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Miles Morales
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«Q-Quiero ir a casa...»

⎯⎯ Historia de Web of Spider-Man ⎯⎯

— ¿El Merodeador? — dijo Lana, viendo como ese tipo acababa con todos los del tejado — ¡¿Estamos trabajando con el Merodeador?!

— Sí, tampoco confío en él — dijo Anton — Pero era mi único medio para poder llegar a Miles.

— ¡Viejo, literalmente es el peor! — exclamó — ¡Ese idiota traicionó a los UnderGround! ¡Todos los ladrones saben que es un doble cara! ¡Y que no hay que trabajar con él!

— Aún si nos está usando para obtener algún tipo de información de A.I.M., su ayuda es indispensable para rescatar a Miles.

— ¡Ah! ¡No puedo creer que estemos haciendo esto! — dijo, para después suspirar — No sabes cuánto te odio...

La pelea en el tejado continuaba.

El Merodeador saltaba sobre los tipos armados, quienes no tenían ninguna oportunidad contra el villano.

Esta arañaba los rostros y pechos de los guardas, salpicando la sangre de sus víctimas por todo el lugar.

Y cuando finalmente acabó, se acercó a uno de los cuerpos y sacó una tarjeta del bolsillo de uno.

Aterrizó enfrente de la puerta del tejado y pasó la tarjeta por el panel.

Las puertas se abrieron y este entró.

— ¡Bien! ¡Es el momento! — dijo Tarántula.

Este disparó un cable hacia el edificio, mientras que Bombshell se impulsaba, gracias a una explosión.

Ambos aterrizaron en el tejado y comenzaron a correr, en dirección a la entrada de ese edificio.

Mientras bajaban por las escaleras, podían escuchar los gritos de varios guardias de seguridad.

— ¡Ese sujeto es muy bueno en su trabajo! — dijo Lana.

— ¡Es un asesino despiadado! — respondió Tarántula — ¡No confío mucho en él!

— ¡Entre asesinos se entienden!

— ¡No en este caso!

Los dos héroes lograron llegar a un piso, donde se encontraron con el Merodeador, atacando a varios de los guardias robots.

— ¡¿Dónde está Miles?! — preguntó Tarántula.

— No lo sé — respondió el villano — Buscaré en el siguiente piso.

— ¡Si buscamos piso por piso, nunca lo encontraremos a tiempo! — dijo Lana — ¡Debemos de apresurar las cosas!

— ¿Alguna idea? — preguntó Anton.

El Merodeador presionó un botón en su casco y comenzó a mirar a todas direcciones.

— No tengo señales de vida. Sin trabajadores retrasados. Sin personal de limpieza — habló Merodeador — Este lugar es un frente. Pero, ¿dónde tienen a Miles?

— ¿Este lugar tiene un sótano? — preguntó Lana — He visto algunas películas y la mazmorra oculta siempre está en el sótano.

— Buena idea... — dijo, mientras miraba al suelo — Tengo una docena de ondas de calor en lo que parece ser una serie de subsótanos.

— Debemos darnos prisa antes de que se den cuenta de nuestra presencia — dijo Anton.

— De eso me encargo yo — exclamó Bombshell, alzando sus manos al suelo.

Allí, formó una pequeña explosión, creando un cráter con el cual podían bajar al siguiente piso.

Aterrizaron e hicieron lo mismo.

En poco tiempo, los tres ya habían llegado a lo que parecía ser la planta baja del edificio.

— Hasta aquí — dijo Tarántula — Hay que usar las escaleras, así no...

Pero antes de que pudiera continuar, un grupo de soldados de A.I.M. aparecieron subiendo las escaleras.

— ¡Hey! — exclamó uno de ellos — ¡¿Quién diablos son ustedes?!

— ¡Frankie, presiona la alarma! — habló otro.

Tarántula y el Merodeador golpearon a dos de los guardias, mientras que el tal Frankie corría hacia lo que parecía ser un botón.

Entonces, de una explosión, Lana salió disparada en dirección del sujeto.

— ¡No lo hagas, Frankie! — dijo, tumbándolo en el suelo — Toma un pequeño descanso, mi amigo.

Lana alzó la cabeza y miró a sus dos compañeros.

Estos se habían quedado quietos, observando algo detrás de Lana.

Ella se giró, para poder ver miraban... y allí la vio.

Una guardia de seguridad, la cual parecía no tener ni idea de todo lo que ocurría en ese edificio.

Se encontraba parada, mirando toda la escena, a un costado del botón de la alarma.

— Debe ser una broma... — dijo Merodeador.

— Señora, por favor, no... — trató de decir Anton.

Pero la guardia de seguridad presionó el botón.

Y se fue corriendo de allí.

— Bueno... hasta aquí llego nuestro plan de ser sigilosos — exclamó Lana.

— De todas formas, no somos muy buenos en eso... — dijo Anton.

Los dos héroes se giraron y solo vieron como el Merodeador comenzaba a correr hacia las escaleras, empezando a bajarlas.

Lana suspiró, mientras Anton comenzaba a correr.

Al llegar a las escaleras, vieron como más guardias aparecían y empezaban a disparar.

El Merodeador saltaba y empezaba a arañar a los malos, asesinándolos sin piedad.

Los dos héroes también se acercaban y golpeaban a los sujetos, dejándolos inconscientes.

Bombshell formó una gran explosión en las escaleras, destruyéndolas y provocando que los tres descendieran con mayor velocidad, además de hacer que los guardias salieran volando.

— Estoy obteniendo datos más refinados — dijo el Merodeador, empezando a caminar por un pasillo — Tengo una señal que podría ser de Miles.

Los tres empezaron a correr, mientras escuchaban como los soldados lo seguían.

Más disparos iban directamente hacia ellos, a lo que no tuvieron más opción que esquivarlos.

Lana creaba explosiones, tratando de perder a los guardias... pero no podía.

Estos seguían apareciendo y seguían disparando.

— ¡A.I.M. es la empresa que más odio en el mundo! — exclamó Lana, continuando sus explosiones — ¡Voy a denunciarlos en alguna red social!

— ¡Estoy seguro que eso ayudará a detenerlos! — dijo Tarántula, parando de golpe.

Este saltó y golpeó al primer sujeto que se acercaba hacia ellos, dejándolo tumbado en el suelo.

Luego, apareció otro que intentó dispararle.

Pero el Merodeador llegó y estrelló su cabeza contra la pared, llenando esta con sangre.

Bombshell no se quedó atrás y causó una gran explosión, derrumbando las paredes del pasillo, evitando que los soldados de A.I.M. continúen siguiéndolos.

— Buen plan, Bombshell — dijo Tarántula, dándose la vuelta.

— C-Claro... sí, esa era mi idea... — dijo la chica, siguiendo a Tarántula.

— Después tendremos que buscar otra salida — dijo el Merodeador — Tengo vitales de un adolescente con biometría sobrehumana... ¡Debe ser él!

— ¡Hay una puerta en este pasillo! — dijo Lana, empezando a correr.

Ella siguió el camino del pasillo hasta llegar a una puerta.

Allí, ni bien estuvo enfrente de esta, hizo estallar la puerta, destruyéndola por completa.

Y cuando los tres entraron al lugar...

Lo pudieron ver.

— Oh, mierda...

— ¿L-Lana...? — expresó Miles, con las pocas fuerzas que le quedaban.

Bombshell corrió hacia él, mirándolo sorprendida.

— Soy yo, Miles — dijo Lana, limpiándole las lágrimas.

— ¿E-Es otro truco...?

— Sin trucos. Estamos aquí, amigo... — dijo — Todos lo estamos.

Miles giró ligeramente su cabeza, observando a los otros dos.

Logró reconocer a Tarántula, para después ver a Merodeador.

A su tío.

— ¿T-Tío Aaron...? — logró decir Miles.

— ¿Tío? — dijo Lana, volteando a ver al Merodeador.

Este asintió lentamente.

— Te vamos a sacar de aquí — dijo Tarántula, acercándose y comenzando a quitar los cables que estaban conectados al cuerpo de Miles.

Este cayó en los brazos de Lana, quien lo ayudó a mantenerse de pie.

Tarántula lo ayudó, sosteniéndole del otro lado, listos para seguir caminando.

— Necesitamos buscar una salida... — dijo Anton — Merodeador, ¿ayúdanos a...?

Pero al darse la vuelta... el Merodeador ya no estaba.

— ¡Que hijo de perra! — expresó Lana — ¡Nos dejó!

— ¡Nos quejamos luego! — dijo Tarántula — ¡Vamos!

Los dos héroes empezaron a correr, lo mejor que podían.

Parecía ser un gran laberinto de pasillos, pero sin ningún guardia, por el momento.

Entonces, el Sentido Arácnido de Miles se encendió.

"Informe complementario del evaluador del sujeto 002-004"

— ¿Qué carajos es eso? — preguntó Lana.

Pero antes de poder ser respondida por su pregunta... recibió un fuerte golpe en la cabeza que la dejó tumbada en el suelo.

Tarántula se sorprendió de esto.

Un extraño portal había salido de la nada y, de este, salió un puño que le dio a Lana.

"Spot iniciará ahora la adquisición no letal de los activos de motivación del sujeto"

De otro portal, apareció un sujeto completamente azul.

Tarántula bajó a Miles y lo dejó en el suelo.

— ¡Vas a pagar por eso! — dijo Anton, mientras iba directamente hacia Spot.

Este volvió a meterse dentro del portal, desapareciendo.

— ¡¿Puede teletransportarse?! — preguntó Tarántula.

Pero, entonces, otro puño apareció detrás suyo, dándole de lleno y estrellándolo contra una pared.

En esta pared se formó otro puño, siendo golpeado, nuevamente, en la cara.

Estaba en problemas.

Un portal apareció arriba de Anton y, de este, salió Spot, aterrizando sobre él.

Lo agarró del cuello por atrás, intentando ahorcarlo.

Tarántula dio un salto hacia atrás, intentando estrellarlo, pero no pudo.

Spot formó otro portal detrás suyo, desapareciendo y provocando que Anton chocara contra una pared.

Un portal se formó enfrente suyo y una patada le dio de lleno, estrellando la cara de Anton contra el metal.

Tarántula dio un salto y se movió a otro lado.

Pero otro portal apareció y recibió un puñetazo en el estómago, terminando en el suelo.

Así fue que, saliendo del portal, Spot se hizo presente.

— Tú debes ser ese nuevo superhéroe que Miles balbuceaba inconsciente — dijo Spot — No me sorprendes, bro.

— B-Bueno... no es que lo busque... — expresó Anton, mientras escupía sangre — Que buenos puñetazos.

— Gracias — dijo — Soy muy bueno en lo que hago.

— ¿Secuestrar niños?

— ¿Por qué todos dicen eso?

Entonces, una sombra se formó detrás de él.

Cuando Spot se dio la vuelta... vio como Miles Morales estaba allí.

Este había saltado y planeaba atacarlo por sorpresa.

Pero no pudo hacerlo.

Spot le dio un puñetazo, volviendo a dejarlo en el suelo.

— A-Alto... — murmuró Miles.

— Que idiota... — suspiró Spot, volviéndose a dar la vuelta — ¿En qué nos quedamos?

Pero, al hacerlo, lo que vio fue dos manos, envueltas en dos aros de energía.

— ¡Muere! — gritó Lana, creando una poderosa explosión.

Spot salió volando, siendo alejado varios metros de allí.

Miles se levantó como pudo, al igual que Tarántula, listos para continuar con el combate.

— Tres contra uno, amigo azul — dijo Anton — ¿Estás preparado?

— Me lleva... — suspiró Spot — Yo me largo...

Entonces, en las paredes de los pasillos se mostró una imagen.

Un sujeto completamente pálido y sin expresión alguna.

Era el evaluador.

"Spot deberá seguir luchando, a menos que desee un cese de operaciones de forma letal"

En ese momento, una figura oscura comenzó a acercarse por detrás del evaluador.

"La ganancia neta de datos del sujeto 002-004 será significativa para los planes de A.I.M."

Entonces, los guantes morados del tipo que se encontraba detrás del evaluador agarraron su cabeza... y le torcieron el cuello.

Varias chispas salieron del cuello del evaluador, demostrando que se trataba de un androide.

Quien había llegado allí era el Merodeador.

Este miró el tablero por unos segundos... y presionó un botón en este.

De pronto, un portal se formó detrás de Spot, absorbiéndolo y sacándolo del pasillo donde estaban los tres héroes.

Spot había viajado directamente hacia donde se encontraba el Merodeador.

Aaron Davis presionó otro botón y apagó las cámaras, dejando a los héroes sin saber que fue lo que ocurrió con los dos.

— ¿Qué carajos fue...? — preguntó Lana.

— No lo sé, pero el tipo se fue — respondió Anton — Es nuestra oportunidad.

— N-No podemos irnos... hay que detenerlos... — dijo Miles, cayendo de rodillas — P-Podrían lastimar a más personas...

— Ahora mismo, Miles... — decía Lana, ayudándolo a levantarse — Tenemos que llevarte a casa.

Bombshell alzó su otro brazo y formó una explosión en el techo, creando un agujero por el cual podrían salir.

Tarántula disparó un cable y los ayudó a subir, empezando su escape de esas instalaciones secretas.

***

Finalmente, después de varias explosiones, los tres héroes lograron escapar de esas instalaciones.

Lograron destruir la pared del edificio, terminando en un callejón.

Allí, dejaron a Miles en el suelo, al mismo tiempo que Lana caía, agotada.

— Hace tiempo que... no hacía estallar tantas veces... — respiraba agitadamente.

— ¿Qué diablos era ese lugar? — preguntó Anton.

— N-No lo sé... Spot... el tipo azul... él me secuestró... — dijo Miles — Ellos... ellos experimentaron conmigo... ellos...

Las lágrimas del moreno comenzaron a salir desbordadas de sus ojos.

Lana se levantó rápidamente del suelo y caminó hasta Miles, limpiándole algunas lágrimas.

— Oye, oye, estamos aquí, Miles — dijo — Ya no estás allí dentro...

— Y tu madre no tarda en llegar... — decía Anton.

Entonces, como si la hubiera llamada, un automóvil apareció enfrente de ellos, siendo conducido por Rio Morales.

Ella bajó rápidamente del auto y corrió hasta su hijo, abrazándolo.

— ¡Lo encontraron! — dijo Rio, revisándolo — Santo cielo, mi vida, ¿qué hicieron contigo?

— ¿M-Ma'...? Q-Quiero ir a casa... — le dijo Miles, mientras más lágrimas salían de sus ojos.

— Allí es donde iremos, Miles... a casa.

Lana y Anton ayudaron a Rio a meter a Miles en el auto, a lo que ella se subió rápidamente hacia el asiento del conductor.

— Regresaremos en un rato y te lo explicaremos todo, Rio — dijo Anton — Solo necesitamos asegurarnos que nadie te siga.

Ella asintió con la cabeza y presionó el acelerador, llevándose a Miles lo más lejos de allí.

Dejando solos a los dos héroes.

— Él va a estar bien... ¿verdad? — preguntó Lana.

— ¿Físicamente? Estoy seguro que sí — dijo Anton — Pero todo el tiempo que pasó allí encerrado... diablos...

— ¿Eso que significa?

— Esto era lo que quería evitar... — dijo — No quería que Miles tuviera que pasar por algo como esto...

— Sí, algo así... algo parecido dijo él sobre ti...

— De todas formas, muchas gracias por tu ayuda. Eres una gran amiga.

— Miles me dio una segunda oportunidad y... un lugar donde vivir — dijo Lana — Salvarle la vida es lo mínimo que puedo hacer por él.

Tarántula y Bombshell se fueron de ese lugar...

...esperando nunca tener que volver allí.

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Ya han pasado dos días.

Dos días donde Miles Morales había sufrido horribles pesadillas, recordando todo lo que había sufrido esa semana.

Toda la tortura que pasó.

Las pruebas que el evaluador le había hecho pasar.

Días donde sufrió una gran fiebre, mientras sus heridas se iban curando, lentamente.

El tormento que su mente le hacía pasar finalmente se detuvo cuando, al segundo día, finalmente despertó.

Cuando logró abrir los ojos... a la primera persona que vio fue a Tarántula, enfrente de su ventana.

— Hola, Miles — saludó Tarántula.

— A-Anton... — murmuro Miles, sin poder moverse.

Su cabeza le dolía, al igual que todo su cuerpo.

Se sentía igual a cuando Venom lo mandó a volar a través de varios edificios.

— ¿Cómo te sientes? — preguntó Anton, acercándose a la cama.

— H-Horrible...

— Sí, algo así suponía...

— ¿Cuánto tiempo...?

— Estuviste dormido dos días...

— N-No... ¿cuánto estuve allí... allí abajo...?

— Oh... — dijo, haciendo una pausa — Poco más de una semana.

— ¿Una semana...? S-Se sintieron como... como meses...

— Sí, sé lo que se siente... — dijo Anton — A mí, una vez, me capturaron y me torturaron por casi un mes... pero sentía que había sido un año... sé que no es muy bonito...

— N-No... no lo fue...

— Sí...

Anton se sentó en la cama de Miles, algo agotado.

Miles pudo notar que no llevaba su traje de superhéroe, sino una ropa normal.

Nunca lo había visto así.

— Ya te he... te he advertido de los peligros que conlleva este trabajo — dijo Anton — El mundo... este mundo ya no es el mismo que vivió el anterior Hombre Araña, Miles. Es un mundo diferente. Extremadamente diferente... y muy peligroso.

El joven de Brooklyn se había quedado callado, escuchando lo que Tarántula tenía que decirle.

— Es un mundo donde... donde no quiero que tú sigas... verte como te vi allí... me trajo un doloroso recuerdo a mi mente y... ahora que tengo la oportunidad de salvar una vida de este peligroso mundo... no voy a desaprovecharla... no esta vez... — Anton se levantó de su asiento, caminando hasta el clóset de Miles y abriéndolo — Por favor, no me culpes por lo que estoy por hacer...

De este clóset, sacó un maletín.

Miles sabía lo que había dentro.

Su traje de repuesto que Happy Hogan le había dado hace mucho tiempo.

Vio como Anton caminó hasta su escritorio, tomando su tarjeta de los Vengadores.

— No puedo permitir que sigas usando este traje... — dijo Anton — Lo siento, pero... no puedo permitir que sigas siendo el Hombre Araña... 

Miles ni siquiera intentó levantarse.

Aún si lo intentara, no iba a poder...

Solo pudo ver como Anton agarraba sus lanzaredes y sus cartuchos de telaraña.

— Pero... lo que quiero es que me prometas, Miles... — decía — Miles... prométeme que no volverás a hacerlo... que no volverás a ser el Hombre Araña...

Los ojos de Miles fueron a parar hacia su escritorio, viendo fijamente un usb.

Aquel usb con el mensaje que Peter Parker dejó para él.

Y sin dejar de mirar el usb...

Dijo...

— Lo prometo...

Anton agachó la cabeza, dándole una ligera sonrisa.

— Gracias, Miles... — dijo — Tienes buenos amigos... no los preocupes, ¿ok?

— O-Ok...

Tarántula abrió la ventana de Miles y salió por la escalera de emergencias.

Una vez se fue de allí, la puerta del cuarto del moreno se abrió.

Allí, entrando a la habitación, se encontraba su madre, la cual soltó un pequeño grito al verlo despierto.

— ¡Miles! ¡Oh, Dios! — dijo Rio, corriendo hacia donde estaba su hijo — ¡Despertaste!

Rio le dio un fuerte abrazo a su hijo, mientras que su hermana menor corría detrás de ella y saltaba sobre él.

En la entrada a su habitación se encontraban sus amigos.

Kamala Khan, Kate Bishop, Kong, Mary Jane y Lana Baumgartner.

Todos habían estado esperando a que despertara.

Y afuera de su habitación, observando la ventana del cuarto de Miles, también se encontraba otra persona...

Black Cat.

Quien, al ver que había despertado, sonrió... para después irse de allí, disparando un gancho hacia otro lado.

Miles mantenía su mirada fija en la memoria usb.

No tenía ninguna otra expresión en el rostro.

Seguía observando la memoria.

Mientras una lágrima se desbordaba por uno de sus ojos.

Hey!

Espero que les haya gustado mucho este capítulo!!! Y sí, estamos aquí con todo y los nuevos traumas para el joven Morales.

No eres un buen Spider-Man si no tiene traumas en tu ser.

Así que, si les gustó este capítulo, pueden darle una estrellita y compartirlo!

Gracias por leer y hasta el próximo capítulo.

Publicado el 06/02/22

[DANIKAST]

"¡Hola, oyentes! Bienvenidos al gran podcast que es este. El Danikast [risas] Si nadie me hecha flores, yo lo haré. ¿Cómo están? Como dije en el podcast, dije que hablaría uno de los dos temas y, pues... llegó el momento de hablar del elefante en el planeta Tierra... ¡Namor y Atlantis! Como algunas sabrán, hace un tiempo, Wakanda tuvo un altercado con un reino que se consideraba ficticio. Aunque, debo decir que, en estos tiempos, ¿qué es solo ficción? No importa. Este acontecimiento se mantuvo en total secreto para el resto del mundo. No se sabe mucho de lo que ocurrió, pero la confirmación de la existencia de Atlantis disparó un montón de teorías acerca de lo que podría haber dentro de ese lugar. ¿Acaso ocurrirá lo que sucede en los cómics de ese hombre pez y la mujer con el látigo brillante? ¿El mundo del océano querrá conquistar el mundo terreste? Sería una locura, ¿verdad? Algo que solo ocurre en la ficción. Pero, como he dicho, la ficción puede llegar a alcanzar la realidad. Díganme qué es lo que piensan. ¿De verdad creen que el pueblo de Atlantis querrá destruir la Tierra? Me gustaría saber lo que piensan al respecto. Eso sería todo por el podcast del día de hoy. Recuerden que si van a pedirle a alguien para ser su novia, asegúrense de hacerlo cara a cara y no por mensaje. Es más romántico así. ¡Zài huì!"

***

Spot yacía muerto en esa habitación.

Unas enormes garras habían atravesado su pecho, asesinándolo en el instante.

Enfrente del cuerpo de Spot, se encontraba el Merodeador, junto a unas computadoras.

Tenía un trabajo que hacer antes de irse de allí...

Estaba eliminando toda la información acerca de Miles Morales y sus cercanos.

De esta forma, no podían volver a buscarlo.

Todo esto se podía ver en una pantalla... mientras que, en otra, se podía observar otra cosa.

Aaron Davis estaba descargando toda la información que poseía A.I.M. a un servidor seguro.

Le serviría muy bien para un futuro.

Sobre todo por los datos que descargaba... acerca de los Vengadores, supercriminales pocos conocidos en la ciudad de Nueva York y... algunos proyectos secretos que tenía la compañía.

Incluyendo uno que logró llamar su atención.

"Sujeto 001-004"

No había mucha información acerca de esta otra persona secuestrada por A.I.M., más que nada que había sido un sujeto exitoso para las líneas de A.I.M.... o lo que era lo mismo, Hydra.

Aaron bajó un poco en los datos que habían... hasta que, finamente, pudo dar con otra revelación.

— Sujeto 001-004 ascendido a "Agente 77" — exclamó el Merodeador, leyendo el informe — Nombre... ¿Drew, J.?