✯ CAPÍTULO UNO
🔮 como un sueño

⋆ 𝔏𝔢𝔞𝔥

UNA VEZ ESCUCHÉ UNA FRASE que decía que nosotros no le tememos a la muerte, sino a lo que viene después de ella.

Y vaya que tenían razón.

Lo último que recordaba era haberle dicho a mi tía que prefería haber muerto con mis padres, ¿como iba yo a imaginar que mi (no tan anhelado) deseo se cumpliría?

Al despertar, algo que se supone no debía de haber hecho, me encontraba en una habitación de color azul, con una ventana con balcón al lado de la cama y una de las paredes era ocupada por un estante con libros, fotos y ¿un arco? Ni siquiera sé cómo usarlo.

Las paredes también era decoradas por más fotos, dibujos de estrellas y postres de un tal Jagged Stone, quien al parecer era un cantante.

Definitivamente no sabía dónde estaba.

━ Leah, cariño, ¿Ya estás despierta?

Me levante de golpe al escuchar esa voz de mujer proveniente de fuera de la habitación, pero enseguida me arrepentí, pues al hacerlo me llegó un gran dolor de cabeza que me obligó a volver a tirarme a la cama.

━ ¡Ouch! ━ me quejé, tomando mi cabeza con ambas manos.

━ Cielo, ¿está todo en orden? ━ preguntó la mujer al otro lado de la puerta.

━ Eh... ━ dudé un poco en si responder o no, pero al final lo hice ━. ¡Si! Está todo bien... ¿señora?

Escuche una risa antes de que la mujer volviera a hablar: ━ Baja ya Leah, tu padre y hermano te están esperando para desayunar.

Escuché sus pasos alejarse. Solté un suspiro mientras cubría mi rostro con la almohada, hasta que caí en cuenta de algo.

¿Papá? ¿Hermano?

Yo no tenía papá, hermano si pero hace tiempo que él dejó de desayunar conmigo.

Con rapidez me volví a levantar de la cama, ignorando el hecho de que de nuevo volvió el dolor de cabeza, y empecé a buscar entre todas las cosas que había en la habitación algo que respondiera todas mis dudas.

Había encontrado una diana y un carcaj con flechas, ¿por qué diablos tendría algo así? Seguramente si mi tía me viera con eso diría que era muy peligroso para mi y lo quemaría.

Me acerqué al escritorio que estaba en una esquina y prendí la computadora con la esperanza de encontrar algo, pero solo estaba el fondo de pantalla de ese tal Jagged Stone.

¿Y las fotos de mi poderosisimo Tony Stark?

Ignore el hecho de que no sabía dónde estaba y salí al balcón. Al mirar hacia abajo vi un montón de autos pasar por la calle y a personas caminando, no pude evitar pensar en que yo ni siquiera vivía en la cuidad, sino a las afueras. Pero al alzar la mirada mi boca se abrió y casi grito al ver a lo lejos la torre Eiffel.

Ay por Thor, ¡Estoy en París!

Corrí nuevamente dentro de la habitación y busqué entre las fotos que estaban junto a los libros. Habia fotos mias con Sasha, Carol y Carlos, incluso con Luke. Lo raro era que yo no recordaba haber tomado esas fotos, y que por alguna extraña razón parecían fotos de caricaturas.

Miré a mi alrededor hasta que vi mi reflejo en un espejo que estaba en una esquina del lugar. Abrí mis ojos con sorpresa (y miedo) al notar que me veía igual que en las fotos.

━ Bien, Leah, tranquilízate ━ dije para mi misma, poniendo mis manos en mi cabeza y mirando a mi alrededor ━. Estoy en un lugar que no conozco, con una apariencia de personaje de caricatura y... ━ caricatura. Un personaje de caricatura.

Un momento.

Recuerdo que Sasha una vez me mostró un video de una serie con este tipo de animación y que se desarrollaba en París. Según recuerdo esa serie se llamaba como mi apellido, o algo así...

━ Oh por Dios ━ susurré ━. ¡OH POR DIOS!... ¡ESTOY EN EL PARÍS DE UNA MALDITA SERIE ANIMADA!

Al parecer, mi grito había llamado la atención de la mujer de hace un rato, pues enseguida se escucharon pasos y la puerta fue abierta de golpe.

━ ¡Leah! ¿Estás bien?

━ No, no, no, no, no ━ repetía una y otra vez en susurros, dándole la espalda a la desconocida ━. Se supone que debía haber muerto, se supone. ¿Qué diablos está pasando?

━ ¿Leah?... ¡Leah!

Me di la vuelta al escuchar el grito de la mujer y mis ojos se abrieron de golpe al verla a ella y a las otras personas que la acompañaban.

━ ¿Ma-Mamá? ━ pregunté con la voz entrecortada, sintiendo mis ojos arder por las lágrimas que se estaban acumulando ━. ¿Papá?

━ Hija, ¿está todo en orden?

Solté un sollozo al escuchar como el hombre me llamaba.

Él, él era igual a mi padre. Lo había visto en una foto que tenía, y la mujer, ella era igual a mi madre.

Dudé en si eso era real o solo un sueño. Alce mi mano y me di un golpe en la mejilla para confirmarlo, pero en vez de despertar solo sentí un cosquilleo seguido de un ardor.

━ ¡Dios! ━ exclamó el chico que había llegado con ellos, quien era igual a mi hermano ━. ¿Qué te pasa, loca?

Los dos adultos se acercaron a mi y me abrazaron. Yo correspondí el abrazo con fuerzas, después de todo no siempre tenias la oportunidad de abrazar a tus padres fallecidos.

No sabía que estaba pasando ni dónde me encontraba. No sabía cómo había llegado a este lugar. No sabía porque de repente mis padres y hermano estaban aquí, frente a mi, abrazándome... como si siempre hubiéramos estado juntos.

No sabía absolutamente nada, todo esto era como un sueño.

Pero si era así, yo estaba segura de que no quería despertar.