Durante varios segundos Tony permaneció en la acera, observando la capilla, era una especie de pequeña cabaña blanca con techo en punta de tejas azules y una torrecilla de piedra con reloj a lado.

Avanzó por el pasillo empedrado, ignorado el jardín, aún no entraba y ya detestaba el lugar.

La puerta blanca de diseño de cuento de hadas, como todo la fachada, estaba abierta, Tony entró siendo seguido por Steve, el diseño del interior era brillante, ochentero y de mal gusto, había  dos hileras de bancas doradas a cada lado, con un pasillo tapizado con una alfombra roja en el medio, también había un confesionario en una esquina y una televisión de pantalla plana en una pared frente a una banca apartada, el podio era de madera, un crucifijo dorado detrás, y aun lado una gran foto enmarcada de Elvis Presley autografiada.

El lugar estaba completamente vacio, o eso creyó Tony antes de notar a cierta pelirroja sentada en una banca, Natasha mantenía los pies alzados y apoyados en el respaldo de otra banca. Aparentemente relajada.

Sin decir nada y sin esperar a Steve, que se había quedado inmóvil a pasos de la entrada, Tony hasta a la banca donde estaba la espia, se dejó caer en la banca deshaciéndose de las gafas y gorra.

Pasaron algunos segundos antes de que Natasha hablará.

—Tardaron bastante en llegar —comentó —. Despedí a tu abogado.

—¿Acaso quieres impedir que solucione esto? —susurró, controlando su ira repentina—. ¿Disfrutaste el espectáculo que te dimos anoche, Romanoff? ¿Te divertiste?

Natasha giró su rostro para mirarlo, arqueando una perfecta y delineada ceja.

Tony continuó.

—Nos animaste a esto, ¿cierto?

—No, si , si y no —contestó la pelirroja con paciencia.

—Natasha. —Steve se acercó a la banca, parecía demasiado tenso, demasido molesto, eso hirió a Tony—. ¿Por qué?

Natasha y Steve se miraron fijamente, no entendió completamente el intercambio, pero por un segundo Tony pensó que Steve llegaría hasta Natasha para comenzar una pelea.

—Yo no los alente, yo solo cuide su espalda, deberían darme las gracias —dijo bajando los pies—. Evite que ustedes cometieran una estupidez.

Tony la miró incrédulo, le mostró el anillo, antes de bajar su mano para cerrarla en un puño.

—Estamos casados, Natasha —gruñó Tony—. Casados.

—La razon por la que eché a tu abogado fue porque no lo necesitas, Tony, no hay validez legal en su matrimonio.

Parpadeó confundido.

—¿Qué?

—¿Qué? —repitió Steve.

Natasha puso los ojos en blanco y dejó la banca.

—No estan casados, no fue una boda real, solo experimentaron lo que es una ceremonia oficiada por Elvis en las Vegas —hizo un gesto para que la siguieran —. Como dije, cuide su espalda.

Tony y Steve la siguieron al pequeño confecionario, Natasha abrió la puerta para revelar a un amordazado imitador de Elvis en el interior.

El hombre de traje blanco con lentejuelas se removió histérico al verlos, Tony notó que estaba atado de pies y manos, Natasha se acerco para quitarle la mordaza de la boca.

—El mundo sabra de esto, los demandaré —amenazó el imitador —. ¿Así es como pagan mi excelente servicio? Cante dos canciones más de las que incluía el paquete que contrataron.

—¿Un imitador de Elvis? —dijo Steve sorprendido —. Me gustan sus canciones.

Tony lo miró de forma acusadora, después puso los ojos en blanco. —Por supuesto que si —regresó su atencion a Natasha —. Vuelve a amordazarlo antes de que el Cap decida pedirle una canción.

Natasha sonrió divertida, como si supiera algo que ellos no, Tony pensó que seguramente lo hacía.

—Yo me haré cargo de esto —dijo Natasha tomando a Elvis del gran cuello de la camisa —. Ustedes necesitan hablar —metió la mano un su chaqueta sacando una memoria usb —. Después de ver esto.

Tony recibió la memoria con el ceño fruncido, sintiéndo un mal presentimiento.

Al quedar solos dentro de la capilla, Tony sospechando lo que era dudo en si verlo o no, suspirando cedió ante su curiosidad, de seguro no podía humillarse más, se acercó a la pantalla en la pared, tomó el pequeño control encima de esta antes de pocisionarse en la banca.

Steve nervioso y curioso hizo lo mismo, Tony lo miró durante unos segundos antes de volver la mirada a la pantalla y comenzar a reproducir lo que era obviamente el video de su boda.

Lo primero que apareció en pantalla fue Steve del brazo de Natasha al inicio del pasillo, ellos caminaron tambaleándose hasta llegar frente al podio, Steve mostraba una sonrisa boba, sus mejillas estaban rojas muestra clara del estado de embriaguez, Natasha tomó el lugar a su lado, como la madrina, Steve en jeans y jersey con un ramillete feo en el pecho, miraba a algún lugar más allá de la cámara, la sonrisa crecia haciéndolo parecer absurdamente feliz.

Can't help falling in love comenzó a sonar, Tony se vio asi mismo del brazo del imitador de Elvis que sostenía el micrófono, cantando sorprendentemente bien.

Tony llevaba puesto el traje que Pepper habia elegido para la expo Stark, solo que sin el saco y corbata, las mangas de la camisa dobladas y sobre esta el chaleco negro, igual que su pantalón, Tony hizo una mueca al verse con flores en el pelo, del lado derecho de su cabeza sostenidas sobre su oreja.

Agradeció no verse llevando un ramo o velo, todo ya era lo suficientemente vergonzoso.

Tony maldijó al ver la enorme sonrisa que llevaba mientras caminaba sobre la alfombra hacia Steve. Volteó a verlo, solo para encontrar una dura y cerrada expresión en su rostro, a su cuerpo había vuelto la tensión de hace minutos en prescencia de Natasha.

Tony comprendió al instante que se arrepentiría de ver ese video, sin embargo no pudo detenerse y solo dejo que la grabación continuará reproduciéndose mientras también comenzaba a recordar.

Tony nunca había sido un fanático de Elvis, pero recordó que había escuchado a Steve decir alguna vez que disfrutaba de sus canciones, por eso había decido que su boda la oficiara un imitador de Elvis.

Sonrió sin poder evitarlo al llegar frente a Steve, tropezó al intentar acercarse más y Steve inmediatamente lo tomó en sus brazos.

Tony amó la sensación de estar envuelto en los brazos del rubio, se sentía protegido, se sentía valioso y querido.

Apoyó su cabeza sobre el hombro de Steve envolviendo los brazos alrededor de su cintura, Steve lo estrechó contra si, y su sonrisa se hizo aún mas grande cuando sintió un beso del rubio en su cabello.

Siguiendo la melodía comenzaron a balancearse lentamente, Tony suspiró olvidándose del mundo.

Se separaron cuando Elvis terminó de cantar y tomados de la mano miraron al frente, Natasha había desaparecido en algún momento, pero no le importo.

Elvis aclaró su garganta. —Estamos aqui reunidos para prescenciar la unión entre estos dos hombres.

—Espere —interrumpió Steve, una expresión sincera dominaba sus rasgos —. Tony…  aún no te lo he dicho.

—¿Decirme qué?

—Que estoy enamorado de ti.

Tony parpadeó, un segundo después sintió las lagrimas comenzar a caer por su rostro.

—¿Me amas? —susurró sintiéndose confundido —. ¿Estas seguro?

—Te amo —dijo acunando la cara de Tony entre sus manos.

Tony frunció el ceño dudando repentinamente, Steve no sentia amor hacia él, no podía creerlo...

—… No es verdad —murmuró, intentó alejarse, pero Steve no lo permitió.

Steve limpió con delicadeza las lagrimas en las mejillas de Tony.

—Lo es —besó la frente de Tony con ternura —. Te amo completamente, amo todo de ti.

Los ojos de Steve mostraban una sinceridad absoluta. Tony le creyó, sonrió, se sintió tan feliz que empezó a reir.

—Te amo. —Se puso de puntillas para besar la mejilla de Steve —. Porque eres el mejor hombre que conozco.

—No, Tony, tu eres el mejor hombre que conozco, y también el más fuerte y hermoso y...

Tony negó con su cabeza. —Soy malo, he lastimado a muchas personas, he cometido muchos errores…

—Yo soy un cobarde que teme no pertenecer a ningún lugar, nunca he sido perfecto, Tony tambien cometó errores —tomó su mano en un suave agarre.

Tony miró sus hermosos ojos azules. —Pero lo eres, Steve, eres perfecto, quiero que tú lugar sea a mi lado... ¿quieres que tu lugar sea a mi lado? —susurró.

—Si quiero, estaré contigo siempre.

—¿Lo prometes? —susurró Tony, temeroso.

—Lo prometo —dijo Steve, mirándolo a los ojos.

Ambos giraron al frente tomados de la mano, Elvis asintió.

—¿Se aceptan el uno al otro?

—Si —declararon al unísono.

—¿Los anillos?

Natasha apareció repentinamente para entregárselos, Steve fue quien lo tomó primero, con suavidad tomó la mano izquierda de Tony para llevar la banda de oro a su dedo anular.

Entonces beso sus nudillos sin apartar la mirada de sus ojos.

—Anthony Edward Stark prometo amarte, cuidarte y respetarte hasta el último dia de mi vida.

Tony también tomó el anillo, y lo colocó en el dedo anular de Steve, imitó el gesto besando sus nudillos.

—Steven Grant Rogers prometo amarte, cuidarte y respetarte hasta el último día de mi vida.

—Bajo el poder que el estado me otorgó, los declaró en matrimonio. Pueden besarse.

Steve se inclinó para besarlo y Tony aceptó uniendo sus bocas, el beso fue suave, largo y perfecto.

—De ahora delante eres mio para amar y proteger —susurró Steve.

Tony sonrió. —De ahora y siempre también eres mío para amar y proteger.

Elvis comenzó a cantar nuevamente, y en cada canción Tony y Steve bailaron sin dejar de mirarse a los ojos.

Tony no se atrevió a mirar a Steve, parpadeó alejando las lagrimas que se habian reunido en sus ojos e intentó tragar el nudo que sentía en la garganta. Se prometió nunca volver a beber en su vida.

—Tony —susurró Steve—. Tony yo no…

Se puso de pie con brusquedad, no quería escucharlo, no quería sentirse mas humillado.

Tony se quitó con esfuerzó el anillo de su dedo y lo lanzó a la banca sin mucho cuidado.

—Fue producto del alcohol, nada de lo dicho ahí es verdad —tragó con dificultad —. Yo no… yo. —Tony no pudo decirlo —, yo no quise decir o hacer nada de lo que vimos en ese video —optó por decir.

Steve apretó la mandibula y asintió.

—Entiendo.

Tony también había entendido, había estado en lo correcto al suponer que Steve no había querido decir nada de lo que habia escuchado en el video, eso era lo que Steve había recordado en la joyería, eso era lo que Steve no había querido recordar...

Avanzó hacia la salida necesitando alejarse de todo, de la ridícula capilla y los vergonzosos hechos descubiertos, no deseaba nada más que olvidar su patético comportamiento.

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Obvio el matrimonio gay no es legal en las Vegas, nada más para aclarar... Bueno, no lo era cuando lo investigue y escribí este fanfic.