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Miles Morales
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«¡Ella tiene poderes que hacen kaboom!»

⎯⎯ Historia de Web of Spider-Man ⎯⎯

Todos los jóvenes héroes se encontraban sentados, alrededor de lo que era una brillante y cálida fogata.

La noche había llegado y no tuvieron mejor idea que asar malvaviscos en medio del patio del templo.

Lo que en resumen era: olvidar un rato su vida superheroica y ser jóvenes normales por una vez en la vida.

Estaban Lana, Miles, Kate, Riri, Kamala, Sam Alexander, Tyrone, Tandy, Kitty y Fabio sentados en un círculo, justo en ese mismo orden.

— Yo solo digo... — decía Sam, mientras mordía un malvavisco — Nosotros somos el mejor equipo. 

— ¿Qué hay de los Vengadores? ¿Ellos no son mejores? — cuestionó Tandy.

— Ellos están bien, pero... la gente cool está aquí.

— Oye, yo soy parte del equipo principal — dijo Bishop.

— Yo también — habló Riri —¿Qué? ¿Acaso no somos "cool" como ustedes?

— A-Ah... no, no dije eso — dijo Nova, aún mordiendo su malvavisco — Quiero decir, la mayoría, ah...

Entonces, Sam se mordió la lengua, provocando que todos comenzaran a reírse.

— Bueno, creo que no todos en este equipo son cool... — dijo Kamala.

— Edo no ed judto... — exclamó Sam, aún sufriendo por la mordedura.

— Yo solo sé que soy la más cool de este equipo — dijo Lana, empezando a asar un malvavisco.

—¿Tú? ¿En serio? — preguntó Miles —A ver, ¿por qué?

— Bueno... tengo los mejores poderes.

— Solo haces estallar cosas — dijo Kitty.

— Ustedes tienen poderes muy complicados... a veces, lo mejor está en lo simple.

— Claro... — dijo Riri, revisando en su celular — Como lo simple que era tu primer traje, ¿no?

Mostrando lo que había en la pantalla, los jóvenes pudieron ver lo que parecía ser un traje, algo ridículo, y a una joven Lana Baumgartner usándolo.

Esto hizo que varios de ellos comenzaran a reírse, mientras que Lana trataba de apuntar al celular para hacerlo estallar.

— ¡¿De dónde carajos sacaste esa foto?! — exclamó Lana, tapándose la cara — ¡Creí que ya no estaban esas fotos en internet!

— Amiga, ¿bromeas? Tienes a un montón de fanáticos que les fascina tu anterior traje — bromeó Riri — ¿Por qué no les haces un favor y te lo vuelves a poner?

— No creo que el traje le quede — dijo Miles.

— Los voy a matar... — dijo Lana, aún tapándose la cara — Juro que voy a matar a cualquiera que haya visto esa foto.

— Pero, ¿cuándo fue que lo usaste? — preguntó Kamala, viendo la foto — ¿Y por qué lo usaste?

— Yo no lo diseñé... fue mi mamá...

— ¿Tu mamá creó ese traje? — preguntó Fabio — Vaya... que...

— Es horrible...

— Nunca mejor dicho — dijo Miles, comiendo su malvavisco.

— No hay muchas fotos tuyas con ese traje — dijo Riri — Solo la usaste una vez y... ¿contra el Hombre Araña?

— ¿Qué?

— Sí... fue en mi etapa de ser una criminal y blah, blah, blah... — dijo Lana, comiendo su malvavisco — Fue la primera vez que usé ese traje y... la última...

— ¡Oh! ¡¿Por qué no nos cuentas esa aventura?! — preguntó Kamala — ¡Ya saben! ¡Es lo normal contar historias enfrente de una fogata, ¿no?!

— Creo que esas son las historias de terror... — dijo Kate.

— Esa experiencia fue una historia de terror para mí... — dijo Lana — Pero no quiero que me estén insistiendo toda la noche con eso...

"Todo ocurrió hace como cuatro o cinco años..."

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Acabábamos de hacer estallar una joyería cuando...

...apareció él.

— Mantente cerca, Lana.

— Lo sé, madre — le dije a mi mamá, mientras le apuntaba al Hombre Araña.

Este parecía vernos seriamente... hasta que los ojos de su máscara se agrandaron...

— ¿"Madre"? ¿Por eso llevan esos lindos conjuntos a juego? — cuestionó Peter — ¡Ustedes dos son adorables!

— ¡Sí! — exclamé — ¡Somos las Bombshells y estamos a punto de joderte tanto que no nos podrás joder a menos que tengas un tubo atravesando tu jodido tra...!

— Oh, y tú suenas como un marinero. Debes ser la más tierna del...

Y sin dejarlo terminar, yo liberé una gran explosión en toda su cara...

Peter salió disparado y se estrelló contra lo que era una pared, al otro lado de la calle.

— ¿Qué diablos fue...? — exclamó Peter, agarrándose la cabeza...

— ¡Hay otro más de donde vino eso, hijo de perra! — exclamé, provocando otra explosión.

Pero, en esa ocasión, el Hombre Araña logró esquivarla.

— ¡Ok, Bombshell! ¡Lo entiendo! — dijo, mientras se acercaba lentamente — ¡Dan buenos disparos!

— ¡Vámonos, Lana! — me dijo mi madre.

— ¡Nos podemos encargar de esta mierda! — le dije.

— ¡Vámonos, ahora!

Mi madre también comenzó a provocar explosiones, pero...

— ¡Por lo general, diría: Realmente deberías escuchar a tu madre! — dijo Peter, casi enfrente de nosotras — ¡Excepto que ella parecer ser la que te metió en esta vida de piratas roba joyas en primer lugar, lo que no la convierte exactamente en la madre del...!

— ¡Pedazo de...! — dije, acercándose a él.

Ambos estuvimos, cara a cara. 

Yo estuve a punto de volarle los sesos, pero... él fue más rápido y golpeó mi puño, mandando la explosión hacia otro lado.

— ¡Esta no es la razón por la que vinimos aquí! — dijo mi madre, empujándome a un lado — ¡Pero podemos hacer esto! ¡Ve al aire, ahora!

— ¡Muy bien, señoritas! ¡Les voy a dar... una oportunidad! — dijo el Hombre Araña, aterrizando sobre un coche — ¡Ríndanse ahora o...!

Entonces, en un movimiento rápido, mi madre hizo estallar el coche, mandando al Hombre Araña a volar por los aires.

Yo y mi madre agarramos las maletas llenas de joyas y nos fuimos de allí, generando explosiones para hacerlo.

— ¡Nosotras no vinimos aquí para hacer esto! — me regañó mi madre.

— ¡Míralo caer! — me burlaba yo — ¡Mira esas explosiones!

— ¡Vámonos!

— Ooooook... cielos...

Lastimosamente, lo que ninguna de las dos esperábamos era que el Hombre Araña saliera de entre el polvo y escombros... y me llenara la cara de telarañas.

Así fue como caí encima de un edificio, mientras mi madre iba tras de mí.

— ¡Oh, por Dios! — exclamó mi madre — ¡¿Estás bien?!

— ¡Quítate! — decía, mientras intentaba quitar la telaraña de mi cara — ¡Quí-ta-te!

— ¡¿Cuál es su maldito problema?!

— ¡¿Los piratas tienen problemas en su persecución?! — preguntó Peter, mientras lanzaba varias redes de telaraña.

Mi madre alzó sus puños e hizo estallar las redes.

Pero cuando el humo se fue, notamos como el héroe ya no estaba. Por suerte, había logrado quitarme la telaraña de la cara.

— Vámonos... — dijo mi madre — ¡Vámonos!

— El Hombre Araña... — dije, sobándome la cara — ¿Puedes creerlo?

— Vámonos, cielo.

— ¿A dónde se fue?

— Creo que lo espantamos...

Y sin previo aviso, Peter apareció y le dio una patada a mi madre, tumbándola al suelo.

— Creo que ustedes son algo nuevas en todo esto... — dijo Peter, girándose hacia mí.

Yo intenté apuntarle, pero él fue más rápido.

Se posicionó detrás de mí y agarró mis brazos, impidiendo que pudiera moverme.

— ¡Hijo de...! — exclamé.

— ¡Lenguaje! ¡Por favor!

— ¡Voy a derretir tu cara de mierda!

— ¡Bueno, eso fue muy lindo, pero ya me gusta alguien! ¡No quiero decir que no seas tierna o...!

— ¡Maldito!

Liberé una gran explosión que hizo que ambos nos estrelláramos contra un edificio cercano.

Después de eso, caímos en picada hacia un callejón, estrellándonos contra un contenedor de basura.

El primero en asomar la cabeza del contenedor fue Peter, para que después yo lo hiciera...

— Ow...

— Cállate — dijo.

Abrí los ojos y vi como un montón de personas del SWAT me apuntaban con sus armas.

— ¡Chicos, váyanse de aquí! — dijo Peter, agarrándome de las muñecas — ¡Ella tiene poderes que hacen kaboom!

— ¡Bueno, ahora ya no! — dije — ¡Gracias!

— ¿Ahora ya no?

— ¡Solo lo puedo hacer cuando estoy junto a mi mamá!

— ¿En serio?

— ¡Suéltame!

— Tú empezaste.

— ¡No me vuelvas a golpear!

— Yo no te golpeé.

— ¡Ugh! Creo que mi nariz está sangrando... — dije, soltándome del agarre de Peter — ¡Te voy a demandar!

— ¿Sí? Buena suerte con eso.

— Jódete.

— Tus poderes solo funcionan cuando estás junto a tu madre... eso es fascinante.

— ¿Sí? Si estás tan fascinado, ve a vivir con ella.

— ¿Cómo obtuviste tus poderes?

— ¿Por qué? ¿Escribes un libro?

— Solo no lo comprendo — dijo, mientras salía del contenedor — ¿Tú y tu madre tienen esa clase de poder y solo lo usan para robar joyerías? ¿Eso es lo mejor que pueden hacer?

— ¡Tú estuviste en el mismo basurero que yo, pedazo de...!

Pero yo no pude seguir hablando.

Me pusieron unas esposas y me apuntaron con sus armas.

— Gran trabajo, Hombre Araña — dijo la capitana de policía — No lo haces nada mal.

— Gracias, Yuri — dijo Peter, quitándose la basura de su traje — Su madre y la bolsa de joyas están en la azotea.

— Un equipo SWAT se está encargando.

— Ok, cool... creo que ya debo irme a tomar un baño.

— Por favor...

El Hombre Araña se fue... mientras a mí me metían a una patrulla policial, al igual que a mi madre.

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— Después de eso, mi madre fue encarcelada y a mí me perdonaron — dijo Lana — El tribunal consideró que fui una víctima de la influencia de mi madre y terminé bajo custodia de mi abuela.

— ¿Quieres decir que tu primer gran rodeo fue recibir una paliza del Hombre Araña? — preguntó Sam.

— Es una historia de origen brutal — exclamó Miles, para después recibir un golpe de Lana en el brazo.

— ¡Ya no quiero recordar eso! — exclamó Baumgartner, tapándose la cara.

— Bueno, bueno, está bien — dijo Riri, guardando su celular — Ninguno de nosotros tiene los orígenes más alegres.

— ¿Cuál dijiste que fue el tuyo? — preguntó Kate.

— Ah, es... no quiero aburrirlos con mi historia.

— Pues mi historia de origen es de las mejores — dijo Sam, poniéndose de pie — ¡Todo empezó cuando mi padre desapareció...!

— Sam, nos contaste esa historia cientos de veces — dijo Ty.

— Y seguimos sin creerte — dijo Kamala — ¿De verdad nunca tuviste miedo cuando casi mueres por los Guardianes de la Galaxia?

— Ya les dije que fingí desmayarme... — dijo Nova, agachando la cabeza — Un miembro de los NovaCorps jamás da marcha atrás.

— Y te creemos, amigo — dijo Lana, sarcásticamente — Creo que ninguno de nosotros tiene otra historia vergonzosa que contar.

— Yo tengo una — dijo Miles — Pero no es mía.

Entonces, volteó a ver a Kitty Pryde, quien abrió la boca cuando supo a qué se refería.

— No — dijo Kitty.

— ¿Quieren saber el altercado que protagonizó Kitty Pryde en la escuela Midtown? — preguntó Miles.

— ¡Juro que si lo haces...!

— ¡Yo quiero saber! — dijo Lana — ¡No quiero ser la única que sufrió esta noche!

— Bueno, Peter estuvo en la mayor parte de los hechos — empezó a contar Miles — Pero, según recuerdo...

— ¡Cuéntalo, Morales! ¡Y te juro que volveré a usar esa túnica!

— ¡Bueno, bueno!

— ¿Qué túnica? — preguntó Kate.

— Nada...

— Ella fue Shroud — reveló Miles.

— ¡¿Fuiste tú?! — exclamó Kamala, sorprendida — ¡Pero ella era una terrorista!

— Esa identidad no fue para eso... — dijo Kitty, avergonzada — Se suponía que sería un símbolo para que las personas vieran a los Mutantes con bueno ojos, pero... las cosas se salieron de control...

— Y de qué forma... — dijo Miles.

— Es mi culpa por confiar en el Club del Fuego Infernal...

— Tuviste suerte que Peter pudiera salvarte de ese aprieto.

— Me salvó de los verdaderos terroristas y testificó a mi favor... — dijo Pryde, para después taparse la cara — ¡No puedo creer que hiciera eso por mí!

— Eres toda una fanática — rió Khan.

— ¡También lo eres tú!

— ¡Pero no dije que eso tuviera algo malo!

— ¿Segura que nunca escribiste un fanfic tuyo con Parker? — preguntó Lana.

— ¿Qué? N-No... — dijo Kitty — Todas mis fantasías se quedaban en mi cabeza.

— ¿Fantasías? ¿Qué clase de fantasías?

— Yo creo que no deberíamos ahondar mucho más en este tema — dijo Capa.

— ¿Por qué no? Quiero saber — preguntó Daga.

— Ah... no... sería incómodo...

— ¡¿Qué?! ¡No! — exclamó Kitty — ¡No ese tipo de fantasías!

Todos rieron después de eso.

Mientras reían, Miles miró hacia el techo del templo, observando como se encontraba Shang-Chi, mirando el cielo y las estrellas.

— Mañana será nuestro último intento... — dijo Miles.

— Las vacaciones de verano están por terminar — dijo Sam — Tienes que lograrlo.

— Lo voy a lograr.

— Si quieres, podemos ser más flexibles contigo — dijo Lana — Ya sabes, para que te resulte más fácil.

— No creo que sea lo que él quiera — habló Riri.

— No... si quiero alcanzar todo mi potencial, debo lograrlo mañana... — habló MIles — Debo intentarlo...

— Lo harás bien — dijo Kamala.

— La última vez casi llegas — dijo Capa.

— Hasta que Ty te absorbió en su universo de bolsillo — habló Daga.

— Shang-Chi dijo que lo haga...

— Oye, Miles... tú solo piensa que lo lograrás — le dijo Lana, dándole un ligero golpe — Ya sabes, solo... no te presiones. Relájate... y estarás bien.

— Eso haré... o, bueno, lo intentaré... — dijo Miles — No, quiero decir... lo lograré.

***

Edificio Baxter.

Enojo.

Esa era la expresión que tenía Sue Storm en el rostro.

Estaba enojada. Pero no con su hermano. Ni con algún amigo suyo.

Mucho menos con Ben.

Estaba enojada con Reed. Con Reed Richards.

Mr. Fantástico... quien ahora llevaba el nombre de El Creador.

— Tu casco es ridículo — dijo Sue, finalmente, dentro del laboratorio de Reed.

— No importa cuánto tiempo me veas con tu cara de enojo, no voy a cambiar de opinión — dijo Reed — Lo planes de contingencia son necesarios.

— Ayer me reuní con Jessica Drew, ¿sabes? — dijo — Está embarazada.

— Ya sé eso.

— Espera un hijo varón.

— Que gran noticia...

— Y con los planes que posee Hydra, ellos podrían matarla mucho antes de que su hijo nazca.

— Bueno, los hijos pueden llegar a ser una carga, ¿no? — le respondió — O eso me diste a entender cuando hablamos del tema...

— Reed...

— Sue, yo... me alegro de verte... — dijo Reed, levantándose de su asiento — De verdad, soy feliz de que hayas vuelto y que estés usando nuestro... viejo uniforme, pero... tú viste lo que pasó.

— ¿Hablas de Latveria? Eso no fue nuestra culpa.

— No es solo eso... es un conjunto de cosas. Es...

— Ya sé ese discurso y créeme que no me importa.

— Debería importarte... a todos debería importarle... — dijo Richards, quitándose el casco — Yo no... muy en el fondo, no quiero hacer esto, ¿sí? Traicionar a mis amigos y su confianza. Conspirar en su contra. Crear planes para neutralizarlos o matarlos...

— Entonces, ¿por qué los hiciste?

— Yo... 

Reed se sentó y agachó su cabeza. Después, empezó a sobarse los ojos.

Estaba muy cansado.

— No lo sé... — dijo — Creo que... no lo sé...

— ¿Decidiste apoyar a SWORD y traicionar a todos los que te rodean...? — preguntó Sue — ¿También hay planes para nosotros? ¿Ben? ¿Johnny...? ¿Para mí...?

Apartando la vista, Reed dio su respuesta.

— No puedo creerlo... 

— P-Pero esos planes no fueron robados — dijo Reed — SWORD ya verificó cuales fueron los robados. 

— ¿Cuáles?

— Los del Capitán América, Bucky, el Hombre Araña y de los Defensores... ningún otro más.

— Sam Wilson es un amigo.

— Lo sé...

— ¡¿Y por qué no haces lo necesario para salvar su vida?!

— ¡Porque...! Porque... porque no puedo perjudicar la seguridad del mundo...

— Hablas igual que SWORD...

— Lo siento, pero... ellos tienen razón en esto...

— Te desconozco...

— Sue, por favor... nadie más comprende lo necesario de todo esto. Por favor, tú... tú debes comprenderlo...

— Puedo entenderlo hasta cierto punto, pero... ¿Qué no hagas nada para recuperar los robados? Eso es lo que no comprendo... — dijo Storm, dándose la vuelta — Creí que serías otra clase de hombre...

— Yo... soy El Creador, Sue... yo...

— Solo eres un idiota...

Entonces, Sue Storm se retiró del laboratorio, dejando a Reed Richards solo.

En aquel lugar.

Rodeado de sus máquinas, pero sin ningún contacto humano.

Reed suspiró, observando su casco. 

Él era El Creador... creó los planes de contingencias para todos los héroes del mundo... a excepción de Sue Storm...

No podía hacerle eso a ella... para nada.

Aquellos planes los había calculado de tal forma que no podrían tener errores. Una forma para no repetir lo ocurrido en Latveria.

Su trauma... que provocó un gran dolor a su amigo...

— Necesito una cita con la Doctora Sinclair... — dijo Reed, sobándose la cara.

Estaba traumado... y su trauma no le permitía pensar con claridad.

Obviamente, necesitaba una cita con su psiquiatra.

Mirando a su derecha, vio una tabla con un montón de futuros proyectos.

Unas ideas alocadas que tuvo y que fue escribiendo allí.

Un clon de Thor. Un transbordador para traer a los muertos a la vida. Vivian Vision. Una prisión en la Zona Negativa. Demolo-Gun...

Pero uno llamó su atención.

Su plan de respaldo para los planes de contingencia.

Por alguna razón, SWORD jamás le pidió algún tipo de plan de respaldo. Por si alguno fallaba o por si alguno se extraviaba. 

Él ya había empezado a trabajar en esa idea mientras realizaba los planes, aunque... no sabía si debía hacerlo.

Si lo hacía, los planes para el Capitán América y los demás se irían a la basura, pero... en una situación así...

¿Qué otra opción tenía?

***

Ya era de día.

El sol se encontraba en lo alto, demostrando que ya eran las doce. 

Eso significaba que era el momento de la verdad.

— ¿Estás listo? — preguntó Daredevil.

— Sí... — respondió Miles, disparando sus telarañas a su cara — Estoy más que listo...

— Muy bien... 

Shang-Chi se acercó hacia los dos y sonrió.

— Miles Morales, estaré esperándote en el templo — dijo el maestro — No olvides. Tienes dos horas para llegar.

— Lo lograré... — dijo Miles.

— Llevas diciéndolo todo este tiempo.

— Esta vez lo haré... lo juro...

— Habla en serio — dijo Daredevil.

— Muy bien, Hombre Araña — dijo Shang — ¡Ve!

Entonces, los dos héroes salieron disparados hacia el bosque.

Comenzaron a correr.

Miles esquivaba los árboles, listo y preparado para poder hacerlo.

Pero apenas avanzó unos metros, sus sentidos le avisaron del peligro, obligándolo a dar un salto hacia atrás.

Le habían lanzado un bastón.

— ¡Ya te he apoyado por mucho tiempo, Miles! — dijo Matt, lanzándole otro bastón — ¡Yo también voy a intentar detenerte!

— ¡¿Es una broma?! — cuestionó Morales, envolviéndose en su Poder de Veneno.

Ahora debía de enfrentarse a Daredevil...

Estaba en aprieto...

...pero no se iba a rendir.

¡¿Qué tal?!

Bueno, como acaban de leer, en este capítulo respondemos alguna que otra interrogante. Así soy yo, contando los orígenes de los personajes mucho después de que se presentaran jaja.

Aquí ya vimos cual fue el primer asalto de Lana Baumgartner, además de saber un poco más el trasfondo de Kitty Pryde. Y pues... Sue Storm trató de hablar con Reed, quien parece estar un poco cansado de la vida jaja.

Además de esa pequeña mención ;).

En fin, espero que les haya gustado el capítulo. Si así fue, pueden darle a la estrellita, comentar y compartir!!

No vemos!

Publicado el 24/05/22

[DANIKAST]

"Tengo una pregunta... ¿está mal visto que una chica invite a un chico a salir? Es para... una amiga. Verán, mi amiga me contó que conoce a un chico que es muy misterioso y eso le parece genial. Pero solo salieron una vez y ahora... solo se hablan por mensaje... así que, por eso quiero... digo, mi amiga quiere saber si no hay nada malo con pedirle al chico para salir en una cita. Quiero decir, estamos en 2028. Los chicos ya no tiene esos problemas de hombría... ¿verdad? O quizás sea que... ¿significa que ese chico no está interesado? No lo sé. Perdonen, sé que quieren saber cosas del Hombre Araña, pero estoy hablando de cosas de mis amigas y esas cosas. Así que voy a leer algunos de sus comentarios del podcast pasado. Veamos... "Danika, ¿estarías dispuesta a sa...salir con alguno de tus seguidores"................ S-Sí, creo que a-aquí dejaremos el podcast de hoy. Recuerde jamás enamorarse. ¡CHAO!"