrosas, tendrán un toque de queda-determina papá.

Apagó la cocina y mi madre se acerca a ayudarme.

-Pero papá...-se queja Jungkook berrinchudo.

-Nada-sentencia serio.

Nos vamos a la mesa y mamá empieza a servir la cena, a lo que prueban bocado me halagan el buen sabor y tiran los comentarios de que vuelva a cocinar más seguido. Reímos y empezamos a conversar de trivialidades y Jungkook a quejarse de no poder salir.

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¡¡¡HOLA!!!
Regresé gente mía y vengo con mucha emoción.

Espero les guste y lo sabré si votan y comentan que tal el capitulo.

Nos leemos pronto mis criaturitas.

＼(^o^)／