Narra ???:

Ya estoy lista, me había vestido con una camisa de hombros abiertos juntó con una falda negra y encima mi abrigo, por qué aun que estábamos en invierno dentro de la facultad hacía mucho calor.

Salí de casa muy contenta, ya llevaba unas dos semanas en clases, este era mi primer año de facultad de medicina, desde muy pequeña tenía claro que quería ser una gran doctora y curar cualquier enfermedad y ver que ese sueño puede llegar a hacerse realidad me hacía sentirme muy contenta y orgullosa de mi misma por llegar tan lejos.

Tomé el metro hasta la facultad, ya hacia algunos meses que había decidido irme a vivir sola para poder centrarme mejor en mis estudios y ser una persona dependiente, aunque la verdad no fue fácil despedirme de mi familia ya que ellos viven en un pueblo bastante alejado de la ciudad, el día de mi partida, mis padres, mi hermano pequeño y yo nos dimos el abrazo más largo de nuestra vida, incluso mi padre se negaba a que su "princesa" dejara la casa y eso que era un hombre bastante serio, ese día algo en su corazón se partió, pero habló mucho con ellos todos los días, así que no pueden tener quejas de falta de llamadas.

Después de unos minutos llegué a mi destino y me encamine a subir las calles hasta la facultad.

???: ¡Hey Sachi!

Giré mi cabeza al ver que me llamaban, se trataba de Sara mi mejor amiga, la conocí en tercero de la E. S. O, cuando se había mudado desdé buenos aires.

Sara: ¡ Hey Sachi! ¿Llegando súper puntual como siempre?

Por alguna razón, a nuestra primera conversación ya nos habíamos agradado la una a la otra y como ambas teníamos casi el mismo sueño no nos hemos separado desde entonces.

Sara está estudiando para ser enfermera, ambas decidimos que cuando termináramos de estudiar, trabajaríamos las dos juntas siendo doctora y enfermera, sabemos que eso no es fácil, pero estamos dispuestas a probar las veces que haga falta.

Sara: ¿qué tal el fin de semana?

Sachiko: pues no gran cosa la verdad, estuve estudiando ginecología el domingo y el sábado fui a ver a mis padres.

Sara: ¡ha! es verdad que vives sola.

Sachiko: Sip, y tú vives con tu tío ¿verdad?

Sara: si, oye por que no vives con nosotros, debe de ser duro estudiar y trabajar a la vez

Sachiko: gracias por la oferta, pero esto es un gran paso para hacerme una persona independiente.

Sara: eso lo dices ahora, pero verás cuando estemos de exámenes, te vas a ver negra en hacer las dos cosas

Sachiko: por eso estoy empezando a estudiar tan rápido, así tengo menos trabajo a la hora de la verdad

Sara: pues sabes qué, que hoy vas a dejar tu agenda de todos los días, porque tú y yo hoy nos vamos a un café a despejarnos.

Sachiko: ¡qué pero-!

Sara pone su dedo índice en los labios de Sachiko para callarla.

Sara: nada de peros, me tienes abandonada y aburrida todo el día, hoy es tarde de chicas, te guste o no *aparta su dedo*

Tras maldecir a lo bajo acabe aceptando la oferta, sabía que no escaparía de ella por mucho que lo intentará.

Tras unas conversaciones más llegamos a la facultad, ya todos los estudiantes estaban entrando y otros esperaban a su grupo en los jardines.

Sara y yo nos dirigimos hasta nuestras respectivas clases, ya que no quedaba mucho para que empezaran, aunque me guste la medicina es verdad que las clases no dejaran de aburrir.

En otro lugar muchas horas después.

Todo el lugar había quedado tocado, varios muros del edificio se derrumbaron y algunos soldados y enfermeros murieron atrapados por los escombros y algunos otros por el sujeto que había escapado.

El jefe del escuadrón, Ray，salía del psiquiátrico ayudado de dos de sus hombres, por que este se había rota una pierna y seguramente varias costillas.

Ambos hombres lo llevaron a una de las ambulancias y lo ayudaron a subir a ella para llevarlo al hospital rápidamente.

Hombre del escuadro: Señor, ¿qué hacemos ahora? El sujeto escapo y muchos de nuestros compañeros están en estado grave.

Ray: no te preocupes *decía con dificultad* ya me encargue de él, seguramente el veneno ya lo habrá matado

Hombre del escuadrón: ¿¡consiguió inyectarle el veneno?!

Ray: si, no fue sencillo pero bajo la guardia por un momento, eso me dio tiempo de inyectárselo.

Hombre del escuadro: ¡es usted genial jefe!

Ray: un soldado debe proteger a toda costa a los suyos, soldado Jack.

Jack: sí señor, por cierto, que hacemos con la prensa, esto no pasara desapercibido.

Ray: pase lo que pase, esto no debe saberse soldado Jack, si algo de ese sujeto sale a la luz el gobierno podría estar en problemas.

Jack: comprendo señor.

Ray tumbo la cabeza de nuevo en la camilla para relajarse.

Jack: descanse jefe, nos encargaremos de todo por aquí.

Ray: si, gracias

Después de eso algunas de las ambulancias que allí había marcharon hacia el hospital más cercano.

En un lugar muy alejado de allí- tres horas antes

Una persona andaba con paso torpe, cayendo varias veces al suelo y chocando con algunos árboles.

El sujeto AArojo deambulaba en medio del bosque en plena noche, el veneno que le fue inyectado estaba haciendo efecto rápidamente y aun que su sistema era muy diferente al de una persona normal, ese veneno lo mataba poco a poco, sin una cura moriría en fracción de minutos.

Con un paso pesado, cayó al suelo de nuevo y por mucho que intentara levantarse le era imposible, el veneno ya había avanzado bastante por su sistema, le costaba respirar y tenía una fiebre muy alta.

No tardaría mucho en quedarse dormido...... Para siempre.

AArojo: m-mal...maldición, co-como e podido.....de-dejar que ese.... E-estúpido me alcanzara.

El sujeto levanto el pantalón por la parte en la que le había sido inyectado el veneno, mostrando un gran moretón y su piel ligeramente pálida.

AArojo: ¿qué clase de veneno es ese? Si mi sistema interno fuera el de una persona normal ya estaría muerto.

De nuevo bajo el pantalón a su sitio, se apoyó en un árbol y dejo caer su cabeza en el tronco mirando hacia el cielo.

AArojo: je y... Yo que pensaba que nunca volvería a ver el cielo, y ahora será lo último que vea..... Ja si....si por algún casual lograra sobrevivir a esto, pienso matar a ese sargento...con mis propias manos.

Poco a poco su vista fue tornándose borrosa y sus ojos comenzaron a cerrarse poco a poco, mientras unas cuantas gotas de lluvia comenzaban a caer en su cara.

AArojo: este...... Es mi fin *cerro los ojos*

???: hey ¿qué haces aquí? Si te quedas a fuera puedes resfriarte

AArojo al escuchar esa voz comenzó a abrir su ojos lentamente, pero solo logro ver una sombra borrosa, puesta de cuclillas sujetando lo que seguramente fuera un paraguas.

???: Oye ¿te sientes bien? No tienes buena cara ¿estás enfermo?

AArojo: .....a

???: ¿Que? ¿Qué dices? *se arrodillo hacia él*

AArojo: a... yu... da... me

Después de eso, callo inconsciente en el frio y mojado suelo, mientras la sombra lo llamaba preocupad@

Unas horas antes.

Sara y yo ya habíamos salido de nuestras clases hace varias horas, primero fuimos a tomar un café a nuestra cafetería favorita, después damos un paseo hasta que decidimos ir al Karaoke y cenar de paso.

Fue un día muy ajetreado, he de admitir que ya echaba de menos pasar un día entero con ella, las dos solas paseando y hablando de cualquier tontería que se nos ocurriera.

Ya a las 8:30 de la noche decidimos volver a casa, me despedí de ella y me puse en camino a casa, volví a tomar el tren mientras escuchaba algo de música para que el viaje fuera más ameno, cuando ya habíamos salido del andén pude ver que el cielo comenzaba a nublarse.

Sachiko: espero que no me pille la lluvia

Media hora después ya había llegado a mi parada, salí corriendo antes de que comenzara a llover y por suerte conseguí llegar a casa, me quite el abrigo, me prepare un chocolate caliente y me tumbe en el sofá mientras veía la televisión.

Cuando termino el programa que estaba viendo lleve la taza a la cocina y tome la basura para tirarla, ya estaba lloviendo así que tome un paraguas y salí de mi casa.

Una vez me deshice de la basura volví a casa, pero mirando hacia la calle para ver que no pasaban coches, pude ver una silueta algo lejos de allí, ¿qué hará esa persona allí? ¿Se habrá dormido?

Decidí acercarme para ver por qué estaba a fuera con la que caía, cuando ya estaba bastante cerca, pude ver que se trataba de un chico de aproximadamente 21 años, con pelo azul y algo alborotado, con poca ropa a mi parecer, solo llevaba unos pantalones blancos algo rotos. Estaba apoyado en un árbol con los ojos cerrados, lo que sospechaba se había quedado dormido.

Me acerque a él y lo llame

???: Ey ¿qué haces aquí? Si te quedas a fuera puedes resfriarte

El chico al oír mi voz pareció despertar, la verdad es que más de cerca no parecía tener buen aspecto, estaba muy pálido y parecía sudar mucho.

???: Oye ¿te sientes bien? No tienes buena cara ¿estás enfermo?

Al decir eso el chico parecía querer pronunciar una palabra, pero parecía que le costaba mucho hablar, me acerque un poco más a él llegando a estar de rodillas a su lado.

???: ¿Que? ¿Qué dices?

El chico con gran esfuerzo logro pronunciar una palabra

Chico: a...yu..da..me

Después de eso se desplomo en el suelo, me asuste ante esa acción, solté el paraguas y lo levante un poco del suelo, al hacerlo me di cuenta de que estaba muy caliente, toque su frente y estaba ardiendo, tenía demasiada fiebre, por su temperatura y estado pude deducir que tendría unos 40° de fiebre, ¡Eso era demasiado! Rápidamente intente apoyarlo en mi brazo para sacarlo de ese lugar, pero pesaba mucho, con dificulta y esfuerzo logre llevármelo a la espalda y levantarlo, no se dé donde saque esa fuerza para levantar a un hombre seguramente sea por la adrenalina del momento.

Comencé a caminar lo más rápido que podía, sino lo enfriaba de inmediato podría morir.

Llegue a casa, lo tumbe en mi cama arropándolo con las mantas y colocándole algunas más, después de que estaba cómodo me adentre a la cocina y tome un poco de agua y medicación, sabía que una persona no podía tomar ibuprofeno sino había sido recetado pero no tenía tiempo de preocuparme por eso, corrí hacia la habitación y con un mortero comencé a triturar la pastilla, con esa fiebre seguramente su garganta estaba inflamada y le costaría tragar, una vez triturada tome el vaso de agua y eche los restos de las pastillas, levante su cabeza he intente que se lo tragara pero era imposible estaba muy débil y el agua se le escapaba, no me quedo de otra, tome el vaso con fuerza y me lo lleve a la boca, levante de nuevo su cabeza y junte mis labios a los suyos, con esto conseguí que todo el medicamento entrara en su organismo.

Pero una fiebre así no comienza así porque si, había otro problema que era el causante de estos síntomas, destape el cuerpo del chico no sin antes calentar la habitación para que no pasara frio, examine su cuerpo lugar por lugar hasta que encuentro el problema, su muslo izquierdo estaba completamente morado, lo examine más de cerca y pude ver un ligero puntito, le han inyectado algo, por los síntomas parece una sustancia letal y que no aguantaría mucho más.

No sabía que hacer no soy una experta, y ni siquiera tenía lo necesario para curarlo como debía, tenía que llamar al hospital rápidamente, sin pensarlo tome mi teléfono y marque el número.

Sachiko: ¡hola! ¿Es el hospital central? ¡Si! Hola oiga necesito aun medico lo más rápido posible, tengo aun chico muy enfermo, está muy delicado por lo que no creo que sea bueno trasladarlo, ¡rápido por favor está muy grabe! Tiene 40° de fiebre, y creo que le han inyectado un tipo de veneno o algo así.... Si..... Gracias, si la calle es...

Después de la llamada colgué el teléfono y me acerque a la cama, tenía que intentar estabilizarlo lo más rápido posible, tape de nuevo su pierna y fui a por un cubo de agua y un pañuelo, comencé a limpiarle el sudor de su cuerpo para refrescarlo un poco, mientras refrescaba su cuerpo coloque otro pañuelo húmedo en su frente.

Pasaron los minutos pero su fiebre no bajaba, estaba claro que le había inyectado algo venenoso, si fuera un resfriado la fiebre hubiera bajado al menos un poco, me estaba comenzando a alterar el médico no llegaba y cada segundo que pasaba el chico estaba peor, pero había aprendido que en una clínica o en una operación no podías permitir que el miedo te dominara, debías relajarte y concentrarte en hacer sentir mejor al paciente. Fui hasta la puerta de salida y regresé a la cama para liberarme del estrés y ponerme otra vez a intentar bajar la fiebre, como mis métodos no funcionaban probé con otros, así estuve un rato hasta que llamaron a la puerta, rápidamente fui a abrir y me encontré con el doctor y varias enfermeras, rápidamente los lleve hasta mi habitación en donde descansaba el chico, el doctor al ver que estaba demasiado pálido no tardo en ponerse manos a la obra examinando sus latidos.

Doctor: su corazón se está parando

Sachiko: ¿¡QUE!?

Enfermera: por favor señorita salga de la sala, el doctor ara todo lo posible por su amigo

La enfermera me saco de la habitación y cerró la puerta, acerque mi oreja a la puerta y pude escuchar cómo le estaban dando una descarga con un desfibrilador.

Doctor: carga la siguiente corriente.

Enfermera: corriente cargada

Doctor: *coloca el instrumento en el pecho del chico* fuera

Por más que le desfibraban sus pulsaciones no cambiaban así que al doctor no le quedó otra que hacerlo por otro método, le produjo un gran puñetazo en el pecho del chico y eso hizo que las pulsaciones volvieran a subir, rápidamente la enfermera se puso a darle aire al chico con una bomba manual.

Pasaron varios minutos hasta que el doctor salió de la habitación, sin pensarlo me acerque a él y le pregunte.

Sachiko: ¿cómo esta doctor?

Doctor: conseguimos estabilizarlo, pero aún está muy grave, al parecer tus sospechas son acertadas, alguien ha envenenado a este chico, pero no podemos saber qué clase de veneno es si no lo examinan y el chico está demasiado débil como para trasportarlo.

Sachiko: ¿así que solo necesitan examinar una muerta de su sangre? ¿Pero no pueden transportarlo porque empeoraría si se le mueve mucho?

Doctor: si eso es

Sanchiko: entonces deme a mí la muestra

Doctor: ¿¡qué?!

Sachiko: cogeré mi bicicleta y llevare la muestra al hospital para que la examinen, después la traeré aquí lo más rápido posible

Doctor: pero..

Sachiko: ¡no hay mucho tiempo para pensarlo doctor! las carreteras estarán hasta arriba de coches y no llegara a tiempo de ir y volver, deje que yo me encargue.

El Doctor observo a la muchacha que lo miraba con una mirada totalmente determinada a llevar a cabo el plan, no podía darse el lujo de hacer que el tiempo corriera sin hacer nada, resignado entro a la habitación y al cabo de unos minutos salió con un botecito con una sustancia roja oscura.

Doctor: Ten, date prisa no le queda mucho, ya he avisado al hospital de tú llegada en cuanto llegues pregunta en información y dales el bote *le extiende el bote*

Sanchiko: *lo toma* no se preocupe

Dicho eso, Sachiko salió rápidamente de la casa sin llevarse un abrigo ni nada, tomo su bicicleta y pedaleo hacia el hospital.

Una vez que llego apareció totalmente empapada y ahogada al hospital, se acercó a la ventanilla de información y le dijo lo que el docto le contó, rápidamente la enfermera que estaba allí, toma el bote de la sangre y sale corriendo hasta la sección de análisis. Una de las compañeras de esa enfermera se acercó a Sachiko y le coloco una manta para que se calentara y secara, la acompaño hasta una de las habitaciones más cercanas a la recepción para que descansara hasta los resultados.

Unos segundos después la misma enfermera que salió corriendo se acercó a ella sosteniendo un frasco trasparente con otra sustancia.

Enfermera: por suerte ese veneno que le inyectaron tiene una cura muy común *le extendió el franco junto con una papel*

Sachiko: *toma el frasco y el papel en el momento en el que se lo extiende* ¡gracias!

Sachiko sale corriendo de la sala como una bala para volver al lugar donde había dejado su bicicleta y salir corriendo otra vez del lugar.

.

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Varias horas después:

Narra AA rojo:

Mi cuerpo se sentía muy pesado, podía sentir como todo mi cuerpo me dolía, abrí mis ojos pesadamente topándome con un techo blanco en un ambiente cálido, mire a mi alrededor, estaba en un lugar que nunca había visto, tantos colores, tantos objetos nuevos para mí, todo llamaba mi atención, pero mi mirada solo se posó en una cosa....o más bien en alguien.

Una persona se encontraba a algunos pasos de mí, estaba de espaldas colocando un pañuelo en agua y escurriéndolo, tenía un largo cabellos castaño que le llegaba a la altura de la espalda, junto con una falda negra y unas zapatillas azules. Una vez quito el exceso de agua se giró, y pude ver quien era esa persona.....se trataba de una chica.....una chica.....hace años que no veo a una, parecía tener casi mi misma edad, tal vez era un poco más joven que yo. Se acercó a paso lento hasta mí, yo instintivamente cerré los ojos como si siguiera dormido, se sentó en una silla que estaba al lado de la cama y coloco el pañuelo húmedo en mi frente, se sentía muy bien tener eso tan frio en mi cuerpo. Por suerte la chica no se dio cuenta de que estaba despierto por lo que pude sentir cada roce y movimiento que hacía.

Ella se quedó allí sentada procurando de que mi cuerpo no se quedara sin algo frio en él, quitando con cuidado el pañuelo y humedeciéndolo para volver a colocarlo en mi frente, lo hacía tan delicadamente como si me fuera a romper si ponía demasiada fuerza, así estuvo durante unos minutos, yo me comencé a relajar por sus acciones, por el sumo cuidado con lo que lo hacía. Un rato después quito el pañuelo y coloco su mano, estaba ligeramente fría y caliente a la vez, eso se sentía mucho mejor que el pañuelo, después de apartar su mano soltó un suspiro de alivio.

Sachiko: que bien, ya comienza a bajarle la fiebre.

Escuche su dulce voz, una voz ni muy aguda ni muy grave, era una voz tranquila y delicada.

Escuche como se movía por el cuarto hasta que abrió la puerta y salió.

Abrí los ojos y mire hacia la puerta que estaba cerrada, volví mi cabeza hacia el techo y así me quede con la mirada perdida hasta que oigo pasos acercarse, nuevamente cierro los ojos esperando a que cruzara por la puerta, la puerta vuelve a abrirse y cerrarse pocos segundos después dejándola pasar y volviendo a su posición de antes, empecé a oler algo que olía muy bien no pude contener las ganas de comer que tenía así que abrí mis ojos despacio para que pensara que acababa de despertar.

Sachiko: ¡Ah! ya despertaste, que alivio *se lleva su mano a su pecho y suspira* pensé que tardarías más en despertar ¿qué tal te sientes?

Me encontré al fin con su cara, sus mejillas ligeramente sonrojadas por el calor del ambiente, una sonrisa de alegría alumbraba su rostro y por últimos sus ojos verdes profundos, era la primera mujer que veo en 16 años y me pareció la cosa más hermosa e inofensiva del mundo. Al ver que no reaccionaba vuelve a sonreírme de forma amable.

Sanchiko: seguramente tienes hambre *se gira para coger un cuenco de sopa y se lo extiende* ¿quieres?

Mi estómago pedía a gritos algo que llevarme a la boca así que asentí.

La chica sonrió en respuesta, se levantó y me ayudo a poder sentarme en la cama, una vez estaba incorporado coloco unas almohadas en mi espalda para estar más cómodo, me arropo con las sabanas y finalmente me extendió el cuenco con sopa.

Sachiko: espero que te guste

Comencé a comer, la sopa estaba muy buena, bueno cualquier comida me sabría bien después de la horrorosidad que me daban en el psiquiátrico, me la termine toda de uno trago.

Sachiko: vaya sí que tenías hambre *toma el cuenco y lo aparta en una mesita de noche* me alegra de que te sientas mucho mejor, sabes te encontré en un estado muy grave ¿qué te paso?

Aparte la mirada no quería hablar del tema, cuando me doy cuenta de algo, me encuentro bien no me pasa nada.....¿cómo?......¿cómo es posible? ese veneno debía a verme matado ya, la miro sorprendido, no me digas que esta chica a conseguido el antídoto.

Sachiko: ¿pasa algo?

AArojo: ¿c-cómo?

Sachiko: um

AArojo: ¿cómo has conseguido....curarme?

Sachiko: ¡oh! jeje en realidad yo no he hecho nada, cuando te encontré te traje aquí, intente bajarte la fiebre pero era imposible, no me quedo otra que llamar al hospital y pedir que viniera un doctor a examinarte entonces.....

Mi mente se quedó parada en la palabra hospital y doctor.........uno de esos asquerosos doctores me ha tocado mientras dormía.........la ira recorrió mi cuerpo en ese momento.

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Continuara.

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YA PARO, YA PARO

Sé que es MUUUUY largo pero juro que no puedo dejar de escribir >.< así que dejo este por aquí y me voy a seguir expulsando estas palabras a otro cap :3

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