Marinette fue guiada por Chloe hacia su casa, ésta última se veía sumamente emocionada y alegre, contrastando con su compañera, que mostraba seriedad e, incluso, un poco de nerviosismo. Pero eso no era algo raro, sino que la alegría de Chloe es lo extraño, la azabache todavía tenía la duda de cómo su padre la había criado de tal manera que ella es la única habitante de todo París con una actitud alegre, inocente y, en general, no corrompida por la dictadura de Fu.

"¡Qué emoción tengo! ¡Es la primera vez que invito a alguien a mi casa!" Gritó Chloe con emoción mientras, incluso, daba un salto de la alegría que sentía, cosa que hizo abrir los ojos a Marinette sobre lo peculiar que era ella.

Conforme avanzaban, Marinette se dió cuenta de que se habían adentrado en un barrio parisino que ella nunca había pisado, era una pequeña calle que se diferenciaba del resto, allí se encontraban las pocas personas ricas de la ciudad luego de la dictadura de Fu, la azabache siempre quiso investigar sobre si alguno de ellos es el famoso Killer Shadow, pero nunca pudo saberlo, pues ninguno de ellos tuvo ningún tipo de emoción negativa que sirva para akumatizarlo.

"¡Aquí es!" Chloe detuvo su andar y alzó sus brazos para señalar a una de las casas de la calle, Marinette no pudo evitar abrir un poco los ojos con asombro, era un hogar extremadamente grande, sabía que la familia de Chloe era adinerada, pero esto aún así la sorprendió.

"Lamento si mi casa es demasiado grande, espero que eso no te incomode" Chloe miró algo preocupada a su amiga, pero ese rostro se iluminó cuando observó a Marinette negar con la cabeza en confirmación de que no se sentía incómoda.

Tras esto, Chloe caminó alegremente y abrió la puerta, anunciando a su padre que ya estaba en casa, Marinette vaciló al principio, pensando si era buena idea, pero, ahora que había aceptado, no podía acobardarse, por lo que, finalmente, la siguió y entró también, no pudiendo evitar estremecerse cuando un mayordomo cerró la puerta en cuanto ella entró.

"¡Hola, Jean-François! ¡He traído visita! ¿Mi padre está en casa?" Saludó Chloe al mayordomo y también le preguntó sobre la presencia de su padre, pues había gritado al entrar y él no había contestado.

"Su padre no se encuentra en casa, pero no se preocupe, volverá en breve para que pueda conocer a su visita" Le contestó el mayordomo, esta respuesta hizo suspirar a Marinette, tenía la sensación de que ese hombre es el típico clasista lamebotas de Fu que la miraría como basura al saber del humilde negocio de panadería de su familia.

"¡Está bien! ¡Esperaremos en mi cuarto! ¡Sígueme Marinette!" Chloe gritó emocionada mientras comenzaba a correr emocionada hacia una puerta con un letrero con el nombre de la chica, Marinette no pudo evitar suspirar algo exasperada, se habían pasado de sobreprotectores con ella, ahora mismo se estaba comportando como una niña.

Prudentemente, Marinette caminó hacia la habitación de su amiga y, en cuanto abrió la puerta, casi se quedó ciega. Todo su cuarto está decorado con objetos de color dorado brillante, parecía una habitación de oro, era obvio el color favorito de la chica. Además de este cegador color, parecía una habitación extrañamente estándar, la azabache esperaba un lugar infantil lleno de juguetes, pero, en su lugar, se encontró con una habitación relativamente vacía, con una cama ciertamente lujosa con un oso de peluche encima, a la izquierda había un escritorio y, a la derecha, un vestidor lleno de armarios repletos de ropa y zona de maquillaje al mismo tiempo. Pero, aparte de eso, y un televisor en la pared, no había nada más. Eso realmente le gustó, pues, aún descendiendo de una familia adinerada, se mostraba humilde.

"Lamento el desorden, ayer y esta mañana han sido duros" Se disculpó Chloe, haciendo que Marinette procese sus palabras y se dé cuenta ahora de que habían algunas prendas de ropa esparcidas por el cuarto, entre ellas unos calcetines, unos pantalones y un vestido.

"No te preocupes, mi cuarto está mucho peor" Marinette trató de bromear, aunque realmente dijo una verdad, no había limpiado su habitación desde hace ya tiempo, pues no lo veía necesario, apenas dormía y únicamente usaba la zona de donde actuaba como Ladymoth.

Chloe pareció reírse con genuina diversión mientras caminaba hacia su cama y se sentaba cómodamente. "¿Qué te apetece hacer? Podemos intentar encontrar ropa que te quede bien entre mis vestidos, intentar de maquillarte para disimular tus ojeras, o también podemos ver la televisión si hay algún programa que te interese" Ofreció Chloe con energía aparentemente ilimitada, provocando una leve y breve sonrisa en Marinette, la cual realmente no sabía qué elegir, pues hacía mucho tiempo que realmente no intentaba divertirse. Pensó brevemente mientras se llevaba un dedo de su mentón para hacerle saber a su amiga que estaba meditando las opciones, optando finalmente por tomar la arriesgada decisión de dejar que Chloe la maquille para intentar que sus ojeras se noten lo menos posible.

"Quizás me arrepienta, pero dejaré que me maquilles" Dijo la azabache, provocando un brillo en los ojos de Chloe que casi purifica el alma deteriorada de Marinette si este brillo tuviera poderes mágicos.

Durante los siguientes minutos Marinette temió por su aspecto cuando Chloe le enseñó su *obra maestra*, al final había acabado luciendo realmente bien, hacía muchos años que no se arreglaba con maquillaje y realmente le estaba gustando verse así nuevamente.

"Realmente me veo bien" Admitió Marinette, totalmente sorprendida, pues pensaba que Chloe la iba a hacer parecer un payaso con esa cantidad de maquillaje.

Esas palabras provocaron que Chloe se frote la nariz con orgullo mientras ríe, haciendo sonreír a Marinette. No recordaba la cantidad de tiempo que había pasado sin sentir esta sensación de felicidad, incluso cuando pasaba el rato con los kwamis no se sentía así, pues sus pequeños amigos son muy distintos a tener una amiga humana.

Por desgracia, todo debe acabar pues Marinette, repentinamente, comenzó a sentir en el broche circular del miraculous de la mariposa una emoción extremadamente negativa, era un efecto pasivo de portar el miraculous, aún sin haberse transformado podía sentir la negatividad para buscar posibles víctimas.

Era un potencial akuma demasiado poderoso para dejarlo pasar, por lo que, inesperadamente para Chloe, Marinette comenzó a agarrarse el estómago con falso dolor.

"Chloe, ¿Dónde está el baño? Necesito usarlo urgentemente" En cuanto la rubia escuchó esas palabras, rápidamente le señaló que el baño más cercano estaba literalmente a la derecha de la habitación, haciendo que la azabache salga corriendo hacia allí.

En cuanto entró, abrió su bolso, saliendo los dos kwamis, Nooroo luciendo sumamente preocupado mientras Duusu lucía confundido.

"¿Por qué has mentido a tu amiga? Parecía que eras muy feliz por cómo se escuchaba todo" Preguntó Duusu, pero a Marinette no le hizo falta contestar, pues Nooroo se adelantó y le habló a su ama en un tono casi suplicante.

"Maestra, por favor, sé que es tentador akumatizar a quién esté emitiendo esa energía negativa, pero aquí puede que nos descubran" Esas palabras de Nooroo provocaron un suspiro lento en Marinette, pero finalmente negó con la cabeza mientras fruncía el ceño.

"Entiendo tu preocupación pero, lo lamento mucho, necesito hacerlo. Nooroo, alzaos alas negras" Tras una disculpa Marinette pronunció la frase de transformación en voz baja para evitar ser descubierta, Ladymoth había vuelto.

"Ten cuidado" Habló Duusu, el cual continuaba presente pues Marinette no se había quitado el broche del pavo real a la hora de transformarse en Ladymoth.

"Lo tendré, además, ahora podrás ver personalmente cómo trabajamos Nooroo y yo" Marinette trató de darle algo de comedia al asunto, pero Duusu no sonrió, sino que se quedó flotando al lado de su portadora con preocupación en su rostro.

"Siento una emoción negativa sin igual: decepción, tristeza y odio combinados, la receta perfecta para mi akuma" Marinette tenía que admitir que sus diálogos malévolos cada vez se le daban mejor, incluso haciendo reír levemente a Duusu en el proceso.

Tras esto, del bastón de Ladymoth apareció una mariposa que fue corrompida y convertida en akuma instantes después, saliendo por la ventana del baño y dirigiéndose hacia donde se encontraba su víctima.

Hace unos escasos minutos, en otra parte de la inmensa ciudad de París se estaba dando la escena que desprendía tanta energía negativa, sorprendentemente, en la preparatoria Françoi Dupont, donde, en el despacho del director, éste estaba mirando con una mezcla de emociones negativas a un hombre robusto frente a él.

"Usted es un director pésimo, mi hija fue akumatizada ayer enfrente de esta institución, ¿¡Cómo ha podido permitir eso!?" El hombre que le dijo eso era el padre de Chloe Bourgeoi: André Bourgeoi.

"¡¿Cómo quiere que lo evite?! ¡Estoy haciendo todo al pie de la letra según las leyes de Fu!" El director Damocles no se contuvo y le gritó de vuelta, provocando que el imponente cuerpo de André Bourgeoi lo intimide poco después.

"Suficiente, hablaré con Fu y serás despedido por incompetencia" Y tras esto André se marchó, dejando al director con odio hacia aquel hombre.

Unos momentos después, en el presente, el akuma entró por la ventana del despacho y se fusionó con la corbata del hombre, entrando en comunicación con Ladymoth.

"Titán Nocturno, soy Ladymoth, ¿Acaso ese hombre te dice cómo tienes que hacer tu trabajo y encima te despide? Te otorgo un poder sin igual que te hará callarle la boca y demostrarle que el hecho de intimidar por su imponente figura no será suficiente.

"¿Me darás fuerza bruta?" Preguntó el director, totalmente controlado por sus emociones negativas.

"¿Fuerza Bruta? ¿Acaso ser un titán sólo implica fuerza bruta? No, contarás con armas de tu tamaño que usarás con eficacia, pero a cambio de esta oportunidad, debes acabar con los secuaces de Fu, empezando por Killer Shadow" Declaró Ladymoth con una sonrisa.

"Trato hecho, Ladymoth" Aceptó el director Damocles mientras una niebla comienza a envolverlo, aumentando tanto su tamaño que rompió el techo del despacho. Ahora era un gigante rojo con uniforme elegante que dejaba a la vista su corbata, pero también contaba con un cinturón lleno de artilugios y armas útiles para la pelea.

Ladymoth casi sentía pena por el director Damocles, pues, si es vencido, seguro que no tendría dinero suficiente para pagar la reconstrucción de los edificios que está destrozando, pero ese no era su problema, pues todo esto lo hacía por una buena causa, la liberación del país de una dictadura.

Tras unos pocos minutos, Killer Shadow apareció enfrente de Titán Nocturno y comenzó a combatirlo, primeramente, intentó usar sus aparentes capacidades felinas para trepar por el cuerpo de gran tamaño que posee, pero sus intenciones fueron vistas por el akumatizado, quién sacó unos boomerang afilados como cuchillas y los lanzó antes de que Killer Shadow pudiera hacer nada, éste esquivó los boomerang con eficacia a excepción de uno, quién le provocó un corte en su brazo izquierdo, comenzando a bortar algo de sangre.

"¡No puedes hacerme nada! ¡Te aplastaré como un insecto!" Gritó el akuma mientras, confiado, utilizaba su puño para intentar aplastar a su oponente, provocando un grana agujero en el pavimento al mismo tiempo que Killer Shadow lo esquivaba y aprovechaba esto para agarrarse al brazo de Titán Nocturno, quien trató de quitárselo de en medio lanzando varias cuchillas, siendo esquivadas todas e, incluso, provocando que el propio akuma se provoque un corte sin querer.

De alguna manera que Ladymoth no pudo comprender, Killer Shadow supo que el akuma se encontraba en la corbata y se lanzó a por ella, rasgando el objeto en mil pedazos con sus manos, haciendo que salga el akuma y que Titán Nocturno vuelva a ser el director Damocles. Tras esto, como siempre, Killer Shadow destruyó al akuma usando su *cataclismo*.

El señor Damocles fue llevado por la fuerza, sabiendo que le espera una deuda que nunca podrá pagar, afortunadamente, no había habido ninguna víctima, pues los daños fueron a infraestructuras y automóviles, más todo el mundo se pudo poner a salvo a tiempo, sumando esto a que Killer Shadow apareció frente al akuma sorprendentemente rápido.

En la casa de Chloe, Ladymoth suspiró derrotada mientras desvanecía la transformación, apareciendo Nooroo sumamente cansado.

"Te has pasado con este akuma, pudiste haber matado a alguien" Dijo Duusu con preocupación, Marinette bajó la cabeza, tratando de disculparse con su fiel amigo kwami, pero antes de poder decir nada más, una voz procedente del otro lado de la puerta de hizo presente, haciendo que la azabache coloque a Nooroo en la bolsa y que Duusu también vuelva adentro.

"¡Marinette! ¿¡Estás bien!? Llevas ya mucho tiempo dentro y Jean-Françcoi dice estar escuchando voces adentro" El tono de voz de Chloe representaba, nuevamente, preocupación, obligando a Marinette a improvisar, saliendo al instante del cuarto de baño con sus manos agarrando su estómago.

"Creo que la mierda de comida que nos dan en la preparatoria realmente me sentó mal, me tengo que ir, lo lamento mucho, Chloe" Explicó Marinette con falso dolor, el rostro de la rubia fue de tristeza e, incluso, desilusión.

"Entiendo, al menos pudimos pasar un buen rato" Dijo la chica mientras bajaba la cabeza, obligando a Marinette a agarrar los hombros de Chloe inesperadamente, obligando a ésta a mirarla fijamente.

"Eso no significa que no pueda volver otro día, somos amigas ¿No?" Marinette se sentía en la necesidad de hacer sentir mejor a Chloe, pero debía de irse para alimentar a Nooroo, por lo que optó por esta opción, al fin y al cabo, realmente lo pasó bien con ella.

Chloe reaccionó a esas palabras con un gigantesco abrazo que tomó a Marinette desprevenida, pero que, por primera vez en muchos años, devolvió durante unos segundos efímeros antes de romperlo abruptamente y dirigirse hacia la salida, despidiéndose con un gesto de despedida a su mejor amiga.

Nada más salir de la casa, se cruzó de lleno con un hombre robusto que la miró como si fuera una piedra en el camino, Marinette no pudo evitar quedarse mirándolo por un detalle en particular que le llamó la atención, su brazo izquierdo poseía vendas, seguramente por haberse tratado una herida que, a juzgar por el aspecto de la sangre que manchó el vendaje, era muy reciente. El hombre finalmente la apartó de un empujón y entró él a la casa, no sin antes llamarla *escoria*.

"Me lo imaginaba" Dijo Marinette en un susurro, había tenido suerte en que el encuentro con este hombre, reconocido como el padre de Chloe, había sido breve, pues había acertado en su actitud.

El detalle de su brazo con una herida... muy sospechoso pero no podía sacar conclusiones precipitadamente, por lo que comenzó a pensar en otra cosa mientras caminaba por las calles nocturnas de París, las cuales no estaban vacías, pues habían bastante personas observando algunos destrozos realizados por el akuma antes de ser vencido.

Ante eso, Marinette pensó en lo que le dijo Duusu, realmente, con cada akuma que creaba, los hacía más poderosos, pero eso también significaba que aumentaba la posibilidad de que hayan víctimas, y ella, por muy creyente que sea de los ideales de Maquiavelo, no estaba dispuesta a sacrificar inútilmente vidas, eso sólo la convertiría en alguien igual a Fu.

"A partir de ahora debo de crear akumas más versátiles y menos destructivos" Susurró para sí misma una vez que se aseguró estar sola en la calle. Aunque había fracasado un akuma nuevamente, no se sentía tan inútil como de costumbre, seguramente por los buenos momentos que pasó esa tarde con su amiga.

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Hasta aquí el capítulo, espero que les haya gustado. 

No olviden comentar, pues me ayuda a saber que los lectores estáis interesados en la obra. Muchísimas gracias. 

Ahora, sin nada más que decir, adiós.