Ne lâche pas ma main (partie 1)
Dos cuerpos ya hacían acostados en una cama, cuya sábanas se encontraban desordenadas, aquella cama había sido testigo de una noche pasión descontrolada; Dónde se encontraban dos amantes completamente diferentes, pero ambos tenían algo en común.
El gran amor que se tenían el uno al otro…
Uno era un país de clima frío, conocido por ser el país más "feliz" del mundo, el cual empezaba a despertar pues los rayos del sol que se escapaban por las persianas dieron directamente hacia su rostro.
Se quejó con su característico “Paska" mierda en español, y gruñó. Su gente es lo que hacía a sus tierras el país más “feliz" del mundo. Él en realidad era un amargado y un gruñón, era conocido por otros países como un país problemático y que te rompería la cara sin tener duda alguna. Un rebelde sin causa y alguien a que le importaría poco el hecho de que existieras.
Finlandia era el tipo de país que te podía mandar a la mierda, decirte que te murieras, que eras basura y que le importa poco lo que sea de tu vida. Además de por supuesto hacerte la Britney señal.
Intentó incorporarse pero no pudo, gruñó y volteó a ver la causa o más bien al causante de que no se pudiera mover.
Finlandia suavizó las facciones de su rostro, al ver a aquél que ilumina su día a día.
México…
El país latino; alegre, sencillo, humilde, hermoso, amable, divertido y un sin fin de adjetivos positivos que el tricolor poseía.
Finlandia pudo darse cuenta de que tenía su brazo debajo del cuerpo del mexicano, y éste tenía su brazo encima del suyo, sus dedos estaban entrelazados. Finlandia observó como el mexicano dormía con tranquilidad dándole la espalda, estaban en posición de cucharita.
A Finlandia se le hizo sumamente adorable el hecho de que incluso dormido el mexicano no se alejaba de él, hacía años que ambos eran pareja. Finlandia estaba acostumbrado a que México fuera encimoso todo el tiempo.
Él podía estar sentado en el sofá, y México inmediatamente llegaba a su lado, acurrucado en hombro, apretando su brazo, tomando su mano o incluso llegaba se sentaba en sus piernas y se metía debajo de su abrigo, Finlandia rio bajito al imaginar a México entre sus ropas, por su culpa sus abrigos eran mucho más grandes ahora, con el fin de que México dejará de hacer su ropa mucho más grande, compró un suéter para pareja que ambos compartían.
–Meksiko rakkaani/México mi amor–. Susurré bajito mientras me acomodaba mejor, escuche a México quejarse por lo bajo.
–¿Mm?–.
Al parecer seguía dormido, sonreí enternecido por su reacción, era muy lindo. Me acerqué a su cabeza y la besé con cuidado, pose mi otra mano en su cadera y comencé a acariciarlo. Pude escuchar leves suspiros saliendo de él, al parecer le era cómodo. Levanté un poco mi cabeza con tal de verle mejor, y intenté reprimir una risa cuando observé que por la comisura de sus labios escurría un poco de saliva, me acerqué más a su rostro y besé su mejilla, una y otra vez mientras mis caricias seguían.
–Ah...–. Suspiró México removiendo un poco su cuerpo contra mí.
–joten pidät siitä?/Así que te gusta?–. Sonreí con picardía, mientras comencé a dejar besos sobre su cuello, anoche había sido completamente exitoso. Cumplí mi objetivo de dejar marcas sobre todo su cuerpo, pero nunca estaban de más algunas cuantas más.
Bajé por su cuello hasta su espalda repartiendo besos húmedos, mientras mis mano dejaba su cadera, para ahora acariciar su hombro. Escuché más suspiros de su parte, pero mi amado negaba a despertarse.
–Ah… tacos de chorizo con salsa...– lo escuché susurrar, pensé que ya se había despertado pero vi como aún escurría saliva de su boca. –Mm… Tacos al pastor–. Se removió un poco dejando libre mi brazo,
Suspiré, México solía hablar dormido y siempre era sobre comida, tamales, pozole, cualquier antojo que tuviera mi amado.
Me incorporé un poco con mis brazos, y admiré el paisaje que se encontraba frente a mí, chifle en sorpresa a ver aquella espectacular vista.
Sonreí con orgullo… había hecho un muy buen trabajo anoche.
Me sonroje al ver como mi esperma se escurría entre sus piernas, México al sentir la humedad entre sus piernas se removió, comenzó a frotarlas y dio una vuelta en la cama.
Cuando México comenzó a alejarse de mí, en un arranque de posesividad me acerqué a él y le abrace nuevamente, enterré mi rostro entre su cuello y comencé a aspirar su dulce aroma.
Me embriagaba su esencia, era como una droga para mí. Aveces me preguntaba ¿Por qué México estaba con un país como yo? Éramos completamente diferentes, México era hermoso, divertido, ocurrente, amable con todo mundo, cosas que yo no era... Antes de comenzar una relación con él, siempre le observaba atentamente en las reuniones de la ONU, al parecer no era el único.
México… mi México. Tenía encantados a todos, cuando la ONU comenzó a hablar de quitar la visa como requerimiento entre otras naciones para entrar a sus territorios, aproveche mi oportunidad para quitarle el requisito de visa a mi amado.
Claro que no fui el único… 134 países más le quitaron el requerimiento de visa a México, tenía demasiada competencia…
Aún así México se quedó conmigo, me eligió a mí de entre todos los países del mundo para ser su compañero, vivíamos juntos, teníamos una vida maravillosa, una relación llena de amor. Solamente me faltaba dar el último paso…
Aunque sé que sería difícil para México, el aceptarme como su esposo…
Sabía todo de él, sus alegrías, sus penas, su pasado, sus miedos…
México temía casarse conmigo y que lo abandonará como lo hizo ese maldito…
Solté un gruñido y apreté mis dientes, ese bastardo…
¿Cómo alguien podía hacerle daño a un país tan hermoso y agradable como México?
México es mi todo, es y había sido mi primera vez, literalmente… él había sido el primero en todo…
Todo lo tuve con él… Mi primera relación formal, mi "primera vez" en medio de aquella repugnante y horrible situación México llegó a salvarme de perder la cordura. Aún recuerdo su dulce y amable voz…
–“Tranquilo todo estará bien, yo estoy aquí. Ya va a pasar, no te dejaré"–.
México siempre me ha salvado, y ha estado ahí para mí. Lo mínimo que puedo hacer por él es hacerle feliz, después de todo lo sufrido. Soy el indicado para hacerle feliz.
Estoy seguro de que México y yo estaremos juntos para siempre…
Somos el uno para el otro…
Sonreí una vez más como un tonto enamorado, México se dio la vuelta y escondió su rostro contra mi pecho, se restregó contra mí y sentí como su saliva se escurría. México aún dormía.
Reí levemente y noté como México encimaba una pierna encima mío, la pierna de México se amarró a mí cadera, y pude sentir cómo acercó su cuerpo más al mío.
Era por más decir que estábamos completamente desnudos...
Esta era una posición realmente favorecida…
Para una penetración…
Tragué en seco ante la tentación, a México no le importaría… Él nunca me decía que no, tanto él como y yo teníamos algo más en común…
Estamos necesitados de amor…
Así que besos, caricias, sexo… México estaba dispuesto a eso y más con tal de sentirse amado.
Más de una vez México me expresó que tenía miedo de que algún día no le llegase a tocar, el tenía miedo de volverse poco atractivo para mí y que le dejará por otro country.
México todo el tiempo me hacía preguntas como… ¿Soy bonito? ¿Enserio te gusta alguien como yo? ¿Por qué? hay muchos countrys mejores que yo…
Yo lo sabía, sabía que México vivía con la inseguridad de que le abandonase por alguien más.
Eso era una tontería…
Besé su frente, y lo vi sonreír entre sueños.
Jamás le abandonaría por alguien más.
Una vez más le abrace entre mis brazos, y le mira sumamente cómodo, bajé la mirada a su pierna que aún se amarraba a mí cadera y nuevamente tragué nervioso.
Hacerlo o no hacerlo… He ahí mi dilema.
–Mielestäni on aikaista, emme ole edes ehtineet aamiaista/Creo que es muy temprano, no hemos siquiera desayunado–. Suspiré en frustración.
–Vaya, habermelo dicho antes–. Escuché su dulce y encantadora voz.
Me sorprendí al escucharle de repente, y di un pequeño brinco en cuanto me di cuenta de que me miraba expectante con aquellos bellos ojos que poseía.
De lo sorprendido que estaba, le solté y me arrastre por la cama alejándome de él. Esté rio divertido por mi reacción y camino a gatas en la cama hacía mi.
Yo me encontraba completamente acostado en la cama, aún sorprendido por los hechos, México me miraba con aquellos ojos hambrientos y deseosos, tragué saliva cuando se sentó encima de mi, dejando mi miembro entre sus nalgas. México lo había hecho con tanta elegancia. ¿Cómo podía ser tan elegante, sexy y hermoso a la vez? Cada acción realizada por el era sumamente fina.
Aunque no lo pareciera por sus insultos vulgares, México poseía una educación de la realeza. Quizás se debería al reinado Español sobre sus tierras, o a su ex esposo Austríaco.
Sus finas y delicadas manos subieron poco a poco por mi pecho, México acariciaba con cuidado. No era un tacto lujurioso, era un tacto con cariño. Le vi sonreír y cerrar los ojos cuando llegó a mi pecho y se restregó contra el. Aún tocaba mi pecho con sus manos y repartía delicados besos en él, yo simplemente estaba quieto dejando a México hacer lo que quisiera conmigo.
Fue entonces cuando subió a mí clavícula y dio un pequeño mordisco, me sobre exalte ante el diminuto pero placentero mordisco, no lo había hecho con fuerza. Pero aún así sus acciones me resultaron placenteras.
–Entonces… ¿Vas a querer o se lo echó al perro?–. Río con burla.
–Kuinka kauan olet ollut hereillä?/¿Cuánto tiempo llevas despierto?–. Pregunté.
–Desde que empezaste a acariciarme–. Respondió.
Yo solo suspiré y fingí molestia, levantando mi cuerpo con ayuda de mis brazos. Al sentarme, como aún tenía a México encima de mi, mi miembro rozó contra su trasero provocándome un escalofrío.
«Hiljainen Suomi, älä nouse ylös, älä nouse ylös, pysy alhaalla!/Tranquilo Finlandia, que no se te levante, no te levantes, ¡Quédate abajo!». Pensé con nerviosismo.
–¡Ah! Vaya mi amor, ¡Sí que eres honesto!–. Exclamó con felicidad México.
«Dammit!/Maldita sea!»
Mire hacia otro lado, evitando hacer contacto con México. Quién descaradamente movía mis testículos.
–Finlandia–. Me llamó.
–Jos?/Si?–. Pregunté.
–Tengo hambre–. Me miró con sus encantadores ojitos, mientras hacía una mueca infantil.
«Vau muuttui/Vaya cambió»
Pero así era México…
–Kyllä? mitä kaipaat aamiaista?/¿A sí? ¿Qué se te antoja para desayunar?–. Pregunté.
México sonrió y susurró cerca de mi rostro.
–Huevos con chorizo, y un poco de leche–. Dicho esto lamió mi rostro.
Parpade confundido y tratando de procesar lo dicho por mi novio, cuando mi mente finalmente hizo un "click" mi rostro se volvió completamente rojo. Temblé un poco de coraje por la broma de México, me había hecho sentir como un mocoso. Entonces con bastante "enojo"/pena, le dije.
–¡A mí no me albures cabrón!–. Dicho esto me levanté de la cama, "ofendido" México parecía sorprendido, pero extrañamente feliz.
–¡Finny has hablado Español!–. Exclamó sorprendido.
–Tietysti! Olen ollut kanssasi jo pitkään, oli ilmeistä, että opitsen jotain/¡Claro que sí! He estado contigo durante mucho tiempo, era obvio que aprendería algo–.
–Tienes razón–. Le escuché reír divertido. –¿Podrías decir algo más en Español?–. Preguntó ilusionado.
Probablemente esperaba escuchar la palabra te amo, pero en cambio yo…
–Si quieres pito, pídelo y ya, no me hagas albures–. Dije comenzando a buscar mi ropa cuando una almohada fue a dar contra mi trasero.
Voltee y le vi completamente ruborizado, era una imagen sumamente adorable, pero tenía que ignorarla y ponerme a cocinar.
México por su lado se levantó de la cama, deje de hacer lo que estaba haciendo para prestarle atención. México se agachó dejándome ver todo absolutamente TODO de él, cuando esté se levantó me miró y se hizo el ofendido, comenzó a "vestirse" puesto que solo se había colocado una chamarra encima.
Esperen… ¡Esa era mi ropa!
–Meksiko!–. Grité acercándome a él.
Sin embargo el al contrario de sentirse intimidado o alguna otra cosa, recogió mi gorro del suelo y me hizo señas de inclinarme para poder ponerlo encima. Suspiré y accedí, no podía molestarme con él. Realmente no estoy molesto, pero era mi manera de ser.
México más de una vez me había dicho que era un “Mamón"
Lo acomodo con sumo cuidado, cuando terminó el me sonrió y acarició la mejilla.
–Listo, ahora eres tú–.
–Mitä tarkoitat/¿A qué te refieres?–. Pregunté.
–Tu gorrito es quien te hacer ser tú–. Me jalo de los pompones de mi gorro dejándome a su altura. –Es lo que te hace ser Kalevi, te hace ver muy guapo–. Dicho esto me besó.
Sentí mi cara arder, en verdad México con la más mínima acción podía hacerme enloquecer.
Intenté reprimir cualquier impulso sexual, tenía que desayunar o seguramente me desmayaria en el acto. México no era de hacerlo una hora… Podía aguantar 3 e incluso más.
Un escalofrío me recorrió cuando sentí como se ponía detrás de mí y comenzaba a acariciarme, cabe mencionar que aún no me vestía… México estaba usando algo de mi ropa.
–Meksiko, jätä se myöhempää käyttöä varten. Ensin on aamiainen/México déjalo para después, primero hay que desayunar–.
–Chale, está bien–. Dicho esto me soltó y empezó a caminar enfrente de mi meneando su trasero, podía ver cómo mi esperma se escurría entre sus piernas. Me sonroje y exalte cuando México volteó a verme. –Pero al menos quédate desnudo, me encanta ver lo que me voy a comer–. México se relamió los labios seductoramente.
«Voi jumala, en usko, että on huono kävellä alasti omassa talossani. Luulen, että "ystäväni" on aika kävellä vapaasti eikä olla kiinni housuihini/Oh dios, No creo que sea malo andar desnudo por mi propia casa. Creo que es momento de que mi "amigo" ande libre y no atrapado en mis pantalones».
En verdad México me había convertido en un descarado…
Lo que hago por amor.
Me encontraba preparando el desayuno, o más bien una parte de él. México estaba alegre en un banquito frente a la barra donde me encontraba cocinando moviendo sus pies como si fuera un niño mientras disfrutaba de un pan francés que había hecho, por mi parte estaba picando algo de fruta.
–Haluatko hilloa?/¿Quieres algo de mermelada?–. Pregunté.
–Quiero leche–. Respondió.
–A como chingas–. Dije en español.
México soltó una carcajada, intentaba no ahogarse por mi comentario al parecer le había resultado gracioso y estaba orgulloso de que aprendiera eso de él.
Sin embargo México señaló el cartón de leche aún lado mío y me pidió que le pasara un vaso.
Demonios me había hecho ver como un pervertido…
–Al parecer no soy el único que está ansioso–. Dijo después de darle un trago al vaso. –Pervertido–. Guió su mano a un pedazo de fruta que había cortado, saco la lengua y tragó haciendo un ruido de satisfacción.
«Paska/Mierda» pensé.
–Don Edgy ¿No podemos comer algo más? Este desayuno es muy sano–. Se quejó haciendo berrinche.
–Se on kohta Meksiko, ja älä kutsu minua emoksi!/Ese es el punto México, ¡Y no me llames emo!–.
–¡Está no es una fase es mi verdadero yo!–. Se burló de mí, yo solo atiné a sonrojarme. –Tengo antojo de unos taquitos o gorditas rellenas, ¡Finny si no me das lo que quiero, el bebé va a salir con cara de taco!–. Se quejó México.
Me sonroje cuando escuché la palabra bebé, México se sostuvo el estómago y hacia un adorable puchero, deje de pelar la fruta y me acerqué a él. Se veía súper lindo con mi abrigo, le quedaba demasiado grande, aproveché la grandeza de mi abrigo, le levanté un poco dejando ver el estómago de México y introduje mi cabeza en el interior del abrigo. México dio un pequeño brinco al sentir mis besos sobre su estómago.
–¿¡Qué pedo!?–. Exclamó, sin embargo no me alejo, al contrario acarició mi cabeza sobre la tela del suéter. –¿Has consumido alguna droga?–. Bromeó jalando el cuello del suéter para verme a través de él.
–Onko sinulla mahdollista tulla raskaaksi?/¿Es posible para ti quedar embarazado?–. Pregunté.
–No–. Respondió México mientras reía y me acariciaba.
–Kuinka surullinen/Que triste–. Contesté con frustración sacando ni cabeza del interior de su abrigo.
–Lo lamento–. Respondió con algo aflicción, se veía bastante decaído.
–Sillä ei ole merkitystä, minulle on ainoa asia olla kanssasi. Olet mitä rakastan eniten tässä maailmassa. Miztli/No importa, igual lo único que me importa es estar contigo. Miztli–. Le sonreí con cariño mientras me levantaba y acariciaba su cabeza.
–Kalevi–. Llamó.
–Jos?/¿Si?–. Pregunté.
–Ya te dije lo sexy que te ves con ese delantal–. Dijo levantando el delantal y dejando al aire libre mi miembro.
A sí, de nueva cuenta. Me encontraba desnudo. México guió su otra mano a mí miembro y comenzó a acariciarlo.
Demonios México me vas a matar un día de estos…
–Mi amor es totalmente honesto, te gusta que te toque–. México sonrió alegremente mientras seguía acariciando. Para facilitar su labor levanté el delantal por él.
–Pidä kiinni!/¡Cállate!–. Dije completamente avergonzado.
–No estoy hablando contigo, hablo con el amor de mi vida, pendejo–. Respondió molesto.
Me quedé perplejo ante el comentario, pero luego mi mente hizo "click" se refería a mí pene.
–Jos hän on elämäsi rakkaus, niin mitä minä olen?/Sí él es el amor de tu vida, ¿Entonces qué soy yo?–. Pregunté molesto.
–Mi puta–. México sonrió divertido.
Ese comentario me molesto un poco, así que realmente molesto hice a un lado la comida, tomé a México y le acosté en la barra de la cocina. Esté me miró sorprendido pero expectante de cualquier movimiento que hiciera.
Me miró con esos grandes y preciosos ojos que poseía ansioso, sabía como hacerme enloquecer. Me acerqué y lo besé con rudeza él en ningún momento se quejó. Al contrario apenas pudo me abrazó y acercó más.
Entre besos y caricias cuando la falta de aire se hizo presente me aleje, y éste me miró esperando cualquier movimiento mío, su respiración era entrecortada. Sonreí con cinismo al ver mi ansioso que estaba, entonces decidí bajar mi mano hasta su trasero y comenzar a prepararlo, pero su voz me detuvo.
–Ayer lo hicimos así que no hay problema en que me prepares, solo mételo y ya–.
–Oletko varma siitä?/¿Estás seguro de eso?–.
Él solo asintió y se dio la vuelta buscando una posición más cómoda, sonreí complacido por el mejor acceso y estaba a punto de introducirlo cuando sonó el teléfono.
Normalmente lo ignorariamos y follariamos como si no hubiese mañana, pero no era el teléfono de la casa, si no el celular personal de México.
Y ese tono en específico solo significaba algo o más bien alguien.
–Englanti/Inglaterra–. Gruñi.
Miré a México y éste suspiró bastante afligido, sentí como mi corazón se contrae al verle tan triste. México se hizo aún lado y bajo de la barra, no sin antes acariciar y susurrar un “Está bien”
Lo vi tomar el teléfono y atender su llamada, lo escuché decir un “Ahora, pero si acabo de volver” México había regresado hace poco de su viaje. Todo este tiempo me lo dedico a mí, México decía que su único compromiso era amarme y estar conmigo todo el tiempo que pudiera, además claro de sus tierras. Me sentí sumamente triste e impotente.
México se iría, otra vez…
Solté un gruñido más audible y México lo noto, volteó a verme con sus ojos tristes.
No podía hacer nada, no poseía el mismo dinero que Inglaterra. Jamás podría sustentar al pueblo mexicano, tenía que cuidar del mío. Suspiré y me entraron ganas de llorar.
México se iría lejos de mi y se acostaría con otro hombre.
Otro hombre que no fuera yo le haría el amor y marcaría su cuerpo.
México me contó su historia, sus matrimonios y todos los que pasaron por su cama, eso incluía a mí padre el Imperio Ruso, a mí hermano URSS y al hijo de éste Rusia.
Y por supuesto estaba yo.
Lo escuché decir “Ahí estaré lo más rápido que pueda, me iré enseguida” y terminó su llamada.
Me miró y acercó a mí, yo solo me di media vuelta cruzandome de brazos. México se sintió rechazado. No quise rechazarlo solamente me sentía impotente al no poder ayudarle más de lo que quisiera, mordí mi labio y le dí una mirada discreta, mi corazón se rompió al ver su expresión.
–Supongo que nadie quiere un durazno que alguien más mordió, solo soy una prostituta. No te merezco–.
Cuando México se comenzó a alejar de mí corrí hasta alcanzarle y detenerle. Mi cuerpo temblaba mi rechazo había lastimado a México.
–Fin, no puedo casarme contigo, mereces alguien mucho mejor como esposo–. Susurró.
–Alguien como Estonia–. Concluyó.
–Mutta en halua Viroa/Pero yo no quiero a Estonia–. Respondí.
–¿Por qué no?–. Preguntó. –Es bonito, educado, amable, mereces algo mejor que yo. Y creo que sería un cónyuge maravilloso, además… Aún tiene sus tierras, no como yo–. Dicho esto México se abrazó a sí mismo.
–En välitä siitä!/¡Eso no me importa!–.
–Eso mismo dijo España, por eso no pudo presentarme nunca como su esposo, y en lugar de eso. Me presentaba como su hijo, como su adorada colonia Nueva España–.
–Mutta en ole Espanja!/¡Pero yo no soy España!–. Grité y le volteé dejándolo frente a mí, lo tomé de sus brazos y sacudí.
–Olen Kalevi, maa tunnetaan maailmalle nimellä Suomi, olen pohjoismainen eurooppalainen maa, surkea, tunnelmallinen, katkera, tunnettu yhdestä metalligenin kehtoista ja tunnetuksi "onnellisimmaksi maaksi maailmassa". joku, joka ei ollut koskaan tarpeeksi vahva, ei pystynyt edes puolustamaan maani Venäjän hyökkäykseltä. Minun piti antaa osa maastani, olen joku, joka näki elämän yksitoikkoisena ja tylsänä. Kunnes tapasin sinut ... Meksiko, iloinen maa, joka vei minut pois syvimmästä ja pimeimmästä kaivosta. Joten älä tule tänne kertomaan minulle, että et ole sen arvoinen, jos olet kaikki minulle. rakastan sinua/Yo soy Kalevi, país conocido como Finlandia ante el mundo, soy un país europeo de la zona Nórdica, gruñón, malhumorado, amargado, conocido por ser una de las cunas del género metal y por ser el país más "feliz del mundo" soy alguien que nunca fue lo suficientemente fuerte, ni siquiera pude defender mis tierras del ataque ruso. Tuve que entregar parte de mi territorio, soy alguien que veía la vida como algo monótono y aburrido. Hasta que te conocí... a ti México, un país alegre que me sacó del pozo más profundo y oscuro. Así que no vengas aquí a decirme que no vales la pena, si tú lo eres todo para mí, Te amo–.
–Kalevi–. Susurró sorprendido.
–Älä koskaan sano, ettet ole sen arvoista, antaisin koko alueeni tehdäkseni sinut onnelliseksi/No vuelvas a decir que no vales la pena, daría la mitad de mi territorio con tal de hacerte feliz–.
–No digas eso ni en broma–. Expresó molesto pero con un tierno sonrojo en su rostro. –Solo bésame pendejo–.
Reí ante su comentario mata pasiones, pero accedí. México era más pequeño que yo, así que tuve que inclinarme para poder besarle. Lo abrace y envolví mis brazos en sus caderas, México hizo lo mismo con mi cuello. Al separarnos México pego su rostro junto a mi pecho, mi corazón comenzó a latir como loco, le vi sonreír me miró y dijo.
–El mío también se pone así cuando estoy a tu lado–.
Oh dios, ¿Podía ser mucho más lindo?
–Entonces vas a hacerme el amor… ¿O me voy a la cama de Inglaterra?–.
Muy bien México a veces podía ser un manipulador de primera…
Suspiré y alce su cuerpo, él se mostraba totalmente dispuesto y emocionado.
–Haluatko tehdä sen seisomalla?/¿Te importa hacerlo parado?–.
–Contigo donde sea y como sea–.
Me posicione firmemente y con ambas manos separé sus nalgas, comenzaba a frotarme contra él cuando pasó…
–Tere hommikust Soome!/¡Buenos días Finlandia!–. Dijo felizmente Estonia abriendo la puerta de la casa.
En ese momento me paralice, Estonia también se quedó quieto observando la situación frente a él. Por otro lado México se encontraba estoico, no parecía darle pena alguna, al contrario lo noté algo más ¿Decidido? ¿Inspirado? ¿Confiado? No encontraba la palabra indicada, solamente estaba frustrado por mis nulos intentos de tener sexo con México.
Mi frustración y pensamientos se vieron interrumpidos cuando sentí una calidez en mi miembro.
«Mutta mitä helvettiä!?/¿¡Pero qué demonios!?».
–Ah~ buenos días Estonia, bienvenido… ¡Ngh! Estamos desayunando ¡Ugh! ¿Gu-gustas acompañarnos?–. Dijo mientras comenzaba a bajar y subir auto-penetrándose a sí mismo.
Estonia solo se quedó quieto observando sonrojado, cuando reaccioné saque mi miembro dentro de México, y éste se quejó gritando “¡Hey!” y corrí con él entre mis brazos gritando un “Espera por favor, sírvete algo de comer, enseguida volvemos" a Estonia mientras esté asentía totalmente apenado, y yo corría hacia la comodidad de nuestra habitación.
Aventé a México a la cama y cerré la puerta de la habitación, estaba completamente rojo y rápidamente comencé a buscar ropa. Mientras México me observaba cómodamente en la cama, aunque sé le veía visiblemente molesto.
–Eso te pasa por dejarle pasar así como si nada, no tenemos privacidad por el hecho de que Estonia puede entrar como si estuviera en su propia casa–. Bufó.
Suspiré cuando termine de ponerme los pantalones, Estonia había sido uno de mis aliados en la guerra de invierno, le había dicho que mi casa es su casa, y se lo tomó muy enserio. Podía entrar como si nada, no molestaba pero a México no parecía agradarle.
Un momento…
Sonreí con triunfante mostrando una maliciosa sonrisa, ahora lo entendía todo.
–Oletko kateellinen?/¿Estás celoso?–.
–Chinga tu pito pendejo–. México se dio la vuelta y escondió su rostro en una almohada.
Me dio bastante risa y ternura ver a México comportarse de esa manera, parecía un niño. Aveces podía ser un manipulador y otras veces se comportaba como un niño de manera infantil y juguetona. Después de abrochar mis pantalones y acomodar mi ropa por completo le dí una mirada a México para notar como este seguía recostado mientras aún escondía su rostro en su almohada.
Con maldad sonreí acercándome a él, no iba a perder la oportunidad de molestarle un poco. Parece que se dio cuenta de mi presencia apenas el peso de mi cuerpo tocó la cama, pues vi como este se estremeció esperando pacientemente.
Levanté con cuidado mi abrigo el cual México estaba usando, y éste se removió un poco mientras soltaba un quejido que fue callado por la almohada. Use su trasero como almohada y comencé a frotar mi rostro con él. Parece que México esperaba algo como caricias o que cediera a sus encantos.
Pero en cambio recibió una mordida de mi parte, le escuché quejarse, la primera mordida fue con fuerza, seguramente dejaría una marca, pero las siguientes fueron suaves como modo de disculpa lamía las heridas que había causado.
–¡Pendejo!–. Se quejó México.
Okay eso me molesto un poco así que decidí volver a morder con fuerza mientras México movía sus pies en un intento de lograr quitarme de encima, claro sólo logró golpearme un poco, pero en ningún momento deje de morder.
–¡Duele! ¡Me duele cabrón!–.
Antes sus quejidos decidí alejarme, no sin antes vengarme de nuevo…
Levanté mi mano y di un fuerte manotazo a la herida causada, México se estremeció por completo y gritó un sonoro “¡Auch!" Lo vi temblar, quizás me había excedido un poco…
–Meksikossa, oletko kunnossa?/México, ¿Estás bien?–.
Me acerqué a él con tal de mirarle de cerca ya que seguía temblando, quizás le había golpeado muy fuerte.
Cuál fue mi sorpresa al ver un rostro completamente lascivo…
–Bésame–. Ordenó México con su mirada suplicante.
No pude decir que no…
Me coloqué detrás de él, y tomé de la barbilla levantando un poco su rostro para poder besarle, fue un beso demandante desde el principio. Era una lucha por ver quién dominaba a quien, lastimosamente perdí… México tenía demasiada experiencia. Jugaba con mi lengua como un experto algo que me estaba haciendo “Despertar" era el hecho de su jugaba con el piercing que yo poseía en la lengua. Varias veces México me dijo el hecho de que encontraba muy sexy mi piercing, y porque no intentaba con una perforación en el pene. Cosa que considere un fetiche suyo, pero siendo pareja durante tanto tiempo él conocía a la perfección mis fetiches y yo los suyos.
También sabía que en el fondo era un masoquista…
Me miró con esos dulces y encantadores ojos, tenía la mirada llena de lujuria, solo pude tragar nervioso ante las ideas que rondaron por mi cabeza. Pero sabía que desgraciadamente debíamos parar, Estonia estaba esperando en la sala y México tenía que irse con ese maldito de Inglaterra…
–Meksiko, Viro odottaa/México, Estonia está esperando–.
–¿Y a quien chingados le importa Estonia?–.
–Meksiko/México–. Susurré.
Su mirada decia claramente, “penetrame que el mundo y todos en él se jodan”.
Me acerqué a él y le dí un beso, tenía claramente las intenciones de molestarlo.
–Sanoit äskettäin, että Viro olisi täydellinen ottelu minulle, että olin kohtelias, ystävällinen ja kaunis. Mitä tapahtui kaikille sanoillesi, jotka sanoit?/Hace poco dijiste que Estonia sería la pareja perfecta para mi, que era educado, amable y hermoso. ¿Qué pasó con todas esas palabras que dijiste?–. Pregunté.
–Eso es algo que solo yo puedo decir, tú no tienes el derecho de decirlo–. Respondió desviando su mirada.
Realmente a veces podía ser tan bipolar y contradictorio…
–Miksi? ei/¿Por qué?–. Pregunté nuevamente.
–Porque...–. se detuvo y dio la vuelta para abrazarme. Me sorprendió su acción pero decidí seguir escuchando.
–Porque solo debes pensar en mí...–. Me miró con sus ojos tristes.
–Me pone de muy mal humor… Estonia siempre está detrás de ti, te come con la mirada, odio que venga aquí… Aún así, sé que es un buen partido, ¿Quién no le querría? Me da miedo que algún día caigas en la tentación y me abandones. Puede darte algo que no puedo darte yo. Es perfecto y superior en todos los sentidos, no tiene mancha alguna, está puro...–.
Iba a decir algo, no soportaba oír esas palabras salir de la boca de México, sin embargo el continuo.
–Tú no sabes lo que es ver algo o alguien, y no poder ser como él. Ver la perfección absoluta en ello y intentar alcanzar esos ideales, me enoja porque es lo contrario a mí… Estonia y yo somos polos completamente opuestos, me da miedo el día que te des cuenta de que estás con alguien como yo y me abandones, no lo soportaría…–.
Se separó de mí y sentó en la cama, yo solo le imite esperando que terminará.
–Para empezar… ¿Por qué alguien como tú está con alguien como yo?–. Preguntó totalmente dolido.
Yo solo sonreí y me acerqué acaricié su mejilla y le robe un beso.
–Sinun pitäisi jo tietää ... Onko se jotain itsestään selvää?/Ya deberías saberlo… ¿Es obvio no?–.
México negó con la cabeza, esperando mi respuesta.
–koska rakastan sinua niin paljon/Porque te amo tanto–.
–Ja Suomi ei ole mitään ilman rakastettua Meksikoa/Y Finlandia no es nada sin su amado México–. Le sonreí.
México me saltó encima, yo solo reía felizmente como un niño feliz, dimos varias vueltas por la cama, México repartía muchos besos por mi rostro. Mientras susurraba unas extrañas palabras, en un idioma que no era castellano…
–Namiktli! Namiktli! Ni mitz tlazohtla–. Susurraba mientras repartía besos por mi cara.
–Mitä se tarkoittaa?/¿Qué significa eso?–. Pregunté.
–Es la respuesta a tantos años de estar chingandome la madre–. México sonrió encantadoramente.
No pregunté nada, ni exigí una respuesta, sabía que tenías sus motivos. Solo disfrutaba de las encantadoras y calidas caricias que México me propinaba.
Claro eran caricias tiernas hasta que…
–Meksiko–. Susurré con los ojos cerrados mientras disfrutaba de las placenteras pero indecentes caricias.
–¿Qué?–. Le escuché preguntar con inocencia.
–Voisitko lopettaa yrittämisen vietellä minua?/¿Podrías dejar de intentar seducirme?–. Pregunté.
–No~~–. Canturreo. –Realmente quiero hacerlo con mi futuro Namiktli–.
«Otra vez esa extraña palabra» pensé.
–Sinun on matkustettava/Tienes que viajar–. Poco a poco fui cediendo a sus caricias, su lengua pasó con confianza sobre mi cuello, lamía y besaba con cuidado llegó a mi barbilla y lamió hasta llegar a las comisuras de mis labios donde depositó un cálido beso.
Claro no quería que se fuera con el maldito de Inglaterra, pero Estonia estaba abajo.
–Un rapidito–. Susurró contra mis labios.
–Sitä ei ole sanastossasi, se ei ole jotain 15 tai 20 minuuttia. Kanssasi se on jotain jopa 3 tuntia/Ese no existe en tu vocabulario, no es algo de 15 o 20 minutos. contigo es algo arriba de 3 horas–. Susurré “Molesto"
–No es como si duraras mucho, te haré eyacular rápido lo prometo–.
No sabía si sentirme ofendido por lo que dijo… okay muy bien, me siento bastante ofendido.
–Sanoin jo ei/Ya dije que no–. Me levanté indignado de la cama.
–Vamos Fin~~ no te pongas así, no es mi culpa que no puedas aguantar mi ritmo–. Canturreo con descaro.
–Se on ok/Está bien–. México se levantó entusiasmado.
–Kun palaat matkaltasi, annan sinulle niin kovaa, että et halua koskaan haastavan minua. En päästä sinua ulos huoneesta tuntien ja päivien ajan, ennen kuin rukoilet lisää, jalat tärisevät etkä voi nousta sängystä/Cuando vuelvas de tu viaje, te daré tan duro que desearás no haberme retado nunca. No te dejaré salir de la habitación durante horas y días hasta que ruegues por más, tus piernas tiemblen y no puedas levantarte de la cama–. Dije seriamente poniendo mis manos en mis caderas haciéndome ver más imponente.
La mirada de México lo decía todo, un bello sonrojó, una mirada lasciva, y mordía con fuerza su labio inferior.
–Suena a una perfecta noche de bodas–. Susurró.
–Mitä?/¿Qué?–. Pregunté confundido.
–Nada~~–. Dijo sonriente –Fin, mi amorcito~~–. México canturreando mientras caminaba hacía mi.
Creí que intentaría alguna artimaña, en cambio solo se dejó caer en la cama y abrazó una almohada.
«Que raro» pensé.
–Oye Fin–. Me llamo. –¿Que tal si le dejas un detalle a Inglaterra?–. Con sensualidad México acarició la mordida que previamente había hecho.
Claramente no dude ni un segundo, México tenía una mirada decidida al igual que yo, sonreí mostrando la perfecta fila de dientes puntiagudos que poseía y me acerque a él con la intención de dejar una nueva marca en su piel.
México tenía su trasero en la esquina del colchón, sus pies estaban apoyados en el suelo, le veía jugar con ellos, levantando uno u otro, jugando como si de un niño pequeño se tratase. Posé mi mano en su glúteo y lo estruje, el solo soltó un pequeño “¡Ah!” de sorpresa. Aún manteniendo presión sobre su glúteo bajé hasta quedar a la altura perfecta para comenzar mi trabajo.
Abrí grande mi boca, y decidido a decirle a ese maldito inglés que México era mío, me dispuse a morder el trasero de México, encajé mis dientes en él y mordí con fuerza, México se retorció. No sabía si era de placer o dolor, posé mis manos en su cadera para intentar parar la convulsión de su cuerpo, cuando dejé de morder, me dedique a lamer con cuidado la herida causada. Había sacado un poco de sangre la marca que hice, apenado intente curar la herida con mi saliva. Mientras México suspiraba cómodamente ante mis acciones.
–Mm~~ de verdad~~ No puedo irme sin hacerte algo mi amor~~–. Canturreo alegremente.
Okay en este momento lo sabía… Esté México era peligroso.
Sabía lo que estaba a punto de hacer…
Rápidamente me levanté e intenté huir, sin embargo México enredó sus piernas en mi cadera impidiendome escapar. ¡Esto era parte de su plan me engatuso y caí en la trampa! Cuando México no tenía lo que quería, lo conseguía a la fuerza…
¡Maldigo a mi hermano URSS el hizo a México de esta manera!
–Meksiko päästää minut Viro on alla!/¡México déjame ir Estonia se encuentra abajo!–.
–Estonia me la pela–.
Me hizo caer en la cama y apenas caí intente huir, sin embargo México alcanzó a sujetarme del pie. Jalo mis pantalones y ropa interior hacia abajo, dejándome totalmente expuesto. Maldición acababa de vestirme pero a México parecía no importarle nada, se encontraba realmente extraño…
«¿Qué es esto… acaso está?»
Acercó su rostro a mi miembro expuesto y comenzó a olfatear, le oí canturrear un “¡Ah! Huele muy bien~~” Esto provocó que yo pasara saliva nervioso. Comenzó a frotar su rostro con él y seguía aspirando el olor, México parecía estar en celo...
–Mm~~ Voy a marcar mi territorio. Ah~~–. Susurró soplando encima del glande.
«Paska!/¡Mierda!»
Estaba bastante nervioso, más de una vez había visto esta faceta de México y solo la mostraba cuando… Cuando había otro country demasiado cercano a mi…
Realmente… ¿Está celoso?
–Finlandia~~ ¿Lo recuerdas?–. México canturreo feliz mirándome con esos adorables ojos color chocolate.
–Así fue como tú y yo tuvimos nuestra primera vez–. Susurró antes de succionar mi miembro.
–¡Ahhhh!–. Exclamé apenas comenzó a hacerme sexo oral.
Me retorcí de placer en la cama, estrujando las sabanas al sentir como México succionaba con fuerza, en el momento en que México mencionó nuestra primera vez, varios recuerdos llegaron a mi mente. Eso recuerdos me atacaron volviendo realmente excitante el momento.
Empezó con México tomando la iniciativa… tal y como ahora México tenía tanta experiencia… En cambio yo solo era un mocoso dejándose llevar por el momento, no podía ni moverme cuando llegó el momento de la penetración. México se encargó de todo, en ningún momento se quejo de mi falta de experiencia solamente estrujó mis manos y me dio el apoyo emocional en aquella situación.
Aunque debía ser un recuerdo completamente hermoso, no lo era…
Porque aunque quisiera, mi primera vez con México no fue completamente de él y mía…
Fue “Compartida”
“Año 1939 frontera entre Finlandia y la unión soviética”
sitio de guerra istmo de Karelia;
–Nopea pakene!/¡Rápido huyan!–.
Unos soldados elegantemente vestidos por un uniforme pulcro color blanco, seguían a su líder. Aquél temerario y valiente país que había iniciado la independencia de sus propias tierras, aprovechando el hecho de que su padre se encontraba batallando con su hermano menor la Unión Soviética, “El gran ducado de Finlandia" o ahora mejor conocido como “República de Finlandia" ordenaba a sus hombres retirarse del campo de batalla, no podían ante el inminente ataque ruso. El ejército de su hermano los superaba con creces, no tenían esos armamentos, simplemente el gobierno de su hermano decidió atacar de repente, logrando que su gente entrara en pánico al no tener el armamento necesario.
Los soviéticos no solo les ganaban en número, los malditos tenían armas de larga distancia, tanques, bombas, aviones y barcos. Esos malditos bastardos venían armados hasta los dientes. En cambio ellos solo poseían esquíes con los cuales se movían como elegancia y rapidez sobre la nieve, intentando atacarlos por sorpresa, poseían arqueros y francotiradores, y algunos soldados eran campesinos. Jamás habían tenido experiencia alguna en batalla.
Su gente estaba sufriendo aquel campo de guerra era inhumano, incluso para las fuerzas soviéticas. Estaban debajo de 40° grados bajo cero, veía tanto como de su lado, como del soviético morir por las bajas temperaturas y falta de alimento. Pero el maldito de Stalin no parecía darse por vencido.
El maldito estaba dispuesto a invadir y conquistar su país, y no veía oposición alguna por parte de su hermano menor.
Él cuál lideraba con gusto sus tropas, era un maldito enfermo. Más de una vez lo vio reír como un desquiciado mientras se burlaba de la poca resistencia de su gente, y gritaba un muy estruendoso “Patético ¡Gloria a la unión soviética!" O un “Deberian sentirse orgullosos de ser invadidos por nosotros, haremos trabajar sus tierras como se deben" Finlandia lo sabía…
URSS y Stalin querían la gloria que alguna vez tuvo el imperio ruso.
Claro que Finlandia no era un país que se dejaría conquistar tan fácilmente, aunque eran menos que el ejército rojo, supieron cómo enfrentarse inteligentemente a tan grande enemigo, dieron bastantes bajas al ejército rojo. Lo cual obviamente molestaba al hermano menor de Finlandia la URSS.
Aunque esté último no supiera el hecho de que era su hermano mayor, igualmente el imperio ruso nunca lo reconoció como su hijo, más bien lo reconoció por ser su esclavo al igual que otros países.
Su orgullo era URSS, mismo que terminó aniquilandolo.
Finlandia estaba harto, Urss había tomado como base militar varias ciudades de su tierra, en algunos pequeños pueblos mataron a los campesinos, y en otros los dejaron vivos aunque éstos hubiesen preferido la muerte, los usaban como esclavos. Habían llegado a sus oídos rumores de que los soldados del ejército rojo habían abusado sexualmente de las mujeres de su población. Esto hervía la sangre de Finlandia, no quería mestizos por parte de esos sujetos en su tierra, no quería que sus mujeres cargarán con el fruto de una violación…
Finlandia se preguntaba ¿Dónde se encontraban sus aliados? Francia, Inglaterra, estados unidos… ALGUIEN por favor… alguien que le ayudará con comida para su gente, y armas para que sus soldados pudieran enfrentar al demonio de rojo.
Finlandia estaba frustrado apenas escuchó que el enemigo atacó su capital, esos malditos realmente querían conquistar toda su tierra. Decidido se levantó y tomó su rifle. En todo ese tiempo Finlandia fue el que más rusos había matado, llevaba arriba de 500 muertos. Le habían apodado “La muerte blanca" Finlandia era un reconocido francotirador y era el orgullo del pueblo finlandés.
Con valentía fue a buscar a su hermano; Finlandia subió a lo alto de un árbol, tenía una vista perfecta ahí arriba, sus hombres le dieron la noticia de que habían logrado asaltar a un batallón del ejército rojo, del cual robaron provisiones. Entre ellas unos francotiradores rusos y le ofrecieron uno, el cuál Finlandia humildemente rechazo, ya que dijo que el reflejo del mirador de la arma podría delatar su posición al enemigo, aunque bien sabían que solo un country podía matar a otro country, aún así podían ser heridos.
Finlandia era sumamente inteligente, por esa misma razón el ejército finlandés había logrado sobrevivir al temible enemigo, les enseñó a sus soldados como moverse con los esquís, a como usar los pantanos y lagos a su favor, a como evitar que su respiración fuera notoria para sus enemigos, esto lo logró introduciendo nieve en su boca. Además se que habían hecho unas trincheras en las cuales esperaban los avances de los tanques rusos y los atacaban con granadas. Sin duda alguna Finlandia era un estratega de temer, si no fuera porque poseía muy poca fuerza militar él sería el vencedor de la guerra.
Lo sabía, sabía que no podría derrotar a su hermano menor, aún así le encantaba ver el hecho de que ese mocoso malcriado entrará en cólera por sus queridos tanques, aviones, barcos y tropas caídas. Finlandia simplemente disfrutaba ver su sufrimiento y frustración.
Con la respiración cansada y amortiguada por la nieve en su boca, sacó un visor de su mochila y observó a sus alrededores, sabía que su hermano había hecho un campamento por esa región, buscó cuidadosamente y bingo. No fue muy difícil encontrar su campamento, las banderas soviéticas y hombres elegantemente vestidos con trajes cafés y ushankas resaltaban entre la blanca nieve.
Observó como los malditos se reían bebiendo vodka y comiendo sin problema alguno, incluso algunos a encontraban danzando, pese al intenso frío de aquel cruel invierno no parecía afectarles. Los malditos tenían abrigos los cuales lucían sumamente cálidos… Maldición Finlandia deseaba que sus soldados tuvieran al menos esos abrigos, ya había varios que morían de hipotermia.
Pese a el bullicio de los soldados soviéticos, no observaba a su líder con ellos. Claro los lideraba la Urss, Stalin nunca saldría de su maldita conformidad, el bastardo se encargaba de la purga realizada en tierras rusas.
Finlandia sentía pena y odio hacia los rusos, pero sobretodo pena. Eran tan idiotas que entre ellos mismos se mataban. Suspiro, aunque él no estaba tan lejos de eso, con la guerra civil finlandesa. Incluso el mismo se daba pena.
Se dió la tarea de buscar a Urss, se le hacía raro que no estuviera cerca de sus soldados. Demasiado extraño…
–¿Huh?–. Exclamó.
«¿Qué es esto?»
Finlandia se sonrojó completamente, había encontrado a Urss, sin embargo este no se encontraba solo…
Urss se encontraba aun lado de uno de los miles de lagos que habían en su territorio, mismos lagos que impedían el paso de los soldados soviéticos en su territorio. Pero no esperaba encontrar esto…
Su hermano siempre se mostraba serio, era conocido por ser un hombre completamente estoico y sin emociones. No espero encontrarlo de esta manera… Tan “romántica”
No se encontraba solo, estaba con otro country, nunca antes le había visto antes. Sus colores eran claros y vibrantes, eran hermosos. Transmitían una alegría y una vibra positiva.
¿Quién era él?
Nunca le había visto, antes y quedó fascinado. Aunque le molestaba el hecho de que su hermano estuviese tocando y besando a ese encantador ser.
Claramente observaba cómo Urss y el otro país se daban un beso francés, desde aquí veía su respiración agitada, Urss estaba distraído, era el momento perfecto para matarle…
Sin embargo, no pudo, temía que el otro país pudiera salir lastimado, así que solamente observó…
La pareja parecía que no se veían hace bastante, el país escandinavo observaba la “tierna y romántica" escena aún lado de lago, el finlandés recordó una típica escena de la película casablanca, o al menos una escena romántica de alguna película. Como sea, solamente estaba concentrado en el país más pequeño y como este parecía totalmente encantado por las atenciones del hombre ruso.
–Urss, Mm–. Se quejó México.
–Мексика–. Susurró Urss besando el cuello de su amado, mientras retiraba poco a poco su chamarra la cual le impedía a su cuerpo congelarse.
México por otro lado intentaba subirse la ropa, su jefe tenía el descaro de volver a desnudarle. La última vez que se dejó llevar termino revolcándose con él en medio de la nieve, al día siguiente se resfrío, ¿Cómo el cabrón soportaba vivir en ese frío? Esta gente estaba demente.
Se supone que el solo había venido con la intención de entregar provisiones a su jefe, y de llevarle a su bendición, en cuanto llego entregó las provisiones y dejó a Urss saludar a su pequeño Rusia. El chamaco le había insistido que lo llevará a ver a su papá, México sabía que era peligroso, sin embargo no dudaba en lo buen estratega que era su amado. Pesé a qué Urss se viera como un malhumorado, no lo era. Al menos no con él o alguno de sus hijos, incluso era bastante romántico y detallista.
México se sonrojó, el eslavo siempre le recibía con alguna flor o algún dulce, y también fue muy tierno el hecho de que le llevará lejos del bullicio para estar a solas, sabía qué Urss se encontraba estresado, pero si quería hacerlo… Pudieron hacerlo en la casa de campaña después de que Rusia se durmiera, no al aire libre.
Pero México inmediatamente recordó qué Urss era fanático de hacer todo al aire libre, eso incluía tener sexo a la intemperie, le miró juzgandolo después de terminar su beso, mientras que Urss se dedicaba a acariciar y besar todo rastro de piel expuesta.
–Espera a que Rusia se duerma, y lo hacemos en la casa de campaña–. Rogó el latino mientras Urss habría la chamarra de México un poco más dejando expuesto su torso, dio varios besos húmedos por el cuello de éste, dejando algunas marcas en su paso, hasta que con un camino de besos llegó al pecho del mexicano donde se dedicó completamente a acariciar sus pezones.
Sin embargo el eslavo lo ignoró y siguió con su labor, México suspiro, A veces Urss actuaba como un adolescente.
–Tengo frío–. Se quejo.
Urss detuvo sus acciones y subió hasta quedar a la altura de México, le tomó de la cintura y abrazo acercandolo a él, México chocó contra el pecho de Urss y este besando su cabeza la susurraba cosas como “Te amo" "Te extrañe tanto" causando que México se sonrojara al ver cómo Urss actuaba tan tierno con él.
Sin embargo… arruino ese romántico momento con lo siguiente.
–Кроме того, когда он внутри, вам не будет холодно/Además, cuando este en tu interior no sentirás frío–. Urss sonrió con perversión y México se sonrojó ante lo dicho por el eslavo, Urss tomó la mano del Mexicano y la guío hasta sus pantalones.
México trago saliva al sentir la dureza de su amante contra su mano, Urss sonrió cuando vio al mexicano completamente embobado.
–Tremendo misil te cargas–. Susurró México contra los labios de Urss.
–И извращенец это я?/¿Y el pervertido soy yo?–. Urss se burló.
–Aún lo eres, viejo rabo verde–. México algo molesto por la burla de su amante, apretó sus testículos mientras que esté se quejaba ante el fuerte pero excitante apretón.
Urss miró mal a México por el apretón, y este se hizo la víctima, dejó caer su chamarra hasta sus codos e hizo un adorable puchero. Sabía que de esa manera, al eslavo se le pasaría el enojo.
–¡Ah! A-aquí no~~–. México llevó su mano hacia su rostro y se cubrió con la enorme manga de su chamarra, a Urss se le hizo esta imágen completamente adorable y sexy, y lo mismo pensaba Finlandia.
Urss trago saliva, abrió la boca mostrando sus colmillos y observó el blanco cuello de México…
–Только один укус/Solo una mordida–. Susurró Urss.
–Esa mordida pasará a ser algo más, no quiero–.
–Мексика–. Urss ignoró la negación de México y se puso encima suyo.
México suspiro, sabía qué Urss era de aquellos hombres que veía algo que quería, le gustaba y lo obtenía. Solo dio un gran suspiro y se dejó hacer.
Mañana tendría un resfriado seguramente…
Urss bajaba la chamarra de México, acariciando sus brazos de paso, México agradeció internamente qué Urss fuera un “Caballero" aveces… y le tratará tan dulcemente de vez en cuando.
Se encargaba de hacerle sentir bien… Siempre estaba pendiente de él, cuando quería correrse, cuando necesitaba una caricia, cuando necesitaba un beso, siempre le daba lo que quería.
Finlandia observaba atentamente, trago saliva al observar cómo Urss levantaba la camisa de México dejando expuesto su torso y sus rosados pezones, los cuales Urss comenzó a acariciar y lamer con lujuria. Finlandia se quejo, algo en sus pantalones comenzaba a despertar y el ver aquella imagen tan sensual frente a él solo lo hacía sentir peor…
Nunca había tenido su primera vez… No sabía absolutamente nada de sexo, quizás sería el momento ideal para aprender…
Demonios eso sonaba demasiado voyerista…
–¡Ahhhh!–. Se quejó México cuando URSS jalo con fuerza uno de sus pezones. –¡Le-Leonid!–. Grito México.
Cuando Urss escucho a México gritar su nombre, prácticamente bajo los pantalones de esté rápidamente, México solo dio un pequeño grito al sentir el frío, y Finlandia trago en seco apenas vio cómo su hermano desnudaba a México.
Urss estaba más que duro y dispuesto a darle con fuerza a México, sin embargo se detuvo apenas escuchó una tierna voz.
–вот они!/¡Ahí están!–. Exclamó un pequeño Rusia.
Urss y México se sonrojaron, Rusia les habia descubierto en una situación bastante incómoda. Si bien Urss no había penetrado a México, este se encontraba semidesnudo en medio de la nieve.
–Что они делают Потому что мистер Мексика голый, разве ему не холодно?/¿Qué están haciendo? ¿Por qué el señorito México está desnudo? ¿No tiene frío?–. Pregunto inocentemente un pequeño Rusia.
Sin embargo ambos adultos se encontraban petrificados, Urss aún tenía su boca dentro del pezón de México.
–Папа, почему ты сосешь сосок мистера Мексики? Ты ребенок? Мексика может производить молоко!?/Papá, ¿Por qué estás chupando el pezón del señorito México? ¿Eres acaso un bebé? ¿¡México puede producir leche?–. Exclamó emocionado Rusia.
–да/Sí–. Respondió Urss alejando su boca del pezón de México el cual se encontraba bañado en saliva.
–Предполагается, что это должны делать только папочки, и только когда они беременны ... может ли мистер Мексика забеременеть?/Se supone que eso solo hacen las mujeres papá, y solo cuando están embarazadas... ¿¡Él señorito México puede quedar embarazado!?–. Pregunto aún más emocionado el pequeño Rusia.
–¡No!–. Exclamó México empujando abruptamente a Urss haciéndole caer, mientras cubría su pecho apenado. –Quiero decir… No mi amorcito, ven aquí–. El mexicano subió sus pantalones y cubrió su pecho, se levantó y alzó al pequeño niño en sus brazos. Este se pego a su cara al pecho del mayor y sonrió al sentir la calidez del mexicano.
En ese entonces México solo veía a Rusia como su pequeño “hijo" México nunca se habría imaginado que unos años después terminaría teniendo un relación con el hijo de su antiguo amor.
–Eso solo es posible para las mujeres, mi cielo–. México tomó la cabeza del pequeño país y le llenó de besos, Rusia simplemente se reía mientras México pasaba ahora a besar sus mejillas. Urss miró enternecido la escena mayor y su amante, en ese momento Urss tuvo la fantasía de tener a México recibiendolo después de un largo día de trabajo en su casa, con su familia. O de tener a México a su lado apoyándolo en el campo de batalla.
Cualquiera que fuera el sueño o ilusión del comunista, veía a México a su lado. Se levantó y abrazó a su familia. En ese momento Urss pensaba hacer a México parte de su familia, y posteriormente lo hizo después de la guerra.
–Тогда у меня не будет нового брата?/¿Entonces no tendré un hermanito nuevo?–. Pregunto Rusia inocentemente mientras México se sentía literalmente incómodo.
–Mi-mi amor–. El mexicano se sonrojó. No podía creer que tenía esta conversación con un niño pequeño.
–Ты и папа парни, верно?/Tu y papá son novios ¿Verdad?–.
–¿¡Eh!? Pues...–. El latino miró al comunista pidiendo ayuda para dejar esta incómoda conversación sobre su anatomía y relación con el país soviético, sin embargo el ruso tenía una mirada orgullosa y un adorable sonrojo en su rostro, México solo tragó saliva nervioso.
–Если ты и папа не парни, значит, ты женился на мне!/Si tú y papá no son novios, ¡Cásate conmigo!–. Exclamó el pequeño Rusia.
Los adultos se estremecieron al escuchar lo dicho por el pequeño, México se sonrojó y por su lado Urss veía a su hijo como un posible rival.
–Российская Федерация!/¡Federación de Rusia!–.
–Huy, ya te bautizaron chamaco–. Dijo el mexicano entregando al pequeño a su padre. México se reía al ver como actuaba Urss con su hijo, en verdad estaba celoso de un pequeño niño, México estaba admirando el adorable paisaje cuando divisó como un soldado con un francotirador bajaba de un árbol.
Ese maldito… Tenía en la mira a su familia…
–Urss mi amor–. Llamó dulcemente el mexicano a al mayor que aún sostenía a Rusia entre sus brazos.
–Если?/¿Si?–. Preguntó el soviético.
–Quiero dar una vuelta por el territorio–. México se comenzó a acomodar la ropa, mientras el soviético le miraba con preocupación, no le agradaba esa idea. Dejando a Rusia en el suelo, se acercó al mexicano y le preguntó el motivo.
–Почему? Мексика опасна/¿Por qué? México es peligroso–. Dijo el eslavo visiblemente preocupado.
–Solo será una vueltita~~ además–. Jalo al soviético de su abrigo, dejándolo a su altura. México acercó su rostro al oído del mayor y le susurró. –Cuando vuelva tendremos una noche muy especial~~–. Con sensualidad acarició el pecho del ruso y beso su mejilla, el ruso solamente asintió efusivamente y tomó al niño entre sus brazos despidiéndose del mexicano, Urss tenía una tonta sonrisa en su rostro, que asustaría a cualquier soldado que no estuviese acostumbrado a ver a la Urss sonreír. Mientras tanto Rusia le decía a su padre que quitara esa cara de idiota.
México sonrió con ternura al ver a su hermosa familia, pero su sonrisa cambio en cuanto vio el camino por el que se fue el soldado finlandés, el mexicano estaba furioso.
Nadie le apuntaba a su familia con un arma… NADIE.
Finlandia se encontraba corriendo en medio del bosque, se maldecía internamente por no poder acabado con la razón de sus problemas, la razón del sufrimiento de su pueblo, simplemente no pudo matar a su hermano menor Urss…
Sabía que una razón había sido el hecho de que vio al país eslavo con ese hermoso país tricolor, pero la otra razón por la que no pudo tirar de gatillo fue…
–Hitolla on poika/Él maldito tiene un hijo–.
Se quejó el finlandés mientras seguía corriendo, hacía un parkour perfecto sobre las rocas, saltaba y corría sin dificultad alguna, el nórdico estaba enojado consigo mismo por el hecho de no poder acabar con Urss, pero su corazón se removió al ver como el soviético era un padre amoroso con su pequeño hijo.
Aún recordaba la sonrisa del niño, cuando el ruso besaba sus mejillas y jugaba con él entre sus brazos, no podía arrebatarle su padre a un pequeño. No podía…
Paró en seco, y se sentó a un lado de un árbol, abrazo sus piernas y comenzó a sollozar. Sabía que su gente sufría, y antes que nada estaban ellos y después ellos. Entonces… ¿Por qué no lo hizo? Estaba muriendo personas inocentes, cada día había más bajas, cada día más personas perdían miembros de sus familias, cada día más sus hombres dejaban atrás sus sueños y esperanzas.
Cada día más la gente de Finlandia vivía el infierno en la tierra…
Y él tenía la culpa de eso, todo porque no pudo matar a aquél hombre, aquel hombre que al parecer no era del todo frío y cruel, tenía una familia a la que amaba…
Finlandia sintió envidia completamente, el siempre estuvo sólo. Nunca antes había tenido familia, estaba completamente sólo.
Esto solo hizo que su rabia, enojo y tristeza aumentará más, miró abajo y pudo recordar la primera razón de no matar al soviético, aquel hermoso país…
Tragó saliva, cuando el país tricolor se hizo presente en sus pensamientos, recordó cada movimiento de su hermano con el más pequeño, como este disfrutaba completamente la atención del mayor. Finlandia se sonrojó, por un momento se imaginó a sí mismo con el pequeño país.
Exacto… él había sido uno de los causantes de que no matará a la Urss. Él tuvo la culpa desde el principio, todo por haberse fijado en aquel país, todo porque su malditas hormonas salieron y esperaba ansioso ver al país retorcerse en placer, aunque fuera otro el que lo hiciera, Finlandia no pudo evitar tener una erección cuando vio como el chico se retorcía debajo del mayor, como esos botones rosados estaban al descubierto y como la saliva escurría de la comisura de sus labios.
Finlandia comenzó a temblar y respirar con rapidez, tragó saliva y abrió la boca dejando salir su lengua, no sabía qué le pasaba, solamente se sentía extrañamente… Caliente…
Miró con lentitud hacia abajo, pudo notarlo… Maldición tenía una erección…
Se quejó y maldijo internamente, intento apretar sus piernas para disminuir el deseo de tocarse pero no funciono, se removió con incomodidad. Quería tocarse, nunca antes tuvo esta necesidad de tocarse, Finlandia nunca pasó por una situación así antes, era demasiado extraño para él sentirse así.
–Paska/Mierda–. Puso su mano sobre su erección, y comenzó a frotarse mientras intentaba calmar su respiración. Recordó los adorables ojos chocolate de aquel país, y se recargo en el árbol. Cerró sus ojos intentando recordar todo detalle de aquel precioso ser, suspiró y bajó la mirada. Seguía duro como una roca… Se quejó y levantó la mirada, cuando lo hizo…
Vio un par de ojos chocolate mirándole directamente, Finlandia parpadeo una y otra vez, pensaba que era producto de su imaginación. Sin embargo aquel ser frente a él era real…
Finlandia se asustó, aquel bello país estaba colgado de cabeza de una rama del árbol, mirándolo con esos penetrantes ojos, el nórdico se estremeció y se hizo para atrás chocando con el árbol.
México sonrió aún estando de cabeza, y bajo elegantemente de aquel árbol. El mexicano gateo hasta el finlandés y se sentó sobre sus rodillas mirándole directamente, tenía una encantadora sonrisa y un lindo sonrojo adornando su rostro, el finlandés tragó saliva y se incorporó, intentó acercar su mano al mexicano y éste no rechazó el futuro contacto con el mayor. Finlandia sonrió y se apresuró a poner su mano sobre la mejilla del mexicano, este cerró sus ojos y puso su mano encima de la del finlandés, éste tenía una sonrisa y sonrojó en su rostro, se acercó al mexicano con la intención de besarlo. En ese momento México abrió los ojos y miró de manera penetrante al nórdico.
Lo siguiente que sintió Finlandia, fue un dolor en su brazo, y como él mexicano lo había empujado contra el suelo con un simple movimiento. Lo siguiente que sintió fue al mexicano sentarse sobre su estómago.
El mexicano sacó un arma de su chamarra, Finlandia le observó atónito en el momento que México puso su arma contra su cabeza. Finlandia ahora temblaba de miedo, ¿Lo iba a matar?
–Ты говоришь по русски/¿Hablas ruso?–. Preguntó el mexicano.
Finlandia se sorprendió, no esperaba que esté bello país hablará el idioma de aquel a quien tanto odiaba.
–да/Sí–. Respondió el finlandés, aunque le molestaba admitirlo. Él hablaba ruso, claro que esto era por la influencia de su padre.
–Ну, ты Финляндия, верно?/Bien, tú eres Finlandia, ¿Verdad?–. Dijo el latino mientras retiraba su arma de la cara del mayor.
Finlandia simplemente asintió, aún estaba atónito por el hecho de que el mexicano le había apuntado con un arma, y también porque aún se encontraba encima de su estómago. Muy cerca de su erección…
Incluso con tremendo susto su erección no había desaparecido, ¡Al contrario! Se había vuelto todavía más grande que antes. Sin embargo intento no pensar en eso hecho, puesto que respondía las preguntas de aquel país tricolor.
–Да это я/Sí, soy yo–.
–Это делает все проще, у меня есть предложение/Eso hace todo más fácil, te tengo una propuesta–. México movió su cuerpo, ahora estaba sentado completamente en el vientre del mayor, el mexicano cruzó sus piernas, mientras sacaba unos cigarros de su chamarra encendió uno y le ofreció otro al finlandés, este temeroso aceptó su oferta. Después de que México prendiera el cigarro de Finlandia, dio una mirada hacia la parte baja del cuerpo del nórdico, intentó ahogar una risa cuando vio la erección del finlandés. Finlandia internamente pedía que la tierra se lo tragara.
–Эх ~~ вау как мило/Eh~~ vaya qué lindo–. México comenzó a reír para después darle una calada a su cigarrillo, y expulsar el aire. Finlandia pensaba que entre más lo miraba más sexy se le hacía el chico.
–Я думаю, что они говорят, правда/Supongo que es cierto aquello que dicen–.
Finlandia miró al latino con confusión, no sabía qué quería decir con aquello.
–О, ты не знаешь?/Oh, ¿Acaso no lo sabes?–. Finlandia negó con la cabeza escuchando atentamente al mexicano.
Говорят, что когда человек умирает, в момент смерти возникает эрекция и эякуляция/Dicen que cuando un hombre está apunto de morir, a este se le forma una erección y eyacula cuando muere–. México comenzó a reír mientras Finlandia escuchaba el resto de la historia.
–Он никогда не давал мне проверить штаны жертвы, пренебрежение - просто ирландская легенда. Я думаю /Nunca me ha dado por revisar el pantalón de una víctima, descuida es solo una leyenda irlandesa, Creo–. Finlandia sudo frío al escuchar esto, ese bello ser ¿Era un asesino? Imposible…
–Это легенда о мандрагорах, не так ли?/Es la leyenda de las mandrágoras, ¿No?–. Pregunto Finlandia intentando seguir la conversación con el mexicano.
–Точно, ты очень умный и милый/Exacto, eres muy inteligente y lindo–. México le sonrió al finlandés y éste se sonrojó por lo dicho. –Будучи таким умным, вы обязательно выберете лучший вариант /Siendo tan listo, seguramente elegirás la mejor opción–. Finlandia se confundió con lo que dijo el mexicano, esté acercó su rostro al del finlandés y le hecho el humo de su cigarrillo, logrando que Finlandia cerrara los ojos ante el acto, el mexicano apagó su cigarrillo en la nieve y colocó su mano en su barbilla.
–Сдаться и сдаться/Entrégate y rindete–.
Finlandia se paralizó ante lo dicho, aquel lindo país estaba del lado de los comunistas.
–Я доставлял продовольствие советским солдатам во время их глупой войны, я видел столько же, сколько и ваших людей, а также солдат Урсса. Я устал смотреть, как умирают невинные люди/He entregado provisiones a los soldados soviéticos durante esta estúpida guerra suya, he visto tanto como a tus hombres, como a los de Urss caer. Estoy harto de ver como mueren inocentes–. México volvió a acomodarse encima de Finlandia, el nórdico estaba ensimismado en lo que decía el mexicano. No sé dio cuenta de que México se había sentado sobre su erección, el mexicano puso ambos brazos a los lados de la cabeza del finlandés. Mirándole con esos penetrantes ojos chocolate, Finlandia juraría que si los ojos fueran pistolas él ya estaría muerto.
Вы, европейцы, со своей глупой гордостью, отказывающейся сдаться и желающей пожертвовать чем угодно, чтобы показать, кто сильнее. это глупо/Ustedes los europeos con su estúpido orgullo, negándose a ceder y dispuestos a sacrificar lo que sea con tal de demostrar quién es más fuerte. Es una estupidez–. El latino le arrebató el cigarro al finlandés y lo tiró por ahí sin prestarle atención alguna.
Вы не можете победить СССР, он превосходен во всех аспектах, у него очень сильная армия и превосходное оружие, но я должен признать, что вы проделали хорошую работу, я впечатлен/No puedes ganarle a URSS, el es superior en todos los aspectos.Tiene un ejército muy fuerte y armas superiores a ustedes, pero debo admitir que has hecho un buen trabajo estoy impresionado–. México le sonrió acariciando su mejilla Finlandia solo se sonrojó al ver sus actos.
–Глупо продолжать борьбу, подписывать мирный договор. Я не думаю, что твои союзники помогут тебе, поверь мне, семья гринго - дерьмо, кроме Канады, он великолепен/Es muy tonto seguir luchando, firmen el tratado de paz. No creo que tus aliados te vayan a ayudar, créeme la familia del gringo es una mierda, excepto Canadá el es genial–.
El nórdico suspiró, sabía que el mexicano tenía razón, su gente estaba muriendo por su orgullo, lo que menos quería era ver a su pueblo sufrir, aún si debía entregar parte de él, al enemigo con tal de salvar a su pueblo haría lo que fuera. Finlandia mordió su labio y el mexicano pudo ver la impotencia de este, se vio se reflejado en el finlandés, recordó cuando no pudo ganar la guerra contra el gringo y éste le quitó la mitad de su territorio.
–Вы знаете Я был в той же ситуации, что и вы, в битве, которую я не смог выиграть, мне пришлось отдать половину своей территории Соединенным Штатам. Я просто не хочу, чтобы ты стал таким, как я, это лучшее. Вы экономите ненужное кровопролитие/¿Sabes? Yo estaba en la misma situación que tú, en una batalla la cual no podía ganar, tuve que entregar la mitad de mi territorio a Estados unidos. Solamente no quiero que termines igual que yo, es lo mejor. Te ahorras el derramamiento innecesario de sangre–.
–Ты прав/Tienes razón–. El finlandés se negaba a luchar, o a discutir con el país tricolor. Ya que este lo había inmovilizado rápidamente, estaba seguro de que si peleaba con aquel hermoso país. Terminaría gravemente herido, Finlandia suspiró y trató de incorporarse, gran error…
–Hijole–. México sintió completamente la erección del finlandés, este entró en pánico. Se supone que era un momento serio, y a él se le ocurría parecer como si nada olvidando que tenía ese "pequeño problemita" abajo. –Mijo eres un chamaco precoz–. México se burló de él, y Finlandia no entendió lo que quiso decir el mexicano pero claramente entendía el hecho de que se estaba burlando de él.
–Не смейся!/¡No te burles!–. Grito el finlandés.
–Извини, извини, это очень смешно/Lo siento, lo siento, es muy gracioso–.
Finlandia bajo la mirada totalmente apenado, evitando ver al mexicano, este se levantó de encima del finlandés. El nórdico desvió la mirada apenado, no quería que ese país le mirara de esa manera, seguramente pensaba que era un pervertido.
–Как тебя зовут/¿Cómo te llamas?–. Preguntó el finlandés tomando el valor para mirar al mexicano.
–Мексика–. Respondió el mexicano.
–Мексика? Мексика ... Боюсь/¿México? México tengo miedo...–.
–Почему?/¿Por qué?–.
–Я боюсь того, что Урсс может сделать со мной/Tengo miedo de lo que Urss pueda hacerme–. Finlandia mentiría si dijera que no le tenía miedo al país de rojo, era la viva imagen de su padre.
Не волнуйся, я не позволю ему ничего с тобой сделать. Все будет хорошо, я обещаю вам, это больше ... Я пойду с вами, чтобы увидеть это, и будет присутствовать, когда будет подписан мирный договор. Ты не будешь одинок, я буду с тобой всегда/Tranquilo, no dejaré que te haga nada. Todo estará bien te lo prometo, es más... iré contigo a verlo, y estaré presente cuando se firme el tratado de paz. No estarás solo, yo estaré contigo en todo momento–. México tomo ambas manos del finlandés, intentaba darle el valor, Finlandia asintió y se sonrojó al sentir el suave y delicado tacto del mexicano.
Finlandia se sonrojó, y su corazón comenzó a latir como loco. ¿Que era este extraño sentimiento que comenzaba a sentir? Finlandia apretó la mano del mexicano, y éste le sonrió. Juntos se encaminaron al campamento para intentar hablar con Urss, aceptar los términos de rendición y evitar la muerte de muchos más inocentes. El nórdico sabía que probablemente perdería mucho, pero nada era más importante que la seguridad de su pueblo, además tenía al mexicano apoyándole.
Mientras México estuviera a su lado nunca tendría miedo, mientras México sostuviera su mano todo estaría bien. Porque con una simple sonrisa del mexicano, Finlandia sentía la paz que le fue arrebatada…
Ah~~ realmente…
Finlandia se había enamorado.
«Mielestäni elämä ei ole niin paha kuin luulin/Creo que la vida no es tan mala como pensaba». Pensó el finlandés.
★★★ To be continued ★★★
Hola mi raza 🤙 mi ganado, mi barrio 😎
Que tranza Bv vengo a responder sus preguntas y aclarar sus dudas.
Sus preguntas pueden dejarlas aquí ♥️
Además de dar algunos datos curiosos de este capítulo, primero que nada decidí acortarlo porque como me dijo un/a lector/a. Si es muy largo acortalo. Esta primera parte tiene 12mil palabras
Llevo más de 46 hojas en word. No es broma...jamás había escrito algo tan largo llevo semanas escribiendo el fanfic. Aprecien que me estoy chingando la vista por ustedes >:'u
Por cierto, F por Finlandia que no lo han dejado tener sexo en paz con México 😔💔
Aclaraciones y datos curiosos a partir de aquí 😳
1: la palabra que dijo México y no puse traducción fue a propósito. “Namiktli" literalmente es esposo en náhuatl. México tiene deseo de casarse con su novio Finlandia ya que prácticamente lo ve como el hombre perfecto, encantador, cariño, respetuoso y
amoroso
2: México es demasiado celoso, y esto es debido a la infidelidad de España con el imperio inca.
3: México y España estuvieron casados, sin embargo este no le presentaba como su esposo por el hecho de que se supone que era una conquista, osea su colonia. México nunca tuvo "derecho" sobre su propia tierra. Prácticamente España veía la tierra de México como propia.
4: México ha estado casado 3 veces, su primer marido fue España, seguido de Austria, y el último fue la Unión Soviética de quién enviudó.
5: México busca con desesperación amor y cariño al igual que Finlandia, sin embargo México teme que un día Finlandia deje de tocarlo. Puesto que España cuando hizo esto, era por el hecho de que estaba engañando a México con países sudamericanos como Perú, Argentina, Chile etc. Sus “Colonias" con las cuales mantenía constantes relaciones sexuales. Sin embargo México era el favorito de España.
6: México ha tenido varias parejas sexuales entre ellas incluidas España, Imperio Ruso, Inglaterra, Rusia, Finlandia, URSS, y dos personajes más en posteriores capítulos. Austria no mantuvo relaciones sexuales con México, no porque no quisiera si no porque él austriaco le trataba como la más delicada flor, siempre cuido de él en todo momento, México sufrió mucho después de su separación.
7: Finlandia le permite a Estonia entrar como si nada a su territorio, debido a la ayuda humanitaria durante la guerra.
8: Estonia no es un pan de Dios, México le odia y el odio es recíproco. Varias veces Estonia se le ha insinuado a Finlandia, pero este no nota sus indirectas... AMO SU INOCENCIA! Ok no, Estonia le ha dicho abiertamente a Finlandia que quiere tener sexo con él.
9: Finlandia mima demasiado a México, ya que conquistarlo no fue nada fácil, México le pateo el trasero más de una vez.
10: México es una máquina de sexo. Para el un rapidito no existe, el aguanta hasta 3 horas.
11: hice un guiño en este capítulo a los países que permiten entrar a México sin visa a sus territorios, entre ellos son en total actualmente 135 países. (contando a Finlandia también). Irónicamente Rusia no deja entrar a México a su territorio sin visa, sin embargo Kazajistán, Bielorrusia y Ucrania sí.
12: México siente envidia de Estonia porque es un país "pulcro" en otras palabras México se considera una puta aún lado de Estonia y cree que Finlandia estaría mejor con este a su lado.
13: hice un guiño a la "muerte blanca" un soldado finlandés que mato más de 500 soldados soviéticos durante la guerra de invierno.
14: puse muchos datos históricos correctos sobre la guerra de invierno, sin embargo lo de las violaciones a mujeres son falsos, solo fue para dar más drama :u
15: lo de que los hombres tienen una erección y eyaculan al momento de morir es una leyenda acerca de cómo se formaban las mandrágoras (las plantas que aparecen en Harry Potter) no recuerdo dónde lo leí, y no sé si históricamente es una leyenda de Irlanda.
16: Finlandia sabe hablar español, y aveces usa los modismos del mexicano.
17: AMO SU INOCENCIA ok no, México nunca llegó a pensar tener una relación con Rusia. Le veía como su hijo, cuando se acostó con el por primera vez se sintió sucio.
18: México es uke dominante, es quien lleva los pantalones en la relación pero sin dejar de ser pasivo.
19: Finlandia sufrirá mucho más adelante, ¿Me perd0nan? Tranquilos no morirá, nadie morirá. NO EN MÍ GUARDIA >:U excepto tal vez Urss pero ese ya estaba muerto :'u pinche gorda capitalista :'v
20: Hay partes donde yo narró, y dónde narra Finlandia. Es la primera vez que escribo desde la perspectiva de un personaje así que espero no sea un asco, no lo vuelvo a hacer >:'u espero que se den cuenta de quién es quién, porque odio los fanfics donde ponen POV de x personaje, sorry soy mamona y muy exigente a la hora de leer fanfics.
Creo que son todas, xd cualquier duda ya saben pregunten ♥️ yo soy feliz de leer sus comentarios.
Perdón por las faltas de ortografía :'v
Intentaré subir la segunda parte pronto, pero créanme que no me gusta hacer capítulos cortos. Yo me inspiro muchísimo. XD me emociono :3
Por cierto este fanfic quizás sea algo largo, tendrá menos de 20 capítulos, eso creo xD pero serán bastante largos los capítulos -0- y habrá más parejas, con México como uke claro :u
#MexicoUkeEsMiReligion
Post de apreciación a Finlandia xd
Cómo siempre daré créditos a los artistas, y de los que no pongo créditos si alguien conoce sus redes para darles sus respectivos derechos como propietarios.
HASTA LA PRÓXIMA AAAAAAA
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