Habiendo pasado tres semana de ser dado de alta Jimin debía volver al hospital para que le retiren los últimos puntos más importantes, iban desde su espalda baja hasta una de sus pompas, pero el rubio por obviedad se negó, hizo un berrinche enorme, se golpeó a sí mismo y a todo quien se le cruzara. Por lo tanto Seokjin decidió llevar a la mansión todo lo que necesario para atenderlo.

Una vez retirados los puntos, debían dejar la heridas sin vendas para ayudar con su cicatrización, lo cual fue un nuevo dilema para todos los que vivían con el.

El pequeño ya no estaba tan pegado a Yoongi, pero si iba cada 10 minutos a reloj a vigilar si seguía donde estaba.

Una cabellera rubia se asomó por la puerta de la oficina del pelinegro.

-Mimi, bebé sigo aquí - le dijo por quinta vez en esa hora.

-mmmhm- Murmuró el pequeño.

-¿Necesitas algo?- No hacer preguntas que sean de sí o no, se repetía siempre a si mismo.

El rubio se lo pensó, pero no sabía cómo decirle que quería mimos, que estaba aburrido y aún no llegaba Taehyung a leerle. Solo le respondió con un sonido similar a una afirmación de labios cerrados.

-Ven, pasa y dime que necesitas bebé- le llamó dejando de lado sus papeles para dedicarle su tiempo en totalidad.

Anonadado, esa era la palabra que abarcaba su situación del pelinegro en ese momento.

Jimin ingresó como Dios lo mandó al mundo, se le llenó la cara de colores, ¿su esposo salió de la habitación así? Bajo por las escaleras de esa manera? No llego a cubrirlo que de golpe entró un agitado Seokjin con una bata para cubrir la desnudez del menor.

-Mimi- le llamó agitado, -Por favor no corras así, y no puedes andar desnudo por todos lado, no te pueden ver así todos, solo Yoongi o yo.-

Con sus ojitos nublados por la lágrimas que se asomaban por sus ojitos el rubio escondió su rostro en el hombro de su esposo. Si el no ve a nadie, nadie lo vería a él. El pelinegro sintió como su camisa se humedecía y la espalda de su pequeño tenia pequeños espasmo, estaba llorando de nuevo.

-Hey, bebé. No te estaba regañando. Solo es porque te queremos cuidar, te puedes enfermar por andar sin ropa, y el cuerpo es privado, ¿te acuerdas lo que hablamos? El cuerpo no se muestra a todos solo a mi y a tu doctor.- le consoló sobando con cuidado su espalda, aceptando la bata que le entendía el castaño claro, lo cubrió y ayudo a que se sentará a horcajadas sobre el.

-Mimi- Le llamó el mayor de los tres. Solo obtuvo una negativa y se escondió más en el pecho de su esposo. -hey pequeño, no te enojes, no te estoy retando solo quiero cuidarte. El pequeño giro su rostro y solo le asintió.

Le habían puesto la bata y le aclararon porque no podía sacársela y que en pocos minutos estaría por llegar Jeon y seguramente Taehyung.

-¿Jimin?- preguntó el joven doctor. -Hoy vas a hablar conmigo? Yo quiero ser tu amigo, ¿tu no? -Cuestionó.

Asintiendo con su cabeza eufóricamente se sentó boca abajo sobre la alpaca que quedó instalada en la sala de lectura, a su tiempo Taehyung se acercaba con libro y le mostró la portada al rubio si aprobaba la lectura de ese día, como recibió una negativa, fue por otro.

Jeon estaba en contra de que le cubrieran todos los caprichos, así no podrían avanzar, el realmente necesitaba que el pequeño hablara y así poder ayudarle con sus traumas y dolores.

El rubio se levantó, y busco entre todos los libros uno que pudiera poner en palabras lo que pasaba dentro de el.

BINGO!! Ese era el que buscaba, sabía que su Yoon había comprado algunos de psicología, otros de derecho y algunos de negocios, entre sus manos tomo con fuerza uno que no era ni muy grueso ni muy fino y se lo extendió a su doctor.

Jeon lo tomó con duda, -¿Quieres que te lo lea? Preguntó, recibió otra negativa apuntando la portada y lo entendió todo

"Todo lo que diga puede y será usado en tu contra"

-¿Tienes miedo de hablar?-

Otro asentimiento.

-No tienes que tener miedo, estas a salvo lo sabes ¿no? -

Jimin se levantó nuevamente cuando sintió que pasó demasiado tiempo lejos de su esposo con una seña de que lo esperara ahí un poquito salió corriendo a la oficina. Pero la molesta tela se movía haciéndole picar la herida, se la sacó y siguió su carrera, se la pondría después.

El pelinegro sintió el sonido de unos pasitos acercándose se enderezó en la espera de la entrada del joven, con la sorpresa se ahogó con su café.

-¡Mimi la ropa!- exclamó cubriendo a su esposo con una manta de la oficina.

-quish, quish- pronunció el joven haciendo referencia con sus manos que le picaba.

-Te pica- Afirmó. -Bien, te voy a comprar ropa que no te pique, ¿Estás bien?- asintiendo el rubio dejo un beso en la mejilla del pálido y se fue corriendo a la sala para continuar con su sesión de terapia.

La puerta estaba abierta, asomó su carita para ver que hacían los demás cuando el no estaba, era una duda que le crecía esos días cuando se dio cuenta que hablaban de su "condición" cuando no estaba presente o dormía.

Pero esta vez no hablaban de él, los vio muy cerca, hablaban bajo como su fue un secreto pero no era de el, mencionaron algo de ellos, escuchó un "El otro día no dijiste lo mismo" su curiosidad se subió al tope, se quedó en su lugar agachadito sin ser notado. Hasta que se delató cuando soltó una expresión de asombro, se habían dado un beso, uno como cuando empezaron a ser novios con Yoongi

El joven de pelo gris se levantó de un salto y huyó al otro extremo de la sala a buscar un libro mientras ocultaba su vergüenza. Mientras qué Jeon solo se aclaró la garganta en un intento de recobrar su profesionalismo.

-Jimin, volviste.- indicando que se siente en su lugar continuó, haciendo un negocio de por medio, si el menor le decía algo el le leería junto a Taehyung un libro y se compartirían los diálogos.

-Dime Jimin, ¿por qué tienes miedo? ¿Qué puedes decir que te puedan culpar? Es algo que paso cuando no estabas con Min o es de ahora- el pequeño indicó que era de ahora con sus manos.

-Palabras Jimin.- le recordó

Con una mueca el rubio se cruzo de brazo, hace mucho que no pronunciaba palabras, lo último que dijo fue en el hospital que quería irse a casa. Sentía que se le hacía un nudo cada vez que quería hablar.

-No llores- suspirando el Joven doctor le extendió una hoja y un lápiz. -Vamos a empezar por escribir, ¿te parece? Todo lo que me tengas que responder será por ahí.

A el no le dijeron nada sobre escribir a el le gritaron por hablar, decidido tomó la hojita se acomodo bien boca abajo dispuesto a cooperar para obtener dos horas de lectura, porque si le lee TaeTae es una hora, ahora también le leería Jeon, así que son dos horas obviamente.

-Empecemos, porque no quieres hablar?

Por que a mimi le pegaron porque hablé con Yoon. Escribió con su pulso temblando ante el recuerdo de sus días encerrado en el cabaña.

-Que es lo que le dijiste a Min?

Que me llamo Jimin.

-¿eso? Espera no entiendo, quien te dijo que no podías decirle que era Jimin a Min?- mirando al joven ex tutor del rubio le pidió ayuda para entender la situación.

-Llama a Min, yo no puedo dar detalles.- se excusó poniendo sus manos al frente para evitar contestar de más.

Cuando el pelinegro llegó a la sala, Jeon intentó reorganizar sus preguntas, le indicó a Min que se pongan en una posición donde el rubio se sienta seguro, optando por sentar al menor en sus piernas cubriendo con cuidado el aún desnudo cuerpo.

-Jiminie, nos podrías contar que pasó cuando los hombres te llevaron? - preguntó suave Jungkook. -Tranquilo podes hablar y no hay nada de malo, nadie lo va a usar en tu contra.-

El joven miró a su esposo para esperar su confirmación, una vez obtenida soltó un suspiro y comenzó.

-Daño- su voz sonó rasposa debido a su falta de uso. Taehyung le alcanzó un vaso con leche de frutilla y unos juguetes sensoriales para ayudar con su ansiedad.

Los mayores no dijeron nada le darían la libertad de hablar a su tiempo.

-Tanto daño, le dijeron a Mimi que mi culpa... po-por hablar con Yoon-

El pelinegro iba a interrumpir para preguntar de que se trataba, pero Jeon lo detuvo le hizo señas que lo dejara ir a su tiempo y que debían dejarle el poder a Jimin de hacer y decir lo que quería.

-Dijo que culpa de mimi por hablar con Yoon, c-cuando vivía en ese lugar, yo no podía hablar con nadie y no hice caso y hable con Yoon y.. y... me fui con Yoon y le hicieron daño a ellos por culpa de mimi, y querían a mimi de vuelta por eso daño a Yoon... si mimi no hablar no hacen daño a mimi- concluyó el menor. Mientras mordisqueaba uno de los mordillos que le dieron.

-Eso no va a volver a pasar, lo sabes? Ya Kim y Lim los mandaron lejos, en un avión a otro lugar, y no pueden volver porque ya no hay aviones que vuelvan de ahí.- le decía Yoongi mientas abrazaba con fuerza el cuerpo tembloroso de su esposito.

-¿En un avión?- preguntó el menor sacando su rostro de su escondite.

-Si en un avión, y después en un cohete que se fue del planeta y ahora están en marte. Ahora estas seguro, ya no va a pasar nada bebé.-

Jeon, los miraba con duda, busco información por su parte y no encontró nada de que hayan ido presos personas con la característica que mencionaban o relacionado a algún caso de secuestro, era como si en verdad fueron enviado en cohete a otro planeta.

Terminada su sesión y con Jimin más tranquilo, tuvieron que cumplir el capricho del menor, leer por dos horas entre los dos jóvenes un libro de aventuras.

Cuando el menor se durmió su siesta, Min mandó a Kang a comprar ropa suave y afelpada para evitar que se siguiera quitando la ropa, aunque realmente no funcionó.

A Jimin realmente le molestaban los bóxer por que le tocaban su pompita lastimada, así que se quitó el pantalón y su ropa interior menos la remera, a el dijeron que no ande desnudo, y el estaba vestido con una remera debía contar.

-Jimin! - Le llamó su esposo con la ropa en la mano.

El menor se quedó quieto en su lugar lo habían descubierto. Despacio de dio la vuelta con pequeños pasitos como si fuera un pingüino.

Que adorable, pensó el pálido. Un adorable pingüino ¿enojado?

-Yo- dijo el rubio apuntado sea si mismo. -Yo no Jimin, mi es mimi, amorcito, cariño, bebé, no Jimin!- dijo contando con sus pequeños y rechonchos dedos cada sobrenombre que le habían dicho a lo largo de su tiempo juntos.

-Si Amorcito perdón, pero no me cambies el tema, ¿que hablamos de la ropa?- dijo el mayor poniéndole de nuevo su ropa.

-Daño aquí - Dijo Jimin apuntando su pompita.

-Bien haremos algo con eso bebé- dijo besando su frente.

Su próxima opción fueron pijamas enteros, sin costura ni elásticos en su espalda, tenían un cierre en el frente y eran bien afelpados, y el menor iba feliz por toda la mansión mostrando su pijamas, en realidad, mostraba todos los pijamas que le habían comprado, cuando llegó Kang con las compras que le pidió Min, el menor no cabía de la felicidad, saltaba por toda la habitación, con cada uno mientras los apretaba con fuerza en su pecho.

La siguiente hora constó en que se probó cada uno de ellos tres veces por cada uno, porque no se decidía por uno, Yoongi se sentía satisfecho de por fin volver a verlo tan feliz y volviendo a ser ese pequeño tan brillante que amaba.

Los pijamas favoritos del menor fueron un dragón verde, una tiburón celeste, y una alpaca blanca siendo la ganadora de todos, así fue como comenzó a ir por la mansión mostrándole a los Kim su pijama puesto y los dos que tenia en su manos, luego a Kang, seguido a la ama de llaves, los cocineros, las chicas que limpiaban, y repitió su listado de personas fácil unas cinco veces a cada uno, todos les respondieron con la misma efusividad que la primera vez, todos estaban felices de ver al menor volver a ser tan enérgico y feliz.

Las sesiones con Jeon fueron avanzando con una gran mejoría, en una de esas sesiones, se enteró que el matrimonio Kim realmente no eran sus padres, que el menor vivía en un orfanato hasta que conoció a Min y toda la situación detrás de joven de sonrisa de ojitos.

-¿Novios? Preguntó Jimin a Taehyung una tarde después de su lectura.

-No minie, no somos novios, el vive en otro país no sería conveniente- le respondió desanimado el joven de peligris.

-Oh, y si viven en el mismo país ¿si?- preguntó con su carita ladeada.

Jeon estaba por entrar a la sala para despedirse de su paciente, vio ese característico gesto tan conocido para el, cerrando todas sus dudas con ese simple acto, era tiempo de terminar esa situación de raíz, tomando su teléfono envió un mensaje y se fue sin despedirse de los jóvenes, avisándole a los señores Kim que se retiraba.

"Es él, se que lo puedo jurar por mi vida"

Editado y escrito por: CalypsoAndStars🥰🥰🥰🥰

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