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Victor von Doom

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Miles Morales
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«¡Dejarlas en la Zona Negativa sería sentenciarlas a muerte!»

⎯⎯ Historia de Web of Spider-Man ⎯⎯

La gravedad de la Zona Negativa era muy diferente a la de la Tierra.

O, por lo menos, así parecía.

Esta dimensión era un gigantesco espacio, con escombros enormes que permitían a las dos heroínas mantenerse de pie.

La nueva Thor, Jane Foster, y Jennifer Walters, la conocida She-Hulk.

Ellas dos habían entrado a este lugar con un solo objetivo:

Detener a Annihilus.

— ¿Tienes un plan? — preguntó Jane.

— Creí que tú lo tendrías — respondió Jennifer — Después de todo, eres la más lista de las dos.

— Bueno, eso es verdad... pero no tengo un plan.

— Bien... siempre se puede improvisar.

Aquella criatura que se acercaba a gran velocidad se detuvo en el gran escombro donde estaban las dos Vengadoras.

Alzó la vista y notó como ellas dos se encontraban enfrente del portal al otro mundo.

¡¿Quiénes son ustedes?! — preguntó Annihilus — ¡¿Las protectoras de la puerta a la Tierra?!

— ¡Algo así, feo! — dijo She-Hulk, dando un paso enfrente — ¡¿Por qué no te acercas y nos muestras si eres digno de cruzar?!

— Cuidado, Jen — dijo Thor, mientras su martillo se envolvía de rayos — Si Reed Richards le temía a esta cosa, es porque es muy peligrosa.

¡¿Reed Richards?! ¡¿Está allí?! — expresó la criatura, perdiendo la paciencia — ¡Maldita sea! ¡Voy a acabar con ese tipo! ¡Lo voy a hacer! ¡Lo haré!

— Ya lo enojamos... 

— ¡Eso no importará cuando le patee el trasero! — dijo la gigante esmeralda, saltando hasta ese sujeto.

Intentó darle un puñetazo en la cara, pero Annihilus la recibió con un fuerte golpe en toda la cara, estrellándola contra el suelo.

Este golpe fue tan fuerte que partió el escombro en dos.

El suelo empezó a temblar.

Aquella parte de piedra donde estaba parada Jane se estaba destruyendo en pedazos, así que giró su martillo y se elevó en el aire.

Annihilus comenzó a caer, por lo que se impulsó con los propulsores de su espalda en una dirección.

Hacia Jennifer.

La tacleó en el aire y la estrelló contra otro escombro que se encontraba más abajo.

Luego, la tomó del cuello y comenzó a golpearla, rápidamente.

Entonces, entre uno de esos golpes, y con una sola mano, She-Hulk agarró el brazo robótico con el que la estaba agarrando el cuello y comenzó a aplastarlo.

El villano intentó alejarse, pero la gigante no se lo permitió.

Se levantó rápidamente y le dio un poderoso puñetazo, mandándolo a volar.

Thor se acercó rápidamente hacia donde estaba Annihilus y también lo golpeó con su martillo, alejándolo aún más.

— ¡Aquí voy! — exclamó Jane, alzando su martillo.

De un momento para el otro, una tormenta se formó encima de ellos, cayendo un gran rayo hacia el martillo, cargándolo de rayos.

Annihilus destruyó varios escombros al liberar una gran energía que empezó a envolverlo.

¡Miserables mortales! ¡¿Cómo osan enfrentarse a un dios?! — preguntó la criatura.

— ¡Ah...! ¡Soy la nueva diosa del trueno, amigo! — exclamó Jane.

Ella apuntó a la criatura con su martillo y liberó una gran ráfaga de rayos hacia su dirección.

El alienígena comenzó a moverse rápidamente, esquivando todo lo que podía el ataque que su adversaria le daba.

Levantó la cabeza y vio el portal, por lo que intentó llegar a él.

Pero She-Hulk, de un salto, lo tomó de la piernas y lo comenzó a descender.

Lo movió de tal forma que ella se encontraba detrás de él, y ambos enfrente de Jane.

La nueva diosa volvió a lanzar un poderoso ataque de rayos que le dio de lleno a Annihilus, causando una gran explosión.

Un gran humo se formó por todos los alrededores, inclusive llegando hasta donde estaba Thor, teniendo esta que cubrirse con su martillo de los escombros que salían volando,

Ella alzó la mirada, tratando de encontrar los restos de ese sujeto extraño... pero solo vio a She-Hulk siendo lanzada hacia su dirección.

Ambas mujeres se estrellaron entre sí, terminando en el suelo, mientras Annihilus soltaba otro gran grito que hacia temblar todo a su alrededor.

¡Voy a destrozarlas, partícula por partícula, hasta que no quede nada de ustedes! — dijo Annihilus, volando hacia las dos mujeres.

Sin darles tiempo ni para levantarse, las tacleó con tal fuerza que les causó un gran daño.

Luego, se paró firmemente y golpeó a la gigante esmeralda, alejándola, para después disparar un poderoso rayo que la estrelló contra un escombro, haciéndolo estallar.

Thor se levantó e intentó golpearlo con su martillo, pero este la detuvo en el acto, agarrándola de la muñeca.

Después, la golpeó en el estómago, haciéndola soltar un grito de dolor... para después lanzar una ráfaga de energía de la palma de su mano, mandándola a volar.

Pero She-Hulk no se dio por vencida.

Volvió a acercarse hasta ese tipo y le logró dar un puñetazo en la cara. El ser volvió a alzar su puño y también le dio otro golpe en el rostro, pero con la diferencia que la hizo retroceder algunos centímetros.

Ese tipo era realmente fuerte.

Jane lanzó otro rayo que tiró a Annihilus al suelo, cosa que Jennifer aprovechó para acercarse y golpearlo en el mentón. Luego de esto, aplastó un poco del pecho de la armadura del tipo, elevándolo en el aire y volviéndolo a estrellar en el suelo.

Annihilus envolvió su mano en energía y golpeó a She-Hulk, fuertemente, alejándolo de él.

Se levantó con velocidad y voló en dirección de Thor.

Ella giró su martillo y comenzó a volar, alejándose de él.

Aún así, la criatura era más rápida, logrando agarrarla de la capa. Este la acercó a él y le propinó un fuerte golpe en la cara a Foster, partiendo parte del casco que le protegía.

She-Hulk intentó volver a saltar hacia donde estaba Annihilus, pero este movió a Jane y la golpeó con ella, estrellándola contra un escombro del costado.

Annihilus soltó a Jane y la pateó, estrellándola contra otro escombro.

¡Son débiles, mortales! — exclamó — ¡No pueden hacer nada contra mi poder!

— ¡Cierra la boca! — dijo Jennifer, saltando hacia él.

— ¡Te derrotaremos! — dijo jane, lanzando otro rayo en su dirección.

Ninguna de las dos Vengadoras pensaban darse por vencida.

Iban a seguir luchar... porque debían de hacer tiempo para que los cerebritos del grupo pudieran cerrar el portal.

***

Las cosas no eran tan distintas en el sótano del castillo.

Aquellas enormes pantallas seguían mostrando la figura oscura de la auto nominada "Madame Hydra".

Alguien de quien no tenían idea de quien se trataba.

Pero la batalla no se llevaba con ella.

Los Vengadores lograron llegar allí, junto a Victor von Doom y sus Doombots, androides que este mismo creó.

Lo que no esperó  es que estas máquinas fueran hackeadas por los de Hydra y empezaran a atacarlos.

El rey de Latveria y su mejor amigo, Reed Richards, comenzaron a iniciar una secuencia de apagado para el portal que se encontraba en medio de la habitación.

Pero los robots iban a ser un problema para ellos, por lo que los demás héroes se encontraban allí.

El Capitán América, quien destruía los robots que se le acercaban con su escudo y alas. La Mujer Invisible se encontraba de crear escudos que envolvían los pechos y piernas de los robots, partiéndolos en dos. Y por último, La Mole destruía a todos y cada uno de los Doombots.

— ¡Es hora de pelear! — exclamó Ben, aplastando otro robot — ¡Reed! ¡¿Cuánto vas a tardar?!

— Unos minutos más... — exclamó el científico, mientras seguía tecleando — Maldición, estos tipos anularon todos los accesos.

— Busca otras entradas — dijo Victor.

— Lo intento, pero es muy complicado entrar a la red Doom.

— Estos tipos lograron entrar, así que nosotros también — expresó — Solo debemos buscar la entrada...

— Sí... dame un segundo.

Mr. Fantástico alargó su brazo y golpeó a uno de los robots que se acercaba hacia ellos.

— Muy eficiente — dijo Victor.

— Gracias — agradeció Reed.

El Capitán América se protegió de los golpes de varios de los Doombots usando su escudo. Luego, los empujó, haciéndolos retroceder.

Dio un gran salto, girando en el aire y abriendo sus alas, partiendo a los robots en varias partes.

Tres Doombots comenzaron a dispararle por la espalda, pero ninguna de las balas le dio. 

Sue Storm se puso detrás de Sam y lo protegió, formando un escudo.

El Cap se impulsó hacia el aire y cayó contra varios de estos robots, destruyéndolos por completo.

A un costado suyo también aterrizó La Mole, quien aplastaba sin parar a los distintos robots que los rodeaban.

Pero no paraban de llegar más y más.

Pronto comenzarían a tener una desventaja.

— ¡Estoy comenzando a cansarme de estas cosas! — dijo Sam, lanzando su escudo — ¡Más de lo que ya estaba! ¡Lo que es mucho!

El escudo comenzó a volar por toda la habitación, chocando con las paredes y golpeando a los robots.

Una de las cabezas de los Doombots comenzó a rodar hasta los pies del Capitán, llamando su atención.

Este se agachó, tratando de recogerla... pero un Doombot saltó sobre él, tirándolo al suelo.

La Mole logró llegar a tiempo y aplastó la cabeza del Doombot con facilidad, liberando a Sam.

— No se distraiga, Capitán — dijo Ben, golpeando a otro robot.

— Lo sé, solo... es que esta tecnología me suena familiar — dijo Sam, agarrando la cabeza del robot.

— ¡No es hora de pensar en eso! — se quejó Sue, protegiéndose con su escudo — ¡Necesito ayuda!

Varios Doombots atacaban a Sue al mismo tiempo, obligándola a crear un escudo a su alrededor, impidiendo que pudiera moverse.

El Capitán América lanzó su escudo, chocando contra los robots, destruyendo algunos.

Al ver esto, la Mujer Invisible deshizo su campo de fuerza, liberando una pequeña onda expansiva que mandó a volar a varios robots.

Luego, se levantó y formó más escudos, que partían en dos a las distintas máquinas.

Victor, quien había alzado la vista, se sorprendió de la forma en la que Sue lograba destruir a los robots.

— Jamás pensé que podría usar sus escudos de esa forma — dijo Victor.

— Sue puede hacer esas cosas y más — le respondió Reed.

— Que ardiente.

— ¡Oye!

— ¿Qué? Es la verdad.

— ¡No, escucha! ¡Logré ingresar a tus sistemas!

Finalmente, Reed Richard había logrado terminar de piratear la computadora de Doom.

— ¡Perfecto! ¡Hay que apagar esta cosa! — dijo Doom.

— T-Tenemos un problema...

— ¿Cuál?

— El portal no está del todo terminado. Es inestable... mientras más se mantenga abierto, más difícil será el cerrarlo.

— ¡Pues ciérralo ahora!

— ¡No puedo hacer eso! ¡She-Hulk y Thor siguen dentro! 

— ¡Mi pueblo será destruido si permitimos que Annihilus llegue a este mundo! — expresó — ¡La única forma de cerrarlo si no lo apagamos ahora sería destruyéndolo! ¡Y la explosión del portal también destruiría mi pueblo!

— ¡¿Crees que no lo sé?!

— ¡Entonces, ¿por qué no lo cierras?!

— ¡No dejaré a dos compañeras mías a su suerte en una dimensión que ni conocemos!

— ¡Ellas estarán bien!

— ¡No lo haré, Doom! — dijo Reed — ¡Dejarlas en la Zona Negativa sería sentenciarlas a muerte!

— ¡Esperarlas es sentenciar a mi pueblo a muerte! — dijo — ¡¿Piensas matar a miles de personas por solo dos Vengadoras?!

— ¡Claro que no! ¡Pero ya he pensado en una forma de evitar más muertes!

Fue en ese momento que Reed comenzó a teclear en la computadoras, abriendo los datos del portal y modificándolos.

— Incluso, en este momento, me es muy difícil cerrarlo... pero si disminuyo su tamaño... — decía Reed, mientras lo hacía — El radio de explosión disminuiría. Si mis cálculos no fallan, si vuelvo el portal lo suficientemente pequeño como para que ellas dos puedan entrar...

— La explosión sería lo suficientemente grande como para destruir todo mi castillo...

— Y lo suficientemente pequeña como para no destruir toda Latveria — dijo — Lo siento mucho, Doom... pero la prioridad ahora es salvar a tu pueblo.

— N-No... espera, espera... ¡el castillo es un monumento para mi pueblo! ¡Una representación de esperanza! ¡No puedes destruirlo!

— Estoy seguro que tu pueblo podrá sobrevivir, Victor — dijo Reed, terminando de teclear — Podrías hacer un nuevo palacio en el centro de la ciudad, ¿no te gustaba como hacían los mariscos en...?

Pero antes de poder seguir hablando, Victor le dio un puñetazo en la cara, haciéndolo retroceder.

— ¡¿Qué estás...?! — expresó Mr. Fantástico.

— ¡No voy a dejar que destruyas el monumento de mi familia!

— ¡¿Lo dices en serio?! ¡¿Vas a arriesgar la supervivencia de tu nación por un simple castillo?!

— ¡Representa un símbolo para...!

— ¡Son solo ladrillos y tierra! ¡Puedes construir cien más si quieres!

— ¡No lo entiendes! ¡No entiendes el significado de las cosas más allá de lo científico!

— Esto debe ser una broma...

Reed alargó uno de sus brazos y estrelló a Victor contra una pared, manteniéndolo allí.

— Tu reino es tu pueblo y blah, blah, blah... — dijo Reed, mientras seguía tecleado — Después me lo agradecerás...

— ¡Déjame ir...!

— Victor, por favor, no hagas esto más difícil...

Entonces, una ligera risa se escuchó por los altavoces 

"Me encanta esto. Los científicos siempre se ponen dramáticos cuando los asuntos morales se ponen en mesa"

Los demás héroes voltearon y vieron la situación en la que los dos amigos se encontraban.

— ¡¿Reed?! — preguntó La Mole.

— ¿Qué está pasando por allá? — preguntó Sam, protegiéndose de varios golpes con su escudo.

"¿Me pregunto que pasaría si destruyo el portal en este momento?"

— ¡No lo hagas! ¡Te quedarías sin la bestia que quieres! — exclamó Victor.

"Tenemos los planos del portal, Victor. Siempre podemos construir otro en otro lugar"

— ¡E-Espera! ¡P-Pero...!

"De todas formas, borrar Latveria del mapa también daría un gran mensaje al mundo, ¿no crees?"

— ¡Por favor!

"¡Sí! ¡Eso me gusta!"

— ¡Capitán! — gritó Reed — ¡Protejan el portal! ¡No he terminado!

— ¡Ya lo escucharon! — habló Sam — ¡Todos! ¡Prioridad al portal!

Los Doombots no perdieron el tiempo y comenzaron a disparar hacia el portal.

Sue Storm logró posicionarse enfrente de este, creado un gran campo de fuerza. Los robots disparaban a este campo, pero no lograban atravesarlo.

Lo único que lograban era agrietarlo, pero Sue lograba concentrarse para tratar de borrar esas grietas.

Pero hasta ella tenía un límite y no iba a resistir para siempre.

El Capitán América saltó, junto con La Mole, y empezaron a destruir a cada uno de los robots que se les presentaban enfrente.

Ben tomó una de estas cosas y se la lanzó hacia Sam, quien la partió en pedazos con un golpe de su escudo. Luego, abrió sus alas y giró, empujando a varios de los Doombots y destruyendo a otros.

Los héroes intentaban dar todo su esfuerzo para poder salvar Latveria... pero las cosas no parecían estar a su favor.

Tenían una desventaja muy grande.

***

Miles Morales y Kamala Khan se encontraban saltando entre los edificios de Latveria.

Escuchaban los gritos de las personas y las suplicas debido a la destrucción que estaban teniendo.

— E-Esto no puede estar pasando... — dijo Kamala, parando y tapándose los oídos — N-No puedo aguantarlo más...

— K-Kamala, escucha... — decía Miles, acercándose a ella — T-Tenemos que seguir... debemos encontrar a Kate.

— P-Pero... las personas... — le respondió — M-Miles, todas estas explosiones... las personas están muriendo ahora... aunque encontremos a Kate... aunque logremos ir con el resto del equipo...

Khan volteó y miró toda la ciudad.

Esta tenía un color rojizo por el fuego que había en cada calle.

— ¿C-Cómo vamos a salvar a todos ellos? — preguntó — ¿Q-Qué haremos si... si cuando nos pongamos nuestros trajes... no habrá a nadie a quién salvar?

Miles se le quedó miran por un momento.

Bajó la cabeza y se comenzó a sobar los ojos. No podía pensar bien. 

Lo único que escuchaba eran los gritos de las personas que suplicaban por ayuda.

Era muchos y no podía ayudarlos a todos. Ni siquiera ahora, que no tenía su traje.

La destrucción de todo este lugar... había ocurrido tan rápido y sin previo aviso que... le hacía recordar a la última vez que había vivido una situación parecida.

Hace más de un año... cuando toda Nueva York fue destruida.

— No lo sé... — dijo Miles, con la mente en blanco — No sé que... que hacer...

Ambos jóvenes miraron la destrucción.

Otra vez, los dos no podían hacer nada para evitar tanta muerte.

***

Reed Richards finalmente había terminado de configurar el portal.

Este se había empezando a encoger, hasta tener el tamaño como para que una persona pudiera pasar.

— ¡Está hecho! — dijo Reed — ¡Tenemos que decirles que entren al portal!

— ¡Yo me encargo! — exclamó Ben, tratando de correr hasta el portal.

Pero una vez se encontró enfrente de este... fue golpeado por algo.

Por el cuerpo de She-Hulk.

Sue se dio la vuelta y vio como Thor también era lanzada hacia su dirección, chocando con ella. Esto provocó que el campo de fuerza se deshiciera de golpe, liberando una onda expansiva que mandó a volar a todos.

Debido a esto, Reed soltó a Victor... pero ambos no comenzaron a pelear, pues estaban quietos.

Observando a quien intentaba entrar.

Annihilus.

¡Maldita sea! ¡Los puedo ver! — expresó Annihilus, en la entrada del portal — ¡Voy a asesinarlos!

El portal no era lo suficientemente grande como para dejarlo entrar, por lo que su brazo fue lo único que atravesó el portal.

— Reed... cierra el portal... — dijo Victor.

— N-No puedo... — respondió este, leyendo los datos que arrojaba la computadora.

— ¡¿Qué quieres decir que no puedes?! 

— ¡Que no puedo! ¡El portal llegó a un punto sin retorno!

— ¡¿Qué?!

— ¡Ya no se puede cerrar! ¡Victor, lo siento, pero debemos dejar que lo destruyan!

— ¡No! ¡No podemos!

— ¡Victor! ¡Eres tú o el castillo!

Doom miró hacia otro lado, observando como los Doombots comenzaban a levantarse del suelo. Se dirigían hacia el portal, con la misión de destruirlo.

Victor cayó de rodillas, golpeando con fuerza el suelo...

— Te odio... — dijo Doom, levantándose.

— Lo sé, y sé que podrás superarlo — exclamó Reed — ¡Es hora de irnos!

Mr. Fantástico alargó sus manos y comenzó a golpear a todos y cada uno de los robots que se ponían en su camino.

Con dolor, She-Hulk y Thor se levantaron del suelo, al igual que los demás héroes, quienes ayudaban a hacer un camino para salir de allí.

"Capitán América..."

Sam se dio la vuelta, mirando la enorme pantalla y la figura oscura que había en ella.

"Espero que nos volvamos a ver... y que sea en persona"

— Me aseguraré de que así sea — dijo Sam, continuando su camino.

Victor, quien iba detrás de ellos, miró para atrás.

Veía a Annihilus, tratando de golpear algunos robots, mientras estos disparaban a la estructura del portal, la cual se destruía.

El rey paró en seco, viendo como los héroes seguían corriendo.

Se dio la vuelta y corrió de nueva cuenta hasta la sala del portal.

Allí, corrió hasta la computadora y comenzó a teclear en esta. Buscaba encoger el tamaño del portal.

No quería que se destruyera el castillo.

Pero no podía. La inestabilidad del portal no permitía modificarlo.

Reed Richards tenía razón. No había nada que él pudiera hacer.

— ¡No! ¡Maldita sea! — exclamó Victor, golpeando la pantalla — ¡Esto no puede estar pasando!

De pronto, el sonido de unas chispas llamó su atención.

Alzó la vista y vio el portal...

Vio lo inestable que estaba.

Y como este estallaba... en su cara.

***

Ya en las afueras del castillo, Reed Richards se dio la vuelta.

Observando a todos los presentes, notó la falta de uno.

— ¿Victor? — preguntó este — ¡¿Dónde está Victor?!

***

— ¡Allí está! — gritó Miles, aterrizando en un callejón.

Allí, tirada en el suelo, se encontraba Kate Bishop. Ella se veía gravemente herida.

A su costado, había un niño, el cual lloraba.

Kamala pudo reconocerlo. Era uno de los niños que los había robado más temprano.

— ¿Qué le pasó? — preguntó Kamala, arrodillándose a su costado — ¿Por qué está...?

Miles miró hacia otra parte y vio restos metálicos en el suelo.

— Creo que salvó al niño de la explosión de uno de los Doombots — dijo Miles.

— S-Sigue respirando... — dijo — Q-Que bueno...

— Tenemos que llevarla al castillo — dijo el moreno, levantando a Kate entre sus brazos — La llevaremos a la enfermería y...

Pero, en ese momento... el suelo comenzó a temblar.

De pronto, una gran luz cegador se hizo presente y un poderoso viento casi los saca volando.

Era tan grande que prácticamente los dejó sin visión a los dos.

Miles tuvo que volver a dejar a Kate en el suelo para poder sobarse los ojos, debido al ardor que le provocó la luz.

Y cuando finalmente pudo volver a ver...

No vio nada.

No vio la montaña, ni el gigantesco castillo de Latveria.

De hecho, no vio ninguna casa o edificio enfrente suyo.

Había suelo varios metros enfrente suyo, pero por lo demás... se había formado un gigantesco cráter.

...

Al parecer... Reed Richards se había equivocado.

Había hecho un mal cálculo y... la explosión fue más grande de lo que esperó.

Prácticamente... habían borrado la mitad de Latveria del mapa.

Miles miraba sorprendido todo esto...

No sabía que había pasado.

No tenía idea de que pasaba.

Y no sabía que iba a pasar ahora.

Lo único que sabía...

...era que no había podido hacer nada.

Uff... las cosas no salieron nada bien.

Cuantas muertes :o... y sin resurrecciones esta vez ;).

Espero que les haya gustado este capítulo!!!

Si fue así, pueden darle a la estrellita, comentar y compartirlo.

Nos vemos hasta la próxima.

Publicado el 25/01/22

[DANIKAST]

"Hola, oyentes. Aquí Danika Hart, en su podcast favorito. Muchas gracias por el aumento de vistas. Cada día somos más populares y todo es gracias a ustedes. El podcast del día de hoy es algo corto y es más que nada para hablar de cierto rumores. No es información confirmada, ni nada por el estilo, pero quiero poner en la mesa lo que se ha estado hablando: Black Cat, y su oscuro regreso. Todos recordamos a Black Cat. Se sabe que fue una criminal que decidió cambiar de bando. Ayudó a encontrar la cura del Aliento del Diablo, además de ayudar a salvar la ciudad en otros atentados horribles. Incluso, en la gran masacre de Nueva York. Pero, desde la muerte del Hombre Araña, Peter Parker, no se le ha visto... hasta hace unos meses donde, según informan algunos, se le encontró robando una joyería. No sé por qué haría esto... y, la verdad, es algo que no deseo creer. Ella fue una inspiración para varias personas y ex criminales, demostrando que alguien podía cambiar de bando y hacer las cosas bien. Por mi parte, yo no creo en estos rumores. Pero díganme que piensan ustedes... ¿de verdad creen que Black Cat volvió a ser una criminal? Me gustaría saber sus opiniones. Eso sería todo por el día de hoy. No olviden limpiar sus habitaciones una vez a la semana. Se llenará de polvo y se verá horrible. ¡Chao!"

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