Eres mi hijo
- Es cierto, pero te has perdido todo el día de clases - respondí.
- Ostras, es verdad - se levanta con rapidez y hago lo mismo - Taylor yo...
- Tranquila puedes irte.
- No quiero dejarte aquí sólo, ¿Por qué no vienes conmigo?
- Estaré bien, pero ahora mismo no tengo cabeza para atender a uno de esos viejos dando un discurso de mil palabras - De sólo pensarlo me agobio - Ve tu y así copias por los dos.
- Esta bien pero que ni se te ocurra irte sin mi - Me amenaza con el dedo.
- De eso nada, te voy a estar esperando justo aquí.
- Ya me voy, nos vemos más tarde - dice mientras se va.
🐺
Salí del Instituto y comencé a caminar sin rumbo por la acera con la vista fija en cada paso que doy.
Después de un rato de vagabundear por ahí me topo con otros zapatos puntiagudo en frente de los mío haciendo que me detenga justo en el lugar.
Alzó la mirada para ver aquel individuo. Vestia completamente de negro, el rostro era un poco intimidante y lleva puesto unas gafas negras impidiendo observar sus ojos.
No pasó mucho tiempo hasta que dos hombres más se colocaron a mis dos costados, de inmediato trato de retroceder pero un cuarto sello mi huida formando así un círculo del que no podía escapar.
Luego una limusina se detiene en frente de nosotros, haciendo que entre en pánico.
¿Qué es lo que pretenden? ¿Me van a secuestrar? ¿Quiénes son estas personas? ¿Será la banda que menciono mi padre? La cual también atacó a Jacob.
Se baja de la misma una figura masculina con un traje muy elegante, al igual que los demás traía unas gafas que cuidadosamente retira, dejando ver con detalles su rostro.
Para mi sorpresa, presenta casi todos mis rasgos faciales: tiene el pelo negro, ojos expresivos de un tono azul intenso y tez tan blanca que hasta parecía estar muerto.
- Hola Taylor, es un gusto conocerte al fin.
¿Qué? No estoy entendiendo. ¿Sabe quién soy?
- ¿Tu quién eres? ¿Cómo sabes mi nombre? ¿Nos conocemos?
- Calma muchacho, ya habrá tiempo para responder todas tus preguntas. ¿Por qué no te sientas a mi lado y te lo explico todo? - dice señalando el asiento de atrás de la limusina.
Esta demente si piensa que voy a entrar en un auto con un desconocido y para variar un par de matones o cada lado.
- No lo pienses más, no es que tengas muchas opciones.
Uno de ellos me empuja obligándome a entrar, seguido de ese señor.
- Ponte cómodo - dice pero yo solo trato de alejarme lo más posible de el, pegado mi cuerpo al otro extremo del coche.
- ¿Qué quieres de mi?
- De ti, nada. Por ahora. - La última frase lo dice por lo bajó, pero puedo escucharla muy bien - Me Marcos Días Conde.
- ¿Días? - ese es el apellido de mi familia.
- Como lo oyes, niño. Soy un vampiro, hermano de tu "padre" - recalca esa palabra - y amante de tu madre.
Si eso es lo que yo estoy pensando entonces el sería mi...
- Padre, así es - interrumpe mi pensamiento.
- Yo.... No estoy entendiendo muy bien.
Siento un leve mareo de tanta información, creo que estoy a punto de perder el conocimiento.
- Dejame que te explique - Hace una pausa - Tu eres mi hijo.
- Pero eres un vam-vampiro, no puedes ser hermano de Tomás porque el es un lincantropodo al igual que mi madre y si fuera así entonces yo sería un...
- Híbrido, pues lo eres.
- ¿Qué?
Ahora si que aguantó más. Se nubla mi visión y todo se vuelve oscuro.
🐺
Me despierto con la esperanza de que todo haya sido sólo un sueño, pero cuando observo a mi alrededor me doy cuenta de que no lo es.
Sigo en el mismo lugar con el mismo señor que afirma ser mi verdadero padre.
- Que bueno que despierta, llevas más de dos horas así.
- Lo que dijiste antes, ¿es cierto?
- Si, cada palabra.
- ¿Cómo es posible de que tu hermano sea tan diferente a ti?
- Simple, padre traiciono a su mujer legítima y de ahí nací yo, un hijo bastardo de una vampira.
- Tomás sabe que existes.
- Oh por supuesto que lo sabe, pertenezco a la banda que lleva persiguiendo hace años - empiezo a entrar en pánico, puede que me haya traído con el para vengarse o chantajear a Tomás.
- También sabe que soy... tu-tu hijo.
- No, aún no y es mejor que continúe así por tu bien.
- ¿Por qué?
- El te odia a muerte y si descubre que tiene otro motivo para odiarte, terminará haciendo lo que hizo con tu mamá ¿Quieres eso?
- No - respondo con la cabeza agacha.
- Eso pensé.
- ¿Qué harás conmigo ahora? - se bien que no voy a salir de esta sin un rasguño.
Cuando Tomás me dijo que el no era mi padre, me sentí muy aliviado de saber que existía la posibilidad de que el verdadero por lo menos fuera mejor que el y me quisiera de verdad.
Pero en estos momentos no se cual de las dos opciones es peor. Mi vida a sido tan injusta, no se porque llegue a pensar de que todo iba a cambiar.
- No soy tan malo como crees, nunca le haría daño a mi propio hijo. Tampoco quiero que pienses mal de tu madre, ella era un mujer muy buena, pero su familia la obligó a casarse con alguien que no amaba y bueno terminó revelandose para poder estar con su verdadero amor.
Sus ojos se nublan por un pequeño instante, pero se recompone casi de inmediato.
- Tu fuiste el resultado de ese gran amor, Taylor. No lo olvides y aunque no lo creas, te quiero más de lo que te imaginas.
La limusina se detiene en el mismo lugar donde me habían raptado. Uno de los guardias abre mi puerta para que pueda salir del coche.
Una vez que se acaba todo y me encuentro libre nuevamente, es entonces que me acuerdo de...
Cristal.
Ella debe de estar esperándome hace tiempo.
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Con cariño Katy 😘❤
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