Me enredé en una tertulia con el silencio indiscreto ; me contó al oído que a veces me extrañas y que masticas entre suspiros los versos que escribí en tus labios.

Me dijo que te asomaste con disimulo hacia el sendero por donde mi silueta se diluyó de tu vista ; en la espalda de aquella noche...

Me mostró un suspiro tuyo por mí; algo arrugado y agónico que se había escondido en la sombra de tus miedos...

Por él me enteré que te tragaste un "no te vayas, por favor" y que borraste de tu boca un "te extrañaré", reemplazándolo por un frío "que te vaya bien"; mientras yo desgarraba mi alma con un "adiós"

También me reveló que detrás de tu indiferencia homicida; se escondía tu asustadiza alma, tan endeble, tan a la defensiva ...

Me contó que algunas noches se te antoja cantar nuestra canción y sonríes cuando recuerdas mi voz...

Me dijo que reposas tu ansiedad; musitando mi nombre a tu almohada, que me llamas cuando despiertas de noche y te abraza el insomnio ...

Que en alguna mañana distraída , miras de reojo tu celular por si te dejé un "buenos días princesa"; y que extrañas mis mensajes tan constantes

Me contó tantas historias al son de un café con sabor a melancolía, me repitió que piensas en mí o tal vez sólo lo dijo porque mi alegría agoniza y mis sonrisas divagan al borde del suicidio ;

Tal vez sea cierto o sólo se apiadó de mí ; pero me gusta pensar que eso aunque sea por un segundo pudo pasar y mejor lo escribo para que no se me olvide, como tantos sueños...