"Hay alguien más"

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—Vamos Kate, tú y yo sabemos que desde hace tiempo esto ya no es lo mismo —dijo tratando de sonar tranquilo.

—¿De qué me hablas? —preguntó temiendo a la respuesta que estaba a punto de recibir.

—Lo nuestro —contestó —lo siento, pero es hora de hablar claro.

—No —frunció el ceño —todo esta perfecto, de maravilla, mejor que nunca mi amor.

Kate trató de abrazarlo, pero él fue más rápido al separarse antes.

—Basta, sabes que no es así.

—¡Si lo es! —dijo comenzando a desesperarse —no entiendo que es lo que quieres, pero nos amamos y eso es lo que realmente importa.

—Kate...

—¿Dime, Justin?

—Quiero el divorcio —la miró fijamente —lo lamento.

Kate se congeló por unos segundos al escucharlo. Era una tortura para ella ver como esas palabras salían de los labios de su amado. Esos labios que había besado en tantas ocasiones antes.

—No... —empezó a reír con un tono nervioso —¿Estas jugando conmigo? ¿Esto es una broma, verdad? Por qué si es así yo...

—No lo es —la interrumpió y acto seguido soltó un fuerte suspiro —vamos Kate, hace meses que te volviste indiferente conmigo, te buscaba cada noche para hacerte el amor y simplemente me ignorabas o decías qué te dolía la cabeza, tú provocaste que sintiera ese horrible vacío.

—Dios mío —colocó sus manos en su cabellera rojiza —el trabajo me agotaba, pero eso no significaba que ya no te amara... Justin por favor, tú no puedes hacerme esto, o más bien, hacernos, te recuerdo que tienes una hija y le dolería igual que a mi.

—Leslie estará bien —tensó su mandíbula —ella es una nena que entiende perfectamente todo, y entendería esto. Además, seguiré cuidando de ella como lo he hecho siempre, jamás la dejaré sola y a ti tampoco Kate.

—Prometo darte más amor, más cariño, todo volverá a hacer como antes mi cielo.

Esta vez intentó besarlo. Y logró su objetivo, aunque solo duró una milésima de segundo, pues Justin volvió a separarla de él.

—Kate mírame —la tomó delicadamente del rostro mientras ella soltaba una lágrima de dolor —no te dejaré sola, ya te lo dije, estaré para ti y para mi hija, pero ya no puedo verte como mi mujer, ya no...

La pelirroja no aguantó más y soltó en llanto. A Justin le lastimaba y le dolía con todo el corazón verla de esa manera, pues sabía que ella no se imaginaba para nada que esto pasaría. Tenía ganas de abrazarla y decirle que todo estaría bien, pero si lo hacía, ella solo se ilusionaría más y no era justo.

—Por favor —lo miró suplicando y tomando de sus manos —no puedes dejarme, ya te lo dije, te demostraré mi amor de todas las formas posibles, te haré sentir pleno de nuevo.

Y enseguida volvió a besarlo pero esta vez con demasiada frustración. Buscó desesperadamente la cremallera del pantalón de su futuro ex-marido y trató de bajarlo. Justin al darse cuenta de ello y un poco irritado por la situación, la empujó levemente y se armó de valor para decir las siguientes palabras.

—Hay alguien más.

Kate sintió que su corazón dejaba de latir por un momento, que en realidad fueron unos segundos pero ella sintió toda una eternidad. No podía imaginar al amor de su vida con alguien más, alguien más que no era ella. No podía imaginar sus labios besando a otros, su mirada viendo a otros ojos, y su cuerpo haciéndole el amor a otro. Simplemente no quería imaginarlo, sentía que su vida estaba perdiendo el sentido y que no podría vivir después de aquello.

¿Acaso su indiferencia fue muy grave, tanto para llegar al grado de buscar a otra mujer? Solo era por el trabajo, no por que ya no lo amara. Pero Justin sabía qué no solo era la indiferencia, eran muchas otras cosas más.

Kate quería pronunciar alguna palabra pero simplemente no podía emitir ningún sonido. Estaba en shock.

—De verdad lo siento mucho —Justin rompió el silencio doloroso y se acercó a ella —eres una gran mujer y allá fuera hay muchos más hombres, hasta mejores que yo... Tienes un futuro adelante, no dejes que esto te tumbe.

—¿Cómo... Cómo puedes estar tan tranquilo? —dijo mirándolo con rabia —¿Cómo te atreves?

Justin fue ahora el quien trató de tomar su mano pero ella se alejó.

—Kate... —cerró los ojos por un instante —mañana empiezo los trámites del divorcio, vendré a buscarte alrededor de las seis... Y nuevamente, lo siento mucho... Llamaré en la noche para hablar con Leslie.

Y sin más que decir, la miró por ultima vez, se dirigió hacía la puerta de la casa y salió de allí.

Ahora ella estaba completamente sola, o al menos así se sentía.

Kate solo miraba a la nada. Todo su mundo se estaba derrumbado, y no sabía cómo lograría salir de ese infierno que estaba por comenzar en su vida.

—¿Crees que es tan fácil deshacerte de mi, Justin? —susurró, retomando la postura—eres mío... y de nadie más.

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¡Hola! Bueno aquí el prólogo de esta nueva historia, espero les guste, espero de todo corazón sus votos y comentarios para saber si quieren que la continue💖 las amo.