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Un alegre y carismático park Jimin había regresado con una sonrisa y muy feliz a casa, ahora que había conseguido por fin las tan anheladas medicinas de su madre que llevaba años padeciendo de una extraña enfermedad que con el paso de los días se tornaba más terrible.


Su madre sonrió en gran manera al ver el regreso de su hijo, su Ángel como ella le llamaba, empezó a trabajar a los doce años cuando su padre murió, y había empezado a mantener la casa el solo ahora con tan solo dieciocho años y a pesar de ser un Doncel trabajaba como gisaeng ofrecía sus servicios de baile que había aprendido de Jihyo a los trece años.

A pesar de su trabajo por el cual muchos lo criticaban y tenían de menos, el solo ofrecía servicios de danza y poesía, jamás había tenido relaciones sexuales con algún cliente.

Para lo único que vivía era ganar dinero y poder pagar el caro tratamiento de su madre, debido al precio de las medicinas sólo hacían dos comidas al día y en situaciones extremas solo una.

Pero a pesar de eso siempre lo ofrecía una cálida sonrisa a su madre, lo único que tenía en el mundo. Terminó de cambiarse la ropa y caminó hacia ella.

La mujer de nombre seungwan de aspecto Delgado y delicado se encontraba cocinando un caldo de verduras para la cena─ huele delicioso ─ dijo acercándose a la caldera, ella le regaló una amable sonrisa ─ ya casi esta lista ─ dijo dando un beso en la frente de Jimin.

Lo miro a los ojos y pregunto─ que tal te fue en el palacio─

─ Mejor de lo que creí ─ respondió con una sonrisa que hacía que sus pequeños ojitos se volvieran dos medias lunas ─ ves te dije solo debías confiar en ti como yo lo hago─

─ tenías razón ─

─ y cuentame como es el Palacio por dentro ─ Jimin pensó y recordó que debido a los nervios ni siquiera se detuvo a observarlo.

─ Lo siento mamá no me fije ─ hizo un puchero triste ─como fui capaz de perder semejante oportunidad, seguramente esa será la única vez que visite el Palacio ─ fingió llorar.

La mujer lo miró divertida mientras meneaba el caldo que estaba preparando ─ siempre hay segundas oportunidades te aseguró que esa no será la única vez que lo visites.

─ y qué hay del rey cuéntame es tan intimidante como todos lo describen ─

─Pues me pareció bastante tranquilo─ pensó en la manera en que lo había visto cuando presentó su baile, la forma en la que sus ojos lo habían analizado de pies a cabeza ─ creo que le gusto mi baile ─

─ y a quien no ─ mencionó la mujer ─ si eres único en lo que haces, es una lastima que la gente no sepa apreciar tu trabajo y se aproveche solamente de tu necesidad ─ agregó un tanto molesta de que las personas solo le den una miseria cuando sus servicios valen más de lo que recibe.

─ sabes que no nos podemos quejar estamos casi al nivel de los esclavos, deberíamos de estar agradecidos de que no nos obliguen a trabajar todo el dia sin descanso ─

─ tienes razón, yo no se que hice para merecerte, siempre le buscas el lado bueno a las cosas ─ acarició la mejilla de Jimin ─ eres mi Ángel─

─ Y tú el mío ─ recargó su mejilla en la mano de seungwan ─ eres todo lo que me queda en este mundo, quisiera tenerte siempre conmigo ─ su tono salió más triste que antes y su madre sintió su pecho doler ─ oh mi bebé sabes que siempre estaré contigo aunque algún día mi corazón deje de latir─

Exactamente era eso lo que Jimin no quería sabía que su enfermedad cada vez empeoraba más y que iba a llegar el día que las medicinas ya no surtirían efecto en ella, y eso lo ponía triste y le daban ganas de llorar si su madre llegaba a faltar el se quedaría solo en este mundo y aunque su madre siempre le decía que jamás lo dejaría que incluso después de la muerte se se quedaría con él no quería que eso pasará.

La puerta sonó interumpiendo tan emotivo momento ─ Yo iré ─ dijo Jimin limpiando las pocas lágrimas que había derramado se dirigió a la puerta para abrirla.

─ Buenas noches Jiminnie, seungwan unnie─

─ Buenas noches Jihyo Noona─ saludo feliz a su única amiga.

─ Traje pan ─ dijo la chica levantando una pequeña bolsa.

─ Justo a tiempo la cena está casi lista pasa por favor ─ Jimin se hizo a un lado para que su amiga pudiera ingresar a su humilde morada.



Las bailarinas se movían al ritmo de los instrumentos en la gran Sala del trono con el único fin de entretener a su Majestad el rey. Pero aunque su cuerpo se encontrará ahí su mente no les estaba prestando ni la más mínima atención.

Dos días había pasado desde que Jimin se había presentado en el Palacio y había maravillado a todos con su hermoso baile, y desde ese momento no había salido de la mente de Yoongi.

Todos ya habían logrado olvidarlo ¿entonces porque él no podía borrar ese recuerdo de su cabeza, ¿que tenía ese chico de especial que se había clavado en sus pensamientos? El ruido de la música empezaba a hostigarlo, levantó su mano en señal de que detuvieran todo, ya no podía seguir ahí necesitaba descansar había sido un día cansado con su pesado itinerario. Se levanto y miro hacia sus cuatro concubinas quienes agacharon la cabeza con respeto despidiéndose.

Nobles y danzantes también hicieron una reverencia despidiendo a su rey.

Salió de la sala real siendo acompañado por varios sirvientes y su general y hombre de confianza Jackson Wang quien había servido a la Guardia Real desde la edad de los quince años.

─Hiciste lo que te pedí ─ preguntó el rey a su soldado.

─ sí mi señor, un Doncel de 18 años, vive en la zona rural del pueblo, park Jimin es su nombre─

Yoongi paró en seco y lo miró asombrado ─¿Doncel? ─ pregunto...los Donceles eran hombres delicados y agraciados muy poco comunes que tenían la bendición de poder quedar en Estado de embarazo, por lo cual ver a uno era como ver algo exótico y enigmático.

─ Así es señor es un Doncel, y uno muy pobre tanto así que casi está al nivel de un esclavo ─

─ así que, solo es un pobreton─ pronunció sabiendo que en esa zona vivía la gente más pobre.

─ si, al parecer su madre está enferma y vive solamente de las limosnas que recibe al bailar─

─ ¿soltero? ─ fue al punto, y no se anduvo con tanto rodeo.

─ sí mi señor─ una sonrisa se dibujó en el rostro del rey al oír eso último.

─ Lo quiero para mañana en la noche ─ ordenó.

─Lo que usted ordene mi señor─ respondió Jackson antes de hacer una reverencia y despedirse de Yoongi.

Los sirvientes le siguieron hasta su morada abrieron la puerta y se hicieron a un lado para que su Majestad entrará en ella, una dama le puso su ropa de descanso subió los tres escalones hasta posicionar su cuerpo sobre la gran cama repleta de hermosos y suaves cojines. Ya hace tres años que dormía solo, después de enviudar a la edad de 31 años.

Amaba a su reina, la que su difunto padre había elegido para él cuando tenía la edad de quince años, Irene fue la elegida de entre tantas Jovencitas por su personalidad virtuosa y educada, fue la que más sobresalió en el concurso para seleccionar a la futura reina por su gran belleza y personalidad aparte de que venía de una buena familia.

Se casaron a la edad de dieciséis años y al año siguiente de la boda Irene concibió a su hermoso hijo a quien amaba con locura.

Era feliz a su lado ella era una buena esposa lo apoyaba siempre como la reina y cuidaba muy bien de harem, pero una nube gris cubrió sus vidas cuando una extraña enfermedad cayó sobre ella y acabó con su vida. Sufrió mucho con su partida ella y su hijo eran su más grande tesoro.

Aún era Joven y todavía podía encontrar una buena mujer para que reinará con el. Pero no había encontrado alguien que éste a la altura y sea digna de ocupar ese lugar.

Tenía a sus cuatro concubinas mujeres hermosas y agraciadas pero a pesar de ser nobles, sus familias no eran muy prestigiosas al punto para convertirlas en su esposa.

Y ahí estaba de nuevo mirando al techo de la habitación pensando en Jimin, no sabía qué le pasaba con él, porque alguien que es dieciséis años menor que él no salía de sus pensamientos, porque alguien de tan bajo estatus social haga que la cabeza del rey sea un completo desastre mental, lo único que sabía es que no veía la hora de volver a verlo, Tal vez dé aprovechará de su posición de rey para obligarlo a estar con el.

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Gisaeng: según Google eran Mujeres coreanas dedicadas al entretenimiento y las Bellas Artes, Buenas en el área de la danza y la poesía, pero como este es un fanfic también habrán hombres que desempeñen este oficio.

Que tal les a parecido el primer cap ¿les gusto? Haganmelo saber en los comentarios uwu.

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