Ryu Grace

Una semana después

El rifle en mis manos se mantiene estable, estoy en la fábrica en medio de una de las prácticas, hacer esto me trae viejos recuerdos, las armas están cargadas con dardos que causan dolor momentáneo por cinco minutos. Estoy escondida detrás de una máquina grande y llena de polvo, hay cámaras en cada rincón ya que JungMin supervisa toda esta práctica, pero algo me dice que me supervisa también.

Escucho el sonido de una puerta chillar al ser movida, me escondo bien y reviso cuantos dardos tengo en el rifle, saco cinco más del bolsillo de mi chaqueta cargándolos con eso. Apunto distinguiendo a lo lejos que uno de los alumnos está alerta de cualquier movimiento, ese alumno es Kai.

Hay prácticas grupales e individuales, esta es una individual, quien dispare más dardo termina ganando.

Estoy lista para disparar a Kai, tengo el dedo en el gatillo, pero mis ojos se abren de par en par cuando sus ojos me ubican, Kai levanta su pistola hacia mí, pero duda mucho para hacerlo, el chico cae al suelo quejándose de dolor cuando alguien más dispara a él, intento ver quién es y no me sorprende que sea el idiota de la clase, ese el que se acobardó en la ruleta rusa. Apunto a él y disparo dando en su brazo, sé que esto es individual pero no dudo en levantarme y correr donde Kai.

— Vamos—lo ayudo a levantarse a pesar de que siente dolor con el dardo en su muslo, por si acaso le disparo otra vez al imbécil en su pecho—Eso nos dará tiempo—voy con Kai rápidamente hacia una de las puertas, vamos por el corto pasillo entrando a otra puerta que da a una sala con otra máquina de cables y cosas que no entiendo.

— No tenía que ayudarme, profesora.

— Es individual, podemos hacer lo que queramos—quito el dardo de su pierna— ¿Estarás bien si te dejo aquí?

— Sí—asiente con algunos mechones de su cabello pegándose a su frente—Gracias.

Asiento saliendo de la sala, cierro la puerta detrás de mí, pero me llevo la sorpresa de ver al pelinegro al final del pasillo, JungKook no está armado, lleva un cuchillo en su mano, sólo tres personas podíamos llevar un cuchillo para complicar la práctica, con este tipo de armas sí o sí terminas sangrando, lo extraño es que a mis alumnos les encanta esa adrenalina.

A mí me gusta sentirla desde que mi madre murió, es la adrenalina que me ayuda a mantenerme activa y sentirme poderosa.

Del otro lado del pasillo me encuentro a la tercera persona que puede llevar un cuchillo además de JungKook y de mí. EunWoo se unió a estas prácticas porque quiere protegerme y ayudarme con Jane, EunHa ha visto su potencial al igual que Hoseok, la diferencia es la siguiente.

JungKook prefiere sostener una pistola y EunWoo prefiere sostener un cuchillo.

Todos nos metemos de lleno en estas prácticas por lo cual tomamos todo muy enserio. Sonrío burlonamente negando con la cabeza.

— ¿Ahora qué? ¿Van a acercarse o van a lanzarme ese cuchillo? —los miro. EunWoo sonríe con esa amabilidad de siempre, esa misma amabilidad en él puede llegar a ser peligrosa, volteo a ver a JungKook quien juega con el cuchillo, está limpio por lo cual deduzco que no ha atacado a nadie.

— ¿Prefieres la opción uno o dos? —sonríe Kook.

EunWoo se acerca y le apunto, disparo en su dirección sin darle realmente. JungKook corre a mí, regreso a la puerta donde dejé a Kai, cierro rápidamente, tomo una silla vieja y la coloco de modo que impida girar el pomo.

— ¿Cuánto queda para que acabe la práctica? —Kai se levanta con una mueca de dolor, al menos ya puede estar de pie.

Miro el reloj en mi muñeca.

— No mucho. Veinte minutos.

— Debemos enfrentarlos—Kai recoge su pistola—Estoy listo.

— ¿Estás seguro? EunWoo y JungKook están afuera...

— Debemos poner lo que sabemos en práctica, estaré bien.

Miro la silla y la quito, repentinamente todo se queda en silencio. Kai asiente con la cabeza levantando la pistola, giro el pomo abriendo la puerta lista para disparar, pero afuera no hay nadie. Salgo al pasillo mirando a ambos lados, éste está vacío. Camino dos pasos, pero me detengo en seco viendo una de las puertas abiertas, ésta se balancea, algo me dice que vaya ahí, antes de llegar escucho a Kai llamarme, la puerta se ha cerrado con él dentro.

JungKook aparece de la nada empujándome contra la pared. Hubiera disparado de no ser porque mi rifle está en el suelo a poca distancia de ambos, una vez que comencé con estas prácticas le aclaré a él en especial que no fuera dulce conmigo. Me suelta e intenta llegar al rifle, pero me apresuro pateándolo más lejos, escucho una maldición de su parte y rio por eso. Intento hacer que suelte el cuchillo, golpeo su punto bajo logrando hacer que lo suelte, tomo el cuchillo y corro hacia mi arma. Cuando apunto a JungKook para dispararle mi reloj avisa que la práctica ha acabado.

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Jane está en la bañera jugando con el agua mientras yo restriego bien el shampoo en su cabeza, no me sorprende que la niña esté tan callada, desde que mamá murió cada vez es menos lo que dice Jane, me preocupa, pero no la culpo, yo también suelo estar más callada, pero en vez de dejarme caer como pensaba hacer sólo he entrenado, me he dedicado a entrenar en toda la semana, los chicos creen que es bueno que distraiga mi mente, pero ellos siguen preocupándose por mí, en especial JungKook.

Cuando acabo con Jane busco su toalla comenzando a secarla. La floristería ha cerrado sus puertas por una semana y quisiera preocuparme por esas familias que trabajan con nosotros, pero no puedo hacerlo, tengo problemas más grandes, EunHa se encarga de ayudarme con el entrenamiento, pero a veces dejo que ella se encargue de todo, ella también ha dejado sus clases de cocina, mis deberes de la universidad están ligeramente olvidados, he pedido a mis profesores que me den tiempo, les conté lo de mi madre y comprendieron, pero necesito mantenerme al día.

Con Jane intento estar al día con sus deberes de la escuela, son tareas sencillas, pero cuando nos sentamos juntas a hacerlas es silencio lo que existe entre nosotras. Las cosas están cambiando y no de la manera que quería.

Termino de vestir a Jane y escucho los toques a la puerta. EunHa sonríe un poco mirándonos.

— Florecita, ¿Puedes dejarme un momento a solas con tu madre?

— Pero necesito que me peinen.

— El tío Hobi te ayudará.

Jane sonríe asintiendo y sale de la habitación con el cepillo en sus manos. La toalla húmeda de Jane la dejo en el baño para que se seque, regreso a la habitación mirando a EunHa quien está sentada en mi cama.

— ¿Qué sucede?

— ¿Has hablado con JungKook?

— Ayer tuvimos una práctica con los chicos—recojo mi cabello en una coleta alta—Esta mañana no hemos hablado, ¿Por qué?

— ¿Has notado algo raro en él?

— No sé si te has dado cuenta, pero todo él es raro—recojo algunas prendas de la niña dejándolas en la cesta de la ropa sucia.

— No sé si deba decirte esto, pero lo haré porque me preocupa.

— Me estás asustando—volteo a mirarla.

— Hoseok dice que NamJoon y JungKook están pasando mucho tiempo juntos, incluso EunWoo me dijo que visitan a menudo la oficina de JungMin—me acerco a ella sentándome en el banco de la peinadora dándole la espalda al espejo, EunHa se inclina a mí luciendo preocupada—Ellos salen por la noche con algunos hombres de JungMin, Hoseok me dijo que antes de venir pasó por la fábrica, en enfermería había tres de sus hombres heridos.

— ¿Hoseok no le ha preguntado a Nam?

— Lo ha hecho, pero no quiere decirle nada, asegura que no pasa nada.

Inclino mi cabeza de lado desconfiando de eso.

— He estado en la fábrica, he pasado una mañana entera o una tarde...

— Quizás actúan con normalidad frente a ti para no preocuparte, yo he estado allí y tampoco he notado nada—chasquea la lengua.

— ¿Crees que estén rastreando a DoJae?

— La pareja está en Tokyo, no tiene sentido rastrearla—niega con la cabeza—JungMin dijo que tarde o temprano vendrán y...—de repente su rostro cambia. Parece que ha encontrado algo.

— ¿Y qué?

— Hace una semana la escuché decir que sería interesante mi idea.

— ¿Qué idea? —ruedo los ojos.

— Dije que debería existir la manera de atraerlos o llamar su atención, dejarles como una advertencia de que no se saldrán con la suya.

— ¿Quieres atraer al enemigo?

— JungKook conoce como trabajan los señores Kim al igual que EunWoo—indica— ¿Y si...JungKook estuviera viéndose con sus hombres?

— No tiene sentido, ¿Por qué iría donde hay personas que lo quieren muerto?

— Quizás...esa es la advertencia, asesinarlos uno a uno.

— No, no lo creo.

— ¿Enserio? JungKook cada vez suena más como Rabbit, ha estado recordando cosas hace una semana y...—se encoge de hombros—Podemos esperar todo de él.

— ¿Crees que los tipos de enfermería fueron atacados mientras se defendían? —pregunto.

— ¿Y si lo comprobamos? —sonríe, pero no comparto su curiosidad—Grace, debemos comprobar si lo que digo es cierto.

— No lo sé, Jane...

— Podemos hacer que EunWoo se encargue de ella, necesitamos que Hoseok vaya con nosotras...

— EunWoo querrá acompañarnos, puedo dejar a Jane con IU.

— Entonces trato, comprobaremos si es cierto o no—sonríe levantándose. La miro salir del cuarto esperando hacer lo correcto, es cierto que intento no derrumbarme, pero en pequeños momentos siento algo parecido a la ansiedad, como si quisiera entrar en pánico.

Cuando esto pasa cierro mis ojos, respiro profundo y pienso en las dos personas que más amo en este mundo, mi hija y JungKook.

Esta portada me la pasó una seguidora por Whatsapp :3

Muchas me preguntan sobre Kai y sí, es el Kai de TXT ♡ Otra cosa, lamento no actualizar en la hora que usualmente lo hago pero ando un poco enferma, la fiebre tampoco ayuda mucho pero aquí les dejo su capítulo :)