(14 de Mayo del 2007)
*1 mes después*
P.O.V Nat
Ya pasó un tiempo desde que realicé mi primera misión para S.H.I.E.L.D. Hemos estado viajando mucho a New York para arreglar temas legales y también para buscar algún departamento para cuando empiecen mis entrenamientos. Nick nos ofreció quedarnos en las instalaciones de S.H.I.E.L.D, pero en este momento no creo que sea lo correcto para nosotras. Quiero alejar a Alex lo más posible de ese mundo y por supuesto vivir en una base no es sinónimo de eso; además, siento que sería muy parecido a cuando vivíamos en la Habitación Roja.
La primera vez que fuimos a hablar con Nick fue para hablar del tema de los nombres y la adopción de Alex, ella y yo tuvimos una pequeña pelea.
*Flashback*
—¿Por qué te puedes cambiar el nombre y yo no?—pregunta Alex un poco molesta y de brazos cruzados.
—Ya te dije que no estoy cambiando mi nombre, solo lo estoy americanizando.
—Sí lo estás cambiando. Lo vas a cambiar de Natalia a Natasha—me recrimina.
—Y tu nombre también va a cambiar de Aleksandra a Alexandra.
—Pero el mío queda igual, yo también quiero cambiar mi nombre—dice frustrada. Fury no hace más que reírse de nuestra pequeña discusión.
—Alex, no vas a cambiar tu nombre.
—Pero mamá…—reclama.
—Si tanto quieres cambiar tu nombre ¿cómo te quieres llamar?—la situación me tiene un poco estresada.
—No lo sé—dice un tono más bajito.
—Como no lo sabes, que te parece si en vez de cambiar tu nombre por completo solo le agregamos un segundo nombre—hablo un poco más relajada.
—Sí, creo que sí—responde un poco convencida.
Luego de debatirlo por un rato llegamos al acuerdo de que su segundo nombre sería Sophia.
—Entonces Alexandra Sophia Romanoff… ¿quieres mantener el Nóvikova?—niega.
—Ok, Natasha Romanoff y Alexandra Sophia Romanoff van a ser sus nuevos nombres—Fury los anota en una hoja—. Entonces ya estaría eso es todo. En unas semanas va a ser la audiencia con el juez para hacer la adopción legal.
*Fin de flashback*
La audiencia con el juez es algo que me tiene muy nerviosa. Sé que el juez me puede negar la adopción de Alex, aunque S.H.I.E.L.D está moviendo todos sus hilos para que esto no ocurra, pero siempre está la posibilidad. Ya, Natasha, concéntrate y piensa en el cumpleaños de Alex. Mañana mi niña va a cumplir 7 años, está tan grande, no lo puedo creer.
—Mamá, ya terminé mi almuerzo ¿puedo salir a jugar con Cooper?—Alex interrumpe mis pensamientos.
—Cooper ¿tú también terminaste?—asiente—. Entonces vayan a jugar, pero con cuidado—los dos salen corriendo en dirección al granero.
—¿Ya tienes todo listo para mañana?—pregunta Laura.
—Sí, creo.
—¿Qué es lo que te preocupa ahora?—pregunta Clint.
—No sé lo que Alex quiere. Ella nunca me habló de lo que quería para su cumpleaños, ni siquiera me pidió un regalo ¿Y si no les gusta lo que tengo para ella?
—A veces siento que no conoces a tu propia hija, a ella le va a encantar todo—dice Laura.
—Laura tiene razón. Va a amar todo, pero estoy seguro de que eso no es lo único que te preocupa—dice Clint.
—También me preocupa la audiencia con el juez. ¿Por qué todavía no me llaman?
—Es normal que se demoren. Tienen que revisar muchos papeles, pero debes confiar en S.H.I.E.L.D. Ellos están llevando de la mejor manera tu caso— dice Clint.
—Sé que no debo preocuparme, pero es imposible no hacerlo.
—Te entiendo, Nat. También soy madre y es imposible preocuparse por cosas que no sabemos cómo van a pasar y no está mal. Es normal, pero hay veces que hay que dejar que la vida tome su curso y estoy más que segura de que te van a dar la adopción de Alex—me abraza.
—Gracias Laura. Voy a ir a ver a los chicos.
Salgo de la casa en dirección al granero y me pongo a pensar en lo maravilloso que ha sido este mes. Hace unos días fue el día de la madre y Alex y Cooper decidieron hacernos una sorpresa, pero nos les salió tan bien.
*Flashback*
P.O.V Autora
Alex y Cooper se levantaron más temprano de lo normal, ya que es el día de las madres. Alex se encuentra muy emocionada porque es el primer día de la madre que lo va a pasar con Nat. Los niños se encontraban en la cocina intentando preparar un pastel para sus madres.
—Cooper, son solo 3 huevos, echaste 6—habla un poco frustrada.
—Bueno, entonces echémosle más harina—Cooper sube los brazos.
—Buena idea, Copito.
—No me digas, Copito—se enoja y Alex ríe.
—Entonces, Coco—Alex lo molesta.
—Si me dices Coco yo te voy a decir...a...a... Arándanos—Cooper responde molesto.
—Lo que quieras, Coco.
—Si así lo quieres, Arándanos.
—Mejor sigamos con el pastel, Coco.
—Tienes razón, Arándanos.
—La receta dice que lleva 2 tazas de harina… así que échale mmm… 4.
Cooper le empieza a echar las 4 tazas, pero por accidente se le cae la bolsa entera. Alex no sé da cuenta.
—¿Ya echaste las 4 tazas de harina?
—Si—Alex mira la mezcla.
—¿Seguro de que solo echaste 4 tazas?
—Muy seguro.
—Bueno, ahora tenemos que mezclar los ingredientes, agregar el chocolate y el azúcar.
Los dos niños se ponen a echar los ingredientes y revolverlos. Alex mira el libro de cocina y se da cuenta de que hay algo raro.
—¿Por qué nuestra mezcla no se parece a la de la foto?
—No lo sé—Cooper sonríe inocentemente.
—Coco, ¿qué hiciste?
—Nada, Arándanos.
—No te creo.
—Bueno… esto… quizás se cayó toda la bolsa de harina.
—Pero Cooper, arruinaste el pastel—Alex se enoja.
Alex le tira harina en la cara y se arma una guerra de comida en la cocina.
—Hey hey ¿Qué es lo que está pasando aquí?—pregunta Clint bajando rápidamente la escalera por el alboroto que había en la cocina
—Nada—responden los niños al unísono intentando tapar su desastre.
—¿Cuándo van a aprender que son unos pésimos mentirosos? Díganme qué están haciendo.
—Queríamos hacer un pastel para el día de las madres, pero Cooper lo arruinó—dice Alex.
—¡Yo no arruine nada!—grita Cooper enojado.
—Si lo arruinaste.
—Ya, basta… Vamos a tirar esta mezcla y vamos a preparar otra, ¿qué les parece?
—Bueno—responden al unísono.
Entre los tres empiezan a preparar una nueva mezcla. La llevan al horno y arreglan la mesa. Preparan tostadas, fruta picada y varias cosas más. Decoran el pastel y ya está todo listo para que las madres lleguen.
—Vayan a buscarlas—dice Clint.
Los chicos salen corriendo a buscar a sus respectivas madres y llegan con ellas tirándoles los brazos.
—Alex ¿qué pasa? ¿Por qué te tiras encima?—pregunta Nat.
—Ya, Cooper, relájate. Nos vamos a caer—dice Laura bajando las escaleras.
—¡Feliz día de la Mamá!—gritan Cooper y Alex al unísono.
A las madres se les llenan los ojos de lágrimas.
—Gracias, Alex—Nat abraza a Alex.
—Cooper, muchas gracias.
*Fin flashaback*
P.O.V Nat
De solo acordarme de ese día se me llenan los ojos de lágrimas, pero veo que Cooper viene corriendo hacia mí, lo cual hace que salga de mis recuerdos.
—¡Tía Nat! ¡Tía Nat!—grita Cooper un poco desesperado.
—¿Qué pasa, Cooper?—me acerco a él.
—Es Alex, algo le pasa, dice que le cuesta respirar—dice preocupado.
—Gracias por avisarme—salgo corriendo hacia el granero donde está Alex. La veo y está sentada en una pila de heno intentando respirar—. Ya estoy aquí Alex, tranquila—me agacho delante de ella—Tranquila, pequeña, sigue mi respiración.
Pero esta vez ella no puede hacerlo. Esta crisis no es como las otras, así que la tomo en brazos para llevarla a la casa mientras intento que regule su respiración. Cooper llega a mi lado.
—Cooper ¿le puedes avisar a tu padre, por favor? Necesito ayuda—él asiente y sale corriendo a la casa y Clint viene corriendo hacia mí después.
—¿Qué le pasa a Alex?—toma Alex.
—Tiene una crisis respiratoria. Es más fuerte que las demás.
—Creo que lo mejor va a ser que la llevemos al hospital—asiento.
Empezamos a caminar rápidamente al auto. Clint la sube en la parte de atrás y yo me subo con ella.
—Voy a buscar las llaves y a avisarle a Laura ¿Necesitas que te traiga tus documentos y los de Alex?—pregunta acelerado.
—Si, están en el cajón del velador.
—Ok, vuelvo en un minuto—sale corriendo.
Dicho y hecho, en un minuto Clint ya estaba de vuelta y encendiendo el auto.
—El hospital más cercano está a 45 minutos de aquí, pero voy a conducir lo más rápido que pueda.
Clint empieza a conducir muy rápido, no respeta los límites de velocidad, pero esto es una emergencia, para suerte de nosotros el camino nos tocó bastante despejado. En el auto yo iba intentando que Alex regulará su respiración, pero se le estaba haciendo demasiado difícil y parecía que estaba empeorando.
—Clint, apúrate. Casi no respira—digo un poco desesperada.
—Ya falta poco.
En efecto llegamos en menos de 5 minutos. Me bajé rápido corriendo con Alex en brazos. Ella apenas reacciona y su cuerpo está lánguido.
—¡Ayuda! ¡Mi hija no está respirando!—grito mientras entro a la zona de urgencias. Se me acerca un doctor que toma a Alex y la pone en una camilla. Empieza a revisar sus signos vitales y se la llevan a una habitación aparte.
—Lo siento, pero no puede entrar, la tienen que estabilizar primero—dice una enfermera—. Se puede sentar aquí, el doctor va a salir a hablar con usted en un rato—termina de decir y entra a la habitación.
No me siento y me quedo viendo como atienden a Alex a través de una ventana que tiene la habitación. Siento que Clint llega a mi lado.
—¿Cómo está?
—No lo sé, no me dejan pasar—me abraza.
—Tranquila, ya nos van a salir a decir qué tiene.
Estuvimos un rato esperando mientras dábamos vueltas por fuera de la habitación. A ratos nos sentábamos y a ratos nos quedamos viendo por la venta. Luego de un tiempo, sale el doctor que está atendiendo a Alex.
—¿Son los padres de Alexandra?
—Soy la madre—me paro.
—Mucho gusto, soy el doctor Chris. Estoy atendiendo a su hija—me tiende la mano y se la estrecho.
—¿Cómo está mi hija?
NA:
¿Alex se va a recuperar? ¿Por qué le está pasando esto? ¿Será grave?
Oficialmente Alex es Romanoff, solo está a un paso de ser adoptada legalmente por Nat, que emoción.
Les deseo un bonito día y no se olviden de tomar agua <3.
Próximo Capítulo Miércoles 21 de Diciembre.
~Heima 💜
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