M-2.
Dedicado a -alcoholica, y Aleinad_priss2, gracias por leer, las amo ctm. JDJSJJSJAJA.
En multimedia: Una canción relajante y chida para leer. ¡Canción recomendada!
<~•••~>
En la cotidianidad debemos
aprender a observar y
apreciar todo lo bueno
que ofrece...
D + Ds +(PA/PL + P) / R + RC = CoCaLuz.
<~•~>
La directora Gutiérrez preparaba su complemento vitamínico con agua caliente, en un pequeño vaso de té. Su oficina era la más espaciosa de todo el Colegio Católico Luz. Consta de un gran ventanal, plantas y un gran cuadro de su Abuela, fundadora de la institución educativa. Un escritorio de roble fino con cuatro sillas de madera.
La luz ingresaba tímida, con miedo a la oficina, dónde normalmente se dan sermones y críticas. Todo era mejor cuando la señora Gutiérrez seguía con vida, ahora era su hija quien está a cargo, hace casi un año.
Sentada en su escritorio con las piernas cruzadas tomaba su complemento vitamínico, mirando el cuadro de su abuela, disfrutaba del momento con una sonrisa.
---Buenos días, abuela.
Pasado un tiempo alguien tocó a la puerta. La directora respiró profundo, no se podía dar el lujo de tratar mal a su personal educativo, representativo y administrativo; la reputación es lo primero.
---Adelante.
El profesor Brown ingresó con pasos suaves, dando los buenos días para así ocupar una silla.
---Buenos días profesor Brown--- Apartó su taza. Se levantó para preparar una de café---. ¿Qué te trae por aquí?
---No hay ninguna novedad.
---Eso es bueno, ¿No?--- Tomó una cucharita de azúcar, removiendo suavemente. La colocó en su escritorio cerca de Brown.
---Muchas gracias--- Agarró la taza, tomó un sorbo---. La semana fue sin contratiempos.
---¿Cómo se comporta el tal Haminson?--- La directora juntó sus manos, mirando firme al profesor.
Brown dudó sobre si ser honesto o no--- No te tenido ningún contratiempo con él.
---Mantenga a ese chico a raya.
---Haminson no es una amenaza. Además, ya se graduará.
---¿Usted sabe cómo se fundó este colegio?--- Gutiérrez acomodó su cabello---. Los rebeldes sin causa siempre son un peligro para todo, creyendo que son la luz del mundo.
---Haminson no es un peligro...--- Gutiérrez le interrumpió golpeando muy fuerte su escritorio.
---Mi única petición es que no haya más problemas que lo involucren, ¿Debo recordar todo el tiempo que mi madre perdió a causa de sus dilemas religiosos? ¡Por Dios!
Brown la miró inexpresivo. Gutiérrez prosiguió--- La fama del Colegio Católico Luz no se mantiene con dilemas ni libertades religiosas. Aquí hay muchos representantes de un carácter religioso bastante marcado. Además, cuando alguien ingresa al colegio se deja muy claro las reglas religiosas.
---No se preocupe señorita Gutiérrez--- Dijo Brown, tragando su orgullo para no sonar enojado. No es bueno tener a la directora de enemigo.
---Lo único que me importa es esta institución. Honrar los esfuerzos de mi abuela y mi madre--- Gutiérrez se levantó para mirar al ventanal, quedando a espaldas de Brown---. Vigile a Haminson, y si hay otro estudiante con "dilemas" me encargaré de él cómo debió ser con Daniel desde un principio.
En ese justo momento sonó el timbre. Gutiérrez se despidió de Brown con una sonrisa algo forzada. El señor se levantó para salir de la oficina. Gutiérrez ocupó su escritorio para seguir tomando su complemento vitamínico mientras observaba el cuadro de su abuela.
<~•••~>
Daniel tocó a la oficina de Marlenne el lunes por la mañana. Tenía su cita, y la semana anterior ella no le había ido a buscar. Al cabo de un pequeño momento Marlenne le recibió con una tímida sonrisa, Daniel la abrazó, ella correspondió el abrazo. Entraron a la oficina.
---¿Cómo estás?
---He estado bien, Daniel--- Ocupó lugar en la colchoneta, Daniel en el mueble verde.
---Oye Marlenne, disculpa si te hice sentir mal con mi visita la última vez.
---No te preocupes. Tu visita me ayudó a ir a la universidad; completaré la carrera.
---No entiendo aún, ¿No eres psicológica?--- Daniel pensó sus palabras---, bueno, no debes decirme si no quieres.
---Tranquilo Daniel--- Marlenne hizo la posición de loto, miró al chico---. Cuando terminé el bachillerato me gané una beca en la Institución Skistown.
---¡Ahg, yo no estudiaría allí aunque me dieran...--- Daniel se tapó la boca, había dicho las cosas sin pensar---. Discúlpame Marlenne yo...--- Le interrumpió.
---No tienes por qué pedir disculpas, es lo que normalmente me dicen. Bueno, mis padres no tenían para pagar una carrera en una universidad privada, y no lograba aprobar el examen a la pública, tampoco sabía que estudiar--- Marlenne exhaló cansada---. Dilemas y dilemas.
---Entonces estudiaste Psicología allí.
---Si. En realidad no tenía pensado estudiar la carrera, pero era la única que más me llamaba la atención dentro del catálogo de carreras que ofrecía la Institución.
---Me gusta que quieras hacer las cosas bien. Debo admitir que me gustas tus sesiones--- Ambos sonrieron, Marlenne cerró los ojos, prosiguió.
---Me terminó gustando la carrera, pero en esa Institución los profesionales no salen muy bien preparados. Estudié por mi cuenta y mis prácticas laborales las realicé aquí. La madre de la directora me apreciaba, así que me dejó el puesto, a pesar de las insistentes negativas de la encargada de recursos humanos. La hija de la directora ha insistido en que abandone el puesto, si no demuestro competencias. Un paso en falso y saldré de aquí.
---¿Dónde estudiarás la carrera?
---Estudié por tres años para ingresar a la Universidad de Strongate, y al fin lo logré.
---¡Felicidades!--- Daniel se levantó para abrazar muy fuerte a la chica, su alegría fue transmitida.
---Muchas gracias Daniel.
---Lo harás muy bien.
---Haré lo mejor posible--- La chica apartó los brazos del chico cariñosamente para levantarse. Fue al escritorio y sacó un expediente.
---¿Cómo calificas tu estado actual?
---Me siento bien.
---Perfecto--- Dijo anotando algunas cosas en el expediente--- ¿Quieres que hablemos de algo?
---Conocí al tal Josep.
---¿Qué tal?
---Bien, pero creo que no hablaremos más. Me pidió el número pero no me escribe--- Dijo un poco triste.
---No te preocupes. Recuerda que no podemos esperar que la gente actúe como uno quisiera que actuara.
---De resto, todo bien. Cambiar mi dieta y tomar más agua me han dado más energía, lo cual es chido.
---Anotaré "Exponenciales avances"--- Marlenne le miró a los ojos, con una gran sonrisa---. No sabes cuánto me alegro.
---Estamos Felices.
---Si, lo estamos. Bueno, creo que es todo. Ve a clases de inglés. Y no, no me pidas tiempo aquí.
Daniel rió--- Tranquila, ya me agrada la clase--- Marlenne le miró extrañada, para luego sonreír.
---Amo las buenas noticias.
Se abrazaron para así seguir cada uno con sus obligaciones. Cuánto alegra a las almas las buenas noticias.
<~•••~>
El conserje fue a la oficina de administración con una taza de café. Arregló un poco su cabello para estar lo más presentable posible a la señora que, apresurada, tecleaba números y anotaciones sin parar. Entró despacio hasta llegar al puesto de trabajo de la chica.
La señora otorgó una tierna sonrisa--- Hola Guzmán.
---Buenos días señorita--- Colocó la pequeña taza de café en el escritorio. La señora lo probó.
---Está delicioso, muchas gracias.
---No hay de qué--- Se sonrieron---. Bueno, la dejo, debe estar super ocupada.
---Lo mismo digo--- El señor al estar a punto de cerrar la puerta se despide con un gesto de manos, y una sonrisa hermosa.
La señora termina su café, lavó sus manos para seguir tecleando números y anotaciones sin parar. Sabía sus intenciones, esas atenciones. Una compañera de trabajo le dijo que él estaba enamorado de ella.
---¿Cómo lo sabes?--- Le preguntó un viernes por la tarde.
---Me lo dijo, pero no actúe diferente, por favor.
No lo quería.
Antes cuando llevaba tazas de café, esperaba tranquila a qué él cruzara la puerta para echarlo por las tuberías del lavado.
"No sé habrá lavado las manos, esas siempre están dentro de los baños o sacando la basura", pensaba, mientras lavaba las suyas.
Y su corazón no le pertenecía. Hubo un tiempo donde la secretaria le entregó el corazón al director del departamento de educación. Este nunca se interesó en ella aunque hiciera todo lo posible por él.
"Un importante director jamás se interesaría por una secretaria infeliz", pensaba, y se corregía, "No, eres linda, él se lo pierde. No eres infeliz".
Un día mientras atendía a su hija entendió que se había convertido en ese director que nunca le dió la oportunidad para demostrar su amor. El conserje, esmerado por decir te amo con una taza de café cada mañana, pero ella, aspirando a "más", decía no. ¿Por qué dejar la incertidumbre de la ilución amorosa? Sus NO eran llevados por la cañería. ¡Las tuberías jamás llevarían el mensaje!
---Te ha rechazado otro café. Cuando te das la vuelta nos da de tomar diciendo que "está muy frío", entiende, no le gustas---. Le dirían las cañerías al conserje, si fueran capaces de hacerlo.
El amor era complejo, y quizás él si estaba dispuesto a comprender el amor.
Al darle una oportunidad apreció que su café era delicioso, pero, ¿Sería capaz de aceptar otra ración?
<~•••~>
En una clase del señor Brown existía otro personaje que hacía sus horas de profesor un pequeño infierno: un chico bajito de cabello largo.
---¿Y quién garantiza que esos escritos no hayan sido modificados para beneficio o control de las personas?--- Indagaba aquel muchacho.
---Es fe. Por favor señor Harry, no estoy para cuestionamientos el día de hoy.
---Usted nunca está para cuestionamientos--- Dijo, con los aires de orgullo de un adolescente inmaduro.
Estudiantes como Harry y Daniel eran cada vez más frecuentes. Brown no sabía muy bien cómo afrontar la situación.
El primero de ellos fue hace mucho tiempo, fue en el segundo año como profesor, pero siempre lograba hacer que cambiarán de opinión. Cada uno de ellos decía ¡Dios no existe! Pero al final del día atravesaban la salida rezando el padre nuestro. Fue después de 12 años dando clases de religión que descubrió su gran reto: Daniel Haminson.
Varias veces sus discusiones llevaban a ambos a las oficinas de la señora Gutiérrez, la madre de la actual directora. Ella era muy comprensiva, y aunque rechazaba los ideales del chico, estaba convencida de que Brown cambiaría su pensar.
---Sé que logrará cambiarle--- Le dijo tocando suavemente su hombro al profesor.
Pero ello nunca ocurrió. La nueva directora sabía perfectamente que era un peligro para su institución, pero ya era tarde para hacer algo al respecto; porque desde su aparición como directora jamás volvieron a la oficina. Brown no permitió jamás que Haminson abandonara el colegio sin antes cambiar su mentalidad. Pero cada día era más complicado.
---Las manzanas podridas dañan las sanas, señor Brown--- Le dijo una vez la señorita Gutiérrez, directora actual.
Daniel Haminson fue su derrota, y siguiendo la afirmación de la directora, se encargaría de esas manzanas podridas, como debía ser desde un principio.
Pero aún no estaba dispuesto a rendirse con Haminson.
---Señor Harry, tenemos que ir a la oficina de la directora, recoja sus cosas.
Harry estaba listo para su extracción del cajón de manzanas: 4 llamados de atención, no realizaba las actividades en clase y dificultaba las enseñanzas religiosas.
La censura no era bien vista, pero para algunos fines estaba bien.
Como para proteger la imagen de Dios, por ejemplo, según Brown.
<~•••~>
El profesor de matemáticas impartía sus clases con su común fastidio.
---¿Por qué aún no entienden a diferenciar el menor o mayor qué?
Recibió excusas absurdas.
---Bien--- Prosiguió---. Imaginen a un cocodrilo hambriento: él abrirá la boca para comer donde haya más comida--- Y dibujó en la pizarra.
•••• < •••••
4 < 5
---Y como ustedes son muy inteligente--- Retomó la palabra el profesor---, entenderán que 4 es menor que 5. Por Dios, deben aprender esto. No me temblará el pulso en colocar ceros en las planillas.
¿Sabes cuál es la excusa absurda que usaban los estudiantes para justificar sus ceros?
¡La matemática es muy complicada!, Pero eso solo era una leyenda urbana.
<~•••~>
Darline impartía sus clases de inglés. Todo estaba en completo orden, sus estudiantes recibían las lecciones con una actitud receptiva.
Todos aman a Darline, aunque su pronunciación del idioma esa un poco... rancio. Todos aman a Darline.
<~•••~>
En un momento de la mañana, Daniel fue al baño a orinar. Al terminar de ir y lavarse las manos Nicolás entró en el baño, casualmente. Saluda en voz alta.
---Hola.
Daniel se supo nervioso, no le estaría hablando a él, pero el baño estaba solo... Nicolás habló más fuerte, algo agresivo e irritado.
---¡Hola Haminson!
Daniel volteó a verle, no dijo nada, ¿Enserio le estaba saludando? ¿Por qué? No estaba en silencio por sonar grosero, solo que... ¿Le estaba saludando? Nicolás caminó hasta el baño, comenzó a orinar. Daniel justo antes de salir del baño regresó el saludo en voz baja, pero lo suficiente como para que Nicolás escuchara.
---Hola Nicolás, ¿Cómo estás?
Daniel siguió su rumbo hacia el salón, y no escuchó el "¿Bien, y tú?"
<~•••~>
Daniel le comentó lo ocurrido a su mejor amiga.
---No hay iluciones, no hay devoluciones--- Dijo la chica. Daniel hizo un puchero apoyado en su pupitre---. No Daniel por favor, vas muy bien, ya casi dejas de prestar atención al feo de Fournier.
Daniel cubrió su rostro con sus brazos. El chico estaba confundido:
"¿No me odiaba? ¿Por qué me estaba hablando? ¿Se quería vengar? ¿Pero de qué? ¿Quizás por hacer que se perdiera en el bosque? ¡Tiene sentido! Me ha estado saludando desde el incidente en el paseo, o quizás, ¿Por los chistes feos que hacían dónde estaba involucrado?, ¡O quizás todas las opciones!"
---No te hagas falsas iluciones ni preguntas tontas, porque sé que estás en eso--- Daniel solo asintió mientras hacía un pequeño grito de frustración---. Oye, no te olvides de Josep, ¡Me hablaste maravillas de él!
Desde la misma posición Daniel agregó--- Josep no quiere hablarme, no me ha escrito. Esperé el sábado hasta tarde por la noche y nada, el domingo ni hoy.
---Puede que lo haya olvidado, o se le perdió el número.
---Lo anotó en su celular.
---No te atormentes--- Emily respiró profundo, mirando al chico con una sonrisa triste.
Daniel no dijo nada. Emily simplemente hacia caricias en su cabello desordenado, mientras leía su libro. Daniel solo necesitaba relajarse un poco, y las clases de mecanografía eran perfectas para eso.
<~•••~>
---Déjeme disculpar y notificar a sus padres la triste noticia de que usted no podrá seguir estudiando en nuestras instalaciones. El tesoro más preciado para ellos--- Hablaba la directora con diplomacia, esa que siempre oculta las verdaderas intenciones---. Creo que usted sabe perfectamente nuestro reglamento.
---¿Le dirá a mis padres que soy ateo?--- Preguntó Harry muy asustado, con los ojos muy abiertos. Brown estaba a su costado, sin ninguna expresión aparente, mirando a la directora.
---Es el motivo de la expulsión. Supongo que tú y tus padres tienen mucho de que hablar esta noche. Le recomiendo comentar esta situación, antes de la reunión, y la noticia caiga como un balde muy frío de agua.
---Usted no puede hacer eso--- Imploró, casi al punto de romper a llorar. Los adolescentes, tan inestables, un mundo revulsivo por explorar---. Por favor, no lo haga.
---Debió no seguir con su actitud después de los llamados de atención. A la institución no le importa sus ideales religiosos, pero debió entender que estaba estudiando en un colegio católico--- La directora se levantó, mirando al ventanal. Harry tenía los ojos cristalinos, a punto de llorar.
---Por favor no--- Comenzó a llorar, difuminando su evidente desesperación.
---Disfrute su último día en nuestra institución--- Sentenció, mientras el joven reprimía sus sollozos.
<~•~>
En el salón de tercer nivel Jessica recibía clases de ciencias. Una compañera se acercó y le abre una conversación.
---Hola Jéssica--- La chica intenta regresar el saludo pero es interrumpida---. ¿Tienes la tarea de ciencias?
Jessica reprimía su nudo en la garganta. "Oh, pensé que dirías un lo siento por hacerte la vida imposible".
Buscó en su bolso el pequeño trabajo, se lo otorgó a la chica.
---Ya lo traigo.
Si, es tonto la acción de Jessica, obvio se aprovechan, pero un tiempo atrás intentó no ser bueno con los demás, y fue peor. Todo era interés rampante para su ser. Después del incidente con su orientación sexual hace tres años jamás volvió a integrar el grupo estudiantil.
Si daba la tarea, le hacían bullying.
Si no daba la tarea, le hacían bullying a la dos.
Oh, podemos hacer una ecuación.
X • Bullying = puta vida.
X = respirar, existir, no dar la tarea, dar la tarea, llegar a clase, estar en clase, andar por los pasillos, comer sola...
Jessica no soportaba esa situación, y aunque actualmente no puede incluirse en el grupo de 30 estudiantes, se siente mucho mejor que en esos días grises. Muchos habían dejado la situación atrás, ya que muchos ya eran "abiertos de mente", solo decía esa dos palabras para alimentar su orgullo. "Deben pensar que soy muy inteligente.", Se dirían.
La chica que fue a pedir el trabajo regresó--- Toma--- Dijo, poniendo el trabajo en el pupitre. ¿Por favor y gracias, qué eso eso? ¿Se come?, Pensó Jessica.
En ese salón había una chica: Stefany. Le gustaba hace dos años, y desde la aparición de Daniel había logrado entablar amistad con ella, y su grupo de amigos: Samuel, Emily, Stefany y Daniela. Le gustaba hablar con ellos.
Y al saber la noticia de que Stefany y Samuel eran novios no le gustó, lo aceptó; porque siempre supo que nuca tendría oportunidades con ella. Stefany nunca le trató mal, de hecho, a veces le defendía.
Al sonar el timbre el salón quedó vacío, pero Jessica no tenía ganas de bajar y hablar con alguien. Sacó sus audífonos, y se durmió.
<~•••~>
La cotidianidad es leer un
libro a los árboles, y
tocar el césped con los
dedos de los pies...
D = Directora.
Ds = Directores de departamento.
PA = Personal administrativo.
PL = Personal de limpieza.
P = Profesores.
R = Representantes.
RC = Religión católica.
<~•••~>
Un capítulo un poco raro, lo sé. Muchas gracias por leer. Me despido, se cuidan <3.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro