Miré al cielo y me acordé de ti;
de cómo se achinaban tus ojitos al sonreir.
Tú risa contagiosa  y tú voz tan melodiosa.
La historia siempre fue tan misteriosa,
nunca pensé que las letras que escribíamos serían tan confusas, con tinta  tan pegajosa  y los textos tan difícil de olvidar. ¿Cómo le digo a la luna que no te volveré a mirar?
Yo le prometí que bajo su luz te llegaría a besar
y hoy se convierte  un sueño del cuál me toca despertar.

Miré al cielo recordando tanto,
fue imposible detener el llanto...
Recordando que aún con el tiempo te sigo amando,
por encima de los días o los años; porque nada ha cambiado.
💔🥀🍂